Lecciones militares y estratégicas del conflicto en Ucrania
Esteban McLaren
El conflicto en Ucrania ha proporcionado valiosas lecciones en el ámbito militar y estratégico, destacando el papel de la guerra urbana, el impacto de la tecnología y la evolución de las tácticas de combate. A continuación, se presentan los principales aprendizajes extraídos del conflicto, organizados en diferentes áreas clave.
El conflicto en Ucrania ha servido como un laboratorio en tiempo real para la evolución de la guerra moderna, ofreciendo valiosas lecciones militares y estratégicas en múltiples áreas. Desde el combate urbano hasta el papel de la tecnología, pasando por la logística y la guerra de información, este conflicto ha demostrado la continua adaptación de las fuerzas en combate y la importancia de la innovación en la conducción de operaciones militares.
La guerra urbana en Ucrania
El combate urbano ha sido uno de los aspectos más críticos del conflicto, evidenciado en batallas como las de Mariúpol, Bajmut y Járkov. A diferencia de los conflictos convencionales en los que el control del terreno se basa en el dominio de grandes extensiones abiertas, la guerra urbana ha obligado a una reconsideración de las tácticas tradicionales. Las fuerzas ucranianas han utilizado una estrategia basada en la movilidad y dispersión para maximizar sus ventajas y minimizar sus vulnerabilidades frente a un enemigo con superioridad numérica y de fuego. En ciudades devastadas por los bombardeos, las tropas defensoras han aprovechado el terreno para establecer posiciones fortificadas en edificios en ruinas, utilizando túneles y sótanos para moverse sin ser detectadas.
Una de las lecciones clave que han emergido del conflicto es el uso de la infraestructura civil como parte integral de la estrategia defensiva. Los edificios altos han sido empleados como puntos de observación y plataformas de tiro para francotiradores y equipos de artillería ligera. De igual forma, los sistemas de alcantarillado han permitido el movimiento encubierto de tropas, facilitando emboscadas y operaciones de infiltración detrás de las líneas enemigas. El uso de barricadas improvisadas y vehículos destruidos ha dificultado el avance de las tropas mecanizadas, obligándolas a ralentizar su ritmo y exponiéndolas a ataques coordinados.
El combate en áreas urbanas también ha demostrado la importancia de la comunicación en tiempo real y la necesidad de una coordinación efectiva entre unidades dispersas. Los defensores han empleado radios de corto alcance, aplicaciones de mensajería encriptadas y redes de drones para transmitir información sobre los movimientos del enemigo. Esta conectividad ha permitido una toma de decisiones más ágil y una capacidad de reacción rápida a los cambios en el campo de batalla.
El impacto de la tecnología en el conflicto
Uno de los aspectos más innovadores de la guerra en Ucrania ha sido el uso de tecnología avanzada en todos los niveles de combate. En particular, los drones han transformado la manera en que se llevan a cabo las operaciones militares, desempeñando funciones que van desde el reconocimiento hasta el ataque directo. Ucrania ha utilizado drones comerciales modificados para la vigilancia del campo de batalla, lo que ha permitido identificar posiciones enemigas y dirigir fuego de artillería con una precisión sin precedentes.
Por otro lado, los drones kamikaze han jugado un papel determinante en la ofensiva. Modelos como el Shahed-136, utilizados por Rusia, y los drones FPV empleados por Ucrania han demostrado ser efectivos para atacar posiciones fortificadas, vehículos blindados y centros logísticos enemigos. La capacidad de estos dispositivos para evadir sistemas de defensa aérea y alcanzar objetivos con precisión los ha convertido en una herramienta clave en el conflicto.
A la par del desarrollo de los drones, la guerra electrónica ha cobrado una importancia sin precedentes. Ambos bandos han implementado sistemas de interferencia para bloquear señales de GPS, comunicaciones y drones enemigos. En este sentido, la doctrina militar ha evolucionado para incluir estrategias de protección contra ataques electrónicos y la integración de sistemas antidrones en unidades de combate. Las tropas en el terreno han aprendido a utilizar medidas de mitigación como el cambio constante de frecuencias de comunicación, el uso de contramedidas electrónicas y la implementación de redes de comunicación resilientes.
Otro elemento tecnológico fundamental ha sido la guerra cibernética. Desde el inicio del conflicto, Ucrania y Rusia han utilizado ataques cibernéticos para deshabilitar infraestructuras críticas, manipular información y afectar la moral del enemigo. Hackers ucranianos han lanzado ofensivas contra bancos, medios de comunicación y sistemas de transporte rusos, mientras que Rusia ha dirigido ataques contra redes eléctricas y sistemas gubernamentales en Ucrania. Estas operaciones han demostrado que el ciberespacio es ahora un dominio de combate tan importante como el terrestre, aéreo o marítimo.
Logística y sostenimiento en un conflicto de alta intensidad
El conflicto en Ucrania ha resaltado la vulnerabilidad de los centros logísticos en la guerra moderna. Ambos bandos han atacado con éxito depósitos de municiones, centros de reabastecimiento y líneas de comunicación, con el objetivo de privar al enemigo de los recursos necesarios para continuar la lucha. Estos ataques han puesto en evidencia la necesidad de adoptar un enfoque más flexible en la gestión del suministro y la distribución de recursos en el campo de batalla.
Las fuerzas ucranianas han aprendido a dispersar sus suministros en múltiples ubicaciones para evitar que un solo ataque pueda afectar de manera significativa su capacidad operativa. Asimismo, han empleado técnicas de reabastecimiento móvil, utilizando vehículos ligeros y drones para entregar municiones, medicinas y equipos a las tropas en primera línea sin necesidad de depender de grandes convoyes logísticos.
Otra lección importante ha sido el alto consumo de municiones en un conflicto de alta intensidad. La guerra ha demostrado que los enfrentamientos prolongados pueden agotar rápidamente las reservas estratégicas de armamento, lo que ha obligado a ambos bandos a buscar alternativas para reponer sus arsenales. Ucrania ha dependido en gran medida del apoyo de aliados occidentales para obtener nuevas armas y municiones, mientras que Rusia ha recurrido a proveedores externos como Irán y Corea del Norte para mantener su capacidad ofensiva.
Operaciones de información y guerra híbrida
El conflicto en Ucrania ha puesto de manifiesto la creciente importancia de las operaciones de información y la guerra híbrida. Las redes sociales han sido utilizadas de manera extensiva como una herramienta de comunicación y propaganda. Ucrania ha empleado plataformas como Twitter y Telegram para coordinar movimientos civiles, compartir inteligencia y fortalecer la moral de sus tropas. La difusión de imágenes y videos en tiempo real ha permitido a Ucrania mantener el apoyo de la comunidad internacional y contrarrestar la narrativa rusa sobre el conflicto.
Por otro lado, Rusia ha llevado a cabo una campaña de desinformación con el objetivo de generar confusión y sembrar dudas en la población enemiga. Mediante la manipulación de noticias, la difusión de rumores y el uso de cuentas falsas en redes sociales, Moscú ha intentado influir en la percepción pública y justificar sus acciones militares. Esta estrategia ha demostrado que la información puede ser utilizada como un arma tan poderosa como cualquier sistema de armamento convencional.
Un aspecto clave de la guerra híbrida en Ucrania ha sido el papel de la resistencia civil. En las zonas ocupadas, la población ha desempeñado un papel fundamental en la recopilación de inteligencia, el sabotaje de infraestructuras y la interferencia en la logística enemiga. La capacidad de movilizar a la población civil para apoyar las operaciones militares ha demostrado ser un factor determinante en el desarrollo del conflicto.
