domingo, 30 de junio de 2013

Tercera Guerra Indo-Pakistaní: La Batalla del Destino (3/3)

“La Batalla del Destino” 
India - Pakistán 1971

Por Marcelo J Rivera (Dintel GDI)

Parte 3/3
Parte 1 -  Parte 2 - Parte 3

Los combates en tierra
El Ejército hindú había comenzado a preparar sus operaciones casi con un año de antelación, durante este tiempo no solo aumentó las maniobras y el entrenamiento de su personal, sino que además aumentó la producción de armamentos, en algunos casos la cuadriplicó. Gracias al aumento de la producción de armas ligeras se logró que el 65% del personal de primera línea dispusiera de fusiles de asalto L-1A1 y ametralladoras Bren como reemplazo a armamentos más antiguos, también se logró una gran provisión de lanzacohetes RPG-7, para complementar a los obsoletos, aunque todavía efectivos, “Bazookas”.
Sin embargo, las operaciones previstas en Bengala Oriental supondrían un durísimo trabajo, pues durante años el Ejército de la India se había entrenado para los áridos y montañosos teatros de Pakistán Occidental, principalmente en la conflictiva zona de Cachemira, mientras que el Pakistán Oriental era una zona pantanosa, húmeda y cruzada por incontables ríos.
Por tanto, podemos decir que Bangladesh resultaba ser una complicación durante la planificación, aunque en la práctica se contó con multitud de factores a favor. La población local brindó un asombroso apoyo, incluyendo información muy importante, se suministró todo tipo de medios locales, reduciendo el tren logístico, bastante complicado de por sí, además, se obtuvo el total control de los cielos, mientras que el alto comando pakistaní colaboró activamente, tomando unas medidas defensivas completamente erróneas en un país tan fácil de defender.
En el frente de Bengala Oriental, el Ejército emprendió las operaciones cuando la Armada y la Fuerza Aérea de Nueva Delhi habían obtenido la supremacía en mar y cielo, habiendo bloqueado completamente este frente, impidiendo cualquier tipo de refuerzos. Esto resultaba bastante improbable, toda vez que el frente estaba separado por más de 1.600 Km. de Pakistán Occidental.
El Ejército indio emprendió, entonces, las operaciones de manera más tranquila, permitiendo que su perfecta planificación fuese llevada a cabo sin contratiempos. Encabezados por tanques T-55 y PT-76, las fuerzas hindúes comienzan a adentrarse en el territorio bengalí, con una tremenda rapidez y eficacia se instalan puentes de vanguardia y reemplazo Bailey y Krupp, en tanto que toda embarcación local era utilizada para transportar carga y cruzar los innumerables ríos y cursos de agua.



Comandos hindúes durante los primeros avances en Bengala Oriental. Los indios hicieron un amplio uso de las fuerzas de infantería ligera, comandos y paracaidistas durante la guerra, teniendo un excelente resultado. (Foto: Bharat Rakshak)
Un aporte fundamental para las acciones indias fue el Cuerpo de Ingenieros, el cual, al comando del general Das, asesora al general Aurora, comandante en jefe de la operación, sobre las mejores rutas a seguir, además de alistar una serie de puentes y líneas de ferrocarril que permitieron que el esfuerzo logístico hindú fluyera sin retrasos a medida de que las fuerzas se iban adentrando en el territorio bengalí.
El asesoramiento del general Das resulta importante cuando el general Aurora opta por aislar todos los emplazamientos defensivos de importancia, progresando a toda velocidad por rutas secundarias y caminos comarcales, en donde los pakistaníes no montaron ninguna vigilancia de importancia. Para cuando los pakistaníes intentaron reaccionar, se encontraban flanqueados y embolsados, impidiendo toda forma de reagruparse y organizar un contraataque.
Es entonces en donde la aviación pakistaní trató de realizar algunas desesperadas misiones de apoyo, inicialmente utilizando los entrenadores armados T-33A, aunque más tarde se unieron los más eficientes F-86 “Sabre”. Sin embargo, la superioridad aérea hindú era aplastante y los constantes ataques no solo borraron la presencia de la FAP, sino que además comenzaban a causar tremendas bajas a las unidades terrestres.



Los transportes de personal BTR-6PB disponibles en el Ejército indio fueron ampliamente utilizados en el frente de Bangladesh, permitiendo mantener un buen ritmo de avance gracias a su capacidad anfibia. (Foto: Archivos Dintel)

Los pequeños tanques anfibios PT-76 se mostraron más que eficientes a la hora de encabezar los asaltos indios, en estos casos, los tanques M-24 “Chaffee” pakistaníes trataron de detener el ataque, pero habían sido distribuidos en pequeñas secciones para apoyar a la infantería y muchos resultaron destruidos rápidamente. Los T-55, más pesados, terminaron por aplastar la resistencia en varios puntos fuertes pakistaníes, en tanto que los cazatanques BRDM-2, dotados de misiles AT-3 “Sagger”, sembraron la destrucción entre los pocos blindados disponibles en la zona.
La infantería hizo un gran empleo de jeeps y camiones, aunque los asaltos principales eran encabezados por transportes de personal BTR-50PK y OT-62 de orugas, así como OT-64 de tracción a rueda.
El Ejército hindú había preparado de una manera muy meticulosa la aproximación a Dacca, la capital del Pakistán Oriental. El día 7 de diciembre, dos Compañías del Regimiento Paracaidista son transportadas a las cercanías de esa localidad a bordo de helicópteros Mi-4 y Mi-8, durante el desembarco, los infantes fueron cubiertos por helicópteros HAL “Chetak”, los cuales estaban artillados con lanzacohetes y ametralladoras. El día 11 de diciembre, esta acción fue completada con el lanzamiento de un Batallón de paracaidistas desde los transportes C-119G y An-12PB de la FAI, reforzando al dispositivo previamente transportado en helicópteros.
Esta acción causó conmoción en los comandantes pakistaníes, quienes dieron por cierta la noticia difundida por la radio local en la que se había “lanzado una brigada paracaidista en las cercanías de Dacca”.
Suponiendo que estas fuerzas permitirían abrir una brecha a las fuerzas pesadas que llegaban desde tierra, los pakistaníes hicieron un gran esfuerzo para tratar de desviar parte de las defensas a combatirlas, sin embargo, el día 10 de diciembre, los hindúes habían realizado otra acción aún más preocupante. Utilizando helicópteros Mi-4 y Mi-8 de la FAI, y protegidos por “cañoneros” HAL “Chetak”, el Ejército indio había trasladado 2.971 hombres y 90.200 hombres de una ribera a otra del río Meghna, estableciendo una importante cabeza de puente después de 95 vuelos de los helicópteros.
La crítica situación desembocó en combates particularmente duros en los alrededores de Dacca, donde se hizo un gran empleo de artillería, morteros y cañones sin retroceso para romper la resistencia pakistaní. Estos disponían de 72 tanques M-24 “Chaffee” dentro del 29º Regimiento de Caballería, además de algunos cazatanques M-36B1 y al menos un Escuadrón de M-4 “Sherman”, sin embargo habían sido distribuidos entre la infantería y no pudieron ser aprovechados, además, estaban en muy mal estado operativo. Durante los combates, los PT-76 destruyeron no menos de quince tanques M-24, mientras que los T-55 destruyeron otros 27 durante los diversos enfrentamientos ocurridos en Bengala Oriental. En uno de los combates cerca de Rangpur, los PT-76 se encontraron con un puñado de tanques M-24 pakistaníes que apoyaban a unidades de infantería. Rodeados totalmente, los tanques pakistaníes trataron de romper el cerco, pero los PT-76 hindúes destruyeron nueve de ellos, dañaron tres y otros cinco fueron capturados. Los equipos antitanques hindúes, con cañones sin retroceso montados en jeeps, así como misiles AT-3 “Sagger” montados sobre blindados BRDM-2 o transportados por la infantería, dieron cuenta de otros muchos tanques pakistaníes sobrevivientes. Al concluir la guerra, no menos de 20 tanques M-24 habían caído intactos o dañados en manos indias, muchos de ellos abandonados.



