lunes, 9 de septiembre de 2024

Scaled Composites Vanguard: Un proyecto para cambiar FAdeA y traerla al Siglo 21


Análisis del proyecto Vanguard: Un avión de combate desechable muy apto para Argentina

Esteban McLaren
FDRA


Imagina un futuro donde Argentina no solo se limite a producir entrenadores antiguos como el IA-63 Pampa III que acaba de salir de producción, sino que se transforme en un centro de innovación aeronáutica regional. La reconversión de FAdeA hacia la producción de un avión modular, altamente tecnológico y exportable, marcaría un salto cualitativo en la industria nacional. Este tipo de avión podría estar equipado con tecnologías avanzadas de inteligencia artificial, fabricación aditiva (impresión 3D), la cual puede descentralizarse entre proveedores regionales, y sistemas de combate autónomo, abriendo puertas a mercados globales en defensa y seguridad. El Scaled Composites Vanguard puede mostrar el camino para un cambio y reestructuración de FAdeA apuntando a cubrir diversas hitos tecnológicos:

  • un caza ligero furtivo de alta velocidad subsónica
  • capaz de convertirse en dron
  • costo de producción de menos de la mitad que un Pampa
  • una autonomía sin registros de más de 5 mil km (!¡) con 6 horas de vuelo
  • bodega multifuncional: puede cargar 2 AMRAAM, una radar de apertura sintética, equipos de ECM, entre muchas combinaciones. 
  • caza que tiene una vida operativa menor pero de fácil reemplazo
  • su producción es colaborativa por lo que puede distribuirse en PyMEs a largo del territorio nacional o mejores postores extranjeros.

La fabricación de un avión modular permitiría adaptarse a las necesidades de cada cliente, maximizando su capacidad de exportación y potenciando la competitividad argentina en el mercado internacional. Este enfoque no solo estimularía la creación de empleos de alta calificación, sino que también incentivaría el progreso tecnológico en sectores como el software, inteligencia artificial y robótica. Al diversificar la producción hacia aeronaves más sofisticadas, Argentina no solo fortalecería su defensa, sino que dinamizaría la economía, atrayendo inversión privada y alianzas internacionales.

Invertir en esta transformación significaría convertir a FAdeA en un polo de desarrollo estratégico, generando un impacto duradero en la economía del conocimiento y posicionando al país como un líder regional en la industria aeronáutica.




El Model 437 Vanguard, diseñado por Scaled Composites bajo la matriz de Northrop Grumman, representa un concepto revolucionario en el campo de la aviación militar. Este caza desechable está diseñado para operar de forma autónoma en misiones de alto riesgo, donde la pérdida de la aeronave se considera aceptable. Se analizará a continuación sus características técnicas, costos de producción, posibles usos en el campo de batalla futuro y su potencial en las fuerzas armadas argentinas.



Características Técnicas del Vanguard

El Vanguard es un caza de dimensiones compactas, con una longitud y envergadura de 12,5 metros, un peso máximo de despegue de 4.535 kg, y está propulsado por un motor Pratt & Whitney 535 que genera 15,1 kN de empuje. Su alcance operativo es de 5.556 km, con una autonomía de hasta seis horas. Estas características lo posicionan como un avión de combate ligero y ágil, ideal para operar en misiones donde la maniobrabilidad y el bajo costo son esenciales.

Su capacidad de carga útil es de 907 kg, lo que le permite transportar hasta dos misiles AIM-120 AMRAAM en su bahía interna de armas, lo que le da capacidad para participar en combates aéreos sin comprometer su agilidad o autonomía. Además, una de las claves del Vanguard es su diseño modular y su plataforma digital de desarrollo, similar a la utilizada en el bombardero B-21 Raider, lo que reduce significativamente los costos de desarrollo al agilizar pruebas y certificaciones mediante simulaciones virtuales.

 


Costos de producción y despliegue

El Vanguard es diseñado para ser extremadamente barato de producir, con un costo estimado entre 5 y 6 millones de dólares por unidad si se fabrica en serie. Este bajo costo se logra gracias a innovaciones en su fabricación, como el uso de deposición de materiales con arco de plasma, lo que permite la impresión de componentes estructurales de titanio sin necesidad de moldes costosos. Además, el uso intensivo de plataformas digitales para pruebas y prototipado reduce aún más los tiempos y costos de producción. La empresa ha reducido los costos de ingeniería en planta de ocupar en promedio un 15% de los costos a sólo ocupar el 1%.

En comparación con los cazas tripulados tradicionales como el F-35, que cuesta entre 80 y 100 millones de dólares por unidad, el Vanguard es considerablemente más barato. Esta diferencia de costos lo convierte en una opción atractiva para misiones de alto riesgo, donde la pérdida de una aeronave es un factor asumido. En este sentido, se proyecta que el Vanguard desempeñará un papel crucial en misiones de supresión de defensas enemigas (SEAD), ataques aéreos en áreas fuertemente defendidas y reconocimiento en profundidad, ya que su pérdida no supondría un costo prohibitivo (ScaledComposites)(TheWarZone).

Especificaciones
Tripulación: 1
Envergadura: 41 pies (12.5 metros)
Longitud: 41 pies (12.5 metros)
Altitud máxima: 25 mil pies (6.000 metros)
Máximo peso al despegue: 10.000 libras (4,535 kg)




Uso en el Campo de Batalla Futuro

El futuro del combate aéreo está marcado por la creciente automatización y el desarrollo de aeronaves autónomas que pueden operar en conjunto con cazas tripulados. En este contexto, el Vanguard encaja perfectamente en los planes de la Fuerza Aérea de EE.UU. bajo el programa Collaborative Combat Aircraft (CCA), que busca desarrollar plataformas no tripuladas que puedan complementar aviones como el F-35 en misiones de combate.

El Vanguard, al estar equipado con inteligencia artificial y operar de manera autónoma, podrá realizar misiones de apoyo, escolta y combate aéreo sin poner en riesgo a los pilotos. Además, su capacidad de ser producido en grandes cantidades permitirá que las fuerzas aéreas lo utilicen como un recurso desechable en misiones de alto riesgo, lo que aumentará la efectividad en zonas con fuertes defensas antiaéreas.


Para tener presente, un avión de estas características y con esta flexibilidad podría, y es solo una conjetura, embarcarse en una plataforma tipo portaaviones o portahelicópteros, tanto en su versión tripulada como no tripulada: es una aeronave muy liviana, pequeña y flexible con enorme autonomía. Ello podría ayudar a volver a brindarle a la Armada Argentina de nuevo la capacidad de proyección de poder aeronaval.

Otros proyectos

Dentro de la gama de proyectos la empresa Scaled Composites incluye un demostrador de un futuro caza de sexta generación denominado Model 401 S y un avión de ataque ligero, con ciertas reminiscencias al A-10 Warthog, nominado como Agile Responsive Effective Support.

