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sábado, 3 de julio de 2021

FARA 83: Otro proyecto destruido por la democracia

El intento argentino de desarrollar un fusil de asalto

por Ronaldo Olive || Small Arms Defense Journal
 


ARRIBA: Este ejemplo particular de un rifle argentino con mira telescópica que se muestra en una foto publicitaria tiene el asa de apertura en el lado izquierdo y, apenas perceptible, un asa de transporte FAL doblada hacia abajo.

Desde finales del siglo XIX hasta el siglo XX, Argentina, como muchos de los países del mundo, estaba equipada principalmente con rifles Mauser de cerrojo adquiridos directamente de DWM (Deutsche Waffen und Munitionsfabriken) comenzando con el M1891 (alrededor de 180.000 unidades) y siguió por el M1909 (unas 130.000 unidades compradas en el período 1909-1911), todo en la recámara de 7,65x53 mm, la llamada munición Argentina Mauser. El local Arsenal Esteban de Luca (también conocido como Fábrica de Fusiles de Buenos Aires) comenzó a producir piezas de repuesto para los rifles, incluidos los cañones, en 1915. Entre 1947 y 1959 aproximadamente, Fabricaciones Militares de propiedad estatal produjo localmente unas 20.000 piezas más cortas (556 mm de cañón ) Ingenieros / Carabina de Caballería variantes del rifle estándar (este tenía un cañón de 740 mm) en su Fábrica Militar de Armas Portátiles “Domingo Matheu” (Fábrica Militar de Armas Pequeñas Domingo Matheu), en Rosario, Provincia de Santa Fé. Para el registro, los diferentes modelos de Mauser se mantuvieron en uso en el Ejército Argentino hasta que fueron reemplazados gradualmente por el FN FAL de 7,62 x 51 mm a partir de mediados de 1957. Tras la entrega de los lotes iniciales fabricados en Bélgica, la fabricación local en la fábrica Domingo Matheu comenzó en 1959, cuando se completaron 500 ejemplares, pero la producción llegaría finalmente a unas 10.000 unidades por año. Se estima que se fabricaron 120.000 FAL en Argentina antes de que la producción se detuviera finalmente a mediados o finales de la década de 1990.

Poco después de la Segunda Guerra Mundial, cuando el M1 Garand estadounidense, la serie SVT soviética y el G43 y StG44 alemanes habían mostrado la nueva forma y moda del rifle de infantería, el Ejército argentino pensó que también era hora de hacer lo mismo, si era posible. , involucrando a los fabricantes locales. Dado que el país carecía de los conocimientos técnicos básicos relacionados con el diseño y la producción de armamento semiautomático, se requirió inspiración externa. Este llegó en forma del rifle de asalto alemán StG 44 que de alguna manera llegó a ese país sudamericano alrededor de 1947. Mediante un proceso de ingeniería inversa, el personal de CITEFA - Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas de las Fuerzas Armadas (Fuerzas Armadas Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas) en asociación con los de la Fábrica Militar de Armas Portátiles “Domingo Matheu” produjeron su clon local del Sturmgeweher, que recibió la designación CAM 1. Al mismo tiempo, Fábrica Militar de Cartuchos “San Lorenzo” del Ejército (Fábrica Militar de Cartuchos de San Lorenzo), también en la provincia de Santa Fé, se preparó para la producción de la munición de 7,92x33 mm utilizada en el rifle, y salieron algunos lotes de prueba para su uso en el número desconocido de prototipos CAM 1 que finalmente surgieron. de la Fábrica Domingo Matheu. Sin embargo, por razones desconocidas, los planes para la fabricación a gran escala del rifle terminaron gradualmente alrededor de 1953-54.


Rara fotografía del rifle argentino CAM 1, el clon de ingeniería inversa del rifle de asalto alemán StG 44 fabricado por FMAP-DM en Rosario, provincia de Santa Fé. La bala de 7,92x33 mm que se ve en el cargador extraído de 30 cartuchos fue producida localmente por la Fábrica de Militar de Cartuchos “San Lorenzo”, también en Santa Fé.

Otro intento que también data de principios de la década de 1950 aparentemente provino de la Armada Argentina con el apoyo técnico informado de H.A.F.D.A.S.A. - Hispano Argentina Fábrica de Automóbiles S.A., un pequeño fabricante de metralletas y carabinas semiautomáticas con sede en Buenos Aires. Esto finalmente se materializó en la forma de un rifle M1 Garand modificado en calibre 7,65x53 mm, del cual al menos un prototipo fue completado por la Fábrica Militar de Armas Portátiles “Domingo Matheu” en 1953. Las características externas más notables de lo que simplemente se llamó Fusil Semiautomático (rifle semiautomático) era un elaborado guardamanos de aluminio con aberturas de ventilación verticales a lo largo y contornos revisados ​​y más delgados para la culata.

También se informa que la Fuerza Aérea Argentina había jugado anteriormente con la idea de un programa de fabricación local del rifle semiautomático M1941 de Melvin Johnson, alguna mención de un llamado M1947 (una carabina semiautomática derivada de la ametralladora M1941) para Argentina habiendo surgido ocasionalmente. Se necesitarían aproximadamente dos décadas para que se iniciara un nuevo movimiento hacia un proyecto de rifle indígena en esa nación sudamericana.

Dimensiones y estampa de cabeza del cartucho argentino 7,92x33mm fabricado por FMC-SL para el fusil de asalto CAM 1.

En 1975, el Estado Mayor General del Ejército envió a la FMAP-DM los requisitos técnicos preliminares para un Fusil de Asalto Argentino (Fusil de Asalto Argentino) de 5.56x45 mm. La responsabilidad del diseño fue encomendada a un equipo encabezado por Enrique Chichizola, y para 1977 se habían definido los parámetros básicos de lo que se denominó “Proyeto Código 10.0187”. A mediados de 1979, aproximadamente a los siete meses de trabajo de construcción real, se completó el primero de cinco prototipos de prueba.

Con numerosas modificaciones dictadas tanto por el programa de pruebas iniciales como por cambios consecutivos en los requisitos oficiales, se completó un lote de preproducción de aproximadamente 50 unidades en la Fábrica Domingo Matheu; las armas se entregaron posteriormente para su evaluación real y pruebas de campo por parte de las unidades del Ejército, con énfasis en los llamados equipos "especiales" como las tropas aerotransportadas, de comando y de montaña. Esto tuvo lugar en el período 1982-1983. Después de haber sido denominada FAA, la pistola pasó a denominarse FAA 81 y, finalmente, FARA 83 (Fusil de Asalto República Argentina 1983). Se estima que, en total, solo se completaron unos pocos cientos de ejemplos del rifle antes de que el programa fuera cancelado por la administración del presidente Carlos Menen a mediados de la década de 1980 debido a la insuficiencia de fondos disponibles.


Enrique Chichizola encabezó el equipo de diseño que creó el rifle FAA / FAA 81 / FARA 83. Se le ve aquí sosteniendo uno de los prototipos en FMAP-DM en febrero de 1990.

A lo largo de su período evolutivo, las modificaciones aplicadas al fusil de asalto argentino dieron como resultado numerosos cambios de especificaciones técnicas. Básicamente, era un arma de fuego selectivo (alrededor de 700-750 disparos por minuto en modo automático completo) y funcionaba con gas con una configuración de portador de pistón / varilla / perno bastante convencional, el bloqueo de la recámara se proporciona mediante un perno giratorio de dos orejetas. El cañón de 452 mm de largo (seis ranuras a la derecha, paso 1: 9 pulg.) Era adecuado tanto para la munición M193 común de esa época como para el nuevo cartucho SS109 que se estaba abriendo camino en el mercado militar. La alimentación fue proporcionada por cargadores patentados de 30 cartuchos fabricados en acero, pero se planeó reemplazarlos por modelos AR-15 / M16 para futuras armas de producción a gran escala.

El cuerpo del rifle estaba hecho principalmente de estampados de acero, los receptores superior e inferior se articulaban entre sí a aproximadamente la mitad de su longitud. El primer prototipo tenía una culata de madera plegable, pero posteriormente dio paso a una unidad sintética con un pequeño compartimento interno que albergaba material de limpieza. Sin embargo, la mayoría de las armas fabricadas para el programa de evaluación de tropas estaban equipadas con una culata de metal tubular basada en la utilizada en el rifle Para-FAL, además de la adición de un reposacabezas de plástico en el que se acomodaba el kit de limpieza.


Un FARA 83 parcialmente desmontado para mantenimiento de campo. El guardamanos de plástico incorporó una chaqueta de metal perforada para ventilación externa del cañón y aislamiento térmico.

Las especificaciones finales del FARA 83 son las siguientes: longitud total, 1.000 mm; largo con culata plegada, 745 mm; altura sobre cargador, 260 mm; peso con cargador vacío, 4,16 kg; peso con cargador lleno, 4.52; peso del bípode plegable opcional, 0,4 kg.

Como posdata, en 1989-90 la Fábrica Militar de Armas Portátiles “Domingo Matheu” hizo otro intento de entregarle al Ejército Argentino un rifle de 5,56x45 mm. Esto tomó la forma de un rifle Para-FAL modificado de 7,62 x 51 mm, recargado para la nueva bala y alimentado por cargadores de plástico Steyr AUG de 30 tiros. Aunque esto funcionó adecuadamente, el programa no maduró lo suficiente para entrar en producción. Quizás porque el rifle resultante era demasiado pesado para el calibre involucrado.