Conclusión
El conflicto en Ucrania ha demostrado que la guerra moderna se desarrolla en múltiples dimensiones y requiere una constante adaptación para mantenerse a la vanguardia. La guerra urbana sigue siendo un desafío significativo, en el que la movilidad y el uso del entorno juegan un papel crucial en la supervivencia y efectividad de las tropas. La tecnología, especialmente los drones y la guerra electrónica, ha redefinido la forma en que se llevan a cabo las operaciones, brindando nuevas oportunidades pero también nuevos desafíos.
La logística ha demostrado ser un factor determinante en la capacidad de sostener operaciones prolongadas, y la guerra de información ha adquirido un protagonismo sin precedentes en la manipulación de la percepción pública y la moral de los combatientes. Estos aprendizajes influirán en la doctrina militar futura y en la planificación de conflictos de alta intensidad, estableciendo nuevos paradigmas sobre cómo se libran las guerras en el siglo XXI.
Los militares ucranianos de la 110ª Brigada Mecanizada Independiente, utilizando drones pesados del tipo "Baba Yaga", atacan objetivos rusos en la dirección de Pokrovsky. Slava Ukrainia!
En el contexto global actual, las fuerzas armadas de todo el mundo se enfrentan a desafíos tecnológicos y estratégicos que demandan una constante actualización y adaptación de sus capacidades. Argentina, como parte de esta dinámica, no es la excepción. En particular, el desarrollo y uso de drones FPV (First-Person View) ha emergido como una tecnología clave en los conflictos modernos, siendo el conflicto en Ucrania un ejemplo reciente y relevante. Las Fuerzas Armadas Argentinas, comprometidas con la defensa nacional y la preservación de su integridad territorial, deben considerar la incorporación de estas tecnologías en su arsenal, y para ello es fundamental la asignación de fondos en el presupuesto público destinados a la creación de una planta de ensamble y producción de drones FPV. Los drones FPV son los fusiles Máuser del soldado de infantería de hace un siglo atrás.
Lecciones del conflicto en Ucrania
El uso de drones en el conflicto entre Rusia y Ucrania ha demostrado el valor de estas herramientas no solo en tareas de reconocimiento y vigilancia, sino también en operaciones ofensivas directas. Los drones FPV, que permiten a los operadores controlar el dispositivo en tiempo real con una visión en primera persona, han sido empleados tanto por las fuerzas ucranianas como por las rusas para ataques de precisión, reconocimiento avanzado y misiones de inteligencia. Estas plataformas han probado ser relativamente económicas en comparación con otros sistemas de armas, y su capacidad para atacar con precisión a objetivos estratégicos ha transformado la forma en que se conduce la guerra moderna.
La lección clave para Argentina y otros países es que los drones FPV, dada su versatilidad, eficiencia y costo relativamente bajo, pueden convertirse en un elemento central dentro de una estrategia de defensa moderna. No se requiere de un ejército inmenso ni de recursos ilimitados para desarrollar capacidades de ataque y defensa eficientes si se aprovechan tecnologías emergentes como los drones FPV. Esto resalta la urgencia de establecer una planta de producción local, que no solo impulse la capacidad tecnológica de las fuerzas armadas argentinas, sino que también genere empleo y desarrollo en sectores clave como la electrónica y la ingeniería.
Beneficios de una planta de producción nacional
La creación de una planta de ensamble y producción de drones FPV en Argentina tiene múltiples ventajas estratégicas. En primer lugar, permitiría la reducción de la dependencia de equipos y tecnologías importadas, brindando a las fuerzas armadas una mayor autonomía para desarrollar y adaptar estas herramientas a las necesidades específicas del país. En un entorno geopolítico cada vez más incierto, la capacidad de fabricar armamento de alta tecnología a nivel local es una ventaja significativa para cualquier nación.
Además, la inversión en infraestructura para la producción de drones contribuiría al desarrollo industrial y tecnológico del país, fomentando la innovación en campos como la robótica, inteligencia artificial y sistemas de comunicación. Al posicionarse como un referente regional en la producción de estos equipos, Argentina podría incluso acceder a mercados internacionales, exportando sus tecnologías a otras naciones de la región con necesidades similares.
Justificación presupuestaria
El financiamiento de esta planta de producción debe considerarse una inversión estratégica para el futuro de la defensa nacional. Dado el costo relativamente bajo de los drones FPV en comparación con otros sistemas de armas, su producción en serie podría optimizar el presupuesto militar argentino, permitiendo a las fuerzas armadas adquirir equipos avanzados a un costo accesible. Además, una planta de ensamblaje podría adaptar las tecnologías de drones a las características del terreno y los objetivos operacionales de Argentina, lo que sería un beneficio adicional en la planificación de misiones de defensa y seguridad nacional.
La guerra en Ucrania ha demostrado que las nuevas tecnologías, como los drones FPV, son esenciales para cualquier fuerza militar moderna. Para las Fuerzas Armadas Argentinas, la creación de una planta de ensamble y producción de drones no solo mejoraría su capacidad operativa, sino que también sería un motor para el desarrollo tecnológico y económico del país. Invertir en esta infraestructura es clave para asegurar una defensa eficiente y preparada ante los desafíos del futuro. Analicemos en este informe qué significa poner una planta de ensamble o fabricación de drones en vistas de la importancia estratégica de este recurso. Lamentablemente, todo apunta a llevarnos bien con China porque la enorme mayoría de los proveedores son de ese origen.
Inversión inicial requerida para una planta de producción de drones FPV
La inversión inicial para establecer una planta de fabricación de drones FPV varía dependiendo de la escala del proyecto, el nivel de automatización, y si decides fabricar todas las piezas internamente o subcontratar algunos componentes. A continuación, se presenta un desglose general de los costos aproximados:
1. Costos de infraestructura y equipamiento
Alquiler o compra de espacio: Dependiendo de la ubicación y el tamaño, el costo de alquiler o compra de un espacio adecuado para una planta de producción puede variar enormemente. Para un espacio de unos 500 a 1000 m² (suficiente para producción pequeña a mediana), los costos pueden estar entre:
Alquiler: $3,000 a $10,000 USD por mes.
Compra: $200,000 a $500,000 USD (dependiendo de la ubicación).
Renovaciones y adaptaciones: Costos asociados con la adecuación del espacio para la producción, como la instalación de ventilación adecuada para el trabajo con fibra de carbono, estaciones de soldadura y áreas de ensamblaje.
Costo estimado: $20,000 a $50,000 USD.
Debe tenerse en cuenta que debido a los recortes presupuestarios en distintos bases militares y fábricas existen amplios espacios en los cuales podría montarse un planta de ensamble de drones estilo ucraniana. Estos costos, en cierto sentido, pueden ser menores. Asimismo, debiera pensarse también en una fuerte interacción con el sector privado a fin de interactuar con aparatos completamente off-the-shelf que son simplemente adecuados al uso militar (especialmente cuando se les añade una carga explosiva).
2. Maquinaria y herramientas
Máquinas CNC para cortar fibra de carbono (ver apéndice abajo): Una máquina CNC de calidad media para cortar fibra de carbono puede costar entre:
Costo Estimado: $10,000 a $50,000 USD por unidad, dependiendo del tamaño y precisión.
