jueves, 26 de diciembre de 2013

Revolución Libertadora: Los inicios

Revolución Libertadora: Los prolegómenos





El clima de violencia estaba instalado en la Argentina, incitado por el oficialismo desde su llegada al poder.
En 1951, ante las inminentes elecciones del 11 de noviembre, un grupo de altos jefes militares encabezados por el general Benjamín Menéndez, comenzó a intrigar secretamente para derrocar a Perón. Sin embargo, como las idas y vueltas y los conciliábulos se hicieron extremadamente largos, algunos de ellos comenzaron a impacientares.
Entre los conspiradores se encontraban los generales Eduardo Lonardi, Pedro Eugenio Aramburu y Eneas Colombo, los coroneles Juan Carlos Lorio y Arturo Ossorio Arana y los tenientes coroneles Bernardino Labayru, Luis Leguizamón Martínez y Emilio Bonnecarrere.
El nombramiento del general Aramburu como agregado militar de la embajada argentina en Brasil inquietó notablemente los ánimos e hizo creer a los conjurados que las autoridades se habían percatado de algo. Por esa razón, a partir de ese momento, los hechos se precipitaron.


Perón pronuncia un discurso

El general Menéndez, por entonces retirado, decidió actuar de inmediato y por esa razón, en la madrugada del 28 de septiembre, después de sincronizar movimientos con sus pares de la Marina y la Fuerza Aérea, se apersonó vestido con su uniforme de combate en la Escuela de Caballería de Campo de Mayo (a la que pertenecía) y contactó a los capitanes y tenientes que lo seguían, entre ellos Julio Alsogaray y Alejandro Agustín Lanusse, para concentrarlos en el Regimiento 8 de Caballería con la misión de tomar la unidad.
Posesionados de la misma, los alzados abordaron los blindados y los ubicaron frente al Casino de Oficiales, iniciando un violento tiroteo que acabó con la vida del cabo Miguel Farina, perteneciente a las fuerzas leales al gobierno, y dejó herido al capitán Rómulo Félix Menéndez, hijo del jefe rebelde.
Eran las 07.25 cuando el coronel Dalmiro Videla Balaguer, director del Liceo Militar, llamó a sus superiores para advertirles que en el cercano regimiento acontecían hechos irregulares. En vista de ello, el general Franklin Lucero, ministro de Ejército, adoptó una serie de medidas urgentes tendientes a neutralizar el movimiento.



Frente del Jockey Club sobre la calle Florida


Al frente de tres tanques, cinco semiorugas y varios camiones con tropas a bordo, Menéndez partió de Campo de Mayo en dirección a la Base Aérea de El Palomar, que para ese entonces había sido copada por los brigadieres Guillermo Zinny y Samuel Guaycochea.
Mientras eso acontecía en el noroeste del Gran Buenos Aires, desde Villa Reynolds, provincia de San Luis, despegaron aviones caza de la V Brigada Aérea, que a las órdenes del vicecomodoro Jorge Rojas Silveyra, debían volar hacia Buenos Aires para atacar a a las fuerzas rebeldes. Para entonces, la Base Aeronaval de Punta Indio se hallaba en poder del capitán de navío Vicente Baroja quien, de acuerdo a planes preestablecidos, abordó un monoplaza AT-6 y seguido por el capitán de corbeta Siro de Martini despegó hacia el Aeroparque con la misión de impedir que Perón se fugara de la capital.
Al llegar a destino, se produjo una breve escaramuza cuando los aviadores rebeldes vieron que en la pista principal un transporte De Havilland Dove iniciaba su carreteo con la aparente intención de huir.
Creyendo que a bordo se encontraba el primer mandatario, Baroja se dirigió resueltamente hacia él para arrojarle sus dos bombas de 50 kilogramos, sin alcanzarlo. Detrás suyo, Siro de Martini abrió fuego con sus cañones perforando la cola del aparato pero el mismo, hábilmente piloteado por el comodoro Luis A. Lapuente, levantó vuelo y a muy baja altura, se escabulló por entre los edificios de Barrio Norte, en dirección sudoeste.
Para entonces, los accesos a la Capital Federal se hallaban bloqueados con camiones, ómnibus y barricadas en tanto el Ejército había montado puestos de vigilancia en diferentes puntos de la ciudad.
A esa altura Menéndez comprendió que las unidades que debían plegarse al alzamiento se habían mantenido quietas y que la asonada había fracasado pero, decidido a todo, se dirigió hacia Buenos Aires para acabar con Perón o morir en el intento. Sin embargo, a la altura de San Isidro, su columna se detuvo, falta de combustible y por esa razón, no le quedó más remedio que capitular y entregarse a las autoridades, a sabiendas de que podía ser fusilado. La revolución había fracasado.
Cuando la noticia se difundió, muchos de los complotados escapaban a bordo de un transporte de la Fuerza Aérea desde El Palomar, con destino a Uruguay, seguido por Baroja y De Martín en sus respectivos aviones. Finalizaba de esa manera el primer alzamiento contra el régimen peronista, fallido preludio de lo que iba a suceder cuatro años después.
Al día siguiente, el mismo presidente, en un agresivo discurso pronunciado ante una rugiente multitud, anunció desde los balcones de la Casa de Gobierno, el establecimiento del estado de guerra interna en todo el ámbito de la Nación y el fusilamiento de los jefes alzados, amenaza que finalmente, no cumplió.