Los HAL "Chetak" fueron los principales helicópteros utilitarios, de reconocimiento y de apoyo cercano con los que el Ejército hindú contó durante las operaciones, principalmente, en Bangladesh. (Foto: Bharat Rakshak)

Sin embargo, en el frente occidental sería donde los combates tomarían un matiz completamente diferente. Con el grueso de los ejércitos de ambos países en primera línea de combate, amén de estar en condiciones ideales para el combate, las batallas fueron extremadamente duras y provocaron graves bajas a ambos bandos. Los combates se iniciaron desde el mismo día del inicio de las hostilidades hasta la declaración del alto al fuego.
Aquí, pakistaníes e indios se rigieron bajo la regla de tomar y ceder terreno, en donde los pakistaníes mostraban un gran apuro en asegurar los territorios capturados con el fin de poder servir como herramientas de negociación para el futuro.
El primer encuentro de importancia se produce el primer día de la guerra, 4 de diciembre, cuando el alto comando pakistaní ordena atacar a las fuerzas indias en Chaamb. Allí los pakistaníes envían a los 11º y 28º Regimientos de Caballería, sumando 75 tanques T-54 y T-59, apoyados por 40 veteranos M-4 Sherman, algunos repotenciados, y 15 cazatanques M-36B1. Los hindúes, por su lado, desplegaban el 72º Regimiento Acorazado, el 9º Regimiento de Caballería del Decán, ambos dotados de T-55, y un Escuadrón de Exploración equipado con tanques ligeros AMX-13.
Los combates fueron violentísimos, en particular cuando ambas fuerzas trataron de hacerse con el poder de los altos de Mandiala. El 11º de Caballería pakistaní se enzarzó con el 9º del Decán, trabando un violentísimo combate entre tanques a distancias medias y cortas.
La batalla concluyó el día 7 de diciembre, cuando los pakistaníes logran hacer retroceder a los hindúes y declaran la captura de Chaamb. En la batalla habían destruido 19 tanques T-55 indios, capturando otros 14 T-55 dañados o fuera de combate. Por su lado, los indios declaran la destrucción de nueve tanques T-59, quince M-4 “Sherman” y cinco caza tanques M-36B1. Pese a que se había logrado destruir un número similar de tanques pakistaníes, estos eran en su mayoría los obsoletos Sherman, lo que hizo que los pakistaníes conservaran la mayor parte de sus T-59 intactos para continuar presionando. Sin embargo, los pakistaníes plantearon mejor la batalla y sacaron un mayor provecho de sus medios, más teniendo en cuenta que incluso los T-59 eran inferiores a los T-55 indios, dotados de proyectores nocturnos y municiones más eficaces.
Entre el 4 y 5 de diciembre ocurrió otra batalla en torno a Longewala, en este caso, los pakistaníes habían desplegado unidades equipadas con tanques “Centurión” y “Vijayanta”, los cuales eran muy superiores a los tanques pakistaníes. En este caso, los tanquistas indios destruyeron 26 tanques T-59 pakistaníes, mientras que los ataques aéreos de los Hunter, Mystére y Su-7BMK destruyeron otros 11 tanques T-59 adicionales, obligando a los pakistaníes a retirarse debido a las grandes pérdidas.



Tanques T-55 hindúes destruidos durante la batalla en los altos de Mandiala, los pakistaníes usaron la copia china de este tanque, los cuales pese a ser algo inferiores pudieron obtener la victoria sobre las armas indias en Chaamb. (Foto: Bharat Rakshak)


Sin embargo, uno de los mayores duelos acorazados se produjo en el Punjab, cuando las 2ª y 16ª Brigadas Acorazadas indias, equipadas con tanques T-54 y T-55, trabaron combate con la 6ª División Acorazada y la 8ª Brigada Acorazada pakistaníes, dotadas con tanques M-47 y M-48 “Patton”, apoyados por unos cuantos veteranos M-4 “Sherman”.. Esta batalla se produjo entre el 15 y el 16 de diciembre, siendo la última gran batalla de la guerra.
En este combate, los indios avanzaron con tanques T-54 dotados de rodillos barreminas a la cabeza, aunque se encontraron con terreno blando que obligó a cesar su empleo. En los combates que sucedieron a continuación, los tanquistas hindúes demostraron tener un mayor entrenamiento y disciplina de combate, además de aprovechar al máximo las ventajas de sus nuevos tanques. En esta oportunidad los indios reclamaron la destrucción de 33 tanques M-47 y M-48, así como 14 tanques M-4 “Sherman”, por su lado, debieron lamentar la pérdida de catorce tanques T-55 por fuego enemigo y dos por minas. En este caso, el apoyo aéreo fue importante, pero bastante limitado, los cazas Su-7BMK realizaron gran cantidad de ataques aéreos, pero principalmente contra las unidades de infantería y artillería desplegadas en la zona. Fue la derrota definitiva para los pakistaníes.
India declaró haber perdido 69 tanques en toda la guerra, de ellos 24 se perdieron en Bangladesh, y 45 en el frente Occidental. Por su lado, los pakistaníes lamentaron la pérdida de 264 tanques en combate, de ellos 72 eran los M-24 “Chaffee” perdidos en Bangladesh, mientras que el resto incluía 61 T-59, 33 M-47 y 25 M-48, mientras que los restantes fueron tanques M-4 y cazatanques M-36B1 perdidos en los diversos enfrentamientos.
La India probó en combate, por primera vez, el moderno tanque medio “Vijayanta”, producido localmente en la fábrica de Madras. Con su potente cañón L-7A1 de 105 mm, no hubo ningún tanque pakistaní capaz de enfrentarle. Se mostró abrumador sobre los obsoletos tanques M-4 y M-24, mientras que fue muy superior a los M-47, M-48 y T-59, que constituían la punta de lanza acorazada pakistaní.



Tanques M-47 y M-48 pakistaníes destruidos o dañados luego de su captura por las fuerzas indias tras la batalla de Punjab. Las bajas sufridas en esta batalla fueron elevadas, a la vez que significó la derrota final pakistaní. (Foto: Bharat Rakshak)

Termina la guerra y nace el Estado de Bangladesh

La victoria india fue fulminante, el 17 de diciembre de 1971 el General Niazi firma la rendición del Pakistán Oriental, que poco tiempo después se transformaría en Bangladesh.
La explicación más práctica de esta guerra fue el hecho de que la India había estado planificando desde hacía mucho tiempo la guerra y para el momento de la operación, sus fuerzas eran superiores a cualquiera de la región y con una preparación envidiable. Sus mandos demostraron una gran mejora en el manejo de la guerra acorazada y mecanizada moderna, con respecto a 1965, así como una gran visión para el empleo de nuevas tácticas y sistemas de armas, como lo fue el ejemplar uso de los helicópteros. Toda la oficialidad demostró un pensamiento de conjunto y llevó a cabo los planes tal y como estaba previsto, pero a su vez demostraron ser capaces de realizar acciones independientes que le permitieran aprovechar cualquier ventaja táctica que se les presentara.
Al finalizar la guerra, muchas críticas surgieron en el seno de las FFAA hindúes, en parte por diversas dificultades aparecidas en los diversos combates y a la alta tasa de pérdidas, principalmente de aviones, que se sufrieron. Este examen permitió reorganizar los sistemas defensivos hindúes de cara al futuro. Las críticas a la Fuerza Aérea India fueron muchas, pues pese a su gran éxito sufrió un desgaste considerable y no se lograron todos los objetivos establecidos al principio de la operación.
Por parte de los pakistaníes, estos demostraron ser completamente inefectivo e irresponsable, a esto se le sumó la necia propaganda oficial que decía que el enemigo era "poco más que un tigre de papel", la cual fue ciegamente aceptada por oficiales y soldados. Cómo si fuera poco, la dirección militar estaba encargada a un grupo de mediocres oficiales de alta graduación, exceptuando al mariscal del aire Rahim Khan. El principal responsable del Ejército, general Tikka Khan, se había dado a conocer por sus brutales represiones a los civiles en el pasado, siendo importante mencionar que, cuando ascendió a Coronel, una nota enviada al Jefe de Estado Mayor decía: "Este Oficial se ha revelado inepto para ocupar puestos de alta responsabilidad".
Los jefes de las fuerzas del Pakistán Oriental, los generales Niazi y Farman, adoptaron medidas totalmente ineficaces para detener a los hindúes, perdiendo todas las ventajas que les daba el terreno, tan apto para la defensa. A la vez que no aprovecharon el grueso de las fuerzas disponibles en esa zona, en particular el material blindado, que si bien no era muy efectivo era el único disponible y podría haber sido empleado de una manera más provechosa. Todos estos errores costó el empleo de varios generales y almirantes a las Fuerzas Armadas pakistaníes.
De igual manera, la culpa fue, en gran medida, de los altos mandos, en Pakistán Occidental, quienes le habrían podido enviar refuerzos, material y otras provisiones, así como planes de acción con los que podrían haber resistido por mucho más tiempo. Tal vez, con una mejor defensa del territorio, las idas y venidas de la diplomacia habrían permitido evitar la humillante rendición incondicional y haber salvado, aunque sea en parte, el honor del Ejército Pakistaní.