Número de prototipo 00015 luciendo un guardamanos de plástico cilíndrico y la pieza de armado en el lado derecho. El bípode de metal plegable se duplicó como un cortador de alambre, agregando aproximadamente 400 gramos al peso del arma.


Dibujos comparativos del primer prototipo de la FAA (arriba) con un modelo de desarrollo posterior. Se encontrarán cambios significativos en la forma del receptor superior, la posición del mango de amartillar (de 90 grados a la izquierda a 45 grados a la derecha hacia adelante), la forma del protector de mano, etc.


sábado, 6 de abril de 2019

Armas Argentinas: Fusil de asalto FARA 83 / FAA 81


FARA 83 / FAA 81 (Fusil Automático República Argentina)

Military Factory





Visión general

El fusil de asalto FARA 83 / FAA 81 argentino solo se produjo en unos 1.200 ejemplares antes de que la falta de fondos forzara su terminación.

Origen: Argentina
Año: 1981
Fabricante: Fabrica Militar de Armas Portatiles Domingo Matheu - Argentina
Operadores: Argentina

Especificaciones

Las mediciones comunes, y sus respectivas conversiones, se muestran cuando es posible. Los calibres listados pueden ser dependientes del modelo / cámara.

Acción: Operado con gas, perno giratorio
Calibre: 5.56x45mm OTAN
Longitud (global): 1,000 milímetros (39.37 pulgadas)
Longitud (cañón): 452 milímetros (17.80 pulgadas)
Peso (descargado): 8.71 libras (3.95 kilogramos)
Miras: Hierro ajustable
Velocidad de boca: 980 metros por segundo
Tasa de disparos: 750 tiros por minuto
Alcance (efectivo): 1,312 pies (400 metros; 437 yardas)


Variantes

Variantes del modelo de serie
• FARA 83 - Designación de la serie base
• FAA 81 ("Fusil Automatico Republica Argentina") - Designación formal.


Historia

Durante décadas, el ejército argentino (y muchos militares en todo el mundo) utilizó el excelente fusil automático Fabrique Nationale FN FAL belga con cámara para el cartucho de la OTAN de 7.62x51 mm. El tipo se produjo en más de 2,000,000 de ejemplos y la distribución fue tal que más de 90 países utilizaron alguna forma de arma u otra, algunos incluso servicio continuo del tipo actual. La producción comenzó en 1947 y continúa en curso a partir de este escrito (2012). No hace falta decir que el FN FAL ha visto su parte justa de combate en todo el mundo.



Argentina aceptó el FN FAL al servicio de primera línea en 1955 con los primeros ejemplos que llegaron en 1958. Los FN FAL en servicio argentino fueron designados como FSL-FAL (el descriptor belga "FAL = Fusil Automatique Leger" se cambió al argentino "Fusil Automatico Liviano" ). La producción de la licencia se otorgó en 1960, a la cual el diseño belga consolidó su lugar en la historia militar de Argentina como su problema estándar: el rifle de batalla. A principios de la década de 1980, se intentó modernizar el inventario argentino y se obtuvo una respuesta en forma de "FARA 83", también conocida como "FAA 81" para "Fusil Automatico Argentino". Para todos los efectos, el FARA 83 fue una mezcla relativa de componentes tomados de otros diseños probados que incluyen, entre otros, el FN FAL en sí. El FARA 83 compartió una sorprendente similitud con el fusil de asalto IMI "Galil" del ejército israelí que, en sí mismo, fue una evolución del sistema AK-47 de la era soviética por medio del RK 62 finlandés y se cree que ha servido como influencia Para el desarrollo argentino.



Por todas las cuentas, el FARA 83 era un diseño de rifle de asalto muy convencional. Tenía características de diseño probadas y comprobadas que creaban un sistema de armas muy funcional. El receptor era rectangular en su forma general y, en general, tenía los lados con el puerto de expulsión y el mango de carga de estilo HK en el lado derecho del cuerpo. La empuñadura de pistola estaba bien inclinada y diseñada ergonómicamente, colocada justo detrás de la unidad de gatillo. El sistema de activación era distinto, ya que administraba los ajustes para el fuego semiautomático y completamente automático. La alimentación del cargador se colocó justo por delante del grupo de gatillo y se aceptaron cajas de cargador curvadas cargadas por resorte. La culata era semi-esquelética y con bisagras para plegarse sobre el lado derecho del receptor, lo que ayuda a promover un diseño general más compacto adecuado para el uso de tripulaciones de vehículos o paracaidistas, elementos del campo de batalla que tradicionalmente requieren las instalaciones de un arma más pequeña. La parte delantera del arma consistía en un conjunto de aleta, cilindro de gas y cañón de nervadura horizontal. El cilindro de gas se colocó sobre el conjunto del barril y se tapó en la parte delantera con una mira de hierro delantera. Se colocó una mira de hierro en la parte trasera extrema del receptor. El cañón sobresalía una corta distancia por delante del arma y estaba tapado por un freno de boca notablemente ranurado.



El FARA 83 tenía una longitud total de carrera de 40 pulgadas con la culata totalmente extendida. La longitud se redujo a 30 pulgadas muy útil con la culata colapsada. El propio cañón mide 18 pulgadas. El peso descargado era casi 9 libras. El sistema estaba equipado para disparar el cartucho de 5,56x45 mm desde cargadores de cajas desmontables de 30 tiros. La velocidad de disparo cíclica fue de aproximadamente 750 disparos por minuto, con una velocidad de salida alcanzando los 3.166 pies por segundo.



Como sugiere su designación alternativa, el rifle FAA 81 / FARA 83 apareció en 1981 y la producción finalmente comenzó en 1984 bajo la dirección de Fabrica Militar de Armas Portatiles Domingo Matheu, de Rosario, Argentina. A pesar de su naturaleza prometedora, las dificultades financieras acosan a los militares argentinos en este momento de la historia. Como tal, la producción del FARA 83 se limitó a solo 1.193 en circulación dentro de las filas del Ejército Argentino. La producción se detuvo en 1986 debido a la falta de fondos, lo que convirtió a FARA 83 en un éxito breve y fugaz. Se cree que la producción limitada se reanudó en algún momento de 1990, pero se desconocen los totales de fabricación de este esfuerzo secundario.

domingo, 7 de mayo de 2017

La carabinización de Europa y la inercia argentina

Tendencias en los fusiles de asalto y la decisión argentina
Por EMcL | FDRA


Soldado argentino disparando el Beretta ARX-160 en calibre 5.56mm

Argentina a decidido cambiar su legendario FN FAL de la época del segundo gobierno de Perón con una versión del ARX-160 italiano aunque camarizado al mismo calibre que el viejo fusil belga, 7,62x51mm, denominada Beretta ARX-200. La nueva versión está pensada para ser usada por tiradores selectos dentro de un pelotón regular armado con ARX-160 (u otro fusil del calibre 5.56) a fin de suministrar fuego de precisión al pelotón, junto con un arma automática (MAG o similar) que proporcione fuego de apoyo. Bueno, aquí Argentina se convertiría en el primer cliente mundial de un arma de apoyo como fusil regular del pelotón y conviene reflexionar algunos aspectos.


Beretta ARX-200 ¿la mejor opción?



La herencia 7.62

Desde los 70s Argentina evalúa un arma de calibre más pequeño para su infantería. El resultado de esos análisis fue el maltrecho FARA 83, un fusil bastante particular pero sólido diseñado por Fabricaciones Militares (FM). En calibre 5.56x45 OTAN, el arma proponía más munición y menor peso, así como apoyo para el disparo a través de un bípode integral. Poco más de mil fueron construidos hasta que la sempiterna impericia y detracción ideológica de los gobiernos democráticos posteriores a 1983 se encargaron por acción u omisión de la destrucción paulatina del complejo de defensa argentino. Actualmente el Ejército Argentino mantiene muy pequeñas cantidades de armamentos en calibre 5.56x45mm, entre ellos los excelentes Steyr AUG (que se suministraron con los tanques ligeros austríacos SK-105), M16 y M4 (comprados vía FMS) y los pocos FARA 83 mencionados. La IMARA, por el contrario, se reorganizó en los 90s reduciendo su escala pero dando de baja el FN FAL (que era reglamentario) con el nuevo M16A2 americano. Diversos intentos por cambiar el calibre estándar del EA resultaron infructuosos.


Fusil de asalto FARA 83

Tal vez por ello y como una limosna a un indigente la facción criminal que gobernó Argentina en los últimos años aceptó adquirir kits de modernización del mercado privado para mejorar y actualizar el arma estándar de infantería. El resultado han sido diversas versiones mejoradas con nuevas miras, guardamanos y apagallamas que convirtieron al viejo FAL en un arma más precisa y más estable para el tirador. Nada se hizo por ahora en mejorar la capacidad de portar municiones a través de cargadores de mayor capacidad. En este sentido, el mercado privado ofrece cargadores de mayor capacidad de polímeros e Israel también posee cargadores rectos de 25 tiros para sus versiones 7.62x51mm del Galil.


FN FAL del EA con kit de modernización que incluye nueva culata fija, mira de punto rojo, nuevo guardamanos con agarre delantero y nuevo apagallamas.