Gral. Benjamín Menéndez

Benjamín Menéndez, un bravo general de Caballería que recién egresado del Colegio Militar, había tomado parte activa en la conquista del Chaco, fue enviado al penal de Tierra del Fuego, donde quedó detenido junto a sus seguidores. De acuerdo a algunas versiones, Eva Perón aconsejó a su marido insistentemente que pasase a los rebeldes por las armas pero aquel desestimó el pedido por considerarlo poco prudente.
Lamentablemente, la violencia no terminó allí.
El 15 de abril de 1953 Perón pronunciaba otro de sus encendidos discursos frente a la masa que se había reunido en Plaza de Mayo cuando estallaron tres artefactos de alto poder que mataron a seis manifestantes y dejaron a otros noventa y tres con heridas de distinta consideración.
Ante la gravedad de esos hechos, el mandatario volvió a azuzar a la turba vociferando frases tan violentas que aquella, enardecida, se encaminó en gran número hacia diferentes puntos de la ciudad para atacar las sedes de los partidos opositores. Ese día, fueron incendiadas la Casa del Pueblo, baluarte del Partido Socialista, sobre avenida Rivadavia; la Casa Radical, que se alzaba en la calle Tucumán; la central del Partido Demócrata (Conservador), en Rodríguez Peña 525, y finalmente, la sede del aristocrático Jockey Club, sobre la calle Florida, que ardió por espacio de dos días.
Entre las obras de arte que se perdieron en aquella luctuosa jornada figuran la biblioteca de la Casa del Pueblo que incluía colecciones donadas por el mismísimo Juan B. Justo; objetos de valor histórico del Partido Demócrata Nacional y los tesoros del Jockey Club entre los que destacaban la Diana Cazadora de Falgueriés, adquirida especialmente para esa institución por Aristóbulo del Valle (se la hizo rodar por las escaleras del salón principal), numerosos cuadros, entre ellos el de su fundador, el Dr. Carlos Pellegrini, obra de Bonnet que databa de 1908 y parte de su gran biblioteca, una de las más completas de la ciudad de Buenos Aires.
Nada hicieron los bomberos para apagar los incendios, salvo resguardar los edificios vecinos. Tampoco hizo nada la policía ya que los vándalos actuaron con total impunidad, destruyendo todo lo que encontraron a su paso.
Al día siguiente, el Dr. Manuel V. Ordóñez, que había viajado expresamente a Roma para referir lo que estaba ocurriendo en la Argentina, fue recibido por el Papa Pío XII quien, lo primero que le dijo al verlo fue:

-¿Sabe usted lo que ha ocurrido?
-No, Su Santidad – respondió Ordóñez.
-Han incendiado la biblioteca del Jockey Club – respondió consternado el Pontífice agregando – Estoy profundamente apesadumbrado. Se han perdido obras de incalculable valor allí.