Impresoras 3D: Dependiendo del número de impresoras 3D que necesites para piezas personalizadas (TPU y otros materiales), una buena impresora 3D costará entre:
Costo Estimado: $500 a $5,000 USD por impresora (puedes necesitar varias dependiendo del volumen de producción).
Estaciones de soldadura: Para la soldadura de controladores de vuelo, ESCs, motores, etc.
Costo estimado: $100 a $500 USD por estación de soldadura. Se necesitarán varias estaciones para un flujo continuo de producción.
Herramientas de ensamblaje y ESD (Protección contra Descargas Electrostáticas):
Costo estimado: $5,000 a $10,000 USD para todo el equipo de ensamblaje (destornilladores, pinzas, multímetros, etc.) y equipo de protección ESD.
Equipos de pruebas y calidad: Simuladores de vuelo, bancos de pruebas para motores y drones, medidores de potencia, etc.
Costo estimado: $5,000 a $15,000 USD.
3. Suministros y materias primas
Materiales iniciales (carbono, motores, controladores de vuelo, ESC, hélices, etc.): Para una producción inicial (primer lote de drones), necesitarás un stock adecuado de materiales y componentes.
Costo estimado: $20,000 a $50,000 USD para adquirir suficientes piezas y materias primas para los primeros lotes de producción.
4. Costos de Personal
Salarios de personal técnico y operativo: Dependiendo de la ubicación, los salarios pueden variar. Para un equipo inicial de ingenieros, técnicos y personal de ensamblaje, los costos salariales pueden ser:
Ingenieros de diseño y electrónica: $40,000 a $70,000 USD anuales por ingeniero.
Técnicos de ensamblaje: $20,000 a $40,000 USD anuales por trabajador.
Personal de calidad/pruebas: $25,000 a $50,000 USD anuales.
5. Desarrollo de marca y marketing
Marketing y comercio electrónico: Para crear una marca en el mercado FPV, es fundamental invertir en campañas de marketing digital, desarrollo de sitio web y presencia en redes sociales.
Costo estimado: $10,000 a $30,000 USD para campañas iniciales, desarrollo de tienda online y publicidad en redes sociales.
6. Licencias, certificaciones y cumplimiento
Certificaciones de seguridad y cumplimiento: Dependiendo del país, es posible que necesites certificaciones de seguridad (FCC, CE, RoHS) para los componentes electrónicos y los drones completos.
Costo estimado: $5,000 a $20,000 USD, dependiendo de la cantidad de certificaciones requeridas.
Permisos y licencias: Registros, permisos de operación, y otros requisitos locales.
Costo Estimado: $2,000 a $5,000 USD.
Resumen de inversión estimada
A continuación, se muestra un resumen de los costos aproximados para la inversión inicial:
Tiempo necesario para comenzar la producción
El tiempo requerido para comenzar la producción depende de varios factores, como la contratación de personal, la adquisición de maquinaria, y la adaptación del espacio de producción. Un cronograma típico puede verse así:
1. Diseño y planificación (1-3 meses)
Finalización de diseños de drones y planes de producción.
Investigación y adquisición de proveedores de materiales y componentes.
Cumplimiento con las normativas locales y obtención de licencias.
2. Instalación de maquinaria y configuración (2-4 meses)m
Compra e instalación de máquinas CNC, impresoras 3D y herramientas de ensamblaje.
Instalación de estaciones de trabajo y equipos de pruebas.
Configuración del sistema de inventario y gestión de producción.
3. Contratación y capacitación (1-3 meses)
Contratación de ingenieros, técnicos de ensamblaje y personal de calidad.
Capacitación de los empleados en el uso de maquinaria y procesos de fabricación.
4. Prototipado y pruebas (1-2 meses)
Prototipado de los primeros drones y pruebas de calidad.
Ajustes en los procesos de producción según los resultados de las pruebas.
5. Producción Inicial (1-2 meses)
Comienzo de la producción a pequeña escala para asegurar que todos los procesos estén funcionando correctamente.
Verificación final de calidad y embalaje para el lanzamiento al mercado.
Cronograma estimado total: 6 a 12 meses
Este período incluye la fase de planificación, instalación, contratación y la producción inicial. Con una buena gestión, puedes estar listo para comenzar la producción en aproximadamente 6 meses, aunque esto puede variar según la complejidad del proyecto y la rapidez con que se adquieran las herramientas y el personal.
¿Cómo producir drones FPV?
1. Descripción básica para establecer una planta de producción de drones FPV
Planificación y diseño: Define el alcance de la producción de drones FPV: ¿qué tipos de drones fabricarás (drones de carreras, drones de freestyle, cinewhoops, drones de largo alcance)? Considera qué partes serán subcontratadas y cuáles se fabricarán internamente.
Diseño del producto y prototipado: Desarrolla o adquiere archivos de diseño para los marcos, la electrónica (controladores de vuelo, ESC, etc.), y otros componentes. Comienza con modelos CAD y prototipa varias iteraciones para asegurar el rendimiento.
Investigación de mercado y cumplimiento: Investiga tu mercado objetivo (aficionados, profesionales, creadores de contenido) y asegúrate de cumplir con las regulaciones locales e internacionales de aviación y fabricación electrónica, como las certificaciones de la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones) o CE.
2. Proveedores clave y suministradores
Necesitarás identificar proveedores para varios componentes y servicios en la fabricación de drones FPV:
Componentes principales
Marcos: Los marcos generalmente están hechos de fibra de carbono. Busca proveedores especializados en corte preciso de fibra de carbono.
Componentes impresos en 3D: Para piezas personalizadas, necesitarás una configuración de impresión 3D o un proveedor externo para plásticos flexibles como TPU.
El personal necesario variará según la escala de la operación y la cantidad de automatización. A continuación, algunos de los roles esenciales para una planta de fabricación de drones FPV:
Personal técnico y de ingeniería
Ingenieros de diseño: Responsables de crear y probar diseños de drones utilizando software CAD y trabajar en estrecha colaboración con producción para optimizar diseños para la fabricación.
Ingenieros mecánicos: Se centran en la selección de materiales, diseño de marcos y aseguramiento de la durabilidad.
Ingenieros eléctricos: Diseñan e integran controladores de vuelo, ESC, placas de distribución de energía (PDB) y garantizan que todos los componentes electrónicos funcionen eficientemente.
Técnicos de control de calidad/pruebas: Especialistas en probar cada dron para el rendimiento, durabilidad y fiabilidad antes de su envío.
Trabajadores de fabricación y ensamblaje
Técnicos de fabricación de marcos: Con habilidades para operar máquinas CNC para corte de fibra de carbono, o gestionar operaciones de impresión 3D.
Técnicos de ensamblaje: Personal capacitado para ensamblar drones, soldar componentes electrónicos, instalar motores e integrar sistemas FPV.
Personal de embalaje y envío: Responsables de empaquetar de forma segura los productos terminados y gestionar la logística.
Personal de soporte
Especialistas en compras: Encargados de adquirir materiales, negociar con proveedores y mantener las cadenas de suministro.
Gerentes de logística y almacén: Manejan la coordinación de envíos, inventario y gestión de la cadena de suministro.
Equipo de marketing y ventas: Ayuda a desarrollar la presencia de la marca en el mercado FPV, gestiona las ventas directas al consumidor y supervisa el servicio al cliente.
4. Equipo y herramientas
Máquinas CNC: Para cortar fibra de carbono, aluminio u otros materiales utilizados en los marcos.