El general Niazi firma la rendición incondicional del Pakistán Oriental frente al general Aurua, máximo responsable de la aplastante victoria hindú. A partir de este momento la independencia de Bangladesh se hizo una realidad. (Foto: Bharat Rakshak)


Dintel DIG

AShM: Un mercado con muchas opciones

Un mercado de compradores para los misiles anti-buque
  

NSM 

Hubo recientemente un SINKEX (ejercicio de hundimiento) en la que Noruega disparó uno de sus misiles de fabricación local Naval Strike Missile (NSM) a una fragata de la clase Oslo fuera de servicio de 2.100 toneladas. El NSM, disparado desde un barco de misiles más pequeños, golpeó la fragata, hizo mucho daño, pero no la hundió. Si la fragata había sido cargado con combustible y munición, el NSM habría comenzado los incendios y, probablemente, hubiese puesto al barco fuera de servicio y posiblemente causado su hundimiento. 

A pesar de los muchos misiles anti-buque ligeros (menos de una tonelada) en el mercado, NSM todavía consigue ventas porque es eficaz, fiable y asequible. También se ofrece para el uso en los barcos, aviones y camiones (como parte de un sistema móvil de defensa costera). Los misiles anti-buque NSM de 409 kg (900 libras) tiene un 125 kg (275 libras) de cabeza de combate y un alcance de 185 kilómetros. El NSM utiliza el GPS y sistemas de dirección inercial, así como un sistema de formación de imágenes y de calor (una base de datos de objetivos probables) para escoger y golpear la nave prevista. El fabricante noruego Kongsberg permite a los compradores para instalar fácilmente sus propios sistemas de control y de radar. 
  

Harpoon 
Hay mucha competencia, siendo las principales el Harpoon y misiles de EE.UU. similares de Rusia y China. El ruso Kh-35 misiles anti-buque es similar al Harpoon americano, pero más ligero (610 kg / 1,340 libras, frente a los 728 kg / 1600) y tiene menos rango de 130 kilómetros (en comparación con 224 para la última versión de Harpoon). El Kh-35 (también conocido como el SS-N-25 o Switchblade) puede ser disparado desde helicópteros, aeronaves, barcos o baterías costeras. 

Kh-35E 
China, vende una gran cantidad de misiles anti-buque C-801 y C-802. El C-801 es de 5,81 metros (18 pies) de largo, 360 mm de diámetro, tiene un alcance máximo de 42 kilómetros, y pesa 636 kg (1400 libras) cada uno. El C-801 es similar al Exocet francés, y se cree que se han basado en ese misil. 
  

C802A 
El C802A es un misil de 6,8 m (21 pies) de largo, 360 mm de diámetro, 682kg (1500 libras), con un (360 libras) ojiva 165kg. El C802 tiene un alcance máximo de 120 kilómetros, y se mueve a lo largo de unos 250 metros por segundo. El misil Exocet francés es del mismo tamaño y rendimiento, pero cuesta el doble (más de un millón de dólares cada uno, pero el fabricante es conocido por ser flexibles en materia de precios.) 

El nuevo MM Exocet Block 3 tiene el doble del alcance (180 kilómetros) debido a su motor de turborreactor. Se trata de un 670 kg (1.500 libras) de misiles que ha existido por más de tres décadas, ha sido probado en combate y se sabe que es fidedigna. El C802 se sabe que es menos capaz que el Exocet, pero parece similar. 


Yakhont   
Rusia fue pionera en el uso de misiles antibuque asesinos de portaaviones supersónicos más grandes (hasta tres toneladas). El ejemplo más común es el Yakhont que es una, misiles tres toneladas 8,9 metros (27,6 pies) de largo con un 300 kg (660 libras) de ojivas. Rusia ha sido la construcción de misiles como éste desde 1970, pero sólo son populares entre los pocos países que tienen una necesidad de destruir los portaaviones estadounidenses. 

Strategy Page

sábado, 29 de junio de 2013

FPS Russia: Recopilación 1/2

FPS Russia: Locuras en tándem

FPS Russia es un canal de Youtube donde se presentan de una manera muy poco convencional la efectividad de armas de todo el mundo. En el capítulo de hoy se presenta una recopilación de las mejores locuras del muchacho éste. Disfrutenlo porque está muy bueno.

Malvinas: DDG clase Sheffield británicos en Malvinas (7/7)

Destructores Type 42 británicos en el Conflicto del Atlántico Sur (1982) 

Parte 7/7
Viene de Parte 6/7

El fantasma del Exocet 
Alrededor de las 16:32 del mismo día 25 de mayo, después de hundido el Coventry, la Task Force recibió un durísimo golpe al perder el portacontenedores Atlantic Conveyor – nave que transportaba vitales suministros para la fuerza anfibia, incluyendo seis helicópteros Wessex, tres helicópteros pesados Chinook y un Lynx de reserva – a manos de misiles AM39 Exocet. La fragata HMS Brilliant detectó el ataque, mas como explica el capitán de la nave, John Coward, “el sistema respondió tal cual lo esperaba: inmediatamente nos alertó sobre la presencia de dos misiles Exocet e hizo puntería con el Sea Wolf. Desafortunadamente, la computadora nos mostró que los misiles se encontraban fuera de alcance y no representaban amenaza para nosotros y no había forma de efectuar el disparo; estábamos demasiado lejos para que nuestro sistema de autoprotección Sea Wolf pudiese actuar”. La razón por la que se decidió no instalar sistemas defensivos en los buques mercantes, según refiere Coward, “no es porque fuese difícil colocar un sistema de misiles compacto como Sea Wolf a bordo de un carguero, sino porque lo complejo consiste en instalar todo el sistema de alerta y monitoreo en un buque de ese tipo, de manera que el buque mercante se “de cuenta” de lo que está sucediendo para evitar derribar aviones amigos, misiles amigos en el aire, señuelos, etc. que son necesarios para lidiar con la complejidad de la guerra moderna. Y eso es complicado de colocar a bordo de un navío de carga: un carguero armado con misiles capaz de dispararle a lo primero que se le atraviese es un peligro potencial para cualquier otro buque en la Task Force.” 

Exeter y Cardiff 
La pérdida en combate tanto del Sheffield como del Atlantic Conveyor había significado una actualización y mejora de los protocolos de la Task Force para lidiar con una amenaza como la del misil Exocet. Lo aprendido de ambas trágicas circunstancias rendiría sus frutos más adelante, durante el último ataque con un misil aire-superficie perpetrado por la aviación de combate argentina. 