Lo que el Santo Padre y buena parte de la opinión pública ignoraban era que, para fortuna de la posteridad, una parte de aquella colección y varios volúmenes de la biblioteca habían sido rescatados de las llamas y puestos a resguardo.
A partir de entonces, las frases de Perón se tornaron cada vez más violentas y brutales: “¡Yo les pido que no quemen más ni hagan nada más de esas cosas porque cuando haya que quemar, voy a salir a la cabeza de ustedes a quemar! ¡Entonces, si fuera necesario, la historia recordará la más grande hoguera que haya encendido la humanidad hasta nuestros días!” (7 de mayo de 1953); “¡Me piden que de leña…¿por qué no empiezan a darla ustedes?!”;“¡Vamos a tener que volver a la época de andar con alambre de fardo en el bolsillo!” o “¡Por cada uno de los nuestros que caiga, caerán cinco de ellos!”.
Ese era el ambiente que imperaba en Buenos Aires cuando se desataron los sucesos que a continuación vamos a relatar. Expresiones tan irresponsables no hicieron más que precipitar los hechos y llevar a la sociedad argentina al caos y el enfrentamiento civil. El régimen se debilitaba lentamente y la tensión comenzaba a adueñarse de la sociedad.


Esta antigua fotografía muestra el accionar de los bomberos sobre la sede incendiada del Jockey Club

La Casa del Pueblo - Sede del Partido Socialista después del ataque

miércoles, 25 de diciembre de 2013

Siria: Rifle antimaterial casero

Enorme rifle antitanque

Los rebeldes sirios lograron terrible rifle a cerrojo antitanque/antipersonal. No se sabe exactamente qué calibre opera (puede ser 12.7mm o más bien 20mm). El freno de boca es monumental.

Rusia: La potencia de las alas rotativas rusas

Caimanes, Tiburones, Vacas y Cocodrilos Voladores


Sí, los tanques y los cazadores nocturnos vuelan también. Todos estos animales vuelan sobre el 344to Centro de Entrenamiento de Combate y Entrenamiento de Transición del Estado Mayor del Aire en Torzhok, Región de Tver.


“Palanca de Emergencia – Tire de la manija”.
El simulador de Mi-8MTB-5 en Torzhok es bastante inusual. La cabina del simulador está montado en la plataforma estacionaria pero no estropea la impresión visual general.


La visualización es tan realista que durante el "vuelo" se siente todos los movimientos y movimientos de balanceo.


Mil Mi-35



English Russia

Brasil: El Gripen en el esquema defensivo brasileño


La compra de los Gripen y la doctrina militar de defensa

Mauro Santayana


(JB ) - Después de 13 años, el gobierno brasileño dio finalmente su acuerdo para la compra de 36 nuevos cazas para la Fuerza Aérea Brasileña, el sueco Gripen NG, optando, en lugar del Rafale de la francesa Dassault y el F-18 de la Boeing norteamericana. El precio bajo, por unidad y por hora de vuelo, la transferencia de tecnología y la cuestión de política fueron factores decisivos para la elección.

Puesto que todavía no está completamente desarrollado, el caza sueco-brasileño será diseñado conjuntamente por técnicos y empresas de ambas naciones, como Akaer brasileña - que ya participó en el proyecto - y Embraer y la propia Saab. La creación inicial de alrededor de 2.000 puestos de trabajo en Sao Bernardo do Campo, São Paulo, donde se instalaría se proporciona el conjunto de accionamiento. El paquete financiero - cada avión le costará unos 125 millones de dólares - fue también el más atractivo. Brasil sólo ha de comenzar a pagar la aeronave después de recibir la última de 36 aviones en el comienzo de la próxima década.

Para Brasil, el Gripen NG es un nuevo nivel, desde el punto de vista de la industria aeronáutica militar, muy por encima del ataque ligero turbohélice y entrenamiento avanzado Super Tucano de Embraer. Pero - como bien recordó el Ministro Celso Amorim, dijo que el país seguirá negociando un caza de quinta generación - no va a resolver todos los problemas del país en esta área.

Como Brasil será el propietario del proyecto, con el tiempo, puede venderlo a otros países de la UNASUR y hasta los países BRIC, como es el caso de los sudafricanos, que ya tienen más edad Gripen en su fuerza aérea. Ellos están desarrollando conjuntamente los misiles A-Darter, que puede armar este avión.

Lo importante es que el Gripen NG puede hacer estratégica y económicamente, el máximo retorno de la inversión prevista.

Ni que decir tiene, el Engesa AMX, la suspensión de la fabricación de artefactos explosivos fue y puede ser perjudicial para el Brasil, tanto en el desmantelamiento de la estructura establecida para su fabricación y en la pérdida del conocimiento y la desmovilización del personal técnico involucrado.