La experiencia de Afganistán e Irak

Luego de que iniciara la Guerra contra el Terror posteriores al atentado del 11 de Septiembre de 2001, miles de tropas del contingente internacional (estadounidenses y británicos en su mayoría, así como franceses, italianos, alemanes, noruegos, daneses, entre muchos otros) fueron siendo estacionados y combatieron contra guerrilleros musulmanes en Irak y Afganistán. Sobre todo este último escenario presentó dificultades de eficiencia en combate por parte de fusiles con "balas pequeñas".  El 5.56 fue observado como un calibre poco efectivo a medianas y largas distancias. Mucha literatura se ha escrito al respecto de la infantería de los 500 metros finales. Las fallas en la efectividad del calibre hicieron que se extendiera el uso por pelotón de al menos un arma para tirador designado en el viejo y más poderoso calibre 7.62 (o superior) así como se relanzó la importancia del francotirador acompañando y brindando fuego de precisión al pelotón que avanza. Eso puso en servicio variaciones de modelos en 5.56 en el nuevamente demandado calibre 7.62 (FN SCAR H / Mk17 Mod0, HK 417, versiones del M14, SIG 716 tactical rifle). En ese estilo surge el ARX-200 como versión en calibre 7.62 del ARX-160 de calibre 5.56.


Tropas británicas con fusiles en calibre 7.62 solicitados para su empleo en Afganistán

Soldado norteamericano dispara con una M240 (MAG construida bajo licencia) en Irak.

Europa va por el M4 germanizado

Orgullosos de producir sus propias armas, tanto Alemania como Francia cambiaron al calibre 5.56mm hace décadas. La primera experimentó con diversas variantes del legendario G3 para el mercado de exportación para luego adoptar el aplomado y modernoso G36 que ahora resulta que fue un fiasco. Debajo se exhibe el video que empezó siendo el final del G36.



Hay varios disparos diferentes representados en ese video. Pero cerca del final del video, el narrador menciona que los hombres del pelotón "Golf" han estado en tiroteándose durante 9 horas. Y luego, mientras se están retirando bajo presión, un vehículo blindado es golpeado por un IED. Y "varios rifles fallan debido al sobrecalentamiento".

Por todo eso, no se escucha en el audio el típico montón de rifles disparando en fuego automático o ráfagas controladas típicos de los audios de soldados americanos. En su lugar, oímos disparos individuales y ocasionalmente ráfagas cortas, controladas y los estallidos más largos y extremadamente rápidos de la MG3 (MG42 mejorada) de alto índice cíclico. Escuchamos lo suficiente como para saber que estos hombres del 313o Batallón de Infantería de Paracaidistas del Bundeswehr son profesionales fríos y duros. Pero ahí es donde comenzaron los problemas, en el 2010: las tropas comenzaron a notar que sus rifles se comportaban pobremente y fue el inicio de un estudio más exhaustivo que determinó que, en pocas palabras. el G36 funciona bien sólo si no es presionado en su uso y con sobrecalentamiento el rifle desvía la bala de modo que a 500 metros no le puede acertar a nada.

En el caso de Francia, el FAMAS es, junto al AUG austríaco, probablemente el mejor diseño bullpup operativo. Considerado por algunos como un arma pesada, difícil de mantener en el campo de combate y complicado de solucionar si se dañaba, los FAMAS, se diferencia de sus competidores, como el M4 o incluso antigua Kalashnikov, en que vio sus ventajas convertidas en desventajas: de pequeño tamaño con guardamanos de asa integrada que impide su "actualización" dado que no se le puede añadir a la misma un mango (grip) táctico, un designador láser, una guarda mejilla de absorción de retroceso en la culata, un lanzagranadas de 40 mm o incluso la capacidad de una mira de rifle! En resumen, todos los otros rifles de asalto aceptan estas mejoras que hacen la vida mucho más simple para el operador (y, a veces lo salvan de la muerte) han quedado imposibilitadas de adaptar al FAMAS. Por supuesto que hay adaptadores, pero no para todos. Pero, sobre todo, un defecto importante estaba claro: el uso de una munición menos potente. Francia calculó el costo de las mejoras y pensó que la mejor solución era cambiar el rifle (algo que UK no hizo y pagó por revivir una bosta como el SA80 sujeto a mucho peores acusaciones de bajo rendimiento).


Un auténtico tapado: El M416 desbanca viejos proyectos europeos

Finalmente, tanto Francia (oficialmente ya) como Alemania (en el mismo camino casi con seguridad) han seguido el camino de una nación pequeña pero con amplios recursos, excelentes tropas y una rigurosidad climática que le impide tomar malas decisiones de adquisición de equipos militares: Noruega. Las tres naciones han adoptado, o van en camino de adoptar, el M416 de Heckler und Koch, el cual es una versión mejorada de la carabina M4 de Eugene Stoner. Europa vuelve a la guerra de Vietnam y entierra 40 años de conjeturas superadoras del M16.

Una cuestión a tener en cuenta: las tres naciones, a diferente escala, han tenido experiencias de combate reciente en Afganistán e Irak. Las mismas eligen el arma basada en la experiencia de sus operadores de armas individuales, quienes en ningún caso piden volver al calibre 7.62 sino que piden mejoras de fiabilidad y precisión al calibre 5.56. El único revival de la experiencia de combate en esos frentes es la de tener un operador con ese calibre para tiros de precisión.

¿Por qué entonces el EA pide para sus pelotones de tropas regulares el calibre 7.62?

Es por ello que sorprende que el EA seleccione la versión ARX-200 de Beretta en vez de su contraparte ARX-160 de 5.56mm. ¿Por qué pasa esto?...
  • ¿Acaso por aprovechar los stocks (si es queda algo) del calibre de la época de buenos presupuestos (hace ya casi 40 años)...? 
  • ¿Tal vez para aprovechar que FM como no invirtió en máquinas amunicionadoras en los últimos 30 años tal vez queden funcionando viejas máquinas para fabricar balas en ese calibre?
  • Tal vez por una lectura sesgada de los resultados operativos de la armas en calibre 5.56 en las experiencias recientes de combate que hizo creer a sus analistas que había una queja general hacia el calibre pequeño por su falta de pegada a favor del calibre más grande. Bueno, los resultados de esas supuestas quejas en la práctica son NULAS. Ninguna fuerza armada del Mundo ha vuelto al 7.62mm. Armas de ese calibre solo complementan al 5.56mm pero jamás lo han reemplazado.
  • ¿Tal vez porque se busca que el cambio sea gradual, aprovechando la potencial interoperabilidad entre los viejos FAL y los nuevos ARX-200? Lamento informar que los cargadores de polímeros de los ARX-200 no son intercambiables con los metálicos del FAL.
  • Tal vez por la misma inercia del FN FAL les hace hecho creer que más vale malo por conocido que bueno por conocer. Si la decisión se basa puramente en inercia, pues estamos dejando estas decisiones a puros ineptos y mediocres que debieran ser dados de baja inmediatamente.

Para hacer un racconto, tal vez convenga detallar ventajas y desventajas de ambos calibres.

Ventajas del calibre 5.56


Interoperatividad con otras fuerzas

Las fuerzas argentinas han estado comprometidas con misiones internacionales desde la Guerra de Malvinas, como forma subrepticia de mejorar su operatividad y adquirir experiencia internacional. Ello ha provocado que experiencias operativas sean compartidas con otros países de la ONU, incluyendo UK en el caso de Chipre (donde los cascos azules argentinos comparten comando con tropas británicas) y el caso de la Segunda Guerra del Golfo u Operación Desert Storm donde fuerzas navales argentinas participaron del bloqueo del Golfo Pérsico a fuerzas iraquíes. En todas estas experiencias las tropas argentinas han ido mayormente equipadas con FAL (salvo la IMARA que porta el M16A2) compartiendo campos de operación con tropas europeas equipadas con el 5.56mm o tropas de otros orígenes equipadas con variantes de los modelos Kalashnikov (7.62x39mm). En caso de enfrentamiento armado en contra de las tropas de la ONU, las fuerzas argentinas no podrían compartir cargadores con sus aliados, dado que salvo con el arma de fuego de apoyo (usualmente una MAG o M60) no comparten munición con estos otros fusiles de asalto.

Las mujeres

Siendo un calibre mas pequeño implica menor peso y menor tamaño del arma, así como también menor retroceso y mayor precisión al disparar. Las carabinas modernas (como la M4 o sus variantes como el M-416) son armas livianas, muy manejables y precisas para el uso de mujeres, una visión omnipresente en el caso de Israel. Debe recalcarse que gran parte de las fuerzas armadas modernas consideran como tendencia la creciente inclusión de mujeres en niveles de capacidad operativa directa en el frente de combate, combatiendo al lado de pares masculinos en todas las áreas. Poseer un arma maleable y precisa para mujeres debe ser considerado como necesario para cualquier fuerza armada moderna.


Soldados mujeres de Israel (arriba) y USA (abajo) portando M4 y M16 respectivamente.


El poder de fuego

Un calibre pequeño permite portar mayor cantidad de municiones y con ello cada soldado puede sostener una capacidad de fuego superior. Pasar de tener 20 cartuchos en un cargador antes del recambio para el fuego sostenido es muy diferente de realizar lo mismo cada 30 cartuchos. Esa es tal vez una de las mayores diferencias a favor del calibre 5.56mm.

El combate urbano

El combate urbano se realiza a distancias cortas usualmente y es necesario un poder de supresión de fuego enemigo. Los viejos relatos sobre Stalingrado siempre han hecho hincapié en la capacidad de fuego abundante (provisto en esa época por las metralletas soviéticas y alemanas, así como la amplia disponibilidad de granadas para limpiar espacios cerrados). El calibre 5.56 provee como se mencionó esa capacidad con mayor carga y disposición de municiones.

Capacidad de detención a corta y mediana distancia

Dentro de los rangos usuales del combate moderno (300 a 400 metros) el disparo de 5.56 mata. Punto.