El día 30 de mayo se puso en ejecución una misión de ataque naval contra objetivos de la Task Force a modo de utilizar el último misil AM39 en inventario. A requerimiento de la Fuerza Aérea Argentina – como “pago” solicitado a la Armada por el uso de sus cisternas aéreos KC-130H (sin los cuales habría sido imposible para los aviones navales alcanzar sus blancos) – cuatro aeronaves A-4C Skyhawk del Grupo 4 de Caza se unieron a dos Super Étendard (uno de ellos armado con el citado Exocet) de la 2º Escuadrilla Aeronaval Caza y Ataque. El paquete decoló de la base de Río Grande, tomando combustible de dos KC-130H unos 50 minutos después, a una altitud de 6 mil metros. Luego de completar la maniobra, los seis aviones continuaron hacia su objetivo, en rumbo 350, a una velocidad de alrededor de 413 nudos y a una altitud apenas por encima de la superficie del mar (menos de 100 pies o 30 metros). La meteorología ese día distaba de ser óptima, con un techo de nubes muy bajo y lluvia que, sin embargo, jugaban en favor de los atacantes por cuanto resultaba mucho más difícil para los buques detectarlos visualmente. Los Super Étendard efectuaron un ascenso a fin de ejecutar un barrido de radar para ubicar los buques; el primer pop-up resultó fallido, mas un segundo logró adquirir un objetivo (que apareció en las pantallas de radar de los aviones de fabricación francesa como un contacto de gran tamaño), luego de lo cual el avión 2-A-202, comandado por el Capitán de Corbeta Alejandro Francisco, soltó su misil, a unos 32-38 kilómetros del objetivo. Con el misil en el aire, los Super Étendard rompieron la formación e iniciaron su escape, dejando a los A-4 realizar su corrida de bombardeo. 

En ese mismo instante se encontraba en estación la fragata HMS Avenger (Type 21 o ‘Amazon’). Al detectar en su equipamiento ESM la primera señal del radar Agave, el Capitán Hugo White ordeno inmediatamente desplegar una cortina de chaff y comenzar a maniobrar dentro de ella (pues, debido a la dirección del viento, lo último que quería era apartarse del patrón de chaff que había desplegado). Con apenas 110 metros de eslora, la pequeña fragata incrementó considerablemente su RCS (sección de radar) al desplegar chaff, apareciendo en los radares argentinos como un buque de mayor tamaño de lo que realmente era (como podría ser un portaaviones), lo cual sedujo a los pilotos a abrir fuego sobre dicho contacto. Una vez que se confirmó la presencia de un misil en el aire, Avenger disparó otra ronda de chaff por sobre la anterior, incrementando aún más la densidad de señuelos alrededor del buque con la esperanza de seducir al misil. 


Fig.41 – HMS 'Avenger', atacada el 30 de mayo por un misil Exocet y aviones A-4 Skyhawk 

Al norte de la fragata se ubicaba el destructor HMS Exeter, perteneciente a la serie (Batch) 2 de la clase ‘Sheffield’, el cual poseía un radar Signaal-Marconi Type 1022 mucho más capaz que su predecesor instalado en las primeras de sus naves hermanas (Type 965M), así como directores de tiro mejorados Type 909 Mod 1; capturó a los contactos en sus sensores y se preparó para abrir fuego con misiles Sea Dart. Con sus modernos radares, Exeter fue capaz de enganchar los contactos aún a través de la nube de chaff dejada por la fragata Avenger y abrir fuego sobre ellos. Un primer misil (que pasó hacia el oeste del cúmulo de señuelos desplegado por la fragata) alcanzó en cuestión de segundos al Skyhawk C-301 pilotado por el Teniente José Vásquez, destruyendo completamente la aeronave. En ese momento, la pieza Vickers Mk8 de la Avenger abrió fuego furiosamente; un segundo A-4C (C-310, con el Primer Teniente Omar Castillo en los mandos) se desintegró en el aire (el derribo fue reclamado por el Exeter – con un segundo Sea Dart – pero es posible que la aeronave también haya sucumbido a la acción de la pieza de 114mm de la Avenger). El misil continuó su trayectoria, curvándose hacia el este, seducido por algunas de las nubes de chaff lanzadas por la fragata, para luego caer al mar. Los dos Skyhawk restantes pasaron sobre la Avenger, soltaron sus bombas de 500 libras (sin alcanzar su objetivo) y escaparon de vuelta al continente. Los argentinos reclamarían luego haber atacado (e incluso dañado) al portaaviones HMS Invincible. Ciertamente ello no fue el caso, pues el portaaviones se encontraba cuando menos a 46 kilómetros de distancia de la fragata y por tanto, fuera del alcance del Exocet. 

En su primer día en combate, Exeter se adjudicó un derribo (más otro probable) de una aeronave enemiga, logro aún más digno de mención por el hecho de que tal baja se produjo a una altitud de menos de 30 metros, bastante fuera de los parámetros y envolvente teóricos del misil Sea Dart. Ciertamente, las mejoras implementadas en los buques de la serie (Batch) 2 respecto de sus predecesores contribuyeron al éxito del encuentro en favor de la Royal Navy, lo mismo que las lecciones aprendidas (de la forma más dura) luego de la pérdida del Sheffield y del Atlantic Conveyor – reacción y respuesta inmediatas ante una amenaza proveniente de un misil sea skimmer – que, en última instancia, salvaron el día. 

El 26 de mayo había arribado a la TEZ un segundo Type 42, HMS Cardiff, junto con el grupo de combate del Bristol. La nave fue destacada a labores de piquete de radar en las proximidades de Stanley, a fin de interdictar aeronaves argentinas que todavía continuaban realizando arriesgados vuelos de reaprovisionamiento hacia y desde las islas. Posteriormente, el 6 de junio, tomó posición más cerca de la costa para proveer fuego de apoyo naval a las fuerzas británicas que ya se encontraban preparando el asalto a las posiciones elevadas que constituían la defensa final argentina de la capital, Stanley. Cardiff disparó 277 rondas de munición de alto explosivo antes que su cañón Mk8 se trabara. Ese día tuvo lugar un triste incidente blue-on-blue cuando un helicóptero Gazelle (XX377) del 656 Squadron (Army Air Corps) fue abatido por un misil Sea Dart lanzado por el Cardiff a una distancia de 46km El aparato tenía su equipo IFF (Identification Friend or Foe) apagado y por tanto, bajo las reglas de combate (RoE), era susceptible de ser atacado al fallar ser identificado como británico por la tripulación del destructor. La tripulación falleció. El día siguiente, HMS Exeter reclamó como víctima un avión de reconocimiento fotográfico Learjet 35A sobre Pebble Island. 


Fig.42 – Casquillos vacíos yacen sobre la cubierta del 'Cardiff' luego de completar una ronda de bombardeo de apoyo naval la noche del 5 de junio. Nótese la pieza de artillería cubierta de hollín y residuos 

Fig.43 – HMS 'Exeter' dispara un misil Sea Dart desde las aguas de San Carlos 

La mañana del 13 de junio – apenas horas antes de la rendición – Cardiff logró adjudicarse el último derribo de una aeronave argentina en la guerra cuando alcanzó con un misil Sea Dart a un bombardeo Canberra B Mk62 (B-108) del Grupo 2 de Bombardeo sobre Mount Kent, para entonces ya en posesión de los británicos. El día siguiente, 14 de junio, a las 23:50, el comandante argentino del teatro de operaciones de las islas Malvinas, Brigadier General Mario Menéndez, capituló ante los británicos, poniendo fin a una corta pero intensa y sangrienta campaña. Al amanecer, el mismo buque ingresó en la bahía de Port Howard (East Falkland/Isla Soledad) para aceptar la rendición de unos 700 soldados argentinos que habían allí depuesto las armas. 


Fig.44 – HMS 'Exeter' retornando al Reino Unido después de la campaña 

Lecciones de una guerra 
La guerra de las islas Malvinas/Falklands fue, en muchos aspectos, el campo de prueba de numerosas tecnologías y tácticas no probadas. Poniendo a un costado el hecho lamentable y luctuoso que constituye la guerra como acto propiamente tal, resultaría necio dudar del hecho de que es en el campo de batalla donde se validan o descartan las tecnologías, tácticas y modelos teóricos trazados y desarrollados en tiempos de paz. “No hay duda al respecto de que la campaña del Atlántico Sur fue – y esto alguien debe decirlo – muy beneficiosa para nosotros”, reflexiona ‘Bill’ Canning, comandante de la fragata HMS Broadsword. “Es sumamente lamentable que uno tenga que sufrir pérdidas de vidas en el proceso, pero la guerra nos da una oportunidad para poner a prueba nuestro entrenamiento, nuestros hombres y nuestro equipo bajo condiciones reales de combate”. 