Impresoras 3D: Para piezas personalizadas como soportes para cámaras u otros componentes flexibles.
Estaciones de soldadura: Para ensamblar manualmente componentes electrónicos como motores, controladores de vuelo y VTX.
Herramientas de línea de ensamblaje: Destornilladores de precisión, llaves, alicates y multímetros para el control de calidad.
Protección ESD: Equipo antiestático para proteger los componentes electrónicos sensibles de las descargas electrostáticas.
5. Flujo de trabajo de fabricación
Fase de diseño: Los ingenieros diseñan el dron en software CAD, simulan pruebas de esfuerzo e imprimen prototipos con impresoras 3D.
Abastecimiento de componentes: Identifica proveedores confiables y desarrolla asociaciones para asegurar un flujo constante de partes esenciales.
Producción de marcos: Utiliza máquinas CNC para cortar las piezas de fibra de carbono para los marcos.
Montaje electrónico: Instalación y soldadura del FC, los ESC, los motores y el cableado. Prueba cada unidad para asegurar la calidad.
Integración del sistema FPV: Instalación de la cámara FPV, el VTX y las antenas, asegurando la compatibilidad con diferentes gafas y receptores.
Pruebas finales: Realiza pruebas de vuelo y de resistencia para asegurar la durabilidad y el rendimiento.
Control de calidad y empaque: Inspecciona el producto final en busca de defectos, empaquétalo de manera segura y organiza el envío.
6. Cumplimiento y certificaciones
Normas de seguridad: Cumple con las normas de seguridad locales e internacionales como CE (Europa) o FCC (EE. UU.).
Cumplimiento ambiental: Asegúrate de que tus procesos de producción cumplan con las regulaciones ambientales, especialmente en lo que respecta al polvo de fibra de carbono y la eliminación de desechos electrónicos.
Regulaciones de drones: Asegúrate de que los drones cumplan con las regulaciones de las autoridades de aviación, como la FAA en Estados Unidos o EASA en Europa, particularmente en cuanto a límites de peso y transmisión FPV.
7. Costos estimados
Costos de Instalación Inicial:
Espacio de fábrica: Alquilar o comprar un almacén para fabricación y ensamblaje, generalmente con techos altos y buena ventilación para la producción de fibra de carbono.
Máquinas CNC e Impresoras 3D: Entre $50,000 y $200,000 dependiendo del número y tamaño de las máquinas.
Estaciones de soldadura, herramientas y consumibles: Aproximadamente $10,000 a $20,000.
Seguro de responsabilidad: Seguro de fabricación para cubrir a los trabajadores y productos.
Costos continuos:
Adquisición de materiales: Fibra de carbono, motores, componentes electrónicos y accesorios.
Costos laborales: Salarios para el personal técnico, los trabajadores de ensamblaje y el personal de soporte.
Investigación y desarrollo: Mejoras continuas del producto y desarrollo de nuevos modelos.
8. Consideraciones clave para el sector civil
Escalabilidad: Se comienza a pequeña escala produciendo solo algunos tipos de drones y se expande gradualmente a diferentes categorías (por ejemplo, carreras, cinewhoop, largo alcance).
Asociaciones: Forma asociaciones estratégicas con comunidades FPV, influencers y minoristas como GetFPV o RaceDayQuads.
Marketing y distribución: Ten una sólida presencia en línea y una estrategia de comercio electrónico directo al consumidor. Usa las redes sociales, YouTube y foros FPV para aumentar la conciencia de marca.
Apéndice: ¿Qué es un máquina CNC?
Una máquina CNC (Control Numérico por Computadora, por sus siglas en inglés) es un tipo de máquina herramienta que opera bajo el control de una computadora. CNC permite automatizar el proceso de fabricación mediante instrucciones programadas que controlan los movimientos de la máquina para cortar, esculpir o modificar materiales como metal, madera, plásticos o, en el caso de drones FPV, fibra de carbono.
Características Clave de las Máquinas CNC
Control Computarizado: Las máquinas CNC ejecutan instrucciones preprogramadas a través de un software, que le indica a la máquina cómo y dónde cortar o esculpir el material.
Alta Precisión: Gracias al control computarizado, las máquinas CNC son extremadamente precisas y pueden repetir procesos con consistencia, algo esencial en la fabricación de piezas complejas como marcos de drones.
Versatilidad: Estas máquinas pueden trabajar con una amplia gama de materiales, incluidos metales, madera, plásticos y fibra de carbono, que es clave en la fabricación de drones FPV por su ligereza y resistencia.
Automatización: Una vez que se configura el programa de fabricación, la máquina puede operar de manera autónoma con supervisión mínima, lo que reduce la necesidad de intervención manual y el error humano.
Aplicaciones en la Producción de Drones FPV
En la fabricación de drones FPV, las máquinas CNC se utilizan principalmente para:
Corte de Fibra de Carbono: La fibra de carbono se utiliza para los marcos de los drones debido a su alta relación resistencia-peso. Las máquinas CNC cortan las láminas de fibra de carbono con gran precisión para formar los brazos y las placas de los drones.
Producción de Piezas Metálicas o Plásticas: Además de la fibra de carbono, las CNC pueden fabricar piezas adicionales que requieran materiales metálicos (soportes, tornillos) o plásticos (partes no estructurales).
Tipos Comunes de Máquinas CNC
Fresadoras CNC: Utilizan fresas (herramientas de corte giratorias) para remover material y dar forma a la pieza, muy usadas para trabajar metales o plásticos.
Cortadoras CNC por Láser o Agua: Utilizan un láser o un chorro de agua de alta presión para cortar materiales como la fibra de carbono o metales finos.
Tornos CNC: Se usan para piezas que necesitan ser torneadas o trabajadas en formas cilíndricas o esféricas.
Ventajas de las Máquinas CNC
Precisión: La capacidad de hacer cortes y movimientos extremadamente precisos es una ventaja clave, especialmente en la fabricación de componentes delicados y detallados como los marcos de drones FPV.
Eficiencia: Permite producir grandes cantidades de piezas de forma eficiente y rápida, mejorando el rendimiento de la planta de producción.
Repetitividad: Puede hacer exactamente el mismo proceso una y otra vez, asegurando consistencia en todas las piezas fabricadas.
Ejemplos de Máquinas CNC para Fabricación de Drones
Shapeoko CNC: Popular entre fabricantes pequeños y medianos por su capacidad de trabajar con precisión en diversos materiales.
Tormach CNC: Conocida por ofrecer máquinas CNC de alta precisión para pequeños talleres de fabricación.
En resumen, una máquina CNC es esencial en la fabricación de drones FPV debido a su capacidad para crear piezas de alta precisión y durabilidad a partir de materiales como la fibra de carbono.
Un ataque multifrontal simultáneo es atacar un blanco desde distintas direcciones al mismo tiempo. Es un elemento costoso de conseguir porque exige muchos recursos dado que la fuerza de ataque debe cubrir al menos dos frentes o direcciones y, más difícil aún, debe ser coordinado, es decir todo el movimiento debe hacerse al mismo tiempo. ¿Qué dificultades enfrenta el defensor? La saturación. Defiende un frente y, por costo de oportunidad, desatiende el otro y viceversa. La historia presenta un caso apasionante.