Demostrador Model 401 Sierra, casi un F-5 reciclado a furtivo




Demostrador aeronave Agile Responsive Effective Support de Scaled Composites




Potencial uso en las Fuerzas Armadas Argentinas

Las fuerzas armadas argentinas, tradicionalmente con recursos limitados, podrían beneficiarse de un avión como el Vanguard por varias razones. Aunque el costo de adquisición de unidades sigue siendo elevado para los estándares de defensa de Argentina, su bajo costo en comparación con cazas tradicionales y su capacidad de operar de manera autónoma lo convierten en una opción interesante para misiones estratégicas.

Argentina podría emplear el Vanguard en varias funciones, entre ellas:

  1. Defensa de espacios aéreos amplios: Dada la extensión del territorio argentino, el Vanguard podría utilizarse para patrullas aéreas y misiones de disuasión en áreas remotas, como la Patagonia o el Atlántico Sur. Es una aeronave excepcional para vigilar el frente norte con enorme extensiones donde pequeñas aeronaves contrabandean drogas. La capacidad de patrulla de una aeronave así es económicamente muy eficiente.

  2. Misiones de supresión de defensas enemigas: En un hipotético conflicto, el Vanguard podría ser empleado para penetrar defensas aéreas enemigas, lo que minimizaría el riesgo de perder aviones tripulados. Para misiones SEAD o ataque a blancos muy protegidos, en su versión UCAV, puede ser eficiente en término de evitar pérdidas humanas.

  3. Operaciones de reconocimiento y ataque en el Atlántico Sur: En un escenario de tensiones en las Islas Malvinas, el Vanguard podría desempeñar un rol en misiones de reconocimiento y ataque a largo alcance sin exponer a pilotos en estas misiones peligrosas. Esta aeronave tiene exactamente la mitad de persistencia en vuelo que un P-3C Orion como los recién adquiridos a Noruega: 6 horas. En su versión no tripulada podría patrullar enormes extensiones del Mar Argentino sin mayor desgaste humano y con conexión directa al edificio Libertad o la Base Naval de Puerto Belgrano si así lo requiera.

 

Recomendación

Argentina, a pesar de no contar con los mismos recursos tecnológicos que EE.UU., podría beneficiarse de una inversión inicial en el Vanguard. Un enfoque gradual en la adquisición de estas aeronaves autónomas permitiría a las fuerzas armadas modernizarse sin incurrir en los altos costos de cazas convencionales. Además, la capacidad de este avión de operar en misiones de alto riesgo y su compatibilidad con un modelo operativo autónomo lo convertiría en un multiplicador de fuerza en escenarios como el Atlántico Sur o el control de fronteras en áreas críticas como la cordillera de los Andes.

El Model 437 Vanguard es un desarrollo innovador que puede redefinir las estrategias de combate aéreo a nivel global. Si bien Argentina enfrenta limitaciones presupuestarias, este tipo de tecnología de bajo costo y alto impacto podría ser una opción atractiva para futuras adquisiciones, permitiendo que el país mantenga una defensa aérea efectiva y moderna en escenarios de alta complejidad.










Análisis de la producción del IA-63 Pampa en FAdeA y oportunidades futuras basadas en el proyecto Vanguard

La Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) ha tenido una historia marcada por la producción de aeronaves emblemáticas, como el IA-63 Pampa, un entrenador avanzado de diseño argentino. Sin embargo, el proyecto Pampa ha sido descontinuado tras la producción de alrededor de 40 aviones, lo que pone en evidencia la necesidad de replantear la dirección productiva de la planta. En este análisis, se examina la viabilidad de reconfigurar la producción de FAdeA para proyectos más alineados con tendencias tecnológicas globales, como el Model 437 Vanguard, un caza de combate desechable, y cómo estas oportunidades pueden representar un nuevo horizonte para la industria aeronáutica argentina.

El fin del Pampa puede ser el inicio del Siglo 21 para FAdeA

El IA-63 Pampa, aunque un hito de la ingeniería argentina, se basa en una concepción aeronáutica de varias décadas. A nivel de costo de oportunidad, seguir invirtiendo en un proyecto como el Pampa que no ha logrado la expansión en el mercado ni una proyección significativa internacional implica dejar de lado la posibilidad de ingresar a mercados emergentes de aviones más avanzados tecnológicamente. Además, el Pampa no cumple con las exigencias actuales en cuanto a aeronaves de combate modernas o sistemas de vuelo autónomo, elementos que se están convirtiendo en esenciales en las guerras del futuro.

El Vanguard ofrece una vía alternativa con un enfoque hacia la producción de aeronaves de bajo costo, alta tecnología y posibilidad de ser fabricadas en grandes volúmenes. Al ser un avión desechable y autónomo, basado en inteligencia artificial, permite a FAdeA incursionar en la automatización y digitalización del combate aéreo, áreas donde la industria argentina ha quedado rezagada. El costo de producción de un Vanguard, estimado entre 5 y 6 millones de dólares, es comparable a la mitad de los entrenadores como el IA-63, pudiendo incluso ser menor debido a los menores salarios en dólares locales, pero su potencial de exportación es mucho mayor debido a la tendencia global hacia la guerra autónoma y la modernización de las flotas aéreas.

Oportunidades Tecnológicas para FAdeA

Las tecnologías implementadas en el Vanguard, como la fabricación aditiva (impresión 3D) y el uso de herramientas digitales para reducir costos de prototipado y certificación, representan oportunidades para que FAdeA modernice su infraestructura. La fábrica podría, con las inversiones adecuadas, empezar a aplicar estos métodos en la producción de aeronaves más avanzadas. Un enfoque hacia el desarrollo de drones militares autónomos podría no solo revitalizar la industria aeronáutica argentina, sino también posicionarla como un actor competitivo en el mercado global de aviones no tripulados.

Este cambio requiere que FAdeA deje de enfocarse exclusivamente en la construcción de aviones convencionales y pase a aprovechar estas nuevas tecnologías. Al desarrollar aviones como el Vanguard, FAdeA podría diversificar su cartera de productos, atrayendo tanto a las fuerzas armadas nacionales como a potenciales clientes internacionales.

Acciones del gobierno argentino para adaptarse a un nuevo sendero tecnológico

Para que este cambio de dirección sea efectivo, es crucial que el gobierno argentino tome medidas proactivas que impulsen la industria nacional hacia la producción de aviones como el Vanguard. Entre las acciones necesarias para este proceso de adaptación se encuentran:

  1. Inversión en investigación y desarrollo: El gobierno debe promover el desarrollo de nuevas tecnologías a través de fondos dedicados a la innovación en defensa. Esto incluye financiar investigaciones en inteligencia artificial, fabricación aditiva y materiales avanzados, esenciales para la producción de aviones de combate autónomos. Esta fase de tecnología abre un espacio de colaboración con el pujante sector tecnológico nacional, sobre todo de software y hardware.