Ello no deja de ser interesante, toda vez que el conflicto que enfrentó al Reino Unido con Argentina entre mayo y junio de 1982 fue no solamente un encuentro bélico sui generis en muchos aspectos, sino por sobre todo, un tipo de guerra para la cual la Royal Navy de la época distaba de estar preparada. La Armada Británica pasó décadas preparándose cuidadosamente para un tipo de guerra y un conflicto que nunca ocurrió: un enfrentamiento con el bloque soviético en un escenario europeo. Argentina era el enemigo incorrecto (no era la Unión Soviética) en el momento incorrecto (la Guerra Fría) y en el lugar incorrecto (el Atlántico Sur). En tal sentido, la fuerza naval británica debió enfrentarse, de forma marcadamente antagónica, a décadas de planeamiento de defensa que se habían concentrado en una visión eurocentrista y multilateral enfocada estrechamente en torno a la OTAN a fin de derrotar a las fuerzas del Pacto de Varsovia en el hipotético escenario de una Tercera Guerra Mundial. Sin embargo, es esta misma naturaleza (la disimilitud entre la campaña del ’82 con aquel modelo de guerra para el cual los británicos estaban mejor preparados, es decir, la guerra antisubmarina contra la URSS) la que hace que el conflicto del Atlántico Sur sea tan relevante y aleccionador, puesto que ante el mismo, la respuesta de la Royal Navy no fue planificada con antelación (todo lo contrario) y por tanto, se vio inmutable ante años de política de planeamiento ‘correcto’ (véase al principio del artículo “Antecedentes: la Royal Navy a comienzos de la década de 1980”). En tal sentido, se trató de una campaña libre de restricciones y muchos aspectos de ella reflejaron reacciones instintivas o soluciones de campo, cuestiones que tradicionalmente han caracterizado a una fuerza flexible y adaptable como la Royal Navy, sometida a restricciones y especialización por las circunstancias previamente discutidas. Retomando lo dicho por el Capitán Canning y siempre lamentando el costo en vidas humanas que el acto de hacer la guerra conlleva, es sensato concluir que, gracias a la experiencia de combate obtenida por las fuerzas navales británicas en 1982, pudieron detectarse, reconocerse, subsanarse y corregirse errores (producto de modelos teóricos desarrollados exclusivamente en tiempos de paz e influenciados por cuestiones ajenas al campo del planeamiento estratégico) que de otra manera habrían plagado a la Royal Navy quizás por décadas y dejado vulnerable ante conflictos de mayor intensidad o en otras partes del mundo, con consecuencias quizás incluso más dramáticas. 

Mucho se podría decir respecto de las lecciones aprendidas por la Royal Navy – y, sin temor a equivocación, por todas y cada una de las Armadas del mundo – a raíz de la experiencia del conflicto del Atlántico Sur. Sin pretender entrar en un análisis detallado de las mismas – puesto que sería distanciarse del tema en cuestión – es menester precisar, sin embargo, aquellas obtenidas de la participación del destructor clase ‘Sheffield’ y cómo las mismas influenciaron no solo mejoras en los buques de la clase y en el diseño de naves posteriores, sino en el desarrollo e implementación de tecnologías en el campo de la guerra naval moderna. 

La pérdida del Sheffield dejó entrever numerosas falencias no solo en el diseño del buque propiamente tal, sino también en la doctrina operacional de la Royal Navy: se esperaba que los buques suplieran a las aeronaves, en primera instancia fungiendo como piquetes de radar para la detección y control de las amenazas aéreas y en segundo lugar, como defensas antiaéreas del Grupo de Batalla. La falta de medios AEW (Airborne Early Warning) contribuyó a la pérdida de la nave, toda vez que tanto los radares de los buques (cuyas deficiencias ya se han expuesto y discutido hasta la saciedad) como los radares de los aviones interceptores fueron incapaces de detectar y rastrear a los aviones atacantes que se vieron posibilitados de atravesar los sucesivos anillos de defensa y lanzar sus misiles. El Wing Commander Nigel ‘Sharkey’ Ward, veterano piloto del Fleet Air Arm y comandante del No.801 Squadron con base en el portaaviones HMS Invincible durante el conflicto, comenta respecto del rol que jugó el avión Sea Harrier en la defensa de la fuerza de superficie: “con nuestro pequeño radar a bordo del Sea Harrier no podíamos realmente ver blancos pequeños y veloces sobre mar picado. Ello constituyó un problema severo y significó que el Super Étendard aproximándose, en condiciones apropiadas, podía pasarnos de largo, lo cual era una preocupación real para nosotros.” Las deficiencias del radar Ferranti Blue Fox y de artillería aire-aire (limitada en el Sea Harrier FRS Mk1 a misilería de corto alcance de guía infrarroja) fueron subsanadas luego del conflicto cuando la flota de Sea Harrier fue reconvertida al estándar FA Mk2, incorporando un radar de pulso Doppler Blue Vixen mucho más capaz y misiles aire-aire AIM-120 AMRAAM (consolidando a la aeronave embarcada de ala fija como principal defensa del Grupo de Batalla). La falta de aeronaves de alerta temprana también demostró ser una debilidad importante, lo cual fue resuelto con la reconversión de plataformas Sea King al rol AEW, recibiendo estas un radar Thorn-EMI ARI 5930/3 Searchwater (derivado del utilizado por el avión de patrullaje marítimo – MPA – con base en tierra Nimrod). De haberse contado con un radar aerotransportado de alerta temprana, ningún Super Étendard podría haberse acercado a menos de 150 millas de la Fuerza de Tareas sin ser detectado. 


Fig.45 – Helicóptero Sea King AEW Mk2 

Tanto la pérdida del Sheffield como del Coventry demostraron fallas de diseño y construcción de las naves Type 42 de las primeras series. A modo de paliar las deficiencias en habitabilidad que plagaron desde el inicio a los buques de la clase, se incluyó en el diseño una importante cantidad de mobiliario relleno de espuma que demostró ser altamente inflamable y tóxica ante la presencia de fuego; se hicieron además concesiones en trazado del sistema contraincendios, que dependía de una sola tubería principal sin un sistema de respaldo (que, por su instalación, habría restado espacio a los compartimentos internos de la nave); ello probó ser fatal durante el incidente del 4 de mayo pues, con la ruptura de la tubería principal y sin un sistema redundante disponible, fue imposible combatir el incendio que se generó producto del ataque, debiendo la tripulación claudicar y rendir el buque a las llamas. 

Contrariamente a la creencia popular, el uso de aluminio en los buques de la clase ‘Sheffield’ no influyó en la pérdida de ambas naves, toda vez que el uso de este material se encontraba limitado a aspectos muy puntuales del diseño y no fue incorporado a la superestructura del barco, como consta en un documento publicado por el MoD (Ministry of Defence) británico en diciembre de 1982: 

Ha habido comentarios respecto del uso de aluminio en la construcción de buques. El hecho es que el aluminio fue utilizado en la superestructura de las fragatas Type 21 y en menor medida en las de de otras clases de naves, pero no en los destructores Type 42 como el HMS Sheffield. Adicionalmente, el aluminio se usa ocasionalmente en mamparos no estructurales, escaleras y ductos de ventilación. Al utilizar aluminio, es posible realizar ahorros significativos en el peso de la obra muerta, pero se ha notado que el material pierde resistencia estructural ante la presencia del fuego y por ello su uso en buques de la Royal Navy fue descontinuado hace años. Sin embargo, no existe evidencia de que ello haya contribuido a la pérdida del buque. 

(The Falklands Campaign: The Lessons, HMSO, Londres – diciembre de 1982) 
Sin embargo, sí es importante recalcar que, por cuestiones de ahorro en una economía restringida, la Royal Navy prestó menos atención a la resistencia de sus naves más nuevas que la que había puesto en el pasado. El CIC de los clase ‘Sheffield’, por ejemplo, fue instalado en una posición bastante vulnerable, apenas a 3 cubiertas por debajo del puente y sin mayor protección (en el ataque al Coventry, el CIC fue destruido inmediatamente, reduciendo a cero la capacidad de respuesta ante emergencias y control de daños de la nave). Buques de una generación previa – como los destructores ‘County’ y las fragatas Type 12I/12M – demostraron estar mejor construidos y ser más resistentes ante ataques con bombas y misiles que probaron ser fatales para buques de series más nuevas (Type 42, Type 21). Como ejemplo de ello, el destructor HMS Glamorgan (clase ‘County’) recibió, al igual que el Sheffield, el impacto de un misil Exocet (esta vez, un MM38 lanzado desde una improvisada plataforma con base en tierra), situación que difirió de la del Sheffield en el sentido de que su tripulación fue capaz de sobreponerse, lidiar con el problema y salvar la nave, que resistió satisfactoriamente el ataque. 