La revisión de lo que se está haciendo en el país en este momento, no está racionalmente gastar cientos de millones de dólares para construir un astillero para cuatro submarinos. La manera correcta de iniciar, a partir de ahí, a la fabricación de al menos un nuevo buque de guerra de un año para mantener activo y en funcionamiento todos los eslabones de la cadena de producción. Lo mismo ocurre con tanques, helicópteros, misiles, artillería, avanzando, con cada paso en la nacionalización de los componentes, para adquirir plena autonomía desde el exterior.

Tenemos que aprobar órdenes de gobierno para garantizar la suficiente para mantener funcionando todas las líneas de producción de la demanda, asegurando que con el tiempo se puede acelerar en caso de conflicto.

Por esta razón, el precio, el consumo de combustible y la transferencia garantizada de la tecnología teniendo en cuenta, el Gripen no debería estar restringido solamente al pequeño número de 36 aviones. Su fabricación debe durar al menos diez años, a un ritmo de 12 aviones por año hasta completar - asegurado las mejoras posibles y las economías de escala naturales - Un mínimo de 120 combatientes, aún insuficientes para asegurar la vigilancia de las fronteras y condición de veterano a nuestra situación geopolítica.

El vector principal para la proyección estratégica de Brasil fuera del contexto geográfico de América del Sur, teniendo en cuenta la competencia y la competencia entre los EE.UU., Europa y los países BRIC en los próximos años, pero no será el Gripen caza- bombardeo de la quinta generación T-50 PAK -FA, que se encuentra actualmente en desarrollo por parte de Rusia y la India, y para las cuales Brasil ha sido oficialmente invitado a participar.

Así podríamos establecer una red de accionamiento de aire progresiva, complejo y amplio, que cubre nuestras necesidades de defensa y nuestra proyección del poder militar, a partir de un anillo exterior, el uso de satélites, aviones no tripulados, UAV y Super Tucanos para la vigilancia de nuestras fronteras. Después vendría una red de bases y escuadrones de Gripen NG BR, dispuestos estratégicamente para proteger a nuestras grandes ciudades, la costa y la Amazonía Azul, y, en caso de amenaza grave, un número inicial menor de aviones más avanzados y ofensivo tales como el Sukhoi Su-35, y eventualmente, el T-50, potencialmente adaptada a la manipulación, control y mantenimiento de los sistemas de FAB.

La simple elección de Gripen, a partir de las partes occidentales, no puede ser visto como un factor limitante para la cooperación de Brasil con otros países, que contribuyen único factor para consolidar nuestra dependencia, en la defensa de los países de Europa y los propios Estados Unidos.

El Occidente no tiene ningún compromiso estratégico con nosotros, y mucho menos en el mediano y largo plazo. Nunca se sabe con cualquier país occidental, en caso de cualquier problema con uno de ellos. Véase el caso de Argentina, totalmente abandonado por sus proveedores de armas en la guerra de Malvinas.


martes, 24 de diciembre de 2013

FAA: Albión se preocupa por el viejo F1M pero no por el moderno Kfir B60


Fuerza Aérea Argentina: ¿Mirage F-1 o Kfir, cambiar para que nada cambie?

Por Luis Piñeiro, corresponsal en Argentina

(defensa.com) Concluimos el año sin resolver aún la adquisición de un aparato de combate para sustituir a la antigua flota de Mirage de la VI Brigada Aérea, que ya está al final de su vida operativa. Las negociaciones con el Gobierno español para la compra de los beneméritos Mirage F-1 que el Ejército del Aire retiró de servicio activo meses atrás, tras varias décadas de amplia operación, motivó la aireada réplica del gobierno británico, suponiendo que estas nobles pero desfasadas aeronaves pueden causar un desequilibrio táctico sobre las gélidas aguas del Atlántico Sur, poniendo en peligro a los sofisticados jets de la guarnición inglesa.


Esta casi humorística situación de un gigante preocupándose por un pigmeo, lo sería si no habláramos de armas, pero extrañamente no se reproduce cuando llega una oferta israelí por los aviones Kfir, arrumbados en el cálido desierto y que con una modernización adecuada podría ser un sistema interesante, dotado de importante aviónica y armamento con lo que repotenciaría sus prestaciones.

