Los primeros dispositivos de disparo silencioso, o silenciadores para armas ligeras, surgieron a comienzos del siglo XX. A partir de entonces, su desarrollo avanzó de forma continua, incorporando nuevas configuraciones, materiales y tecnologías modernas. Estos avances permitieron mejoras sustanciales en su rendimiento y una notable reducción del ruido generado al disparar.
Historia del problema
El primer dispositivo de supresión de sonido (SSD) fue desarrollado y patentado a principios del siglo XX por el inventor estadounidense Hiram Percy Maxim, hijo de Hiram Stevens Maxim. Una vez completados los trámites de patentamiento, se inició la producción comercial bajo la marca Maxim Silencer.
Posteriormente, otros fabricantes comenzaron a diseñar sus propios dispositivos de supresión. Paralelamente, algunas organizaciones extranjeras desarrollaron variantes como el PBS (silenciador de boca). Se investigaron diversas mejoras sobre el diseño original de Maxim, así como soluciones completamente nuevas. Estos dispositivos se orientaron tanto al uso civil como al militar.
Con el tiempo, el ámbito militar se convirtió en el principal impulsor de esta tecnología. Durante el periodo de entreguerras y la Segunda Guerra Mundial, varios países desarrollaron sistemas de armas integradas con supresores de sonido. En algunos casos, el PBS era un componente estructural del arma, indispensable para su funcionamiento operativo.

Subfusil estadounidense M3 con PBS integrado. PhotoWeaponsman.com
Tras la Segunda Guerra Mundial, la evolución tecnológica en silenciadores continuó de manera sostenida, con avances importantes en materiales, eficiencia y diseño. En las últimas décadas, el desarrollo se ha acelerado debido al crecimiento de la demanda, junto con la incorporación de nuevas tecnologías de fabricación y diseño computacional.
Dinámica de los gases
Pese a los avances tecnológicos alcanzados en los últimos 125 años, los principios fundamentales del silenciador de proyectiles (PBS) se mantienen sin cambios. Al disparar, la boca del arma expulsa llamas y gases calientes producto de la combustión de la pólvora. Estos, debido a su alta velocidad y temperatura, generan una onda de choque que se percibe como un sonido fuerte y agudo. El silenciador actúa conteniendo estos gases y la llamarada, evitando su liberación directa al exterior y, con ello, reduciendo el ruido.
Un PBS es, esencialmente, un dispositivo tubular acoplado al extremo del cañón. En su interior alberga una serie de divisiones con distintas formas, diseñadas para obstaculizar el flujo libre de los gases, generar turbulencias y disipar la energía. Todo ello sin afectar el paso de la bala ni interferir con el funcionamiento del arma.

Al ingresar al PBS, los gases pierden velocidad y una parte considerable de su energía. Dentro de las cavidades internas, transfieren calor a las superficies del dispositivo y reducen su presión, disipando así la energía restante. Como resultado, los gases se enfrían y salen lentamente al exterior, sin generar una onda de choque ni explosión audible.
En los modelos convencionales de silenciadores, existen tres métodos principales para obstaculizar el paso de los gases. El primero utiliza tabiques transversales rígidos con un orificio central para permitir el paso de la bala. El segundo emplea membranas flexibles de caucho o polímero, que se expanden al paso del proyectil o se perforan con el primer disparo. El tercero consiste en rellenar el interior del cuerpo con malla metálica enrollada o con arandelas, lo que ayuda a dispersar la energía de los gases.
Nuevos diseños
Durante varias décadas, el desarrollo de los PBS se ha centrado en la mejora de la configuración interna. Se introdujeron nuevas formas de tabiques, y se realizaron pruebas con diferentes tipos de membranas y mallas. Muchas de estas soluciones se combinaron entre sí y fueron aplicadas en distintos proyectos, dando lugar a diseños más eficientes y adaptados a diversas necesidades.