La conclusión obvia a todo esto es que no se puede ni se deben realizar concesiones en favor de la habitabilidad o de ahorro económico en detrimento de la protección y capacidad de un buque para resistir y combatir daños. Estas lecciones han sido aplicadas en el diseño de naves de guerra posteriores. 

El conflicto de las Malvinas/Falklands también proveyó importantes lecciones en el campo de los sistemas de detección, comunicaciones y guerra electrónica. Las deficiencias del radar de búsqueda aérea de largo alcance Marconi Type 965 se pusieron de manifiesto durante el conflicto de 1982 cuando aviones Super Étendard argentinos fueron capaces de aproximarse a los buques británicos, alcanzando con un misil Exocet al Sheffield. Una de las razones para ello fue que, a la velocidad de acercamiento del Super Étendard (de aproximadamente 965km/h), la tasa de rotación de la antena (cuya manga era considerable, aun para los estándares de la época) se convierte en un factor crucial, impidiendo actualizaciones (updates) rápidas de blancos moviéndose a alta velocidad: en los 30-40 segundos necesarios para verificar un contacto, el avión se habría acercado unas 6.6 millas (10.6km). Durante al ataque al Coventry, más limitaciones del veterano radar, tales como la falta de estabilización y MTI, contribuyeron a la pérdida de la nave. Las limitaciones del Type 965 eran ampliamente conocidas por los británicos; sin embargo, en su momento se consideraba que, como el radar trabajaba relativamente bien en aguas abiertas – el escenario en el cual los buques de la clase ‘Sheffield’ idealmente debían operar – dichas limitaciones no habrían de significar mayor problema (situación muy distinta a lo que ocurrió cuando el buque pasó a operar en aguas costeras). Los buques de la serie (Batch) 2 (y Batch 3) recibieron el radar Signaal-Marconi Type 1022 – también instalado en los de la serie (Batch) 1 sobrevivientes luego de su refit posterior a 1982 – que en definitiva y como era de esperarse, demostró ser mucho más eficiente y capaz en combate que su predecesor (ver “Los Type 42 en combate – Exeter y Cardiff”). 

De igual forma, los lanzadores de contramedidas y señuelos fueron mejorados: hasta el conflicto del Atlántico Sur, los lanzadores de chaff (piezas rudimentarias y poco sofisticadas de equipo cuyo diseño había cambiado poco desde los años posteriores al fin de la Segunda Guerra Mundial) dependían del ajuste de la espoleta (a fin de controlar la altitud a la cual el cohete debería desplegar la broza) y de la orientación de los lanzadores que debía que hacerse de forma manual en cubierta, lo mismo que el comando de disparo. El desarrollo de chaff denominada ‘de seducción’ y ‘de distracción’ hacia fines de los ’70 y comienzos de los ‘80, controlada por computadora desde el CIC (que toma en consideración factores como velocidad y dirección relativa del viento, posición de la propia nave, rumbo y distancia de la amenaza y tipo de amenaza – a manera de desplegar los señuelos de la manera más efectiva posible y seducir de manera exitosa al buscador de radar del misil enemigo trabajando en una frecuencia específica), permitió no solamente un uso más eficiente de contramedidas sino además la automatización del proceso, al enlazar el sistema de advertencia de radar con los lanzadores (cuestión que ahorra valioso tiempo y permite una respuesta inmediata ante la detección de una amenaza). Los Type 42 fueron entonces equipados con el sistema NATO Sea Gnat, lanzador séxtuple capaz de desplegar cohetes Mk214 (seducción) y Mk216 (distracción). También recibieron contramedidas electrónicas activas (ECM) y mejoras en la suite ESM (UUA2). 

Tanto el ataque al Glasgow como al Coventry (12 y 25 de mayo, respectivamente) demostraron la inviabilidad de intentar suplir las deficiencias de un buque (en el caso del Type 42, de su falta de habilidad para lidiar con amenazas aéreas a corta distancia, tales como un misil rozaolas o un avión volando a muy baja cota) pareándolo con otro (combo 42/22), significando que la supervivencia y el destino de un buque en combate dependía, en definitiva, de la reacción y efectividad de un segundo. En tal sentido, ello puso en evidencia la necesidad de los buques de la clase ‘Sheffield’ (y naves futuras) de contar con sistemas de defensa de punto que los volviera autónomos en este aspecto (como se ha visto, la única defensa antiaérea de corto alcance existente de estos buques en las Malvinas consistió en cañones de puntería manual y armas cortas), razón por la cual fueron equipados con armas de alta cadencia (CIWS – Close-In Weapon Systems) GE/General Dynamics Vulcan Phalanx Mk15 de 20mm. Como paréntesis, es interesante notar que a pesar de que los buques correspondientes a la serie (Batch) 3 o clase ‘Manchester’ fueron alargados unos 7.3 metros en su longitud de casco, fueron incapaces de incorporar un sistema de defensa de punto basado en misiles (como se había pretendido originalmente durante su etapa de diseño: se había proyectado la instalación de una versión VLS – Vertical Launch System – del Sea Wolf (en desarrollo desde 1968), mas los buques fueron ‘recortados’ unos 40 pies o 12 metros en su longitud planeada por un tema de costos), demostrando limitaciones inherentes al diseño poco flexible del Type 42, debiendo conformarse estos, como ya se ha mencionado, con los Phalanx que aún dejan sin cubrir sendos sectores ciegos hacia la popa del buque, deficiencia que estuvo presente desde el inicio y que nunca fue subsanada. Las fragatas Type 23 o clase ‘Duke’, proyectadas a fines de los años ’80, se beneficiaron de estas lecciones: fuera de ser buques verdaderamente multipropósito, mucho más flexibles y adaptables a un abanico más amplio de misiones, incorporaron desde el inicio sistemas de defensa antiaérea y antimisil a fin de protegerse a sí mismas de amenazas como las que enfrentaron los ‘Sheffield’ en el Atlántico Sur. 


Fig.46 – HMS 'York', destructor Type 42 Batch 3, muestra de forma clara varias de las diferencias y mejoras respecto de sus predecesores – nótese, por ejemplo, el radar de búsqueda aérea Signaal-Marconi Type 1022 y los CIWS Vulcan Phalanx 

Mejoras también fueron introducidas en el sistema Sea Dart. El GWS30 Mod 2 se distinguió durante la primera Guerra del Golfo Pérsico en 1991 al interceptar con éxito, lanzado desde el destructor HMS Gloucester (Type 42 Batch 3), un misil Silkworm iraquí – convirtiéndose en el primer misil en interceptar otro misil en combate. Como nota aparte, los errores de software del sistema Sea Wolf de las fragatas Type 22 – que le costaron la vida al Coventry y pusieron en riesgo al Glasgow – fueron subsanados. 

Mucho más podría decirse respecto de las lecciones aprendidas por la Royal Navy luego del conflicto del Atlántico Sur, como por ejemplo aquellas que significaron el retorno del portaaviones como nave fundamentalmente expedicionaria y de proyección de poder naval – y no como nave de escolta ASW – con su fuerza residiendo en la potencia de su ala embarcada (desde 1983, los portaaviones clase ‘Invincible’ embarcaron aviones Harrier de ataque de la RAF en forma regular), pero ello implicaría extenderse demasiado, por lo cual constituirá tema para reflexionar en alguna otra ocasión. 