La Batalla de Midway fue un punto de inflexión crucial en la Segunda Guerra Mundial, donde un ataque simultáneo no intencionado de las fuerzas aeronavales estadounidenses desempeñó un papel decisivo. Durante la batalla, los aviones estadounidenses lanzaron ataques secuenciales desde una misma dirección a la vez. Los comandantes de portaaviones llegaron a esquivar la mayoría de estos ataques (¡un capitán lo hizo más de 70 veces en ese fatídico día!), torpedos y bombas caían por las bordas de estos enormes buques pero ni hacían mella en ellos. Sin embargo, una partida de ataque dirigida por el comandante McClusky perdió su rumbo y al volver para re-encausar el ataque lo realizó desde un inesperado Suroeste, coincidiendo con otra partida de ataque dirigida por el teniente Leslie provenía de Noreste al mismo tiempo, sorprendiendo por completo a la flota japonesa. Este ataque simultáneo desde dos flancos diferentes, llevado a cabo principalmente por bombarderos en picado SBD Dauntless, resultó en la destrucción casi inmediata de tres portaaviones japoneses empezando por el Kaga, lo que cambió el curso de la guerra en el Pacífico.
Las consecuencias de este ataque fueron devastadoras para la Armada Imperial Japonesa. La pérdida de cuatro portaaviones, junto con pilotos experimentados y aviones, debilitó gravemente su capacidad operativa. Esta victoria permitió a los Estados Unidos pasar de una posición defensiva a una ofensiva en el teatro del Pacífico, alterando el equilibrio de poder y marcando el inicio del declive de la supremacía naval japonesa.
2. La Batalla de Midway
La Batalla de Midway, ocurrida del 4 al 7 de junio de 1942, es una de las confrontaciones más importantes de la Segunda Guerra Mundial en el Teatro del Pacífico, marcando un punto de inflexión en la guerra. Durante esta batalla, un evento crucial fue el ataque simultáneo de dos formaciones de aviones estadounidenses desde diferentes direcciones, lo que resultó en la devastadora destrucción de los portaaviones japoneses.
2.1 Contexto previo
El 4 de junio de 1942, las fuerzas japonesas, bajo el mando del almirante Isoroku Yamamoto, lanzaron un ataque contra Midway con la esperanza de eliminar la amenaza de los portaaviones estadounidenses y asegurar el dominio en el Pacífico. Los japoneses confiaban en la sorpresa y la superioridad numérica. Sin embargo, gracias a la ruptura del código japonés por parte de la inteligencia estadounidense, los norteamericanos sabían de antemano los planes japoneses y prepararon una emboscada.
2.2 Ataques iniciales y esquiva de los japoneses
En la mañana del 4 de junio, los aviones estadounidenses lanzaron una serie de ataques aéreos desde sus portaaviones USS Enterprise, USS Hornet, y USS Yorktown contra la flota japonesa. Estos ataques iniciales consistieron en oleadas de aviones torpederos (principalmente TBD Devastators) y bombarderos en picado (SBD Dauntless). Los aviones torpederos atacaron primero, pero fueron diezmados por los cazas japoneses y el fuego antiaéreo; casi todos los aviones torpederos fueron derribados, y no lograron impactar a los portaaviones japoneses.
Durante estos primeros ataques, los comandantes de los portaaviones japoneses, como el vicealmirante Chuichi Nagumo, realizaron maniobras evasivas efectivas, logrando evitar los torpedos lanzados por los aviones estadounidenses. La combinación de maniobras hábiles, la protección de cazas Zero, y la falta de coordinación entre las diferentes oleadas de ataque permitieron a la flota japonesa esquivar la destrucción.
2.3 El ataque simultáneo decisivo
Sin embargo, mientras los aviones torpederos estadounidenses mantenían ocupadas a las defensas japonesas volando bajo y atrayendo a los cazas Zeros hacia niveles bajos, una fuerza de bombarderos en picado SBD Dauntless de los portaaviones USS Enterprise y USS Yorktown llegó a la escena desde una dirección diferente y en altitud. Liderados por los comandantes de escuadrón como el Teniente Comandante Wade McClusky y el Capitán de Corbeta Max Leslie, estos aviones aprovecharon que los cazas japoneses estaban ocupados a baja altura y que las maniobras evasivas japonesas habían dejado a los portaaviones en posiciones vulnerables.
En un giro del destino, los bombarderos en picado atacaron simultáneamente desde dos direcciones distintas: desde el noroeste y el sudoeste, tomando por sorpresa a los japoneses. Son las líneas de ataque 1 y 2 convergiendo a los blancos mientras sorpresivamente aparece una enorme ala de ataque 3 desde el suroeste, como se ilustra debajo. No deje de ver los dos videos añadidos para terminar de comprender el panorama de esta fantástica batalla aeronaval. Los portaaviones Akagi, Kaga, y Soryu fueron impactados casi simultáneamente en cuestión de minutos. Es que al querer esquivar los torpedos y bombas lanzadas por el grupo aéreo desde el Noreste, como lo habían hecho toda la mañana, quedaban alineados para los ataques provenientes desde el Suroeste. No había escapatoria. Las bombas penetraron en los hangares de los portaaviones, donde los aviones japoneses estaban siendo rearmados y repostados, lo que resultó en explosiones masivas que causaron incendios incontrolables. Este ataque decisivo resultó en la destrucción de tres portaaviones japoneses en rápida sucesión.
Más tarde, ese mismo día, un cuarto portaaviones japonés, el Hiryu, lanzó un contraataque que logró dañar severamente al USS Yorktown, pero fue finalmente localizado y destruido por aviones estadounidenses. Fue el fin de la Kidō Butai, la aviación naval imperial japonesa.
2.4 Consecuencias
La pérdida de los cuatro portaaviones japoneses en Midway fue un golpe devastador para la Armada Imperial Japonesa, ya que no solo perdió buques clave, sino también pilotos experimentados y aviones. La batalla cambió el equilibrio de poder en el Pacífico, permitiendo a los Estados Unidos pasar a la ofensiva en el teatro de operaciones.
El ataque simultáneo desde diferentes direcciones durante la Batalla de Midway se considera uno de los momentos más decisivos de la Segunda Guerra Mundial, demostrando la importancia de la coordinación y la sorpresa en el combate aéreo-naval. De todos modos, debe recalcarse que esta simultaneidad fue azarosa: el grupo que atacaba desde el Sudoeste simplemente se había perdido y volvía sobre sus pasos.
3. Pesadilla en el mar
Imaginen una operación naval a mar abierto. En dicha locación existe un alto potencial de ataques aéreos con bombas (tontas o LGB) o misiles antibuque (AShM) enemigos. Sin embargo, el infierno de Midway podría emerger personalizado en nuevos misiles AShM o misiles de crucero. Las nuevas amenazas, gracias a la digitalización, pueden hasta incluir diseño de guiado con inteligencia artificial. Por lo tanto, ni siquiera un humano estaría implicado en su gestión.
Un capitán de un buque capital moderno (como un destructor, crucero o portaaviones) enfrentado a un ataque simultáneo de múltiples de AShM desde diferentes direcciones tendría a su disposición una combinación de capacidades de defensa avanzada, obviamente imposibles de obtener en el contexto tecnológico de la Segunda Guerra Mundial. Estas capacidades están diseñadas para detectar, rastrear y neutralizar las amenazas antes de que impacten en el buque. Adentrémonos en ellas.