Desventajas del 5.56


Bajo poder de detención a grandes distancias

Esa pues ha sido la queja de las tropas occidentales en Afganistán sobre todo. A distancias mayores del orden superiores a 300 metros la munición pierde precisión y pegada. La bala en sí misma del calibre 7.62 es tres veces más grande que la bala de 5.56 y su velocidad es apenas menor lo que redunda en energía cinética superior. Eso se nota en combate en grandes espacios, como la meseta afgana. En el caso de Argentina, puede ser una queja para combate en grandes espacios abiertos como posee el país (meseta patagónica, llanos pampeanos, puna norteña). No así para espacios mas reducidos como los bosques subtropicales o espacios urbanizados.


Ventajas del 7.62


Poder de detención

El calibre ha demostrado poseer mayor fuerza cinética que su contraparte de 5.56mm. Eso han destacado las experiencias reciente en Oriente Medio, y es la razón que los ejércitos occidentales incluyan ahora dentro del pelotón de infantería un tirador designado equipado con un arma del calibre 7.62. En el caso del Reino Unido es el L129A1 y en el US Army es el SCAR H / Mk17 Mod0 el que porta el calibre. En el caso de la IMARA ha restituido el FN FAL como fusil de tirador designado para acompañar a sus infantes con M16A2.

Fuerza al uso más eficiente de las municiones

Menos balas obligan al tirador a ser más selectivo en sus disparos lo cual solo puede ser aprovechado si el tirador posee el nivel de entrenamiento y los recursos necesarios. Ello implica tener tiradores que regularmente disparan en el campo de tiro y eso implica cientos de cartuchos semanales de práctica continua. Algo que hoy no creo que se observe en Argentina donde con suerte los infantes disparan esas cientos de balas en el período de un año.


Desventajas del 7.62


Bajo número de municiones

El mayor tamaño de la bala y propelente hacen que se porten menos cartuchos por soldado. Ello juega en contra en el caso de soldados novatos con bajo entrenamiento que tiendan a malgastar municiones en estados propios de stress de combate.

Mayor peso

Un mayor calibre exigen municiones más grandes y más pesadas, cañón y estructura general más pesada. Mayor peso implica mayor incomodidad para el transporte y la operación del arma en combate por parte de un infante regular. En el caso de un infante con menor estructura corporal (como las mujeres) esta relación empeora.

Mayor tamaño

Junto al peso viene asociado un mayor tamaño que dificulta su transportabilidad y usabilidad por parte de soldados de menor contextura física (destaco principalmente a las mujeres).

Mayor retroceso al disparar

El disparo del calibre viene con mayor patada al disparar, afectando levemente (aunque en caso de combate tal vez de manera vital) la precisión del tiro.



Imposibilidad en el ARX-200 de un cambio rápido de cañón

Y si, así como lo leen, los tanos no pensaron el ARX-200 como un arma para las masas, sino para tiradores selectos. Entonces no poseen todas las mejoras operativas del ARX-160, entre ellas la posibilidad de cambiar rápidamente el cañón en el campo de batalla. Uno debe llevar herramientas para ello. Y mientras cambia el cañón con herramientas con fuego enemigo tal vez pierdas la vida en el intento cosido a balazos.

Conclusiones

El fusil de asalto ARX-200 es un fusil de tirador designado, no es un fusil de asalto desarrollado ex-profeso para que sea portado "por cualquier infante". En el Esercito Italiano es usado con esa finalidad, siendo portado en un soldado designado por cada pelotón de infantería cumpliendo el mismo rol que cumple el Dragunov en el ejército ruso.

Usar a gran escala el ARX-200 implica que las tropas deben entrenarse para ser todas buenos tiradores (selectos) a fin de aprovechar la menor cantidad de munición más potente y con un calibre que tiene mayor (bastante) retroceso que el calibre 5.56mm.

En definitiva, pienso que es una decisión errada del Ejército Argentino adoptar para uso general y estandarizado esta variante del fusil ARX-160. Argentina tiene que alguna vez madurar y adoptar el mismo calibre que la OTAN. Los países que trabajan en la OTAN han experimentado situaciones de combate más reciente y el resultado de dicha experiencia es tender a un arma de calibre menor y bien liviana y pequeña y que ayude por su misma configuración a la precisión en fuego. La carabinización de las principales fuerzas europeas como Francia y Alemania que adoptan o están en camino de adoptar el Heckler und Koch M-416 no hace más que recalcar que no buscan un calibre ni tampoco un cañón largo (como el de ARX-200). La experiencia argentina se remonta a Malvinas donde precisamente por las distancias de combate (asalto de trincheras y fuego de 300 metros a los sumo) un calibre como el 5.56mm hubiese hecho alguna diferencia en términos de mayor capacidad de fuego y capacidad de detención adecuada. Si la excusa del EA es seguir sacándole leche a la vieja vaca FAL (es decir aprovechar la munición de 7.62mm que queda remanente o algún tipo de interoperabilidad con los FAL dados de baja) estamos poniendo la carreta adelante de los caballos. La infantería que se viene va a incluir a la mujer y un arma de ese calibre es ponerle un escollo a la efectiva capacidad de la mujer de ser una tiradora de combate sin que ello perjudique la capacidad del infante regular. Israel es otro caso donde la experiencia de combate se mama a diario y las mujeres ya cumplen rol de infantería de combate armadas todas con armas de 5.56 (Tavor y sobre todo M4/M16) y nadie reclama por el 7.62mm.

Dejo abierta la discusión.

domingo, 5 de marzo de 2017

Fusil de asalto: Historia y uso en Argentina

La aparición del fusil de asalto





La Primera Guerra Mundial sirvió de marco de reflexión sobre el papel del arma individual de infantería en el combate. En el escenario bélico característico de esta contienda, donde las trincheras se hallaban separadas escasos metros unas de otras, la ametralladora era el arma dominante y, frente a ella, el fusil de cerrojo resultaba excesivamente grande, potente y con escasa capacidad de fuego para contrarrestar las oleadas de los asaltos.

Lógicamente comenzó a pensarse en el excelente papel que podría hacer un fusil más ligero, que disparase un cartucho menos potente pero eficaz hasta 400 m. y con capacidad para hacer fuego automático como el subfusil o la pistola ametralladora, que básicamente son las características que hoy definen al fusil de asalto.

Indudablemente se trataba de un concepto totalmente nuevo, porque el arma que cumpliera aquellos requisitos, se separaba tanto de los fusiles al uso como de las ametralladoras ligeras y de los subfusiles, aunque en determinadas condiciones tácticas tenía que operar como éstos. Era, en definitiva, un enfoque radicalmente diferente del problema del arma del infante y no simplemente una reforma de las existentes, pero que, ante todo, exigía una munición menos potente que la de los fusiles reglamentarios de la época, al objeto de poder controlar el disparo en ráfagas.

En el período comprendido entre las dos guerras mundiales, la idea no germinó en nada concreto. Cada país había realizado costosas inversiones en armas y municiones, por lo que la perspectiva de lanzarse a fabricar el fusil de asalto no tenía grandes visos de realización. Tampoco había razones para investigar sobre nuevas armas, porque el Tratado de Versalles había generado grandes esperanzas de asegurar en Europa y en el resto del mundo, una paz duradera. Por otro lado, Estados Unidos, con mentalidad muy conservadora, había encaminado sus proyectos en armamento ligero portátil, hacia una dirección distinta y poco innovadora, como fue la consolidación del fusil semiautomático "Garand" que disparaba un cartucho de alta potencia.

Tan sólo el Estado Mayor del Ejército alemán comenzó, en 1938, a desarrollar el estudio de un arma que supusiera un cambio radical en el armamento del fusilero granadero, base de su Ejército.




Al mismo tiempo, se fijaron las especificaciones de un cartucho de menos potencia, que se aviniera a los requerimientos del futuro fusil de asalto. El análisis de las tácticas de combate empleadas por la Infantería alemana en los primeros meses de la II Guerra Mundial, vino a confirmar plenamente la necesidad de un arma de este tipo. La mayoría de los combates entre fuerzas de Infantería tenían lugar a una distancia inferior a 400 m., aunque el fusil de reglamento de la época podía alcanzar en tiro eficaz hasta los 1.000 m. y a esa distancia no hace falta un cartucho tan potente como los utilizados (6,5; 7; 7,92; 7,5 mm.)

Además un arma como el fusil proyectado resultaba ideal para las nuevas tácticas ofensivas de la "guerra relámpago", que exigía además gran movilidad de las fuerzas atacantes, una considerable capacidad de fuego y un grado de autonomía mayor que el existente. En la fábrica alemana de Polte, se obtiene por fin el cartucho de 7,92x33 mm. "Kurtz" (corto), que parece ser el buscado, puesto que esta munición permitía el tiro a ráfagas con un retroceso más que aceptable. Con el cartucho ya perfectamente definido, en 1942 aparece el primer fusil de asalto, bautizado Mkb-43, que cambió su nombre por los de MP-43 y MP-44 (Maschine pistole) y poco después, en 1944, por el de StG-44 o "sturmgewehr", su último y más cómodo título, cuya traducción aproximada es "fusil de asalto" con lo que nombre y arma se hermanaron.

Existe una pequeña historia de contratiempos y dificultades sobre el “Sturmgewehr”. Parece ser que se construyó pese a la oposición de Hitler, quien hizo uso de su experiencia en la Primera Guerra para condenarlo, a causa de su poco alcance y también, porque había almacenados millones de cartucho de 7,92 largo. Sin embargo, el Ejército alemán estaba a favor del MK 43 y para protegerlo, se sustituyó su nombre por MP 43, haciendo ver a la cúpula nazi que se trataba de fabricar subfusiles.