  2. Alianzas internacionales: Argentina debe buscar asociaciones con empresas extranjeras líderes en el sector, como Northrop Grumman, para adquirir conocimiento técnico y colaborar en el desarrollo de aviones de bajo costo y alta eficiencia. Estas alianzas también permitirán una transferencia tecnológica hacia la industria local. Otro potencial socio puede ser Embraer de Brasil

  3. Marco regulatorio adecuado: El gobierno debe desarrollar un marco normativo que incentive la inversión privada en el sector de la defensa, así como políticas de exportación que faciliten la venta de estas aeronaves en mercados internacionales. En ese sentido, la ley RIGI presenta una opción enormemente tentadora para la inversión privada extranjera en este campo específco.

  4. Incentivar la participación del sector privado: La modernización de FAdeA debe ir de la mano con una mayor participación del sector privado nacional, ya que este puede aportar capital, innovación y eficiencia operativa. Esto puede lograrse mediante alianzas público-privadas para la fabricación y exportación de drones y aviones autónomos. Ya se sabe que la injerencia excesiva del estado solo ha provocado inacción, retrasos y proyectos que ya son viejos cuando llegan si quiera a prototiparse (CITEDEF, ARS, Tandador, son vergonzosos ejemplos de desidia gremial).

Plan de acción a 5 Años

  1. Año 1: Diagnóstico y Modernización Inicial

    • Realizar una auditoría tecnológica de FAdeA para identificar las brechas en capacidad productiva.
    • Iniciar la adquisición de tecnologías de fabricación aditiva y plataformas digitales de prototipado.
    • Firmar acuerdos preliminares con empresas extranjeras como Scaled Composites para transferencia de tecnología.
  2. Año 2: Inversión en Capacitación y Desarrollo Tecnológico

    • Capacitar al personal técnico en nuevas tecnologías de producción.
    • Iniciar proyectos pilotos de aviones no tripulados con énfasis en aplicaciones militares y civiles.
    • Implementar una política gubernamental para facilitar incentivos fiscales a empresas tecnológicas nacionales que participen en el programa.
  3. Año 3: Producción de Prototipos

    • Construir los primeros prototipos de aviones no tripulados, utilizando modelos de alta fidelidad similares al Digital Pathfinder utilizado en el Vanguard.
    • Integrar pruebas de campo en colaboración con las fuerzas armadas y evaluar los costos de producción a escala.
  4. Año 4: Expansión de la Producción

    • Ampliar la producción con la participación de inversores privados y alianzas internacionales.
    • Convocar a startups y PyMEs regionales que fabriquen las partes mediante impresión 3D y materiales compuestos.
    • Lanzar una campaña de exportación de drones militares fabricados en Argentina hacia mercados latinoamericanos y africanos, donde hay demanda de soluciones de defensa asequibles.
  5. Año 5: Consolidación del Programa

    • Alcanzar la producción en serie de aviones no tripulados, con un enfoque en aviones de combate desechables para misiones de alto riesgo.
    • Asegurar la integración completa de la industria privada en el sector de defensa, mediante contratos de producción y ventas internacionales.

Conclusión preliminar

El proyecto del Vanguard plantea un horizonte prometedor para la reconfiguración de FAdeA, alejándola de la producción de aviones convencionales como el IA-63 Pampa y orientándola hacia tecnologías modernas de fabricación digital y aeronaves autónomas. Este enfoque no solo posicionaría a Argentina en la vanguardia de la aviación militar regional, sino que también abriría nuevas oportunidades en el mercado global de defensa, donde la demanda de drones autónomos y vehículos aéreos no tripulados está en crecimiento constante.

El prototipo Vanguard puede convertirse en un caza ligero de una autonomía pornográfica con un costo de hora de vuelo completamente inusual (en el rango de 150 a 500 dólares la hora de vuelo) posibilitando enorme cantidad de combinaciones. Su bodega puede ser provista desde armas dirigidas (AMRAAM, LGB, misiles ASM, etc.) así como equipamiento electrónico de diversos sensores, perturbadores, señalizadores, etc. Es una plataforma sensible, barata, podría interoperar electrónicamente con los nuevos F-16 MLU del mismo modo que la USAF busca que interactúe con sus F-35.

Mediante un plan estratégico de varios años, el gobierno argentino, en conjunto con el sector privado, puede transformar FAdeA en un centro de innovación aeronáutica, capaz de producir aviones de combate de bajo costo que respondan a las necesidades modernas de defensa.



MPA: Diferencias entre los P-3A chilenos y P-3C argentinos

domingo, 8 de septiembre de 2024

Fusil de asalto: IWI ARAD ¿viene para Argentina?


Fusil de asalto IWI ARAD

Modern Firearms e IWI



Ya se encuentra en servicio en el Ejército de Perú en su versión IWI ARAD 7



Aparentemente en el viaje que se ha realizado a Israel para buscar munición flecha de 105mm y UAV MALE también se pretende traer fusiles ARAD. Los mismos ya se encuentran en servicio en Perú en su versión ARAD 7 de 7,62x51 y probablemente sea éste el modelo a buscar. Es extraño porque las FDI acaban de firmar un contrato para proveerse con una cantidad enorme de M4 de la empresa Colt norteamericana y, por simple escala de producción, debo sospechar que esos M4 deben ser muchos más baratos que los ARAD 5. Respecto a un modelo en 7.62x51mm habiendo stocks excedentes en los arsenales de FN FAL no entiendo la urgencia ni la necesidad. Pero bueno, veamoslo.


Fusil modular de combate eficiente y confiable

El fusil de asalto ARAD de IWI está diseñado para el uso de infantería, unidades especiales y fuerzas del orden público. El fusil de asalto ARAD, tipo M4 de IWI está especialmente diseñado para varios tipos de escenarios de combate con su capacidad para cambiar calibres. ARAD está equipado con rieles Picatinny para facilitar el uso de una variedad de accesorios de óptica y otros. El riel Picatinny forma parte integral del receptor superior del fusil. Además, cuenta con rieles M-LOK en las posiciones de 3, 6 y 9 horas en punto a lo largo del guardamano. Incluye una culata telescópica que permite al usuario ajustar individualmente la longitud conforme a sus necesidades particulares. La estructura modular del fusil permite desmontar y sustituir fácilmente el cañón. El arma es totalmente ambidiestra con controles a ambos lados del fusil. El fusil de asalto ARAD de IWI incluye un pistón de gases de carrera corta con regulador, que facilita la operación continuada en todas las condiciones ambientales. 