3.1. Detección y seguimiento
Radar de vigilancia de largo alcance: Un radar como el AN/SPY-1 (utilizado en el sistema Aegis) o el más moderno AN/SPY-6, proporciona una cobertura de 360 grados, permitiendo la detección y seguimiento simultáneo de múltiples amenazas desde diferentes direcciones.
Sistemas de sensores electro-ópticos e infrarrojos (EO/IR): Estos sistemas complementan al radar al proporcionar capacidades de detección pasiva, cruciales para identificar misiles furtivos o para operar en entornos de alta interferencia electrónica.
3.2. Contramedidas electrónicas (ECM)
Jammers y perturbadores electrónicos: El buque puede emplear sistemas de guerra electrónica para intentar desviar o desorientar los misiles entrantes. Esto podría incluir la emisión de señales de interferencia (jamming) para interrumpir los sistemas de guía de los misiles o el uso de señuelos electrónicos que crean falsos blancos para confundir los sistemas de radar del AShM.
3.3. Defensa antimisil de capa externa
Misiles antiaéreos de largo alcance: Misiles como el SM-6 (Standard Missile 6) en un sistema Aegis pueden ser lanzados para interceptar los misiles antibuque a larga distancia. Estos misiles tienen la capacidad de maniobrar a gran velocidad y de interceptar misiles entrantes incluso a altas velocidades (como los misiles supersónicos o hipersónicos).
Sistemas integrados de defensa en red: En un grupo de combate, como un grupo de ataque de portaaviones (CSG), otros buques también pueden contribuir a la defensa, lanzando misiles interceptores desde diferentes posiciones para aumentar la probabilidad de interceptación.
3.4. Defensa de capa media
Misiles de defensa de punto o corta distancia: Misiles como el RIM-162 ESSM (Evolved Sea Sparrow Missile) se encargan de la defensa en un rango medio, interceptando misiles que logran penetrar las defensas de largo alcance.
Cañones CIWS (Close-In Weapon Systems): Sistemas como el Phalanx CIWS o el Goalkeeper, que son cañones de alta cadencia de disparo, proporcionan la última línea de defensa, disparando ráfagas rápidas de proyectiles para destruir misiles entrantes a muy corta distancia.
3.5. Contramedidas activas
Señuelos lanzables (chaff y flare): El buque puede lanzar señuelos físicos como chaff (que dispersa tiras de metal para confundir el radar del misil) y flares (que emiten calor para desviar misiles guiados por infrarrojos).
Decoys Remolcados: Dispositivos como el Nulka, un señuelo activo lanzado que imita la firma radar del buque, pueden ser desplegados para atraer misiles lejos del barco real.
3.6. Maniobras evasivas:
Maniobras de alta velocidad: Aunque limitado por las capacidades físicas del buque, el capitán podría ordenar maniobras evasivas para intentar evitar que los misiles logren un impacto directo, especialmente en caso de que los misiles se acerquen desde diferentes ángulos.
3.7. Coordinación con la flota:
Defensa coordinada de grupo de combate: En un escenario de combate real, el buque capital estaría operando como parte de un grupo de combate, con otros buques y aeronaves de apoyo que proporcionarían una capa adicional de defensa. Por ejemplo, destructores o fragatas pueden actuar como piquetes de radar para interceptar misiles antes de que lleguen al buque capital.
Estas condiciones no están ampliamente difundidas entre todas las armadas del Mundo. Estos equipos se encuentran disponibles son en las armadas más modernas, incluso sólo en el US Navy, la cual es la mayor armada del Mundo. Es decir, un combatiente de superficie promedio en el Mundo quedaría sin poder emplear alguna de esas "capas" siendo altamente probable un impacto de un AShM sobre su estructura sin que mucho se pueda hacer.
3.8 Resumen
El capitán de un buque capital moderno tiene a su disposición una serie de capas de defensa que, cuando se utilizan de manera conjunta y efectiva, ofrecen una protección robusta contra ataques coordinados de misiles antibuque desde múltiples direcciones. La clave del éxito reside en la detección temprana, la rápida decisión para desplegar contramedidas, y la capacidad de coordinar todas estas defensas en un entorno de combate de alta intensidad. A pesar de las avanzadas defensas, un ataque masivo y bien coordinado de múltiples AShM sigue siendo una amenaza seria, subrayando la importancia de la redundancia y la preparación en la guerra moderna.
¿Cómo repeler un ataque multidireccional simultáneo? La mayoría de las veces, no puedes.
Perfiles de ataque del AShM Penguin y misil de crucero Tomahawks Nótense la posibilidad de realizar curvas y explorar blancos para detectar y optimizar el perfil de ataque.
4. Algoritmos de ataque simultáneo
Sin embargo, la misma digitalización puede llegar a elementos de defensa mucho más pequeños, para blanco muy puntuales, en escalas también precisamente definidas. Existen sistemas avanzados de dirección de misiles y drones diseñados para coordinar ataques desde múltiples direcciones de manera simultánea, lo que incrementa las posibilidades de éxito en la misión. Este tipo de ataques coordinados se emplea especialmente en operaciones contra objetivos fuertemente defendidos, donde el objetivo es saturar o superar las defensas enemigas.
4.1 Ejemplos de tales sistemas
Sistemas de enjambre (swarming):
Los drones pueden operar en enjambres, donde múltiples unidades trabajan de manera coordinada para atacar desde diferentes direcciones. Cada dron puede ser autónomo o controlado en red, compartiendo información en tiempo real para ajustar su ataque. El enjambre puede saturar las defensas enemigas al atacar simultáneamente desde varios ángulos. Uno puede recordar en una escena de Matrix Revolutions donde una evento así se observa. Y es sobrecogedor, por cierto.
Misiles de ataque coordinado:
Misiles como el Tomahawk Block IV o el AGM-158 JASSM tienen capacidades avanzadas de navegación y control que les permiten realizar ataques coordinados. Estos misiles pueden ser programados para seguir diferentes trayectorias y llegar al objetivo desde varias direcciones al mismo tiempo, lo que complica la defensa.
Ataques de saturación:
En este tipo de ataque, múltiples misiles son lanzados en un patrón diseñado para saturar las defensas enemigas. Los misiles pueden ser programados para atacar desde diferentes ángulos, alturas y velocidades, creando una situación en la que es difícil para los sistemas de defensa aérea interceptar todos los misiles entrantes.
Guerra de enjambre con drones de ataque:
En contextos modernos, los drones kamikaze o loitering munitions (municiones merodeadoras) como el Harop o el Switchblade pueden ser desplegados en masa. Estos drones pueden ser programados para atacar simultáneamente desde múltiples direcciones, lo que aumenta la probabilidad de que al menos uno logre alcanzar el objetivo.
Google trabaja con drones con inteligencia artificial que permitan discernir blancos y decidir ataques
Una discusión muy técnica de cómo se pueden programar enjambres de drones y coordinarlos para ataques y otras misiones
4.2 Principio operativo
La coordinación, sincronización y redundancia al ataque se combinan para forzar casi a un resultado implacable final: el blanco será alcanzado y destruido.
Coordinación y sincronización: Estos sistemas dependen en gran medida de una coordinación y sincronización precisa, generalmente mediante comunicaciones avanzadas y sistemas de navegación como GPS, INS (Sistema de Navegación Inercial), o incluso tecnologías emergentes como la inteligencia artificial.
Redundancia de ataque: Al atacar desde diferentes ángulos y direcciones, se reduce la probabilidad de que un solo sistema de defensa sea capaz de neutralizar todas las amenazas entrantes, asegurando así que al menos uno de los misiles o drones alcance el objetivo.