Para la pérfida Albión, los Kfir no son una amenaza para el geoequilibrio y sí lo son los F-1 de los setenta. ¿O será que saben que estos medios –tan antiguos sus fuselajes como los ibéricos Mirages- tienen un propulsor, el J-79 de factura estadounidense y en vista de los nefastos resultados concretos del uso de los motores J-52 de los jets A-4AR argentinos, podrían administrar el suministro de partes y repuestos hacia la Fuerza Aérea Argentina y controlar a los díscolos aviadores nacionales?



Sin lugar a dudas el país sufre un aislamiento, ejemplificado en sutiles presiones que se hacen palpables en cuanto se intenta obtener algún equipamiento de cierta entidad o sofisticación. Aunque el gobierno nacional se destaca por su pésimo manejo real de la cartera de la Defensa, prueba de ello la baja disponibilidad de los medios en la FAA, los problemas de la Flota de Mar y la antigüedad de los equipos del Ejército, debemos sumar la mentalidad castrense que sigue con su pensamiento en las luces de París o la intensidad de New York, con el clásico colonialismo mental que tanto daño nos ha producido.

Todavía la observación de las torres doradas de Moscú o el dinamismo chino en materia bélica choca con las mentes uniformadas, como si no hubiéramos aprendido nada de la ya lejana contienda en el sur del continente, sobre quién es quién en materia diplomática y de qué es la OTAN.

Los días pasan y la situación se enrarece, los intereses de uno y otro se potencian, mostrando las falencias del modelo competidor y alzando las virtudes propias, ni que estuviéramos frente al Contrato del Siglo europeo, donde saliera vencedor el F-16 o el actual Programa FX brasileño.

Para colmo, Francia se dedica a dificultar la operación, argumentando que son los únicos que pueden garantizar un servicio postventa de los aparatos galos, qué novedad… Mientras tanto los pilotos argentinos siguen esperando máquinas con las cuales puedan entrar en el siglo XXI y cumplir con los requerimientos nacionales de defensa del espacio aéreo.

Cuenta la leyenda que, años atrás, el extinto presidente Néstor Kirchner volaba hacia la patagónica ciudad de Río Gallegos –como lo hacía habitualmente- en el avión presidencial. Su plácido vuelo fue interrumpido por la visión de un par de aviones de combate que se colocaban a su costado. Suponiendo que eran los comúnmente temerarios aviadores de la FAA, Kirchner blasfemó contra estos pilotos, aunque su molestia se transformó en cuanto le avisaron que las amenazadoras cruces de Malta que exhibían en sus timones estos jets, eran las insignias del escuadrón inglés de Malvinas. Los Tornados -estos eran los aparatos- habían osado vulnerar el espacio aéreo nacional y formar a los costados del Boeing 757 del primer mandatario.

Obviamente, la aeronáutica nacional estaba y está ausente de los cielos propios ante las penurias que vive. Cuesta creer que tras años de progreso económico, no hubiera voluntad política que permitiera un reequipamiento, aunque fuera modesto. Siempre que se intenta hablar sobre aquellos medios decisivos, léase aviones de combate, medios anfibios o submarinos, se produce un ominoso silencio… como si dieran la razón a aquellos que denuncian acuerdos espurios sobre limitación de medios ofensivos, todo para no molestar a los usurpadores.

Hoy, nuestra discusión es si compramos un puñado de baqueteados aviones ibéricos o un grupo de deltas sacados del desierto, con el fantasma de futuros problemas en la provisión de repuestos y la ya presente inferioridad tecnológica. Parece que no podemos escapar de la mediocridad, la misma se ha hecho carne en nosotros y nos tutela.

¿Qué pasará, qué llegará, llegará algo? Interrogantes que al parecer no tienen una contestación segura en el día de hoy… y tampoco mañana.

Sudán del Sur: Un estado fallido que estalla


Sudán del Sur: el estado en que se vino abajo en una semana
Informes de testigos desde Juba, donde se ha producido un descenso a una brutal y repentina guerra civil

Daniel Howden en Juba
The Guardian


Un pastor de ganado joven de la tribu Dinka lleva su rifle AK 47, cerca de Rumbek, capital del Estado de Lagos, en el centro de Sudán del Sur. Fotografía: Goran Tomasevic / Reuters

Hace una semana, Simon K, un estudiante de 20 años que vive en la capital de Sudán del Sur, fue detenido por hombres con uniformes militares. Se le preguntó una pregunta que ha adquirido una importancia mortal en el país más nuevo del mundo en los últimos siete días : incholdi - "¿Cuál es tu nombre?" en Dinka, el lenguaje del presidente del país y de su grupo étnico más grande.