Bibliografía consultada 
  • FRIEDMAN, Norman / THE NAVAL INSTITUTE GUIDE TO WORLD NAVAL WEAPON SYSTEMS / Naval Institute Press, 2006 / Estados Unidos de América 
  • HARDING, Richard / THE ROYAL NAVY 1930 – 2000 / Frank Cass Publishers, 2005 / Reino Unido 
  • SPELLER, Ian / THE ROYAL NAVY AND MARITIME POWER IN THE TWENTIETH CENTURY / Frank Cass Publishers, 2005 / Reino Unido 
  • BOYCE, George D. / THE FALKLANDS WAR (TWENTIETH CENTURY WARS) / Palgrave Macmillan, 2005 / Reino Unido 
  • FREEDMAN, Lawrence / THE OFFICIAL HISTORY OF THE FALKLANDS CAMPAIGN (VOL 2 – WAR AND DIPLOMACY) / Routledge, Taylor & Francis Group, 2005 / Reino Unido 
  • FINLAN, Alastair / THE ROYAL NAVY IN THE FALKLANDS CONFLICT AND THE GULF WAR / Frank Cass Publishers, 2004 / Reino Unido 
  • SAUNDERS, Stephen / JANE’S FIGHTING SHIPS 2004-2005 / Jane’s Information Group Ltd., 2004 / Reino Unido 
  • ANDERSON, Duncan / THE FALKLANDS WAR (OSPREY ESSENTIAL HISTORIES 015) / Osprey Publishing, 2002 / Reino Unido 
  • CHANT, Christopher / AIR WAR IN THE FALKLANDS 1982 (OSPREY COMBAT AIRCRAFT 28) / Osprey Publishing, 2001 / Reino Unido 
  • MILLER, David & MILLER, Chris / MODERN NAVAL COMBAT / Crescent Books Ltd., 1986 / Estados Unidos de América 
  • MARTINI, Héctor / HISTORIA DE LA AVIACIÓN NAVAL ARGENTINA (TOMO III) / Departamento de Estudios Históricos Navales (Armada Argentina), 1992 / Argentina 
  • BOARD OF INQUIRY – REPORT INTO THE LOSS OF HMS SHEFFIELD / Ministry of Defence (MoD), 1982 / Reino Unido 
  • BOARD OF INQUIRY – REPORT INTO THE LOSS OF HMS COVENTRY / Ministry of Defence (MoD), 1982 / Reino Unido 
  • ENGLISH, Adrian & WATTS Anthony / BATTLE FOR THE FALKLANDS (2) NAVAL FORCES (OSPREY ‘MEN AT ARM’ SERIES) / Osprey Publishing, 1982 / Reino Unido 
  • Revista MALVINAS LA GUERRA AÉREA (FACSÍCULOS 11 y 12) / 1982 / Argentina

Recursos en línea 
  • Naval History (www.naval-history.net) 
  • HMS Coventry D118 (www.hmscoventry.co.uk) 
  • HMS Broadsword Association (www.hmsbroadsword.co.uk) 
  • Fuerza Aérea Argentina (www.fuerzaaerea.mil.ar) 
  • Armada Argentina (www.ara.mil.ar) 
  • Ministry of Defence (www.mod.uk)

Documentales 
  • 1982 MALVINAS: LA GUERRA DESDE EL AIRE / The History Channel Latinoamérica & Creavisión, 2009 / Argentina 
  • SEA OF FIRE / BBC, 2007 / Reino Unido 
  • FALKLANDS WAR: THE UNTOLD STORY / YTV, 1987 / Canadá-Reino Unido 
  • IN THE WAKE OF HMS SHEFFIELD / BBC, 1986 / Reino Unido

Tecnología y Defensa Naval 

Aviación del Ejército: Aviation Légère de L'Armée de Terre (ALAT)

Aviation Légère de L'Armée de Terre (ALAT) 




Bases de la ALAT

  • Aviation Légère de l'Armée de Terre

Tras la desaparición del Pacto de Varsovia, el Aviation Légère de L'Armée de Terre (ALAT) se reorganizó radicalmente en el transcurso de la década de 1990. Estas reorganizaciones vieron el desbande de muchas unidades y el resto reajustado. Entre éstos se encontraban todas las unidades de helicópteros con base en Alemania el apoyo a la primera, tercera y quinta división acorazada y sus bases en Trier-Föhren, Friedrichshafen-Löwenheim (2RHC) y Baden Baden-Oos cerrado. Otras unidades principales que se disolvió en Francia fueron el 7 Regiment Hélicoptères de Combat (7RHC) en Nancy-Essey y una serie de pequeños grupos de helicópteros ligeros (Groupe d'Hélicoptères légères (GHL). El ALAT vio su misión desplazada de una con una misión antitanque importante causado por los enormes ejércitos de tanques soviéticos basados ​​en la antigua República Democrática Alemana a una fuerza aeromóvil flexible, capaz de operar en cualquier lugar del mundo a corto plazo. 



Actualmente, la ALAT está en otra reestructuración que está previsto que esté terminado en 2002. Debido a estas reorganizaciones de la actual estructura exacta de las unidades bajo la ALAT todavía no es completamente claro para nosotros. Todos los activos de combate operativos se organizan actualmente en el aeromóvil 4 Brigada, que se formó en julio de 1999. Tres regimientos están informando a esta brigada es el 1 Regiment Hélicoptères de Combat (1RHC) en Phalsbourg, 3 Regiment Hélicoptères de Combat (3RHC) en Etain-Rouvres y el 5 Regiment Hélicoptères de Combat (5RHC) en Pau. Los regimientos se componen de vuelos especializados en la realización de diversas misiones, como reconocimiento, anti-tanque, escolta y transporte. Normalmente, el primer vuelo es la Escadrille d'Hélicoptères Reconnaissance (EHR), equipado con ocho Gazelles SA341F. Uno o dos Escadrille d'Hélicoptères d'Appui Protection (EHAP) tienen la tarea de extinción de incendios y misiones de lucha contra el helicóptero y equipado con ocho SA341F2 Gazelles Canon u ocho SA342ML1 Gazelle ATAM (Misil Aire-Aire), que está armado con cuatro AATCP corto alcance aire al aire misiles. La Escadrille d'Hélicoptères d'Attaque (EHA) está equipado con diez SA342M Gazelle HOT o con diez actualizado SA342M1 Gazelle Viviane. Como un resultado directo de la disminución de la amenaza del tanque, el número de EHA de ha disminuido de doce en 1989 a sólo cuatro hoy en día. 



Hay 68 NH90 en fin, que sustituirán a los Pumas sin modificar, mientras que los 45 Pumas modificados permanecerán en servicio hasta que todos los NH90 están en servicio. Los SA330s de DOAS serán reemplazados por 7 EC725 para el combate SAR. Todos SA341 Gazelle serán retirados del servicio en los próximos años, mientras que los SA342 Gazelle serán reemplazados por los Tigres. 

Al menos dos escuadrillas están operando nueve SA330Ba helicópteros Puma o Cougar AS532U2. Estas unidades se designan como Escadrille d'Hélicoptères de Manoeuvre. El 1RHC también tiene el control de la Escadrille d'Hélicoptères Horizon (EH HOR). La EH HOR opera un pequeño número de AS532 del equipado con el radar de vigilancia HORIZON Battlefield. Es de destacar que la 1RHC se transformará en una inteligencia especializada reunión regimiento. Además de la EH HOR, en 2002 el regimiento tendrá dos vuelos Puma, un Viviane vuelo Gazelle, un Canon vuelo Gazelle y posiblemente algún Gazelle de ATAM. La unidad va a perder sus tres vuelos de helicópteros de ataque con su SA342M de 30 en el proceso. 



Otra parte principal de la ALAT es la aplicación d'Ecole de l'Aviation Légère de l'Armée de Terre (ALAT EA), que es responsable de la formación de base de todos los pilotos de los helicópteros militares franceses. Además también los estudiantes de algunos países extranjeros amigos están siendo entrenados con el EA ALAT. La formación se distribuye en dos lugares son Dax y Le Luc. La formación básica se realiza en Dax en el SA341F. Los pilotos ALAT luego proceder a Le Luc para su formación táctica. 