Esta arma, de la que se fabricaron 300.000 y resultó práctica y muy utilizable en el combate, fue dotada de una serie de complementos y accesorios, como la bocacha lanzagranadas, sistema de puntería óptico y hasta un prolongador de cañón curvo con mira de reflexión, para poder disparar resguardado desde algún obstáculo o desde el interior de vehículos tácticos.

No fue el MP 44 el único fusil de asalto proyectado y construido en Alemania. Durante la GM II hubo otro que cabe en esta categoría. Se trata del FG 42 (fusil de paracaidista) de Rheinmetall que entró en servicio a raíz de la incursión llevada a cabo por paracaidistas alemanes para liberar a Mussolini, en el Gran Sasso en septiembre 1942.

El MP-43, marcan el nacimiento del fusil de asalto en Alemania. En su excelente diseño se inspiró el famoso Kalashnikov AK-47 del que han sido construidos algunos millones y ha sido la base de la mayoría de los fusiles de asalto actuales: Desde el robusto, fiable, algo rudo y bien probado combate GALIL israelí, al refinado SiG 550/551 de los relojes suizos.

LOS FUSILES DE ASALTO DE LA POSGUERRA

Al finalizar la contienda mundial, el concepto de fusil de asalto estaba ya suficientemente extendido en todo el mundo y había calado profundamente en los Estados Mayores, sobre todo en los europeos, de manera que todos, de una forma u otra, acometieron planes de estudio y desarrollo, basándose en los modelos alemanes.

Para subvenir a las necesidades del bloque defensivo occidental (OTAN), en 1948 la Fábrica Nacional belga (FN) de Herstal, produce el fusil conocido por sus siglas FAL (fusil automatique legére) que se convertirá en un clásico del género y será el arma de asalto más difundida fuera del mundo comunista. Fue fabricado inicialmente en calibre alemán 7,92 x 33 (Kurtz) y años más tarde, en el nuevo calibre de la OTAN, el 7,62 x 51.

En 1949 fue adoptado por los Ejércitos belga e inglés (versión rebautizada L1A1). A principios de 1970, más de 75 países utilizaban el FAL en sus diferentes versiones: Canadá, Australia, India, Argentina, Austria, Brasil, etc. El éxito se explica por las excelentes cualidades de este primer fusil de asalto de la posguerra: un arma perfectamente equilibrada, sólida, estabilizada, aunque sin duda, algo pesada por la gran cantidad de acero que se empleaba en su construcción.

En el panorama del arma ligera de la época, va a brillar con nombre propio un fusil español. En 1950, el Centro de Estudios Técnicos de Materiales Especiales (CETME), fundado en año anterior inicia, con la participación de ingenieros alemanes que habían intervenido en la fabricación de los fusiles de asalto germanos, los estudios para el desarrollo de un fusil automático individual que sustituya al Máuser M-41, de dotación en las Fuerzas Armadas españolas. Surgió así el CETME modelo 2, con dos características especiales: el sistema de funcionamiento por retroceso de masas con acerrojamiento semirrígido (Se trataba del mismo sistema de cierre semirrígido de rodillos que utilizaba la ametralladora M6-42), (el sistema imperante era el de toma directa de gases); y gran número de piezas de chapa embutida.
Este fusil disparaba un cartucho de potencia intermedia, el 7,92 CETME, pero, tras la adopción por la OTAN del calibre 7,62 x 51, se desarrollaron los modelos A y B (en 1956 se inicia la fabricación del primero), hasta llegar al modelo C, adaptado al cartucho OTAN y en servicio desde 1964.

El tercer modelo de fusil de asalto en el panorama europeo de la posguerra, es el modelo alemán G-3, fabricado por Heckler Und Koch (HK). Este fusil no es más que un desarrollo del diseño CETME, aceptado tras numerosas pruebas por el Ejército alemán, en 1959. Desde entonces, el arma ha sufrido algunas modificaciones que no afectan a sus características fundamentales, aunque desde un principio el G-3 se adaptó al cartucho 7,62 x 51 OTAN. A partir del sistema de funcionamiento del CETME, la casa HK modificó los procesos de fabricación, con mayor empleo del metal estampado así como de material plástico, y ha creado toda una familia de variadas armas portátiles. El G-3 tuvo un enorme éxito, ya que fue aceptado por gran número de países. Actualmente está considerado como uno de los fusiles de asalto más importantes y es reglamentario en el Ejército alemán.


En Estados Unidos se fueron por otros derroteros, siguiendo una dirección menos innovadora, pero perfectamente definida. Tras ciertos estudios y pruebas, quedó claramente concretado que el cartucho que se debía utilizar en una nueva arma para la Infantería, habría de ser de características similares al 30.06 Springfield, por la seguridad y confianza que confería al combatiente americano, reduciendo únicamente la longitud de la vaina al emplear otro propelente de mayor densidad de carga, para hacerlo más adecuado a las armas automáticas. A partir de aquí, se desarrolló un nuevo fusil similar al Garand M-1, con una mayor capacidad de cargador y con posibilidad de hacer fuego automático, que fue bautizado como M-14 y disparaba el nuevo cartucho 308 (equivalente al 7,62 x 51 mm.)
En el bloque oriental (Pacto de Varsovia), el panorama aparece dominado por el arma más famosa de la historia de los países socialistas. Nos referimos al "Kalashnikov" AK 47 (Automat Kalashnikov), que disparaba un cartucho de potencia intermedia, similar al 7,92 mm. Kurtz, el 7,62 x 47 mm. M-43. Fue fabricado en 1947, sobre la base de algunos STG44 alemanes, capturados por el Ejército soviético en 1945. Se trata de un fusil de asalto correcto y bien construido sobre el que se han aplicado las experiencias de fabricación en masa, recurriendo al metal estampado, técnica iniciada en la URSS con los subfusiles PPSh41 y PPSh43. La combinación adecuada del acero de buena calidad y madera de buen acabado en el cajón de los mecanismos, ha dado por resultado un arma que puede soportar duros tratos y errores de manejo. Resulta también muy fácil de entretener y puede utilizarse con un adiestramiento elemental, al reducirse al mínimo sus partes móviles. El AK47 básico y su versión más moderna el AKM han sido y son utilizados por fuerzas regulares y guerrillas de todo el mundo. Se ha fabricado en China, Polonia y República Democrática Alemana y su diseño básico ha inspirado otros proyectos extranjeros como el fusil VALMET finlandés. El AK fue arma reglamentaria del antiguo Pacto de Varsovia y de Ejércitos como el egipcio o el chino.

No puede establecerse con seguridad de dónde proviene la cantidad de AK-47 que se ve por toda la geografía mundial, ya que esta arma y sus derivados se fabrican en muchos países además de los citados: Hungría (modelo AKM-63), Corea del Norte, Yugoslavia y Rumania; incluso numerosas copias se han fabricado en lugares tan extraños como Afganistán.

LA EXPERIENCIA AMERICANA DE VIETNAM

La OTAN no tardó en reconocer que era necesario un calibre más pequeño, puesto que el adoptado no correspondía, desde luego, a la munición más idónea para el concepto de fusil de asalto. La experiencia de los años transcurridos desde 1953, vino a confirmar esta impresión que era sentida en el fuero interno de muchos Estado Mayores de la Alianza. En efecto, el nuevo calibre exigía un elevado peso del fusil de asalto, para que pudiera absorber el fuerte retroceso que producía el disparo.

Así, los infantes de la OTAN tenían que llevar un arma que, además de ser pesada, lo era más que las de sus adversarios del Pacto de Varsovia, dotados del AK47 que disparaba un cartucho más pequeño, el 7,62 x 39. Por otro lado, su potencia hacía nula la eficacia en el tiro, cuando se empleaba la modalidad de ráfagas sin ningún apoyo. Los ingleses supieron ver desde un principio que el 7,62 x 51 no era un calibre para un arma de asalto y por ello, su versión del FAL sólo era semiautomática (tiro a tiro)

Mientras los países europeos occidentales se planteaban estas dudas, la guerra de Vietnam va a obligar a Estados Unidos a revisar su criterio, en favor de los gruesos calibres en vigor desde finales del siglo XIX. Desde los primeros combates en el nuevo escenario bélico del Sudoeste asiático, los soldados USA, armados con el M-14 30.06, se vieron en inferioridad de condiciones ante vietnamitas del Norte y guerrilleros del Vietcong, provistos del AK47, arma superior en ligereza, potencia de fuego y rapidez de tiro. Para subsanar esto, los estadounidenses decidieron investigar en busca de un nuevo fusil, adaptado a las nuevas circunstancias, y hallaron el Armalite AR-15, un arma de aspecto ligero y moderno a la que había que encontrar un nuevo tipo de munición.


Se pensó que un proyectil de menos calibre, pero dotado de mayor velocidad inicial, resultaría eficaz a 200 ó 300 m.; menos sin duda que el 7,62 mm. (.30), pero lo suficiente, teniendo en cuenta las distancias habituales del combate. Su valor balístico podía ser discutible, así como su efecto explosivo, pero el nuevo calibre .223 Rémington (5,56 mm.) ofrecía sobre el 7,62, ventajas indudables en la práctica como su menor peso que permitía tiros a ráfagas largas con una aceptable puntería.