Estos enfoques son fundamentales en la guerra moderna, especialmente contra adversarios que cuentan con sistemas de defensa aérea avanzados.
5. Conclusión
La capacidad para ejecutar ataques multidireccionales simultáneos, ya sea con misiles antibuque, misiles de ataque a blancos terrestres o drones, representa un avance crucial en la guerra moderna. Esta estrategia se basa en la coordinación de múltiples dispositivos de ataque que convergen sobre un mismo objetivo desde diferentes direcciones al mismo tiempo. Su importancia radica en su capacidad para desbordar las defensas enemigas, minimizar la posibilidad de interceptación y maximizar el impacto del ataque. La importancia en el campo de batalla moderno puede enumerarse así:
Saturación de defensas: Un ataque desde múltiples direcciones complica significativamente la tarea de las defensas aéreas o antimisiles del adversario. Las defensas tradicionales están diseñadas para interceptar amenazas que provienen de una o pocas direcciones al mismo tiempo. Al enfrentarse a un ataque multidireccional, los sistemas defensivos pueden ser saturados, haciendo que algunas de las armas logren penetrar y alcanzar sus objetivos.
Reducción de la efectividad de los contramedidas: Las contramedidas electrónicas y de defensa activa, como sistemas de interferencia o misiles interceptores, son menos eficaces cuando deben lidiar con múltiples vectores de ataque simultáneos. Esta multiplicidad obliga al enemigo a dividir sus recursos, aumentando las posibilidades de que uno o más de los vectores de ataque tengan éxito.
Confusión y desorganización del enemigo: Un ataque multidireccional también puede generar confusión en las filas enemigas. La necesidad de responder a amenazas que provienen de diferentes direcciones puede desorganizar la defensa y dificultar la coordinación efectiva de la respuesta.
Destrucción de blancos fuertemente defendidos: Los objetivos bien defendidos, como instalaciones militares clave, centros de comando y control, o buques de guerra, requieren ataques con alto grado de precisión y potencia. La capacidad de golpear simultáneamente desde diferentes direcciones aumenta la probabilidad de que se puedan neutralizar o destruir estos blancos. Incluso si parte de la defensa logra interceptar algunos misiles o drones, otros pueden seguir su curso y alcanzar el objetivo.
Un ejemplo claro de la efectividad de esta táctica se observó en el ataque a las instalaciones petroleras de Aramco en Arabia Saudita en 2019. En este ataque, una combinación de misiles de crucero y drones fueron lanzados desde diferentes direcciones hacia las instalaciones. Este ataque coordinado saturó las defensas antiaéreas saudíes, que no pudieron interceptar todas las amenazas, resultando en daños significativos.
Otro ejemplo es el uso de drones suicidas (también conocidos como loitering munitions) en el conflicto de Nagorno-Karabaj en 2020, donde Azerbaiyán utilizó enjambres de drones para atacar simultáneamente desde diferentes ángulos, superando las defensas armenias y destruyendo posiciones fortificadas y sistemas antiaéreos.
Un tercer ejemplo, más cercano a nosotros, lo presenta el protocolo de asalto de posiciones a trincheras argentinas por parte de infantes de marina británicos (Royal Marines). Los asaltantes se distribuían de a tres cubriendo un amplio abánico frente a la posición argentina y realizaban la corrida. Los defensores al emerger recibían fuego de múltiples direcciones, lo que los confundía y daba ventaja al atacante.
Finalmente, la capacidad de ejecutar ataques multidireccionales simultáneos, ya sea mediante misiles, drones o cualquier otra fuerza o una combinación de ellas, es una herramienta poderosa en el arsenal militar moderno. Este tipo de ataques no solo aumenta la probabilidad de éxito contra objetivos bien defendidos, sino que también representa una evolución en las tácticas de guerra que busca maximizar el impacto y minimizar la capacidad de respuesta del adversario. A medida que la tecnología avanza y los sistemas de armas se vuelven más autónomos y precisos, es probable que esta táctica se convierta en un estándar en los conflictos futuros. Imagine el lector si el Comando de Aviación Naval hubiese contado con esa capacidad en sus Exocet lo inexorable que hubiese el ataque a un blanco altamente protegidos como los portaaviones del Task Force británica en Malvinas.
Submarino clase Los Ángeles a profundidad de periscopio
Muy
por encima de la superficie del océano, la búsqueda aérea de un enemigo
invisible debajo de las olas es extremadamente compleja y difícil.
Encontrar submarinos
enemigos en una situación del mundo real es como "encontrar una aguja
en un pajar". Las misiones antisubmarinas pueden implicar mucho
descubrir dónde no está un enemigo y luego acercarse al objetivo, como
jugar al clásico juego de mesa Battleship, excepto que, en este caso, tu
oponente puede ver ambos lados del tablero.
Una breve historia del uso de aeronaves en ASW
En
respuesta a la gran amenaza que representaron los submarinos enemigos
en la Primera Guerra Mundial, en la que se destruyeron más de 5.000
barcos y perdieron la vida 15.000 marineros, la Junta Británica de
Invenciones e Investigación (BIR) ideó múltiples contraestrategias.
Trabajando
"para iniciar, investigar y asesorar en general sobre propuestas con
respecto a la aplicación de la ciencia y la ingeniería a la guerra
naval", el BIR incluía a físicos de primer nivel como William Bragg y
Ernest Rutherford. Al cambiar su enfoque durante la guerra de la
radiactividad y la estructura atómica a la acústica submarina,
Rutherford hizo contribuciones significativas para mejorar la detección
submarina del sonido de los submarinos.
Por
otro lado, durante la Segunda Guerra Mundial algunos aviones terrestres
se convirtieron en los primeros aviones de patrulla marítima (MPA) y
han iniciado patrullas aéreas de guerra antisubmarina (ASW). Desde
entonces, la mayoría de las AMP se han derivado de aviones civiles, ya
que pueden volar largas distancias, permanecer en el aire durante mucho
tiempo y tener mucho espacio interior para la tripulación y el equipo de
la misión.
Dos
primeros ejemplos de AMP de aviones de pasajeros reconvertidos fueron
el Nimrod de la RAF (originalmente el Cometa de Havilland), que fue
retirado en 2010, y el P-3 aún activo de la Marina de los EE. UU.
(originalmente el Lockheed Electra). El MPA desarrollado más
recientemente, el Boeing P-8A Poseidon, está basado en el Boeing 737.
British Aerospace Nimrod MR.2
Todos
estos aviones están diseñados para aprovechar el hecho de que es
posible encontrar submarinos mediante la física. Durante una misión ASW,
la tripulación de un avión utiliza una serie de sensores de alta
tecnología para encontrar cualquier rastro dejado por un submarino.
Los
sensores acústicos buscan ondas de presión sonora bajo el agua,
mientras que los sensores electromagnéticos identifican varias partes
del espectro electromagnético. En cuanto a los sensores activos, emiten
un pulso de energía con forma, o un ping, y recogen cualquier señal de
retorno que se haya reflejado en parte del submarino. Mientras tanto,
los sensores pasivos “escuchan” y recogen cualquier ruido del entorno,
que con suerte incluye una emisión del objetivo. Veamos los detalles de
estos sensores que utilizan los aviones para detectar submarinos.