Características

  • Pistón de gases de carrera corta
  • Regulador de gases de 2 posiciones: Regular / Uso de supresor
  • Opcional: Rieles de accesorios MIL-STD 1913/M-LOK en posiciones de 3, 6 y 9 horas en punto
  • Riel monolítico de aluminio anodizado de alta resistencia, MIL-STD 1913 en el receptor superior
  • Riel monolítico de aluminio anodizado de alta resistencia, MIL-STD 1913 en el receptor superior


Ventajas y beneficios

Diseñado para un nivel mínimo de mantenimiento del operador y del armero, lo que reduce costos de mantenimiento y del ciclo de vida

  • Intercambiabilidad del 100%, lo que reduce los costos generales del sistema
  • Todas las partes metálicas del arma son resistentes a la corrosión
  • Forjado a martillo, revestido de cromo, con cañón de flotación libre para optimizar la precisión y el ciclo de vida
  • Cañón rápidamente desmontable que puede ser sustituido por el usuario en cuestión de segundos
  • Utiliza cualquier cargador OTAN / MIL. STD 5,56 de acero, aluminio o polímero.

Diseño ergonómico optimizado

  • Culata plegable de polímero
  • Empuñadura pistola sumamente ergonómica
  • Arma totalmente ambidiestra
  • 4 puntos a lo largo del fusil para anexar portafusil de extracción rápida o correa


Datos técnicos

  • Calibre: 5,56 × 45 mm
  •  Estriado: 6 estrías RH, paso 1:7″
  • Longitud del cañón (mm): 292 (11,5″)
  • Largo total, culata plegada (mm): 720
  • Largo total, culata extendida (mm): 800
  • Peso (aprox. kg) (sin cargador): 2,85
  • Cadencia de tiro (aprox. cartuchos/min.): 700~1100








El rifle de asalto ARAD fue presentado en 2019 por la empresa Israel Weapon Industries (IWI).
Desde entonces, ha sido adoptado por la propia unidad antiterrorista Yamam de Israel, así como por la policía militar brasileña de Sao Paulo y ciertas unidades de Operaciones Especiales de los ejércitos de Chile y Ecuador. Es interesante observar que el rifle ARAD es el cuarto diseño diferente de la misma clase, producido simultáneamente por el IWI para los mercados militares y policiales nacionales y extranjeros. Compite directamente con los rifles X95, Carmel y Galil Ace del mismo fabricante o los complementa, lo que permite a su fabricante cubrir todas las bases más populares en el campo de los rifles de asalto modernos. El nombre ARAD del nuevo rifle probablemente proviene de una ciudad del sur de Israel con el mismo nombre.

 

 

El fusil de asalto IWI ARAD

 

El rifle de asalto IWI ARAD es un arma modular basada estrechamente en la popular plataforma AR-15/M16, con algunas mejoras agregadas al diseño básico. Para empezar, el rifle ARAD presenta el sistema operativo de pistón de gas de carrera corta. Tiene un regulador de gas de tres posiciones con ajustes para condiciones normales, disparando con supresor y disparando en condiciones adversas (o con una mayor velocidad de disparo en condiciones normales, usando más gas del cañón para impulsar la acción). Otra desviación del sistema básico "AR-15" es el cañón fácilmente desmontable, que el usuario final puede quitar y reemplazar en cuestión de minutos, utilizando una llave especial para tuercas de cañón. Al momento de escribir este artículo, los cañones del rifle ARAD están disponibles en dos calibres (5,56x45 mm y .300 Blk) y en varias longitudes, que van desde 11,5 a 16 pulgadas. Otras características del arma incluyen los controles ambidiestros como el selector de seguridad/disparo, la liberación del cargador y la liberación del cerrojo, así como el riel Picatinny integrado en la parte superior del receptor superior monolítico. El gatillo es del tipo de dos etapas para mejorar la precisión. La culata es del ahora común tipo carabina M4, ajustable en longitud. La munición se alimenta de varios cargadores compatibles con STANAG.

 

Especificación Valor
Nombre de texto completo El fusil de asalto IWI ARAD (Israel)
cartucho de calibre .300 Whisper / .300 AAC Blackout (7.62x35) , 5.56x45 OTAN, .223 Remington
Tipo de acción seleccionar-fuego
Tipo de disparador sa
Longitud total, mm 775-855 con cañón de 368 mm
Longitud del cañón, mm 292, 368 o 406
Peso vacío, kg 2,8 - 3,0
Capacidad del cargador, rondas 30
Velocidad de disparo cíclica, disparos/min. 700-1100






PNA: Las poderosas Shaldag

sábado, 7 de septiembre de 2024

Argentina: El Beech B-45 Mentor producido bajo licencia

Beech B-45 Mentor producido bajo licencia y en servicio en la Fuerza Aérea Argentina

Sean Eternos los Laureles




Beech B-45 Mentor en la Fuerza Aérea Argentina. Una historia de gloria tecnológica, militar y aeronáutica, ¡pero de verdadera vergüenza política sobre el final de su vida útil!




  El legendario avión de entrenamiento básico Beech B-45 Mentor en la Fuerza Aérea Argentina comenzó su andadura a mediados de los años 50s, cuando surgió la necesidad de incorporar una aeronave destinada a cubrir el rol de entrenamiento primario o básico como reemplazo de los no muy veteranos pero sí ya obsoletos y desgastados I.Ae-22DL (que poseían célula de madera), y de los Fiat G-46-2B, cuyas células habían demostrado ser de poca vida, a pesar de ser excelentes aviones ambos modelos. En tal sentido, y por aquellas fechas, el avión estadounidense de la firma Beech (hoy Beechcraft) era el modelo más avanzado del mundo, y la Fuerza Aérea Argentina posó su atención en él, pero con la intención de construirlo en Argentina.




  El Beech B-45/T-34A Mentor era un avión monoplano biplaza de ala baja, construcción metálica, y cabina en tandem, de entrenamiento básico diseñado por Walter Beech en la segunda mitad de la década de los 40', derivado del avión de recreo Beech Bonanza.



  El prototipo contaba con el empenaje en V tal como el de los primeros Bonanza de producción, pero posteriormente fue reemplazado por uno convencional. En relación al Bonanza, la estructura del Modelo 45 estaba reforzada para soportar elevadas fuerzas g, ya que desde un principio se lo pensó para una función militar. Los primeros dos prototipos estaban equipados con un motor Continental E185 de 185 hp, el primero de los cuales levanto vuelo el 2 de diciembre de 1948.



  El tercer prototipo ya contaba con el que seria el motor de los ejemplares de serie, el Continental E225 de 225 hp. La producción en serie se inició en el año 1953 para la USAF (United States Air Force), que los denomino como T-34A, y en 1955 se inicia la fabricación del modelo destinado a la US Navy, donde se los conoció como T-34B, diferenciándose del A en sus frenos y dirección de la rueda de proa.
 