Los Estados Unidos parecieron descubrir en Vietnam, que los calibres pequeños daban mejores resultados tácticos en distancias cortas de combate. En aquel escenario bélico, se demostró que la mayor parte de los encuentros armados se libraron sobre los 100 m. de distancia. Con el 5,56, obtuvieron alta probabilidad de impacto en ráfaga y buena rasadura de trayectorias. El inconveniente que se vio en este cartucho, era su nivel de entretenimiento, porque el 5,56 mm. Se encasquillaba antes que el 7,62, pero los técnicos USA estimaron que las ventajas superaban a los inconvenientes y el .223 fue empleado en el AR-15 (M-16) que en 1965 entró en servicio en Vietnam. En 1966, se perfeccionó y pasó a ser fabricado por Colt, convirtiéndose en el célebre M16A1, el primer fusil de asalto de la segunda generación, el equivalente del AK47 en el mundo occidental, ya que se ha producido en centenares de miles y ha sido ampliamente suministrado y vendido a numerosos países de todo el mundo.

La aparición de la cartuchería 5,56 mm. Y su rápida popularidad en la guerra de Vietnam, constituyó para Europa la señal de alerta de una tendencia al cambio en las municiones, que se confirmó con la elección de ese cartucho por las fuerzas armadas USA. Los Estados Mayores europeos, disconformes desde su aparición con el 7,62, contemplaron cómo los Estados Unidos que habían presionado a la OTAN para que se decantara por ese calibre, adoptaban unilateralmente la nueva munición y el fusil M16A1 adaptado a la misma. Desde este momento, los países de la Alianza se sintieron libres de esta dependencia y se lanzaron a fabricar la nueva munición y a la vez, a desarrollar un arma capaz de dispararla.

A su vez, las casas comerciales y fábricas de armas, del prestigio de FN, Heckler und Koch, Beretta, etc.; no tardaron en darse cuenta de que el cambio a calibre inferior al 7,62, estaba en marcha y que existía un mercado potencialmente amplio para un arma que, con igual cantidad de cartuchos, permitía reducir la mitad de la carga de municiones y facilitaba el adiestramiento y el tiro por su pequeño retroceso. Sin embargo, había un problema y era la gran cantidad de armas y municiones de 7,62 Mm. existentes. Los aliados no podían permitirse desechar inmediatamente todas las armas de este calibre, que prácticamente acababan de adquirir. Por esta razón, hasta 1977 no comienzan en la OTAN, las pruebas-concursos encaminadas a proporcionar un nuevo cartucho básico para las fuerzas de Infantería y simultáneamente, los estudios para elegir un fusil de asalto adaptado a ese calibre. Hubo que esperar hasta 1980, momento en que algunos países tenían que renovar sus reservas de armas ligeras, para que el proyectil SS-109, de 5,56 x 45 Mm., fabricado por FN en Herstal (Bélgica), fuera escogido como segundo proyectil reglamentario. El SS-109 es un cartucho de extraordinario rendimiento balístico. El proyectil es de ojiva de radio variable y base reducida. Mide 23,1 Mm. de longitud (algo más largo que el normal de 5,56 que mide 23 Mm., y que el norteamericano M-193 que tiene 19,2). Está formado por un núcleo perforante de acero tratado, de 4,62 Mm. de diámetro (0,65 gr.), un núcleo de plomo (2,1 gr.) y una camisa (1,3 gr.) Para ello, tuvo que derrotar a otros proyectos de municiones de pequeño calibre, que también pugnaban por ser los sustitutos del 7,62 Mm., como el 4,85 inglés, de 4,6 x 36 alemán y otras municiones americanas, como el 4,32 o los tipos llamados “flechettes”.

Actualmente, el 5,56 Mm. se ha impuesto en todo el mundo, con muchas variantes y versiones. Pero, tras la adopción por la OTAN del cartucho belga SS-109, éste y el fabricado por EE.UU. para el M16A1 (llamado M-193), (la decisión de la OTAN planteó algunas dificultades a los países usuarios de armas con rayado para la carga M-193 (EE.UU., Francia, Israel...), puesto que sus armas no son muy precisas si se emplea la carga NATO), constituyen los dos grandes grupos de esta munición en el momento presente. Más de medio siglo después, también en Alemania, se produce uno de los modernos modelos de este tipo de arma: el Heckler und Koch Gewehr 36 en calibre 5,56x45 OTAN. Otra innovación de gran repercusión, tanto táctica como industrial, fue la implantación del calibre, 5,56 Mm. El combate en la jungla demuestra la necesidad de un arma individual que, usando munición más ligera, permita al soldado portar una dotación numéricamente mayor, y toda vez que las acciones se realizan muchas veces de modo súbito y normalmente a distancias cortas con tiro automático, requieren que éste sea controlable, lo que no es posible con cartuchos tan potentes como el 30-06 (ilusión de los tiradores de caza mayor), el calibre del célebre fusil Garand M1, que muchos dicen fue el mejor de la Segunda Guerra Mundial. Aparece así, el calibre 5,56 Mm. (233 americano) con el FUSA Armalite AR-15 (M16) y se consolida luego con el Colt M16-A1. Casi todos los Ejércitos occidentales se irán pasando al nuevo cartucho. La letalidad del nuevo disparo se basa en su mayor velocidad remanente a la distancia de impacto, lo que produce la dispersión de los fluidos del organismo, y el volteo del proyectil después de incidir en los cuerpos, debido a estar subestabilizado (es similar al efecto "Dum-Dum"). Actualmente se apunta hacia el cartucho sin vaina, para desesperación de la logística y delicia de la industria suministradora.

LOS FUSILES DE ASALTO EN LA ARGENTINA
Fusil de asalto FAL
Su uso en combate

Utilizado por muchos países, el FAL acumuló una larga y excelente foja de servicios. Israel lo utilizó por ejemplo, en la Guerra de los seis días en 1967, pero lo desaconsejó por su facilidad para atascarse con la arena del desierto.


Esto llevó al diseñó del Galil, inspirado en el ubicuo y muy efectivo fusil ruso Kalashnikov, más conocido por el modelo AK-47. Israel probó también y se proveyó de grandes cantidades de otro famoso fusil, el norteamericano M-16, pese a las dificultades que también presentaba de trabarse con arena.

Galil AR

Galil ARM

Galil SAR

El AK-47, un verdadero ícono

Otra arma emblemática, el M-16-A1


Australia fue también un buen usuario de este fusil. Uno de los datos poco conocidos de la Guerra de Vietnam, fue que efectivos del SAS australiano combatieron contra fuerzas norvietnamitas por varios años. Sus armas principales eran la ametralladora M-60 de origen estadounidense, la pistola ametralladora Owen y el también ubicuo y confiable FAL.

La combinación de esa ametralladora mediana con este fusil era que a diferencia de los soldados estadounidenses que necesitaban dos tipos de munición (7,62 y 5,56), los australianos se valían de un monocalibre para ambas armas: el muy efectivo y contundente 7,62, pudiendo intercambiar la munición de sus arma cuando lo desearan.

Pero sin duda, la guerra por excelencia que tuvo como protagonista al FAL, fue el conflicto de Malvinas. Tanto el Reino Unido como Argentina usaban el SLR y el FAL, versiones fabricadas bajo licencia en cada país, del modelo belga.

Esto hizo que la entrega de los fusiles a los soldados argentinos luego de la rendición, fuera especialmente provechosa para Inglaterra a nivel de ganancias de materiales y municiones, más allá de la gran cantidad de armas que los argentinos inutilizaron antes de su entrega para impedir o dificultar su empleo por parte del enemigo inglés.

Fueron tantas las naciones que utilizaron el FAL que los relatos de su uso en combate se harían sin duda muy largos, pero en todas las guerras u operaciones en que combatió, siempre se reveló como una excelente arma de fuego.

El fusil FAL hoy
 Curiosamente, el fusil FAL es ahora producido por un país que antes lo rechazara: EE.UU. A principios de 1950 se produjeron escasas unidades para ser probadas por el U.S. Army, pero no fue aprobado. Sin embargo, en los últimos años, cierto número de compañías privadas de EE.UU. fabrican diferentes versiones del FAL, la mayoría limitadas al fuego semiautomático y enfocadas al mercado civil. Para ello se utilizan tanto partes nuevas como viejas de fusiles usados. Aunque no se produzca más en gran escala, muchos países utilizan todavía al FAL en todas sus versiones, que son numerosas. Brasil todavía lo fabrica, donde se lo conoce como LAR. Argentina, a pesar de haber adoptado una cantidad sustancial de fusiles M-16, no ha reemplazado todo su parque de fusiles de asalto, de manera que el FAL sigue siendo un arma tanto de entrenamiento como de primera línea.

En Inglaterra, sucedió algo curioso. Al término de la Guerra de Malvinas, se generalizó el airoso fusil SA80, desplazando al SLR, pero a pesar de haberse fabricado y provisto una gran cantidad de estas nuevas armas de sistema bull-pup, pronto comenzaron a mostrar sus fallas de diseño y existen versiones de que a muchas unidades de infantería, se les reintegró el antiguo y confiable SLR.

Configuración

El FN FAL es un arma ligera automática operada por recuperación de gases producto de la expansión de la deflagración de la pólvora de los cartuchos en el momento del disparo. Según los modelos, es automática o semiautomática. El cargador se presenta en versiones de 20 y 30 cartuchos, cosa desconocida esta última en nuestro país.