Aquellos que, como Simon, fueron incapaces de responder, se arriesgó a ser identificados como Nuer, el grupo étnico de la ex vicepresidente ahora líder de la oposición armada y frente a la peor parte de lo que los iniciados se describen como más reciente guerra civil en el mundo.

Simon K fue llevado a una comisaría de policía en el distrito del mercado Gudele de Juba, donde desfilaron varios cadáveres y fue encerrado en una habitación con otros hombres jóvenes, todos Nuer. "Contamos con nosotros mismos y descubrimos que éramos 252", dijo a The Guardian. "Entonces pusieron armas a través de las ventanas y comenzaron a dispararnos".

La masacre continuó durante dos días con los soldados regresando a intervalos para disparar de nuevo si veían algún signo de vida. Simon fue uno de 12 hombres en sobrevivir al asalto, cubriendo a sí mismos en los cuerpos de los muertos y moribundos.


Una familia desplazada de Sudán del Sur tribu Nuer, que huyó de su casa por temor a las matanzas étnicas por el gobierno liderado por Dinka, erige un refugio improvisado dentro de la Misión de las Naciones Unidas en el centro de Sudán en Jabel. Fotografía: James Akena / Reuters

Simon habló desde el interior del recinto de la ONU que se ha convertido en un santuario de emergencia a los Nuer que queda en la capital. Sentado en un colchón sucio por el lado de un camino de tierra, con vendas que cubren las heridas de bala en el estómago y las piernas, recordó : "Fue horrible, porque para sobrevivir tuve que taparme con los cuerpos de los muertos, y durante el dos días, los cuerpos comenzaron a oler muy mal."

En el espacio de siete días de desesperación, la base de la ONU se ha transformado de un centro logístico para una operación de ayuda en un santuario escuálida para más de 10.000 personas. En medio de la confusión de cuerpos y pertenencias, una señal hecha a mano cuelga de los rollos de alambre de espino. "El Señor es nuestra mejor defensa ", se lee.

Pero no hay ninguna señal aquí de la defensa del señor, como el país que obtuvo su independencia en 2011, con gran fanfarria y el apoyo internacional se ha desprendido en el espacio de una semana.

El último episodio de violencia comenzó después de una pelea entre los soldados Dinka y Nuer de la guardia presidencial el 15 de diciembre, encendiendo una lucha por el poder político a fuego lento en el partido en el gobierno de Sudán del Sur y provocando matanzas étnicas generalizadas.

El residente Juba Gatluak Kual, que tiene heridas de bala en ambos brazos y un pie protésico de la batalla de 20 años que se separó de Sudán y ha creado un sur independiente hace dos años bajo el presidente Salva Kiir, dice que el país está de nuevo en guerra.


El personal de la Misión de las Naciones Unidas en Sudán cuidan a la gente del sur de Sudán desplazada por los combates en Jabel, en las afueras de Juba, capital de Sudán del Sur. Fotografía: James Akena / Reuters

"Aquí todo el mundo ha perdido a alguien [en la última semana]", dijo, señalando a lo largo de la multitud con el dedo que se rompió hace cinco días el desarme de un miliciano Dinka que estaba tratando de matarlo. "Hemos visto que nuestras hijas, nuestros hermanos, nuestras madres asesinadas simplemente porque son Nuer. Para mí esto ya es una guerra civil."

Las reverberaciones de la ola de asesinatos selectivos que comenzaron en la capital en ciernes se hacen sentir en todo el país, donde han provocado ataques de venganza y atrocidades de imitación. Los generales que se han amotinado se han apoderado de la capital del estado más grande de Sudán del Sur, Jonglei, y su principal área productora de petróleo, el estado de Unity. El ex vicepresidente Riek Machar dio su apoyo a la oposición armada y ahora es su líder de facto. El domingo, un carro de combate a gran escala se estaba librando entre las facciones opuestas en el ejército del Sur en los confines occidentales de la rica en petróleo, pantanosa Alto Nilo.

"Hubiera sido difícil hace una semana imaginar que las cosas desentrañar a este punto", dijo el jefe de la ONU de los asuntos humanitarios en Sudán del Sur, Toby Lanzer.