Sonoboyas
Las
sonoboyas son botes cilíndricos que se lanzan en paracaídas desde un
avión. Contienen un hidrófono (micrófono especial) sintonizado con el
agua y un transceptor de radio para enviar la información al avión.
Cuando golpea el agua, la sonoboya despliega inmediatamente el hidrófono
a una profundidad preestablecida y erige una pequeña antena flotante
para que una simple radio a bordo transmita la señal a la aeronave. El
alcance de las sonoboyas y el lugar donde deben colocarse depende del
objetivo y del entorno local y es una de las áreas más clasificadas en
las operaciones ASW.
Un avión P-8 Poseidon desplegando sonoboyas
Las
sonoboyas vienen en dos variedades básicas: activas y pasivas. La
sonoboya pasiva es un hidrófono bastante sencillo y económico; su única
función es recoger toda la energía acústica del agua y convertirla en
una señal de radio, que se transmite a un procesador de computadora en
el avión. La sonoboya activa (sonar), por otro lado, funciona como un
radar submarino, pero en lugar de ondas de radio, transmite ondas
sonoras de alta frecuencia (los pings) que la tripulación puede
controlar de forma remota.
Los vehículos aéreos no tripulados se utilizarán antes en ASW
Los
submarinos están muy tranquilos hoy. Muchos rangos de detección de
sonoboyas pasivas son extremadamente cortos (<100 m). Algunos
submarinos están recubiertos con material que absorbe el sonido, por lo
que es muy difícil detectarlos con sonoboyas activas contra este tipo de
submarinos.
Detector de anomalías magnéticas (MAD)
Un
instrumento MAD detecta variaciones mínimas en el campo magnético de la
Tierra. Un submarino sumergido representa una masa de material
ferromagnético que crea una perturbación detectable en el campo
magnético de la Tierra. El equipo militar MAD es un descendiente de los
instrumentos de reconocimiento geomagnético o aeromagnético utilizados
para buscar minerales detectando su alteración del campo terrestre
normal. Para reducir la interferencia de equipos eléctricos o metales en
el fuselaje de la aeronave, el sensor MAD se coloca al final de una
pluma o en un dispositivo aerodinámico remolcado. Aun así, el submarino
debe estar muy cerca de la posición de la aeronave y cerca de la superficie del mar
para detectar la anomalía, porque los campos magnéticos disminuyen con
la inversa del cubo de la distancia. El tamaño del submarino, la
composición y orientación del casco, así como la profundidad del agua y
la complejidad del campo magnético natural determinan el alcance de
detección.
Pluma trasera MAD en P-3C (Imagen: Wikipedia)
Requiere
que los aviones vuelen muy bajo sobre la superficie (aumentando la
fatiga del fuselaje y el consumo de combustible). Descender desde una
altitud de crucero también lleva tiempo. El equipo es grande y pesado.
Por estas razones, un brazo MAD no está incluido en el actual USN P-8,
el avión de patrulla marítima de largo alcance más nuevo de la marina.
Contramedidas:
el submarino puede sumergirse más profundamente para reducir sus
posibilidades de ser detectado. Las profundidades operativas típicas del
SSN son 400 m. Las armadas están tratando de reducir la firma magnética
haciendo pasar corrientes a través del casco y utilizando materiales de
casco no magnéticos. Los rusos han construido submarinos con titanio no
magnético, y la nueva clase sueca A26 se construirá parcialmente con
vinilo reforzado con fibra de carbono que no es magnético (y 5 veces más
resistente que el acero).
Radar
El
radar puede detectar un snorkel o un periscopio submarino y la estela
que crea. Históricamente, eran más útiles para detectar submarinos en la
superficie, lo que los obligaba a pasar más tiempo bajo el agua, donde
eran menos efectivos (más lento, resistencia limitada, alcance limitado
del sensor). Durante gran parte de la Segunda Guerra Mundial, los
submarinos alemanes fueron esencialmente torpederos sumergibles. La
mayoría de sus ataques en realidad se realizaron en la superficie.
Hoy
en día, nuestros radares mejorados pueden detectar periscopios
submarinos (y sus estelas) a distancias significativas, lo que obliga a
los submarinos a echar sólo vislumbres muy breves. En realidad, el
periscopio es bastante útil para identificar objetivos y obtener
alcances y rumbos mucho más rápido que acechar solo con el sonar.
Sistema de radar Poseidón P-8
Las tecnologías de radar se están desarrollando más rápido que los sonares. La Marina de los EE. UU. está probando un nuevo módulo de radar que puede detectar submarinos.
La
Marina de los EE. UU., rompiendo con la detección tradicional de
submarinos, está trabajando para reemplazar el sonar y la detección
magnética por radar. El sensor aéreo avanzado (AAS) AN/APS-154 detectará
las estelas invisibles dejadas por los submarinos bajo el agua, pistas
reveladoras de que algo grande acecha bajo las olas. El AAS será
transportado por el avión P-8 Poseidon, que luego podrá atacar a los
submarinos con torpedos antisubmarinos lanzados desde el aire.
Según Forbes
, la cápsula montada hacia abajo cuenta con un radar avanzado de
escaneo electrónico (AESA). A diferencia de los radares parabólicos
tradicionales que utilizan un módulo de radar grande y potente, los
radares AESA utilizan muchos módulos más pequeños. Estos módulos pueden
operar colectivamente en múltiples frecuencias, lo que significa que
pueden superar interferencias o ampliar o enfocar su campo de detección,
especialmente contra objetos pequeños e invisibles para el ojo humano.
Un dron volador detecta objetivos submarinos utilizando el
sonar PASS: pulsos láser producen ondas sonoras bajo el agua, que son
captadas por los transductores del dron (Imagen: Universidad de
Stanford)
Intercepción de señal, ESM
Es
posible que detecte un submarino comunicándose por radio. También
puedes detectar un submarino si utiliza su radar con sistemas ESM. Una
transmisión de radio, aunque sólo tarda una fracción de segundo en
enviarse, puede captarse y indicar la orientación del submarino.
Visual
Si estás directamente encima de un submarino a poca profundidad, podrás verlo. No hace falta decir que esto es extremadamente
raro, pero es una de las razones por las que operar en aguas litorales
poco profundas es peligroso. Si tienes suerte, es posible que veas una
estela de periscopio. También es poco probable que veas una estela en la
superficie. A la profundidad del periscopio, los submarinos se mueven
muy lentamente. Y a profundidades operativas, las estelas de la
superficie son extremadamente diminutas, probablemente indetectables
incluso mediante radar y procesamiento avanzado, aunque se han hecho
intentos.
El submarino australiano clase Collins, HMAS Rankin (SSK 78)
navega mar adentro a una profundidad de periscopio (Foto de la Marina
de EE. UU.)
EO/RI
Un
submarino diésel-eléctrico sin AIP (Air Independent Propulsion) tiene
que levantar el snorkel para hacer funcionar los diésel y cargar las
baterías. Los sistemas EO/IR pueden detectar gases de escape o
periscopios/estelas.
Otros métodos no acústicos
Químico (por ejemplo, sensor de hidrocarburos): para detectar submarinos que practican snorkel recargando sus baterías.
LIDAR:
potencialmente más rápido que MAD. Profundidad y banda de búsqueda
limitadas. Menos eficaz en aguas costeras turbias. No se utiliza
operativamente.
Radar
para detectar las diminutas térmicas del agua caliente calentada por
reactores. (Afirmado por los rusos, no demostrado por Estados Unidos).