Los orígenes de la “Blitzkrieg”:
Las Tácticas de tropas de Asalto (Sturmtruppen) de la Primera Guerra Mundial
La vertiginosa ofensiva alemana de Marzo de 1918, su agotamiento final y la reacción Aliada
Las nuevas e innovadoras tácticas de asalto alemanas de 1918 fueron muy exitosas y presagiaron las tácticas de la “Blitzkrieg” de la Segunda Guerra Mundial, pero su propio triunfo contribuyó a la derrota alemana.
El tratado de Brest-Litovsk que selló la derrota de Rusia, permitió a Alemania concentrarse en el Frente Occidental. Ludendorff, el co-dictador de Alemania y el Supremo Comandante Militar, insistió en mantener la ocupación de Rusia. Más de un millón de soldados estaban estacionados en Rusia y Rumania. Otro millón de hombres y 3.000 cañones fueron transportados al Frente Occidental. Desde Noviembre de 1918 hasta Marzo de 1918, el potencial alemán en el Frente Occidental se incrementó de 150 divisiones a 208 divisiones, incluyendo 13.832 piezas de artillería.
En esta época, las unidades militares de los adversarios eran similares. Las divisiones alemanas consistían en unos 10.600 hombres, las británicas en 12.000 y las francesas en 13.000. Las recientemente arribadas divisiones americanas eran del doble, tanto como 28.105 hombres. Al final, las tropas americanas resultarían vitales para salvar la causa aliada y ganar la guerra.
En ésta época tardía de la guerra había evolucionado un complejo sistema de trincheras y nidos de ametralladoras emplazados en profundidad. Todas las trincheras de combate estaban unidas entre sí por trincheras de comunicación que comunicaban a su vez con la retaguardia. En frente de las trincheras había extensos cinturones de alambradas de púas. El esquema defensivo británico se basaba en un manual alemán capturado. (Cuando hablamos de “británicos” también incluimos a los aliados de los ingleses: Anzacs, Canadienses y Portugueses). Los ingleses habían copiado la letra pero no el espíritu del sistema alemán. Los británicos creían que la ametralladora sostenía a la infantería mientras que los alemanes, más realistas, creían que la infantería sostenía a la ametralladora. El nuevo sistema defensivo tenía una Zona de Vanguardia ocupada por un tercio de las tropas. Tres a cinco kilómetros más atrás estaba la Zona de Batalla, con un ancho de 1.800 a 2.700 metros, y ocupada por un tercio de la infantería y dos tercios de la artillería. La Zona de Retaguardia estaba de 6,4 a 12 kilómetros detrás de la Zona de Batalla. Este sistema no era tan eficiente como el alemán que reservaba dos tercios de las tropas para contra-ataques (estas se encontraban en la Zona de Retaguardia). Francia estaba al límite de sus recursos humanos, por eso la artillería era su arma más importante. Los franceses astutamente ocupaban su frente ligeramente y mantenían el grueso de las tropas en las posiciones principales fuera del alcance de la artillería.
Mientras las defensas evolucionaban, los alemanes estaban desarrollando nuevas tácticas de asalto para lidiar con dichas defensas. Las nuevas tropas de asalto, o Stosstrupp, fueron empleadas experimentalmente por primera vez en 1915. Grupos de tres, uno con un gran escudo y dos hombres a cada lado lanzando granadas como punta de lanza de un ataque. Mas tarde, el General Oskar Von Hutier desarrolló tácticas de bombardeos masivos e infiltración de infantería en Riga, Rusia. Para las nuevas ofensivas en Francia, la rígida cadena de mandos fue flexibilizada. Los comandantes de del ejército podrían dirigir las operaciones de batallones, por tanto relegando a los cuerpos y brigadas a funciones de refuerzo y suministros.
Debido a las grandes bajas de sub-oficiales en 1917, no todas las divisiones alemanas fueron convertidas en divisiones de asalto. Las divisiones se clasificaron en “de asalto” o “de trinchera” y se les dieron diferentes prioridades en los suministros. A las divisiones “de asalto” se les entregaron tropas de asalto y cuatro semanas de entrenamiento en guerra móvil. Las tropas de asalto de elite estaban en óptimas condiciones y comandadas por oficiales no aristocráticos, incrementando así la camaradería entre sus miembros.
En la Operación Michael, se acumularon 69 divisiones alemanas contra 32 británicas y en algunos sectores los ingleses fueron superados por la relación de 4 a 1. En la Ofensiva de Lys, 9 divisiones alemanas atacaron a 3 divisiones inglesas. Veintidós divisiones fueron acumuladas contra cinco en la Segunda Batalla del Marne. La artillería fue concentrada en números nunca antes vistos. Para comparar, en 1915 en la batalla de Loos, había un cañón cada 55 metros de frente. Para la operación Michael de 1918, se había emplazado un cañón cada 11 metros. Continuando con esta tendencia, los soviéticos en la Segunda Guerra Mundial acumularían su artillería en la densidad de un cañón cada 2,8 metros! A diferencia de las anteriores ofensivas, los bombardeos de artillería eran breves y demoledores. Primero se eliminaba la artillería enemiga con granadas y gas asfixiante. Luego eran alcanzados los cuarteles generales, los centros de comunicación y los depósitos de suministros. Luego eran devastadas las trincheras de primera línea, siendo los primeros objetivos los nidos de ametralladoras. Luego se bombardeaba la Zona de Batalla.