El avión se ajustaba a las necesidades de la Fuerza Aérea Argentina, y es así que para el año 1956 se firma el contrato de adquisición por parte de la misma, que contemplaba un total de 90 ejemplares, 15 de ellos fabricados en los Estados Unidos en las instalaciones de Beech en Kansas, y los 75 restantes serían suministrados como juegos de piezas para ser ensamblados en Argentina en la Fabrica Militar de Aviones de Córdoba. Para su exportación a la Argentina, los Mentor conservaron la denominación comercial de B-45 de la empresa, y no la militar de los T-34 del gobierno de los Estados Unidos. Los primeros 15 ejemplares fueron volados desde los Estados Unidos, arribando al país el 20 de junio de 1957. Este primer lote fue matriculado correlativamente como E-001 a E-015.



  El ensamblaje de los 75 aparatos restantes se inició en 1959, y el primer ejemplar voló para la Fuerza Aerea Argentina el 1 de Noviembre de 1959, siendo entregado el último en 1962, estos aparatos recibieron las matriculas E-016 a la E-090. A su vez, se adquirieron 2 ejemplares de tercera mano, ambos ex-Ejército del Aire Español y ex-Fuerza Aerea Uruguaya, en los año 2002 y 2003, por lo cual la Fuerza Aerea Argentina en total llegó a operar 92 aviones Mentor.



  Cuando el avión entró en servicio, a medida que se encontraban disponibles, los aparatos eran asignados al Grupo I de entrenamiento con sede en la Iª Brigada Aérea de Morón, Provincia de Buenos Aires. Posteriormente serían transferidos a la VIIª Brigada Aérea de Morón y finalmente a la Escuela de Aviación Militar (EAM) con sede en la Provincia de Córdoba donde se dedicarían exclusivamente al entrenamiento primario.



  Además de los Estados Unidos y Argentina, el Mentor fue fabricado bajo licencia en Canadá y Japón, llegándose a construir un total de 1.904 Beech Modelo 45/T-34.



  Los Mentor con motor a pistón (B-45/T-34A y B) fueron empleados por las fuerzas armadas de Argentina, Bolivia, Canadá, Colombia, Chile, República Dominicana, El Salvador, Estados Unidos, España, Filipinas, Turquia, Uruguay y Venezuela.



  Entre sus variantes podemos destacar:
•YT-34A: denominación aplicada a los tres prototipos de desarrollo.
•T-34A: denominación aplicada  los ejemplares de serie destinados a la USAF (450 unidades)
•T-34B: modelo de serie para la US Navy (423 unidades)
•YT-34C, prototipo equipado con motor turbohélice
•T-34C Turbo Mentor: modelo de serie con motor turbohélice
•T-34C-1, variante del anterior con capacidad de ataque ligero
  Como hecho destacable de su servicio en la Fuerza Aerea Argentina, vale mencionar que durante 1962 los B-45 Mentor formaron la escuadrilla acrobática “Bodas de Oro” en conmemoración del 50 aniversario de la Fuerza Aérea Argentina.



  Además de operar en la VIIª Brigada y la EAM, algunos ejemplares estuvieron en servicio en el Destacamento Aéreo Militar Reconquista, entre los años 1962 y 1963, estos ejemplares pasarían luego a la Dirección de Fomento siendo rematriculados como LQ-..., y ya en el año 1969 pasarían a la EAM.
  También participaron muy activamente en operaciones de combate, realizando misiones contra insurgencia en roles de ataque y observación aerea avanzada durante el Operativo Independencia sobre los cielos tucumanos, rechazando a las fuerzas guerrilleras castroguevaristas que intentaban tomar el poder mediante el terror y el uso de la fuerza. Estas operaciones aereas se combinaron con cazabombarderos A-4B Skyhawk, e IA-58A Pucará, y con diversa intensidad se ejecutaron entre los años 1975 y 1977 denominándose "Operación Torión", no existiendo mucha información al respecto, pues todos los militares, policías y civiles que defendieron la Patria obedeciendo los constitucionales Decretos 261/75, 2770/75, 2771/75 y 2772/75 del gobierno constitucional de Doña María Estela Martínez de Perón (elegido por el 62% de votos), y ratificados legislativamente por unanimidad, son hoy perseguidos políticamente y encarcelados inconstitucional e ilegalmente por haber combatido al terrorismo, y por ello es muy dificil obtener información sobre tales sucesos, ya que sólo los terroristas que atacaban a la Argentina pueden contar lo que hacían, quienes defendían la Patria luchando contra ellos no, y todavía resta por develarse muchos detalles de la actuación de los Mentor en defensa de la Patria.



  Finalizada la "Operación Torión", y derrotada la subversión incluso en la controfensiva extremista del año 1979, ese mismo año se adquieren 50 motores nuevos Continental IO-470-N12B de 260 hp para remotorizar a los 41 Mentor que había en operación por entonces, y los trabajos se llevaron a cabo en el Área Material Rio IV de la Fuerza Aérea Argentina, en la ciudad homónima, en la provincia de Córdoba.
 


La vida operativa del Mentor dentro de la Fuerza Aérea Argentina fue realmente provechosa y longeva, formando a más de 40 promociones de pilotos. Lamentablemente durante 1996 se comienzan a observar los primeros síntomas producto de los años se servicio, y la atrición del Mentor, cuando en las inspecciones de mantenimiento se detectan varias fracturas en las alas producto de la fatiga de material, y sin bien era ya evidente que se necesitaba un reemplazo, las limitaciones presupuestarias impuestas por un poder político que cada vez crecía más y absorbía gran parte del presupuesto de Defensa (y de otras carteras del Estado), volvieron imposible que se autorizara la compra de nuevos aviones, y se decidió avanzar con una modernización de estos nobles pero muy viejos aviones.



De este modo, entre los años 1996 y 1999, en la empresa LMAASA (Lockheed Martin Aircraft Argentina Sociedad Anónima), que era la ex-Fábrica Militar de Aviones (hoy FAdea), se procedió a realizar en 30 Mentor aún operables, un trabajo de refuerzo estructural, renovación de la aviónica y de puesta a punto, con la intención que ese puñado de ejemplares continuara volando el mayor tiempo posible, a espera de diseñar un avión de entrenamiento básico nacional. El trabajo se realizó dentro de las directivas establecidas por el Ministerio de Defensa y a lo que, lamentablemente, el Comando de la Fuerza Aérea Argentina desacertadamente accedió.



  Poco después se produjo un hecho que marcó el destino del avión. El 18 de septiembre del año 2001 en la EAM de la ciudad de Cordoba, se aprestaba a vivir el vuelo de bautismo de los cadetes del primer año del curso de aviadores -entre ellos 9 mujeres-, cuando sobrevino la tragedia al caer e incendiarse uno de los 3 B-45 Mentor cobrándose la vida los dos tripulantes.