El sistema de disparo utiliza un pistón que actúa como tal dentro de un tubo cilíndrico ubicado en forma paralela y dorsal superior al cañón. Éste, tiene a la altura de la mira una pequeña perforación que a través de la masa del punto del guión del sistema de mira, comunica el cañón con el cilindro o tubo de gases. En el momento del disparo, una parte de los gases pasa por esa perforación al cilindro de gases, impulsando al pistón que se encuentra en su interior, el que empuja hacia atrás en su accionar, al conjunto de corredera y cerrojo, que se encuentra tapando el cargador. En ese instante, un nuevo cartucho salta del cargador y en su inmediato retorno, la corredera/cerrojo, impulsada por un resorte ubicado en la culata, introduce al cartucho entro de la recámara, dejando al arma nuevamente lista para el disparo. Todos estos mecanismos, en fracción de segundos.

El arma posee un regulador de gases, que permiten anular este sistema, permitiendo que todos los gases, salgan detrás del proyectil, por la boca del cañón, en el momento del disparo. Esto puede facilitar el empleo de tromblones lanzagranadas de fusil, sea utilizando cartuchos especiales impulsores, sin proyectil, o bien granadas especiales con trampa para balas, y cartuchos equipados con balas comunes.
Son muchos los cambios progresivamente introducidos en diversos países, en el diseño original del FAL. Debe tenerse en cuenta, que se ha fabricado o continúa haciéndoselo, en Australia y Nueva Zelanda, Canadá, India, Argentina, Brasil, Chile, Perú y un gran número de países más.

Por ejemplo, los receptores eran al comienzo, de acero maquinado, pero en 1973 FN pasó a fabricarlos con procedimientos más modernos para bajar los costos de producción. Sin embargo, muchos fabricantes continuaron empleando los procedimientos originales. Como el muelle o resorte recuperador está alojado en la culata, al crear los modelos con culata plegable, hubo que reconfigurar muchas partes del sistema, particularmente el conjunto de corredera y cerrojo.

La palanca de carga está en la parte izquierda de la caja de mecanismos y no se mueve mientras el arma es disparada. Dependiendo del país donde se lo fabrique, esta palanca puede o no ser plegable. Igualmente, el selector de tiro puede tener dos posiciones (seguro – disparo – disparo automático). Todos los cañones están equipados con apagallamas, que también sirven como tromblón lanzagranadas, pero estos dispositivos cambian de un país productor a otro.

Igualmente, los materiales de construcción del FAL cambiaron con el tiempo y los países. Al comienzo, se utilizaba madera para la culata y el guardamanos, como puede verse en muchas fotografías de época. Para estas partes, luego se usaron metal o diferentes materiales plásticos. Por lo general, todas las versiones de ametralladoras ligeras fueron equipadas con bípodes, y en algunos países pasó lo mismo con la versión de fusil. Las miras también suelen ser muy parecidas, pero los detalles varían de país en país. Casi todos los modelos de FAL están equipados con posiciones para bayonetas, y muchos tienen también manijas móviles para facilitar su acarreo con una sola mano.



 Vistas laterales del centro del FAL. Obsérvese la robustez de los mecanismos, totalmente hechos en metal. Como en la mayoría de los fusiles de esa época, las partes de material sintético eran escasas. Obsérvese también la manija para portar el fusil, uno de las partes que más sirven para identificar un FAL, aunque no todos lo tenían. En esa época, hasta la llegada del M-16, pocos fusiles tenían asa portafusil.

Características generales
Calibre: 7,62x51 (7,62 OTAN)
Acción: operado por gases
Largo: 1,10 metros en versión de fusil, y entre 99 y 73,6 cm. para el modelo "Para"
Largo del cañón: 533 Mm. para la versión de fusil, 431 en el modelo "Para"
Peso vacío: 4,45 Kg.; 3,77 Kg. en el modelo "Para"
Capacidad del cargador: 20 cartuchos (30 en los modelos de ametralladora liviana)
Cadencia de fuego: entre 650 y 700 proyectiles por minuto

Fusil de Asalto Argentino F.A.R.A 83


A este casi desconocido fusil de producción argentina gestado por la F.M.A.P ‘DM’ ( Fabrica Militar de Armas Portátiles Domingo Matheu) de Rosario Santa Fe primeramente se lo denominó F.A.A. 81 o Fusil de Asalto Argentino 81, para se más tarde definitivamente conocido como F.A.R.A 83 o Fusil de Asalto Republica Argentina 83. Su nacimiento se debió a una petición del Ejercito Argentino a la D.G.F.M. (Dirección General de Fabricaciones Militares) ante la necesidad de contar con un arma que disparara el cartucho OTAN 5.56X45mm (223 Rémington) sin recurrir a compras extranjeras, por lo que se procedió el desarrollo de un fusil de asalto para reemplazar al noble y veterano F.A.L. de 7.62x51mm (308 Winchester) de dotación reglamentaria en Argentina, el cual se había tratado, sin resultado, de convertir al 5,54 mm.

La estética del arma se parece un poco al FNC belga, Beretta AR-70, Galil, entre otros fusiles de asalto. Consta de una palanca de montar el cierre adelanta y ambidiestra por encima del tubo del cilindro de gas, en una posición semejante al del fusil CETME español o la línea tradicional de H&K; sin embargo esta palanca no es solidaria al cerrojo, a su vez carece de ayuda o empujador, necesario por si se llegase a producir un cierre incompleto por causa extrema de suciedad, el apoyo al hombro del tirador se formaliza por medio de una culata de fibra plegable hacia el costado de la ventana de expulsión, siendo la ventana de pequeñas dimensiones para evitar la entrada de elementos que afecten el buen funcionamiento del arma, a su ves esta culata es hueca para alojar útiles de mantenimiento. También se le doto de una culata muy similar al del F.A.L 2 Para de tipo esqueleto y plegable, construida con tubos de aluminio y apoyo para la cara.

En cuanto a los aparatos de puntería, constan de un guión protegido por túnel, el alza o mira trasera es de tipo ortóptica de tambor giratoria graduada para 200 y 400 metros, además cuenta con un guión (que permanece plegado sobre el cañón) y tercer diopter auxiliar de tritium para uso en malas condiciones de luz, el cargador de treinta cartuchos de capacidad es de acero estampado y su reten se encuentra por delante del arco guardamonte. El tipo de construcción es más bien la clásica de los fusiles de asalto tradicionales, en donde la chapa de acero estampado ocupa un gran porcentaje de su estructura como son el cajón de mecanismos y los cargadores, en comparación a las armas que usan aleación ligera como el AR-15 o los últimos desarrollos en donde los compuestos sintéticos están en primer orden como las ultimas creaciones de H&K. La disposición de sus partes principales no se apartan de lo tradicional, pistol grip y cargador por delante de éste, a diferencia del F.A.L el cajón de mecanismo está hecho de acero estampado como un AKM-47, FNC etc. El conjunto porta cierre y cierre, cañón y piezas internas son de acero lógicamente, quedando el plástico reservado para piezas como culata, guardamano y pistol grip.

La sencillez del fusil hace que tenga un desarme básico para su entretenimiento muy sencillo, separando un pasador trasero y abisagrándose el cajón de mecanismo sobre otro pasador ubicado delante del arco guardamonte, semejante el tipo de apertura al del fusil F.A.L, de este modo se puede retirar por detrás el muelle recuperador seguido del porta cierre con su pistón y el mismo cerrojo, de esta manera y sumado el acceso para inspección del sistema de disparo, cañón y cilindro de gas es mas que suficiente para mantener operativo el arma.

Su funcionamiento esta basado en la toma de gases en un punto del cañón con cilindro por encima del mismo, con cierre rotativo con tetones de bloqueo en la cabeza, consta de un porta cierre con pistón solidario y cierre al estilo de un AK-47, la disposición del muelle recuperador es semejante al del fusil ruso y no dentro de la culata como un AR-15 o F.A.L NATO. Su funcionamiento: estando en seguro su palanca selectora de tiro y una vez puesto el cargador lleno se tira de la palanca de montar retrocediendo el porta cierre y cierre, llegando a su limite trasero se larga la palanca de montado y por medio del muelle recuperador el conjunto de cierre en su carrera hacia adelante extrae un cartucho del cargador y lo aloja en la recamara quedando de esta manera positivamente acerrojado y listo para disparar.


Ya elegido el modo de hacer fuego y efectuado el disparo (caída del martillo sobre el percutor y golpe de este en el iniciador del cartucho en recamara) una vez que el proyectil recorrió un tercio del cañón da paso por medio de un orificio en su anima y tobera comunicante, el ingreso de gases producto de la deflagración de la pólvora al cilindro, estos gases se encargan de de empujar el frente de la cabeza del pistón y trasmitir al porta cierre un corto desplazamiento hacia atrás, logrando este movimiento el giro y desbloqueo de los tetones del cerrojo, así con la energía remanente del disparo continúan el conjunto de acerrojado arrastrando la vaina servida que es eyectada por el expulsor o botador hacia fuera del cajón de mecanismos por la ventana de expulsión, en este mismo momento el paso del cierre hacia atrás volvió a montar el martillo percutor, cumplido este ciclo mecánico de haber mas cartuchos en el cargador se vuelve a repetir le proceso de carga, disparo, expulsión o de lo contrario el cerrojo queda retrasado anunciando la carga agotada así se este disparando en modo semiautomático o automático.

