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miércoles, 2 de agosto de 2017

Ucrania: La guerra civil... continua

"Es peor que la Segunda Guerra Mundial": los testimonios de los que viven en Ucrania en medio de un conflicto del que el mundo se olvidó

BBC Mundo



La guerra estalló en marzo de 2014 entre separatistas apoyados por Rusia y fuerzas del gobierno ucraniano.

Hace tres años un avión de Malaysian Airlines con 298 personas a bordo fue derribado por un misil Buk en el este de Ucrania.
Cuando ocurrió este hecho el mundo centró la atención en los posibles responsables y en el conflicto armado que se libraba en esa región.
La guerra estalló en marzo de 2014 entre separatistas apoyados por Rusia y fuerzas del gobierno ucraniano.
Hoy, tres años después, investigadores internacionales continúan tratando de llevar a la justicia a los responsables del derribo del avión.
El mundo, sin embargo, se olvidó de esta guerra en la que más de 10.000 personas han muerto y más de un millón han huido o se han visto desplazados de sus hogares.
¿Por qué relacionan el recrudecimiento de la guerra en Ucrania con la llegada al poder de Donald Trump?
Pero muchos no han tenido más opción que permanecer en el campo de batalla.


En la guerra en Ucrania más de 10.000 personas han muerto y más de un millón han huido de la región.

Fergal Keane, de la BBC, estuvo en la ciudad de Avdiikva, en el frente que marca el territorio controlado por los rebeldes pro rusos.
Y allí recogió testimonios de la gente que se ha visto forzada a permanecer en la zona.

JelenaMakrinchok, 50 años, se unió al ejército ucraniano en Avdiikva cuando estalló la guerra.



"Esta es mi madre patria. Nací aquí. Mis abuelos y todos mis antepasados están enterrados aquí. Mis hijos nacieron y crecieron aquí. Mis nietos nacieron aquí".
"Quiero que esta tierra sea de mis nietos. Y yo quiero vivir aquí".
Avdiikva fue una vez una zona industrial próspera pero tras tres años de guerra, está devastada.
A pesar de que se firmó un cese del fuego, ninguna de las partes lo ha respetado y continúan los combates.
El frente de batalla en Avdiikva tiene más de 400 km de largo y sólo un muro divide a la ciudad de la zona que controlan los rebeldes separatistas.


Avdiikva fue una vez una zona industrial próspera pero tras tres años de guerra, está devastada.

"Es una guerra que, después de tres años, se ha estancado y en la cual los ceses del fuego no tienen ningún impacto", afirma el corresponsal de la BBC, Fergal Keane.
"Esto significa un sufrimiento indescriptible, particularmente para los civiles de la región", agrega.
Una de las desplazadas de esta guerra es Lyudmila Minienkova quien ha estado mudándose de un poblado destruido a otro.
Llegó a Avdiikva después de que su casa fuera destruida por un proyectil al inicio de la guerra.
Su familia ahora sobrevive con limosnas y sólo cuenta con un pequeño sótano para refugiarse de los ataques.

Lyudmila Minienkova



"Me preocupa cómo se verán afectados los niños. Cómo les va a impactar esto, cómo envejecerán pronto por el miedo".
"Pienso que van a empezar a tartamudear. Le ruego a Dios que no suceda. Lo peor es no saber qué pasará".
"¿Seremos blanco de un ataque? ¿Qué ocurrirá con nosotros?"
Este tipo de historias se repiten también al otro lado del frente de batalla, entre los civiles que viven en el territorio controlado por los separatistas pro rusos.
La gente que no puede escapar debe adaptarse a la vida en el frente de batalla.
Ana Vasilievna tiene 88 años. Vive sola en un departamento que fue atacado con un proyectil y se incendió cuando empezó la guerra. Sobrevive con una pensión de US$65 al mes.

Ana Vasilievna



"Ruego que Dios me lleve con él. Todavía recuerdo las eras de hambruna y de guerra en Ucrania. Pero esto es peor."
"Es peor que la Segunda Guerra Mundial. Ya han pasado tres años desde que comenzó, cuando yo tenía 85 años".

Olga Yudina, trabajadora humanitaria


"Siento que nos han dejado solos con este problema. A nadie le importa. Ni a nuestro propio gobierno, ni a la comunidad internacional".
"No les importan nuestros niños, ni nuestra juventud ni nuestros ancianos".
"Estamos tratando de tener un vida común y corriente. Vamos a trabajar y al colegio bajo fuego. Estamos tratando de adaptar nuestra vida a esta situación".
Zhenya Aslanova, de 7 años, es uno de las huérfanos de esta guerra.
Un proyectil cayó sobre su casa y mató a su madre y a otros tres miembros de la familia.

Tamara Shulakova, abuela de Shenya



"Los niños pensaron que había estallado un globo. Pero cuando corrieron afuera vieron a su madre tirada en el sueloy salieron a la calle gritando".

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