  La desgracia ocurrió cuando el ala de uno de los tres aviones Mentor B-45, que volaban a 50 metros de altura, chocó contra los ventanales de la torre de control, perdió estabilidad y se desplomó a tierra ante la atónita mirada de los familiares de los 73 cadetes de la Escuela de Aviación Militar, cuyo director era entonces el brigadier Agustín Miguez, y era la primera vez había mujeres en el cuadro de cadetes
  El brigadier Miguez tomó el comando del avión guía de la formación, acompañado por la cadete mujer más joven, María Polo. A su derecha se ubicó Espirituoso, con el cadete Rodrigo Alisio, y a la izquierda quienes luego resultaron ser las víctimas mortales, el jefe de Estudios del Cuerpo de Cadetes, vicecomodoro Ernesto Cooke, secundado por el cadete varón más joven Carlos Díaz Berástegui, de 19 años, oriundo de Buenos Aires.



  La primera incursión de los 3 aviones, en una misma línea y a baja altura, se desarrolló sin inconvenientes. La segunda fue fatal.



  Si bien el jefe del Cuerpo de Cadetes, vicecomodoro Aldo Perotti, catalogó el hecho como "un accidente", y en sí no se puede achacar a una falla del avión, esa es la realidad, la fama del mismo quedó signada para siempre.



  Los 3 aviones avanzaban en una misma línea, escasamente separados entre sí y a una altura inferior a la de la torre de control. El Mentor siniestrado no tenía margen de maniobra para evitar la colisión. Si hubiese intentado esquivar el edificio, cuyos ocupantes no sufrieron heridas, habría impactado contra la nave que conducía Miguez.
  Cooke llevaba ocho años como instructor de vuelo. Hasta ese año se desempeñó como jefe de un escuadrón del Grupo Aéreo Escuela y era instructor de vuelo. Estuvo dos años en la Academia General del Aire de Murcia (España) como parte de los planes de intercambio con la Fuerza Aérea Argentina. Por su expresa voluntad, no fue velado. Curiosamente el cadete Díaz Berástegui le comentó a una cronista radial antes de abordar el vuelo de bautismo que "Estoy un poco nervioso, pero dentro de todo tranquilo y con expectativas: tengo ganas de volar", agregando que su vocación de ser piloto la sintió "desde siempre. Desde que nací"...



  Antes de la partida de la primera escuadrilla, el jefe accidental del Grupo Aéreo, vicecomodoro Arturo Espirituoso, expresó: "Sólo me resta pedir que la Virgen de Loreto, nuestra patrona, los reciba en los cielos de la Patria y los bendiga en este día".



  El avión había dado todo de sí, y se le exigió aún más. El 8 de octubre de 2010 se produjo en Córdoba un accidente durante un despegue de rutina con el E-046, la aeronave sufrió una pérdida de potencia lo que provocó que el avión se estrellara al poco de alzar el vuelo; por suerte tanto el cadete como el instructor de vuelo sufrieron heridas leves pero este incidente encendió nuevamente las primeras luces de advertencia que se sumaban a los problemas de fatiga que cada vez eran más evidentes; incluso el avión siniestrado era uno de los Mentor que se había vuelto a someter a un nuevo programa con el que los políticos, animados por la matemática Mirta Iriondo, como veremos al final, demencial y devergonzadamente pretendían estirar la vida util de las aeronaves por enésima vez, ahora mediante refuerzos estructurales ¡que incrementaron el peso del avión y lo llevaron al limite en esw vuelo que estuvo a punto de matar a los dos tripulantes!. Quedaba claro que el venerable Mentor era demasiado anticuado y que lamentablemente no podía estar en servicio por mucho tiempo más.



  Su reemplazó debería ser el IA-73, un turbohélice de fabricación nacional que desde hacía años se venía anunciando, pero desde hacía años se venía y aún hoy se le siguen negando los fondos para desarrollarlo.



  Fue así que en agosto del año 2012 la Fuerza Aérea Argentina decidió pasar a retiro a los aviones Mentor B-45, que durante más de 50 años sirvieron para la instrucción de sus pilotos, cuando el entonces titular de la fuerza, brigadier general Normando Costantino, lo confirmó en el discurso que dio a propósito de los cien años de creación de la misma, señalando que "El sistema Mentor con más de 50 años de entrenador básico deja de volar y daremos paso a nuevas tecnologías para la formación de pilotos", sin aclarar entonces qué aparato lo iba reemplazar, pues como ya se estaba haciendo costumbre entonces en Argentina, ya nada se reemplazaba, o lo poco que se hacía lo era de manera improvisada. Así la Fuerza Aérea Argentina accedió al programa conocido como «pay per hour», ofrecido por el grupo alemán Grob, que entonces firmó un acuerdo estratégico para la comercialización del entrenador subsónico avanzado AT-63 Pampa con la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) dirigida por Raúl Argañaraz, ¡y que nunca se cumplió! Ya que si bien la firma alemana Grob proveyó los 10 aviones Grob G-120TP-A en la línea de vuelo (que eran insuficientes porque se requerían un mínimo de 30 ejemplares), más los repuestos que demande el mantenimiento, y se pagaba por las horas de vuelo requeridas para cada etapa de entrenamiento, sea el básico o el avanzado. Eso en teoría, y según el entonces director general del servicio logístico de Defensa, Carlos Lugones, ofrecía ventajas atractivas frente a la estrechez fiscal, permitiendo el entrenamiento básico y avanzado, todo en un mismo aparato, con lo cual el piloto saldría capacitado para acceder a las escuadrillas de aviones de alta performance como el A-4AR Fightinghawk o el AT-63 Pampa, requiriendo un mínimo de horas de adaptación a esos sistemas, calculando que en una segunda etapa FAdeA obtendría el know-how del trabajo con compuesto de carbono transferido por los alemanes: el Grob 120 se fabrica íntegramente con ese material. Como bien sabemos hoy el Grob G-120TP-A no cumplió con las espectativas, y no logró cubrir plenamente el rol del B-45, debiéndose recurrir años después a rentar 8 TECNAM P-2002JF Sierra (hoy inoperativo), y a adquirir 12 (de un mínimo de 24 solicitados) Beechcraft T-6C+ Texan II para el entrenamiento avanzado en reemplazo de los EMBRAER EMB-312 Tucano supervivientes.  



  Los viejos B-45 habían ya expuesto el paso de los años con fallas recurrentes que se agravaron a fines de 2008, se les había exigido mucho más de lo que tenían para dar, pero que tampoco ello le importó a los políticos cuando en el año 2006 se unificó el aprendizaje básico de los pilotos de las tres fuerzas en el denominado CBCAM (Curso Básico Conjunto de Aviador Militar) que se imparte en instalaciones de la Escuela de Aviación Militar ¡en un avión con más de medio siglo de servicio!!!



  La EAM recibió un número de pilotos superior a lo habitual, y a la cabina de los veteranos B-45 convergieron camadas de las tres fuerzas que multiplicaron los esfuerzos bruscos a un parque aéreo ya disminuido por la fatiga de los materiales propia en aviones sometidos a uso intenso.