El F.A.R.A tiene como complemento cuchillo bayoneta de doble filo con engarce en el pomo y guía en la cruz, vaina metálica y tahalí de cordura, bípode con tijera corta alambres y destapador, otra posibilidad es el disparo de granadas de fusil de tipo AP-AT (antipersonal y antitanque), con sistema TB (trampa de bala) para poder efectuar el disparo de la granada con cartucho ‘C’, común de guerra, oficiando de guía de lanzamiento el cañón con su rompe llamas, este ultimo esta roscado para colocar un dispositivo reforzador de presión para el tiro con cartuchos de fogueo, se menciona un aparato de puntería óptico auxiliar, desconozco origen y características. Para el año 1986 se produjeron cerca de 2000 fusiles, pero el proyecto finalmente fue cancelado debido a limitaciones económicas.


Características
Origen: Argentina-Rosario-provincia de Santa Fe
Fabricante: F.M.A.P ‘DM’ (Fabrica Militar de Armas Portátiles Domingo Matheu)
Tipo de arma: fusil de asalto
Calibre-cartucho: 5,56x45mm (223 Rémington) M-193 y SS-109 belga
Sistema de funcionamiento: por tomas de gases en un punto del cañón
Sistema de cierre: a cerrojo cerrado, bloqueo rotativo por te
Sistema de alimentación y capacidad de carga: cargador de petaca doble hilera curvo con capacidad para 30 cartuchos
Longitud total aproximada: 1000mm con culata extendida, 745mm con culata plegada
Peso aproximado: vacío 3,85 Kg.
Cañón: longitud 452mm
Rayado: convencional, seis estrías con paso de una vuelta en 229mm
Velocidad en boca: 965 a 1005 metros por segundo
Cadencia teórica de tiro: 700 a 800 D.P.M. (disparos por minuto)

Soldados Digital

sábado, 19 de diciembre de 2015

Armas Argentinas: Fusil de asalto FARA 83



Fusil de Asalto Argentino F.A.R.A. 83 

(F.A.R.A. 83 - Argentine Assault Rifle) 


Prototipo de preserie del FAA 81, después evolucionado y conocido como FARA 83, de 5,56 x 45 mm. 

En un principio se lo conoció como F.A.A. 81 "fusil de asalto argentino 81" y luego conocido como "F.A.R.A. 83". Conocido por las personas relacionadas a las armas de fuego pero desconocido por el aficionado común, si bien muchos se cuestionaron el porque no el cambio del sistema FAL 7.62 nato por la munición estándar de la OTAN para fusiles de asalto 5.56 x 45 (.223 Remington) y un fusil de asalto extranjero de forma masiva, se sorprenderán al enterarse de que podríamos disponer de un fusil de asalto argentino y es el que estamos tratando cuestiones y causas que no van al caso hicieron no posible contar con esta arma de forma estándar en nuestras fuerzas armadas, arma que mantiene rasgos de fusiles similares y un conjunto de virtudes de los mejores fusiles de asalto, si bien es cierto que fusiles como el nuevo H&K G-36 se apartan en cuanto a materiales, forma de fabricación y ergonomía usando masivamente los compuestos plástico de última generación que lo apartan rotundamente del concepto de fabricación del fusil argentino en donde se mantiene la fabricación clásica y el uso de chapa estampada, no pretendo hacer una historia evolutiva de los fusiles de asalto solo quiero que se difunda entre los aficionados de que pudimos disponer de este tipo de armas sin recurrir a la compra extranjera, demostrando un gran nivel en cuanto al armamento portátil. 


 

Pasando al arma, se le parece al FNC belga y AR-70 por citar dos ejemplos, tiene una culata plegable hacia el costado derecho, su palanca de montar mantiene una disposición adelantada similar al fusil H&K G-3, CETME español, etc. Inclinada hacia el costado derecho, en el desarme se lo ve con pocas piezas lo que facilitaría la operación de mantenimiento por parte del infante, opera por tomas de gases a cerrojo cerrado y positivamente acerrojado, con acerrojamiento rotativo por dos tetones en la cabeza del cierre, este ultimo guiado por el portacierre que lleva el pistón guía solidario, este pistón recibe el impulso de los gases dentro del cilindro que esta por encima del cañón tomados y derivando estos gases en la tobera ubicada en un punto del cañón sobre el tercio delantero del mismo, acción que provoca que al recibir el pistón este impulso provoque el retroceso de el portacierre y posterior rotación y el desbloqueo del cierre produciéndose la apertura del conjunto.



Luego se produce la expulsión de la vaina servida, montado del sistema de percusión y posterior alimentación de un cartucho fresco si lo hubiera en el cargador, su muelle recuperador esta ubicado en la parte superior del portacierre, el cajón de mecanismos esta fabricado de forma clásica por estampado de lamina de acero, soldado y remachado posterior, culata y pistolete están fabricados en material plástico, los aparatos de puntería constan en un alza de tipo H&K MP-5, G-3, etc, giratoria ortóptica graduada para 200 y 400 metros y un tercer diopter con insertos de tritium para el uso en malas condiciones de luz, los cargadores son de chapa estampada con capacidad de 30 cartuchos curvo y de doble hilera retenidos por un pestillo en frente del guardamontes, como opcional se le pudo adosar un bípode y una bayoneta que no he podido ver en fotos hasta el momento, por información recaudada se le atribuye el diseño al técnico Enrique Chiquizola, se lo completo a finales de el año 83 y para el año 1984 se pretendía construir una cantidad de 1000 ejemplares sinceramente he escuchado versiones de que se fabricaron solo 70 ejemplares pero tampoco lo aseguro, como tampoco puedo asegurar el porque se lo saco de producción y se abandono el proyecto. Se estima que se lo termino en el 84 lo de "F.A.A. 81" tal vez sea la denominación que se le dio en la fase de prototipo, en una guía de materiales de la revista el soldado argentino nro:711 de 1995 (tabla de apoyo a la educación) entre las referencias del FAL, FAP, etc. Aparece este fusil como si estuviera en dotación o al menos con gran seguridad de que se lo adoptaría masivamente. 




Decía dicha ficha: 

Empleo: combate cercano. 
Munición: común, trazante y fogueo. 
Dotación: uno por hombre. 
Limitaciones: no posee. 

Ahora pasamos a la ficha técnica : 

Origen: Argentina. 
Fabricante: Fabrica Militar de Armas Portátiles "Domingo Matheu", Rosario, provincia de Santa Fe. 
Sistema de disparo: semi-automático y ráfagas con selector. 
Acerrojado: rotativo a gas. 
Calibre: 5.56 x 45 m-193 o ss-109 belga. 
Cargadores: 30 tiros doble hilera curvos. 
Peso: 3.95 kg. 
Largo: 1000 mm con culata extendida, 745 mm con culata plegada. 
Cañón: de 452 mm, rayado convencional, 6 estrias con paso de una vuelta en 229 mm, (velocidad en boca ): 965 a 1005 metros por segundo. 
Cadencia teórica de tiro: de 700 a 800 d.p.m disparos por minuto. 



FAL comparado con el FARA 83: Ambas configuraciones pesan lo mismo, pero en el primer caso el soldado lleva 100 municiones mientras que en la segunda el soldado carga 210 municiones. 


No puedo decir si podía tirar granadas de fusil creadas para esta arma o de otra similar, con trampa bala o con cartucho de propulsión y si son de guerra, ejercicio o luminosas. 

Por favor quien tenga datos que aportar o salvar errores les agradezco de antemano para conocer mas sobre nuestro fusil de asalto argentino. 



Espero que este pequeño y modesto articulo sirva para que los aficionados conozcan que pudimos disponer de un gran fusil de asalto y argentino y no dejarlo en el rincón de los recuerdos sin olvidar a los técnicos y diseñadores que trabajaron en el proyecto, que sin ser tan famosos como Browning, Stoner o un Saive han querido demostrar de lo que la argentina es capaz en materia de la industria armera e industrial de nuestro país argentina. 

 
Bosquejo del Fusil Fara 83 

Vamos a ampliar datos del fusil FARA 83, gracias a la gentileza de Ruben Malatini que nos aportó una copia del artículo de la revista DESEMBARCO año 90 (escrito por Guim Leonardo J. Maurizzo) en donde pudímos disipar algunas dudas que teníamos como por ejemplo si podía lanzar granadas de fusil y se menciona en este tratado que si, sin saber las cualidades técnicas de este artefacto, diametro, efecto, etc, se menciona que este arma tiene rosca en el rompellamas para el dispositivo reforzador de presión para cartuchos de fogueo, otro dato es que estaba provisto de bipode con tijera corta alambres, puñal de asalto con engarse en el pomo con guía en la cruz para acoplar en el fusil, este con oja de doble filo y se menciona un visor optico con montaje de quita y pon sin mecionar aumentos y demás, bueno esto queda abierto a quienes quieran seguir actualizando y aportando datos sobre el fusil, serían muy fuertes los comentarios de su adopcion en esa epoca porque al final del artículo se mencionan varios fusiles de su familia y termina asi ''y a la que ahora se sumará el FARA 83 diseñado en ARGENTINA.'' 

 
Peine de cartuchos 5,56 X 45 Nato (223 Remington) Cal. del Fara 83, AR-15, Steyr Aug, etc. y que pretendía reemplazar al 7,62 X 51 Nato (308 Winchester) usado en el fusil FN-FM Fal 




FARA 83 de preserie en manos de un paracaidista argentino. Entre las diferencias evolutivas del FAA 81 y el FAA 83 se incluye la culata retráctil tubular 





Cuchillo bayoneta del F.A.R.A con su vaina metálica y tahalí tipo cordura

Por Raul A. Gonzalez - Junio de 2004
Nota de DINTEL.