Durante la Operación Michael, los ingleses acumularon el 30% de sus tropas en la primera línea. En vez de lograr el objetivo deseado de frenar a las tropas atacantes con un fuego de defensa abrumador, estas tropas fueron aniquiladas por el fuego de artillería. En el sector del Cuerpo de Ejército XVIII, de los 10.000 hombres de la primera línea, sólo sobrevivieron 50 al bombardeo y subsiguiente ataque.
Las tropas de asalto atacaron inmediatamente luego del bombardeo. A diferencia de las unidades de infantería regular empleadas al comienzo de la guerra, estos hombres estaban equipados con una gran variedad de armas, no sólo con el fusil de cerrojo tradicional. Cortadores de alambres y tropas de demolición crearon brechas en las alambradas de púas. Los granaderos, sirvientes de lanzallamas, ametralladoristas y morteristas se infiltraron en las posiciones enemigas. Tres o cuatro olas de infantería les seguían. Las tropas atacantes no tenían objetivos fijos y dejaban los bolsones de resistencia para ser suprimidos por las tropas de apoyo. Se reforzaba el éxito, no el fracaso. Las tropas de asalto traían consigo la primera pistola ametralladora realmente efectiva, el Bergmann MP 18. Este novedoso subfusil era liviano y fácil de usar, y tenía mucho mas potencia de fuego que el fusil Mauser. Las tropas de infiltración a menudo avanzaban más allá del alcance de su artillería, dejando sus flancos desguarnecidos. Debido a que la artillería era muy pesada para ser transportada siguiendo a los atacantes, los flancos eran protegidos por morteros ligeros de trinchera y ametralladoristas. Las Grandes Ofensivas alemanas también fueron apoyadas por la fuerza aérea. 730 aviones alemanes fueron acumulados contra 579 aviones aliados en la Operación Michael.
La Operación Michael fue un gran éxito para los parámetros de la Primera Guerra Mundial. Los alemanes penetraron unos 64 kilómetros, capturaron 975 cañones y causaron 300.000 bajas, pero eventualmente el ataque alemán se detuvo por agotamiento. Los aliados finalmente hallaron algunas contramedidas para las nuevas tácticas. Por ejemplo, el 15 de julio de 1918 el Cuarto Ejército Francés fue atacado por tres ejércitos alemanes. El frente estaba ligeramente sostenido y la resistencia principal se encontraba tres a cinco kilómetros detrás. Los franceses mantuvieron los puestos de comando y los depósitos de munición fuera del alcance de la artillería. La noche antes del ataque, los puntos de reunión de los alemanes fueron bombardeados, y el asalto fue detenido en la Zona de Batalla.
A pesar de su éxito, las ofensivas de la primavera de 1918 terminaron agotadas, y las ofensivas del verano fueron detenidas.
“El ejército alemán del oeste estaba escaso de hombres y no existía una genuina infantería motorizada, la cual por sí sola hubiese proporcionado a las fuerzas alemanas libertad operacional.” “La propia velocidad del avance había llevado a las tropas al agotamiento.” Peor aún, un 20% de los hombres estaban sufriendo de influenza. “Cuando Ludendorff inició su campaña tenía a su favor 207 divisiones, 82 en reserva. Ahora sólo le quedaban 66 divisiones completas en su reserva.”
Con la moral alemana zozobrando luego del fracaso de las ofensivas, y con muchas de las reservas comprometidas, a lo que se agregaba la devastación económica causada por el bloqueo aliado, Alemania se bamboleaba hacia el colapso. Los aliados habían aprendido de los métodos de ataque alemanes, y el contra-ataque inglés del 8 de agosto de 1918 fue decisivo. Los alemanes no pudieron detener el avance aliado, y el 11 de Noviembre de 1918 se firmó el Armisticio. Las nuevas tácticas de asalto habían roto el estancamiento. En la siguiente guerra, los tanques y otros vehículos blindados posibilitarían una explotación decisiva de las rupturas, profundamente en la retaguardia enemiga. Los sensacionales métodos de la blitzkrieg habían tenido sus raíces en las tácticas de las tropas de asalto de 1918.
Publico algunas imágenes de las tropas de asalto alemanas "Stosstruppen" y del bombardeo de artillería sobre los ingleses. Así también imágenes de los stosstruppen avanzando con cortadores de alambres y granaderos.