En el año 2010 el avión dijo basta, pero a pesar que una inspección de rutina detectó fisuras en los largueros dorsales, y viga longitudinal que recorre el ala y soporta los esfuerzos de carga aerodinámica durante el vuelo; y también se registraron grietas en las bancadas de los propulsores, los politicos peronistas a cargo de la Defensa decidieron seguir adelante con el uso del avión. El entonces diputado radical Julio Martínez , entonces presidente de la Comisión de Defensa (que luego llegaría a ser el primer ministro de Defensa de la administración Macri), reclamó al Gobierno por el estado de los aviones y de la instrucción con una frase elocuente, señalando con gran premonición que "El país no forma pilotos, gradúa kamikazes". Pero el reclamo de la Comisión de Defensa del Congreso sólo produjo que Mirta Iriondo, doctora en Matemáticas y licenciada en Física, y que entonces se desempeñaba como subsecretaria de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico del Ministerio de Defensa, sólo impulsara y aprobara la modificación de la estructura alar de los Mentor con el agregado de un refuerzo interno para prolongar la vida del avión.



  Con esa locura, ¡por la que nadie está preso hoy!, sólo se obtuvo un peso agregado que alteró las condiciones de carga y cambió el centro de gravedad original del avión, no podía volar con el instructor y su alumno, sólo podía despegar con un tripulante a bordo; tampoco podía hacer vuelo en formación, ni acrobático, ni prácticas de tiro. Se gastaron 4.3 millones U$D en un trabajo que realizó FAdeA del que sólo quedan los testigos mudos, más de una decena de inservibles aparatos que poco después se convirtieron en chatarra, y el accidente aéreo con dos pilotos que milagrosamente lograron salvar sus vidas al no lograr despegar de la pista de la EAM ese 8 de octubre de 2010 con el E-046 al que hicimos referencia.



  Pero ello no termina allí. Sin desmerecer la nobleza del avión, pues lo que se hace en Argentina es contradecir toda lógica y razón, una vez más el Mentor debió rendir servicio a la Patria.
  En agosto del año 2016, y ante la terrible escasez de material aéreo, el B-45 Mentor volvió a volar. Eran ahora 2 aviones los que nuevamente tomaron vuelo desde la EAM. En este caso los aparatos EX-034 y EX-086, rematriculados como experimentales de investigacion y desarrollo, debido a que estuvieron en tierra y sin mantenimiento, perdiendo condicion de aeronavegables desde su desprogramacion casi cuatro años antes. Los vuelos se limitaron a maniobras rectas y niveladas, sin exigir grandes esfuerzos g a las células. Estos vuelos se hicieron en medio de las especulaciones de la posible evolución del demostrador tecnológico FAdeA IA-100, a un entrenador básico bajo la denominación IA-74, que por fin sería el reemplazó de los Beech B-45 Mentor y también de los TECNAM P-2002JF Sierra.



  Pero el vuelo de esos B-45, al margen de la emoción de los nostálgicos, que tanta admiración pueden llegar a sentir por el que sin lugar a dudas es uno de los grandes aviones de la historia y el mejor entrenador básico de uso militar de su época, despertó la justificada crítica de especialistas y aficionados expresando sus reservas frente a devolver a condicion de vuelo estos aparatos, siendo que hasta de los Estados Unidos la propia Beechcraft, su empresa madre oportunamente desalentó nuevos trabajos de reacondicionamiento sobre los B-45 argentinos, ¡ÚNICA  FORMA DE PONERLE FRENO A LA TACAÑERÍA Y DESVERGÜENZA DE LOS POLÍTICOS ARGENTINOS!!!, y llegar así por fin a dar a este formidable y noble avión el merecido retiro. Eso sí, todavía hoy, pasados ya 23 años desde que se solicitara su reemplazo, y 7 años desde su baja del servicio, la dirigencia política argentina no ha autorizado aún la incorporación de adecuado reemplazo alguno para los B-45 Mentor de la Fuerza Aérea Argentina. 



Especificaciones técnicas (T-34A)

•Tipo: Biplaza de entrenamiento básico
•Planta Motriz: 1 motor de 6 cilindros Continental O-470-13 de 225 hp (Continental IO-470-N12B de 260 hp en los B-45 modernizados en FMA de Argentina en 1979)
•Envergadura 10.6 mts.
•Longitud: 7.90 mts.
•Altura 2.90 mts.
•Superficie alar: 16.68 m².
•Pesos: 977 kgs. vacío, 1.315 kgs. máximo en despegue.
•Velocidad máxima: 306 kph.
•Alcance: 1.520 kms.



•Techo de servicio: 6.096 mts.
•Velocidad scenso: 6.3 m/seg.
•Armamento: 2 ametralladoras alares de 7.62×51 mm; 2 afustes alares para 544 kgs. de bombas o cohetes.
 