La lucha se ha cobrado ya miles, si no decenas de miles, de vidas de civiles. Cientos de miles de sudaneses del sur han huido a la selva o devuelto a pueblos de origen, según la ONU. La cifra oficial de 500, lo que corresponde con el número de muertos en un solo hospital de Juba hace seis días está siendo despedido por los expertos. Un trabajador de la ayuda del veterano, que ha estado evaluando la magnitud y la naturaleza de los asesinatos de fuentes en todo el país, dijo que la cifra real era "en las decenas de miles".

El lunes, Machar afirmó que sus fuerzas habían ganado el control de todos los principales campos de petróleo en Unity y Alto Nilo. El ministro de Información, Michael Makuei, dijo a Reuters que era "una ilusión".

En Juba, Gatwech T recuerda cómo, el pasado martes, corrió por su vida cuando los soldados atacaron su zona de origen de Hai Referendum. Algunos de los hombres corrió más aprisa que los más jóvenes, que fueron capturados por los uniformados. "Tomaron a los chicos y yo me detuve a mirar. Los contaron y había 21 niños, tan jóvenes como él", dijo, señalando a una de 15 años de edad. "Les ataron las manos a la espalda y los mataron."

Yien K, 28, estaba en su casa el pasado lunes por la noche alrededor de las 22:00 en la zona Jabarona en las afueras de la capital, cuando oyó disparos. Como se acercaban decidió esconderse en casa de su hermano. Había cinco de ellos dentro de la estructura simple: su hermano, la mujer de su hermano, de un año de edad, sobrina y otra niña de seis años de edad, un primo. Yien recuerda el momento justo después de la medianoche, cuando las huellas de un tanque atravesaron las paredes y aplastó al bebé de un año de edad. "Los tanques llegaron y pasaron por encima de la casa", dijo. "Los hombres escaparon, pero la mujer y las niñas fueron asesinadas."

A diferencia de algunos de los barrios de Juba, que han dividido a lo largo de líneas étnicas, Jabarona es una zona mixta y Yien cree que los operadores de tanques tenían guías mostrándoles donde la gente Nuer estaban viviendo.

En barrios como Mangaten, Hai Referéndum, Area 107 y Eden City, ahora es fácil decir donde la comunidad Nuer vivió. A mitad de la calle principal del mercado de Mangaten, un complejo volado de polvo de tiendas tipo cabaña de chapa y puestos desvencijadas, el bullicio y la actividad se detuvo. La mayoría de las empresas han sido saqueadas, sus ásperos estantes despojados de todo, los puestos se han quemado hasta los cimientos. Cruzando hacia Hai Referendum, uno de los asentamientos de densidad más altos Juba, es ahora un pueblo fantasma de casas abandonadas.

El sábado, unos saqueadores relajados podían ver la carga de un magro botín de sillas de plástico, ollas y colchones de espuma a vehículos de tres ruedas. En algunas casas vecinas platos de alimentos fueron dejados atrás, la ropa se ha dispersado cuando la gente huyó. Solo sillas de plástico rotas, tinas vacías de leche en polvo y ventiladores rotos yacen en el suelo.


Fuerzas de paz de la ONU distribuyen cajas de alimentos a las personas desplazadas en Sudán del Sur. Fotografía: Anna Adhikari / AFP / Getty Images

Cruzando la frontera en Eden City, la atmósfera cambió. Soldados de paisano, uno de ellos con un cuchillo de cocina con mango de plástico en el bolsillo de sus pantalones cortos y un machete visible debajo de la camisa del fútbol detenían e interrogaban a cualquier forastero. A sólo 20 metros de distancia estaba el cadáver carbonizado de un hombre acostado con las piernas extendidas fuera del bar Eden Sports saqueados.

Cerca de allí, una familia nerviosa había regresado a su casa de choza de barro, conocida como tukul, para visitar a la anciana madre de Moisés, que está demasiado enferma para hacer el viaje a la base de la ONU a menos de una milla de distancia. Estaba decidida a irse antes de caer la noche, cuando comienza el toque de queda desde el anochecer hasta el amanecer impuesto por el gobierno. "El ejército está viniendo en la noche", dijo. "Uno escucha las armas que van tuk-tuk-tuk."

Rose, que surgió del tukul donde la madre de Moisés está postrado en la cama, dijo : "Todo el mundo ha estado en marcha debido a la guerra también estamos corriendo.".