Existen otras unidades para apoyar comandos adicionales en el ejército francés. La Escadrille d' Hélicoptères de 'l Armée de Terre (EHADT) es un vuelo exclusivo VIP con sede en Compiègne operando el AS555 Fennec. La Escadrille d'Haute Montagne se basa en Gap en apoyo a la 27a Brigada d'Infanterie Montagne. Las unidades Alouette III de han sido sustituidos por un número de Gazelles. Otra unidad llamada Détachement ALAT d'Opérations Spéciales (DAOS) tiene dos escuadrillas. Según informes, uno de EHM está equipado con Puma y Cougar. A EHAP funciona el Gazelle Canon y el Gazelle ATAM. El Groupement Aéromobile de la Sección Técnica de 'l Armée de Terre (GAMSTAT) en Valencia es la unidad de prueba y evaluación de la ALAT. La unidad está participando actualmente en el NH90, Cougar HORIZON y helicóptero de ataque Tigre. La Escadrille Avions de l' Armée de Terre (EAAT) es la unidad de ala fija de la ALAT y equipadas con una serie de TBM700 y de Cessna F406 Caravan II. El Etablissement Réserve Générale de Matériel ALAT (ERGM) en Montauban está operando dos Pilatus PC6 Turbo Porter en apoyo del centro logístico Montauban. Varios destacamentos apoyan las unidades del ejército francés basados ​​en el extranjero que opera principalmente Puma y Gazelle. 



El primer vuelo del helicóptero de transporte SA330B se llevó a cabo en 1969. Años después, el Puma sigue siendo la columna vertebral de la fuerza de helicópteros ALAT, transportando soldados y su equipamiento a todos los puntos calientes. 

No es el más numerosos helicóptero utilizado por el ALAT. Hay sólo 17 de estos helicopers formación AS555UN basado en la École d'Aplicación l'ALAT en Le Luc-Le Cannet y eso es todo. 


Tres versiones del helicóptero Gazelle están en uso con la ALAT. El SA342M está equipado con bañera de misiles anti-tanque, el SA342L1 está equipado con aire-aire misiles Mistral y el SA341F es un helicóptero de coordinación general, a veces armada con un cañón. 

Scramble

viernes, 28 de junio de 2013

Humor: El Vuelo (en cordobés)

Humor: El Viaje

Un piloto muy culiao se embarca en un vuelo totalmente chupadazo y fumadazo. Ni se acuerda de su rango. El avión cae y se hace bosta contra el suelo. Luego lo juzgan, no le perdonan una, ni él tampoco deja de darle a cualquiera que se le cruce. Les da... "en ese orden".

Una versión cómica doblada de El Vuelo (Flight) actuada por Denzel Washington sobre la vida de un piloto muy corrupto que logra salvar a casi todo el pasaje de un vuelo en un accidente y luego es juzgado. Un doblaje muy ocurrente, con fuertísima tonada cordobesa (Córdoba, Argentina). Para reírse un rato.




Patrulleras: clase Hayabusa (Japón)

Barco de patrulla de misiles guiados clase Hayabusa, Japón 



Patrullera Hayabusa de la clase Hayabusa (PG 824) y Umitaka (PG 828) en el muelle. 

Datos clave 
Tripulación: 21 
Constructor: Mitsubishi Heavy Industries (MHI) 
Operador: Japan Maritime Fuerza de Auto-Defensa (JMSDF) 
Velocidad máxima: 44 nudos 
Largo: 50m 
Ancho: 8.4m 
Profundidad: 4,2 m 


El casco largo y estrecho del recipiente está hecho de acero de alta calidad. 


Las patrulleras de misiles guiados clase Hayabusa fueron construidas por Mitsubishi Heavy Industries (MHI) de la Organización Marítima de la Fuerza de Auto-Defensa (JMSDF) de Japón. Seis barcos fueron comisionados para la JMSDF entre 2002 y 2004. 
La clase Hayabusa ha sido desarrollado como un reemplazo para los hidroplanos misiles de la clase PG 1-go. Los dos primeros barcos fueron aprobados en el presupuesto del año fiscal 1999, el segundo y tercer pares del presupuestos bajo año fiscal 2000 y año fiscal 2001 respectivamente. 
La quilla de la embarcación principal de la clase, Hayabusa (PG 824), se estableció en la MHI Shimonoseki Shipyard & Machinery Works en noviembre de 2000. Fue lanzado en junio de 2001 y puesta en servicio en marzo de 2002. Wakataka (PG 825) se estableció en noviembre de 2000, puso en marcha en septiembre de 2001 y puesta en servicio en marzo de 2002. Otaka (826) se colocó en octubre de 2001, puso en marcha en mayo de 2002 y puesta en servicio en marzo de 2003. 
Kumataka (PG 827) se estableció en octubre de 2001, puso en marcha en agosto de 2002 y puesta en servicio en marzo de 2003. Umitaka (PG 828) se estableció en diciembre de 2002, puso en marcha en mayo de 2003 y puesta en servicio en marzo de 2004. La nave de final en la clase, Shiritaka (PG 829), se colocó en diciembre de 2002, puso en marcha en agosto de 2003 y puesta en servicio en marzo de 2004. 



Diseño y características 
Los problemas en la PG 1 barcos fueron corregidos en la clase de Hayabusa. El desplazamiento normal se incrementó a cuatro veces el de la clase PG 50t 1-go para mejorar la navegabilidad. La alta velocidad de la embarcación aumenta la capacidad de interceptación. Un diseño de casco único se optó por mejorar la resistencia del casco y la navegabilidad. El casco largo y estrecho está hecho de acero de alta calidad. La parte inferior en forma de V proporciona estabilidad a velocidades más altas. 
La clase Hayabusa ofrece algunas características de furtividad. La superestructura estaba pendiente para reducir la reflexión de radar directa. El mástil del trípode y el cañón de 76mm incorporan características de furtividad. La Hayabusa tiene una longitud de 50 metros, una anchura de 8,4 m, una profundidad de 4,2 m y un calado de 1,7 m. El desplazamiento de la embarcación es de 200t. La nave complementa una tripulación de 21. Puede transportar un barco inflable rígido los 6.3m (RIB) para tareas de embarque e inspección. 

Mando y control 
El Hayabusa está equipado con Fuerza Operacional Marítimo (MOF) y el Sistema OYQ CDS-8 (Sistema de Datos de Combate). El MOF es el sistema de comando de teclado comúnmente instalados en la flota MSDF. Es interoperable con otras unidades JMSDF. El barco recibe las órdenes de ataque y otra información de la sede de la Regional Distrito a través de la comunicación por satélite. 



Barco lanzamisiles japonesa Otaka (826) de la clase Hayabusa de la Fuerza Marítima de Autodefensa en el puerto de Yokosuka, Japón. 


Sistemas de armas 
El Hayabusa está armado con dos lanzadores dobles misiles buque-buque (SSM-1B) de Tipo 90 instalados en la popa y en la cubierta de proa. El SSM-1B puede transportar una ojiva de 260 kg para un alcance máximo de 200 kilómetros. La principal arma montado delante es un arma rápida de doble propósito de 76mm súper Otobreda. Se puede disparar a 120 rpm para un alcance máximo de 30.000 m. Dos ametralladoras de 12,7 mm M2 también están montados en la parte posterior del puente.

Sensores / radares 
El conjunto de sensores consiste en un radar de búsqueda de superficie CCI OPS-18 y una ayuda del radar CCI OPS-20 que opera en la banda I (de 8 a 10 GHz). 

Contramedidas 
El Hayabusa se instala con dos lanzacohetes de seis tiros Mk 137 para contramedidas de chaff fuera de borda MK 36 Super Rapid Bloom y el sistema de lanzamiento de señuelos. El sistema se puede poner en marcha una serie de cartuchos de paja para engañar a los misiles entrantes. Otros equipos incluyen un interceptor NOLR-9B y OAX-2 de seguimiento y vigilancia. 

Propulsión 
La clase Hayabusa es alimentado por el sistema de propulsión de la turbina de gas de 3 ejes. Se compone de tres motores de turbina de gas LM500-G07 que conducen tres chorros de agua. Los motores de turbina de gas fueron construidas por Ishikawajima Harima-(ahora IHI Corporation) bajo licencia de General Electric. 
Cada motor está conectado de forma independiente a la boquilla de un chorro de agua. El sistema de propulsión desarrollo de una potencia total de 16.200 shp que proporciona una velocidad máxima de 44 nudos. 


Una vista de lado largo del Kumataka (PG-827). 

Naval Technology