Un francotirador ruso con un fusil SV-98 equipado con silenciador. Foto: Rosoboronexport
Diseños iniciales y evolución
Las primeras versiones de silenciadores utilizaban particiones muy simples: arandelas con orificios alineadas a lo largo del cuerpo del dispositivo. Más adelante, se introdujeron variantes con particiones colocadas en ángulo. La combinación de varias particiones biseladas permitió dividir el PBS en múltiples cámaras, lo que mejoró significativamente la disipación y frenado de los gases.
Hiram Percy Maxim también diseñó una partición en forma de arandela con un centro cónico truncado, capaz de desviar parte de los gases. Esta solución dio lugar posteriormente a particiones con formas más complejas. La sección cónica puede variar en longitud y diámetro, adaptándose a las características específicas del PBS, el arma y el cartucho utilizados.
Estas particiones pueden fabricarse como elementos individuales montados dentro del cuerpo, o bien integrarse en un único bloque interno. En este último caso, el PBS se compone únicamente de dos elementos: el cuerpo exterior y el conjunto interno de particiones.
Aunque de diseño más simple, las mallas también ofrecieron posibilidades de innovación. Pueden usarse como rollos ajustados al tamaño necesario o como pilas de arandelas metálicas precortadas. Ambas configuraciones presentan ventajas, especialmente por su sencillez en comparación con otros sistemas más elaborados.

Sistema modular PBS para la pistola Q-Erector. A continuación se muestra un módulo independiente. Foto: Thefirearmsblog.com
También se han propuesto enfoques radicales para rediseñar los PBS, entre ellos el desarrollo de silenciadores modulares por parte de organizaciones extranjeras. Estos dispositivos están compuestos por varias secciones independientes, de geometría compleja, que se ensamblan en serie mediante un sistema de roscas. En ciertos diseños, incluso se prescinde de una carcasa externa, utilizando únicamente módulos funcionales ensamblados entre sí.
Tecnologías y materiales
El avance en el desarrollo de los PBS ha sido impulsado por la adopción de nuevas tecnologías, que facilitan la exploración de diseños innovadores y permiten fabricar componentes más complejos con mejores prestaciones.
A lo largo de la evolución de los silenciadores, se han realizado numerosos ensayos con distintos materiales. Se han probado diversos metales y aleaciones para fabricar carcasas y particiones. Inicialmente predominaba el uso de acero y sus variantes, pero con el tiempo se incorporaron materiales como el titanio y otros con propiedades mejoradas, adaptados a las exigencias de cada aplicación.

La unidad interior PBS de BOE Suppression, fabricada íntegramente mediante impresión 3D. Foto de BOE Suppression.
Resultados del desarrollo
Inicialmente, los dispositivos de disparo silencioso se comercializaban principalmente en el ámbito civil, siendo adquiridos mayormente por tiradores deportivos y aficionados. Con el tiempo, estos equipos comenzaron a ganar reconocimiento en el ámbito militar, lo que impulsó la aparición y adopción de numerosos diseños innovadores. Durante mucho tiempo, las fuerzas armadas y agencias de seguridad de distintos países fueron los principales usuarios de los PBS.
En las últimas décadas, esta tendencia ha cambiado. El crecimiento del deporte de tiro y otros factores han impulsado una nueva etapa en el desarrollo de silenciadores para el mercado civil. Este fenómeno ha sido especialmente notable en Estados Unidos, donde existe un mercado amplio y legalmente establecido para armas de uso no militar. En consecuencia, muchas empresas han comenzado a diseñar y fabricar sus propios modelos de silenciadores, incorporando ideas y tecnologías nuevas. Esto ha dado lugar a una gran variedad de PBS adaptados a diferentes tipos de armas y cartuchos.
En cambio, en países como Rusia, el uso legal de silenciadores sigue restringido a fuerzas armadas y organismos de seguridad. Sin embargo, tras el inicio de la Operación Especial para la Protección del Donbás, la industria militar rusa ha intensificado el desarrollo de PBS, produciendo silenciadores en una variedad de configuraciones. Estos dispositivos se están suministrando activamente a unidades en combate, contribuyendo directamente a las operaciones en curso.

Un soldado ruso con un fusil Haenel HLR 338 capturado en el área de Operaciones Especiales. Foto: Telegram / "El Rincón del Sith".
Aplicación civil y perspectivas
El mercado civil también ha sido considerado. Los tiradores deportivos y aficionados pueden acceder a dispositivos como moderadores de sonido o compensadores de freno de boca de tipo cerrado. Aunque no son PBS completos, su diseño es similar y permiten una reducción del ruido sin violar la legislación vigente.
A lo largo del tiempo, los dispositivos de disparo silencioso han experimentado un notable progreso. Aunque sus principios fundamentales de funcionamiento y diseño se han mantenido constantes, se han desarrollado numerosas soluciones innovadoras para mejorar su rendimiento en todos los aspectos.
Hoy en día, los silenciadores están firmemente establecidos en múltiples ámbitos, tanto civiles como militares, y es poco probable que desaparezcan. Además, es previsible que el avance continuo de la ingeniería y la tecnología en este campo dé lugar a nuevos desarrollos de interés.