El gobierno de Sudán del Sur, ha recibido miles de millones de dólares en ayuda extranjera y es el hogar de la mayor operación de paz de la ONU en el mundo fuera de la República Democrática del Congo, sigue insistiendo en que las masacres en Juba no han sucedido. El presidente, cuyo guardias provocado la primera lucha el 15 de diciembre, ha asegurado a los sudaneses del sur que sus fuerzas estarán proteger a los civiles.

Philip Aguer, portavoz del Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán, (ELPS) la guerrilla de la guerra civil que es ahora el ejército nacional, negó cualquier ataque orquestado se habían producido. Él dijo que no tenía conocimiento de la masacre en la comisaría de Mangaten y culpó de cualquier muerte en los "elementos criminales" que habían explotado la oportunidad para saquear y matar otorgada por la crisis. "A pesar de que algunos de estos criminales están usando uniformes del ejército no significa necesariamente que sean parte del ejército", dijo. Negó cualquier soldado del ejército nacional participaron : "No hay soldados del ELPS están involucrados en esta actividad criminal."

Con respecto a quienes llevan a cabo las atrocidades, agregó : "Estamos listos para arrestarlos y llevarlos a los tribunales."

Pero esta descripción de elementos incontrolados no concuerda con el relato de Riek W, que fue hasta el sábado por un miembro en activo de la guardia presidencial, conocido por Jubans como los "Tigres".

Un veterano de la unidad multiétnica que estaba destinado a unir las diversas comunidades de lo que había sido el sur de Sudán y tres años, no era conocido públicamente como Nuer a muchos de sus colegas y no lleva la tradicional cicatriz "Gaar" que muchos hombres Nuer tienen en sus rostros.

Ahora en la clandestinidad en la base de la ONU, describió cómo los combates entre los Dinka y Nuer miembros de los Tigres último domingo noche había extendido a los ataques contra civiles Nuers por toda la ciudad.

"Se llevaron a personas que no eran soldados y les ataron las manos y les dispararon. Vi con mis propios ojos, yo estaba allí llevaba el mismo uniforme que ellos."

Los hombres jóvenes de la comunidad Dinka, muchos de ellos sin formación militar, se les dio uniformes y armas de fuego de diversos arsenales alrededor de la capital, entre ellos uno ubicado dentro de nuestra compuesto del presidente Kiir, conocido como J1, dice.

"Se trata de soldados que están haciendo esto y la milicia de los niños Dinka que han recibido las armas de los Tigres", dijo.

Riek W dijo que sus colegas Dinka no podían actuar sin la autorización de su comandante y que ellos eran "los mismos soldados que están matando a la gente por la noche."

Riek W, que decidió abandonar su puesto en el compuesto del presidente en el fin de semana ya que temía por su vida y estaba horrorizada por el asesinato de civiles, dijo que la escala de los asesinatos estaba siendo cubierto. "Ellos... están utilizando el toque de queda para retirar los cuerpos ", dijo.

Él describió cómo había visto "grandes camiones" llenos de cuerpos, algunos de los cuales fueron llevados a fosas comunes cavadas con excavadoras, mientras que otros habían sido vertidos en el río Nilo en dos puntos: uno cerca de los cuarteles Bilpam y uno en el puente de Juba. Estos informes han sido corroborados por los pescadores que han visto los cuerpos en la orilla del río. "Los números que están diciendo son totalmente equivocado, la gente ha perdido la vida en todas partes ", dijo Riek W.

Los Nuer que han sobrevivido en Juba, la numeración 20000, ahora están hacinados en dos bases de la ONU de la ciudad. Su destino es igualada por otros 14.000 civiles de otros grupos étnicos de refugio con la ONU en otras ciudades principales del sur de Sudán.

Muchos de los Nuer hacinados en la base principal de la misión de la ONU en Juba dijeron que estaban seguros de las fuerzas de paz de los protegerían a pesar de la evacuación durante el fin de semana de todo el personal no esencial de las Naciones Unidas.

No todo el mundo se siente a salvo, sin embargo. Vistiendo un traje chaqueta de rayas de polvo y pidiendo disculpas por no haber regado en seis días, Peter Bey de 51 años de edad,  no estaba seguro. Él ha visto en los últimos días como un vuelo de evacuación tras otro ha tomado a los extranjeros a la seguridad del aeropuerto en el otro lado de la valla. "Vemos en la historia que la ONU ha dejado a la gente detrás de antes en Ruanda", dijo. "Ellos pusieron su propio pueblo en los helicópteros y salieron de las personas que murieron."