▪Historial individual (se desconoce fecha de baja de algunos ejemplares; en cualquier caso, ya para el año 2012 ninguno volaba por lo que se dará por sentada su baja por desprogramación del Sistema de Armas, con excepción del los EX-034 y EX-086, que volvieron a volar por breve tiempo en el año 2016 para el CEV):
•E-001: nº/serie CG165, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido tras accidente el 20/3/1981.
•E-002: nº/serie CG166, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 27/6/1960.
•E-003: nº/serie  CG167, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 11/04/1977.
•E-004: nº/serie  CG168, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, accidentado el 25/11/1970, dado de baja en noviembre de 1982.
•E-005: nº/serie  CG169, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 9/10/1979.
•E-006: nº/serie  CG170, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 28/5/1976.
•E-007: nº/serie  CG171, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, dado de baja en 2011.
•E-008: nº/serie  CG172, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 16/07/1981.
•E-009: nº/serie  CG173, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 25/2/1959.
•E-010: nº/serie  CG174, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, dado de baja en 2011.
•E-011: nº/serie  CG175, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, dado de baja en 2011.
•E-012: nº/serie  CG176, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 29/05/1969.
•E-013: nº/serie  CG177, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, destruido en accidente el 29/5/1968.
•E-014: nº/serie  CG178, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, dado de baja tras accidentarse el 15/10/1972.
•E-015: nº/serie  CG179, fabricado en USA. Alta en la FAA en 1958, dado de baja en mayo de 1977 cuando su célula es sometida a ensayos de destrucción para comprobar el estado de los componentes en la FMA.
•E-016: nº/serie  CG180, primer ejemplar fabricado en Argentina, en la FMA (Fábrica Militar de Aviones), dado de alta en la FAA en 1958.
•E-017: nº/serie  CG181, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959
•E-018: nº/serie  CG182, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, dado de baja en noviembre de 1965.
•E-019: nº/serie  CG183, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959
•E-020, nº/serie  CG184, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, destruido en accidente en Seguí, provincia de Entre Rios, el 5/08/1966, falleciendo sus dos ocupantes.
•E-021: nº/serie CG185, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, desprogramado tras un accidente el 15/5/1996.
•E-022: nº/serie CG186, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959
•E-023, nº/serie CG187, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, destruido en accidente en la provincia de Córdoba el 3/02/1987, falleciendo su único ocupante.
•E-024: nº/serie  CG188, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, destruido en accidente el 14/12/1962.
•E-025: nº/serie  CG189, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, desprogramado tras un accidente el 30/10/1985, preservado como monumento en la provincia de Córdoba.
•E-026: nº/serie  CG190, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1959, re-matriculado como LQ-HNE en 1962, en 1969 pasa a ser el E-094.
•E-027: nº/serie  CG191, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente en la Lagunilla, Alta Gracia, provincia de Córdoba el 22/08/1962, falleciendo su piloto, el Alférez Alfredo Laine.
•E-028: nº/serie CG192/AG-03, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente en Alta Gracia, provincia de Córdoba el 10/02/1989, falleciendo uno de sus ocupantes.
•E-029: nº/serie  CG193, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960
•E-030: nº/serie  CG194, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-031: nº/serie  CG195, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente en James Clark, provincia de Córdoba el 29/5/1968, falleciendo sus dos ocupantes.
•E-032: nº/serie  CG196, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente el 31/05/1963.
•E-033: nº/serie CG197, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente en Córdoba el 16/05/1963, falleciendo su piloto el Teniente Santiago Clemente Vásquez.
•E-034: nº/serie  CG198, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960. Dado de baja, rematriculado y puesto en vuelo en agosto de 2016 como EX-034
•E-035: nº/serie  CG199, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-036: nº/serie  CG224, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente el 8/04/1976.
•E-037: nº/serie CG225, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-038: nº/serie CG226, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-039: nº/serie CG227/AG-14, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido durante un show aéreo en la provincia de Córdoba el 18/09/2001, falleciendo sus dos ocupantes, vicecomodoro Ernesto Cooke, y cadete Carlos Díaz Berástegui.
•E-040: nº/serie  CG228, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, re-matriculado como LQ-HNF en 1962, en 1969 pasa a ser el E-095, destruido en accidente el 19/09/1981.
•E-041: nº/serie  CG229, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-042: nº/serie  CG230, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1958.
•E-043: nº/serie  CG231, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, re-matriculado como LQ-HHV en 1962, en 1969 pasa a ser el E-090(2), destruido en accidente el 19/1/1977.
•E-044: nº/serie  CG232, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-045: nº/serie CG233, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-046: nº/serie CG234, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-047: nº/serie CG235, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-048, nº/serie CG236, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente el 9/11/1977.
•E-049: nº/serie CG237, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960.
•E-050: nº/serie CG231, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, rematriculado como LQ-HHW en 1962, en 1969 pasa a ser el E-091.
•E-051: nº/serie CG239, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1960, destruido en accidente el 1/11/1971.
•E-052: nº/serie CG240, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-053: nº/serie CG241, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido tras accidentarse el 22/08/1972.
•E-054: nº/serie CG242, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 3/10/1968.
•E-055: nº/serie CG243, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 4/07/1969.
•E-056: nº/serie CG244, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-057: nº/serie CG245, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 3/10/1968.
•E-058: nº/serie CG246, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente en Quilmes, provincia de Buenos Aires, tras despegar del Area Material Quilmes el 6/10/1967, falleciendo su piloto, el Teniente Luis Favario.
•E-059: nº/serie CG247, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 16/08/1969.
•E-060: nº/serie CG248, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961. Primer ejemplar modernizado en la ex LMAASA, puesto nuevamente en servicio en 1997.
•E-061: nº/serie CG249, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente en las cercanía de la ciudad de Córdoba, el 8/06/1967.
•E-062: nº/serie CG250, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1962.
•E-063: nº/serie CG251, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-064: nº/serie CG252, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1962.
•E-065: nº/serie CG253, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 6/08/1964.
•E-066: nº/serie CG254, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido al colisionar contra el cerro Monigote en la provincia de San Luís el 9/10/1974, fallecen sus dos ocupantes, entre ellos el Alférez Javier Rothlin.
•E-067: nº/serie CG255, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-068: nº/serie CG256, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-069: nº/serie CG257, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-070: nº/serie CG258, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente en Villavicencio, provincia de Mendoza el 1/05/1962, fallecen sus dos ocupantes.
•E-071: nº/serie CG259, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente en Fraile Pintado, provincia de Jujuy el 18/07/1961, fallece uno de sus dos ocupantes.
•E-072: nº/serie CG260, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, desprogramado tras accidentarse el 1/9/1993.
•E-073: nº/serie CG261, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-074: nº/serie CG262, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-075: nº/serie CG263, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 24/3/1983, falleciendo sus dos ocupantes.
•E-076: nº/serie CG264, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-077: nº/serie CG265, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en un aterrizaje forzoso el 20/03/1968 en el aeropuerto de Córdoba, falleciendo sus dos ocupantes.
•E-078: nº/serie CG266, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente a 2 kms del aeropuerto de Santa Rosa, provincia de La Pampa, el 16/11/1964, fallecen sus dos ocupantes, el Alférez Armando Ojeda y el Cabo 1ero. Miguel Alovera.
•E-079: nº/serie CG267, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 25/11/1965.
•E-080: nº/serie CG268, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, re-matriculado como LQ-HHX en 1962, en 1969 pasa a ser el E-092.
•E-081: nº/serie CG269, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 195, re-matriculado como LQ-HHY en 1962, destruido en accidente en 1967.
•E-082: nº/serie CG270, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, re-matriculado como LQ-HHZ en 1962, en 1969 pasa a ser el E-093, destruido en accidente el 26/3/1980.
•E-083: nº/serie CG271, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-084: nº/serie CG272, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente en la provincia de Córdoba el 12/06/1987, fallecen sus dos ocupantes.
•E-085: nº/serie CG273, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961.
•E-086: nº/serie CG274, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 25/10/1962.
•E-087: nº/serie CG275, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1961, destruido en accidente el 25/10/1962.
•E-088: nº/serie CG276, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1962.
•E-089: nº/serie CG277, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1962, destruido en accidente el 15/05/1975.
•E-090: nº/serie CG278, fabricado en la FMA, dado de alta en la FAA en 1962, re-matriculado como LQ-HLF en 1962, en 1969 pasa a ser el E-096. destruido en accidente el 17/01/1977.
•E-097: nº/serie G-47, ex Ejército del Aire Español E17-23/791-23, ex Fuerza Aérea Uruguaya FAU635, adquirido por la Fuerza Aérea en el año 2002, destinado al Centro de Ensayos en Vuelo (CEV) como EX-086.
•E-098: nº/serie X-103, ex Ejército del Aire Español E17-7/791-07, ex Fuerza Aérea Uruguaya FAU646, adquirido por la Fuerza Aérea en el año 2003, destinado al (CEV).