jueves, 30 de mayo de 2013

Malvinas: La FAA y el COAN golpean al HMS Invincible

Volviendo a leer...
Ataque al HMS Invincible
  


Portaaviones liviano
Botado en 1980 (19.500 tn.)


A-4C - IV Brigada Aérea (FAA)
30-Mayo-82; 14:26 horas


Hercules C-130 - I Brigada Aérea (FAA)
30-Mayo-82


Super Etendard - 2do Esc. Aeronaval Caza y Ataque (ARA)
30-Mayo-82; 14:24 horas

Dañado por un misil Exocet AM-39 disparado por aviones de la Armada y por el impacto de bombas y cañones de los cazabombarderos de la FAA.
Los ingleses aún mantienen en silencio los daños sufridos por la nave
(no reconocido por Inglaterra).



Ataque al HMS Invincible: La decisión

Para el 28 de mayo el COATLANSUR había tomado la decisión de atacar al HMS Invincible con los Super Etendard / Exocet que necesitarían reabastecerse en vuelo de Hercules KC-130. La FAS exigió intervenir con una escuadrilla y aumentar el poder de fuego del ataque.

Se eligieron los A-4C Skyhawk por su capacidad de reabastecimiento y autonomía de oxígeno y se dio la orden al escuadrón en San Julián.

El jefe viajó a Comodoro Rivadavia y se impuso de la planificación. Dada la extrema complejidad y peligrosidad de la operación, el jefe del escuadrón solicitó voluntarios.

Se presentaron dos jefes de escuadrilla, el 1er Teniente José Vázquez y el 1er Teniente Ernesto Ureta. A éstos se los autorizó a designar a sus numerales: 1er Teniente Omar Castillo, Teniente Daniel Paredi y Alférez Gerardo Isaac. Uno actuaría como reserva.

En la mañana del 29 de mayo despegaron hacia Río Grande. Problemas con los Hércules KC-130 hicieron que la salida se demorara hasta el día siguiente. Se aprovechó esta circunstancia para cambiar dos Skyhawk que tenían algunas fallas y estuvieron listos para el día de la operación aérea más importante hasta ahora planificada.


La Operación Invincible

Fue protagonizada por dos Super Etendard de la Armada Argentina (ARA), cuyos pilotos fueron el Capitán de Corbeta Alejandro Francisco y el Teniente de Navío Luis Collavino y, por el siguiente personal y aeronaves de la Fuerza Aérea:

Hércules C-130, matrícula TC-69, indicativo "Cacho". Tripulación: Vicecomodoro Luis Litrenta, Capitán. Guillermo Destéfanis, Mayor Francisco Mensi, Cabo Principal Juan Perón, Cabo Principal Juan Tello, Suboficial Auxiliar Hugo González, Suboficial Auxiliar Vicente Reynoso y Suboficial Auxiliar Manuel Lombino. Despegó de Río Gallegos a las 11:25 hs y arribó a Comodoro Rivadavia a las 17:25 hs.



Hércules C-130 matrícula TC-70, indicativo "Gallo". Tripulación: Mayor Roberto Briend, Vicecomodoro Roberto Noé, Mayor Miguel Sánchez, Capitán Osvaldo Bilmezis, Suboficial Mayor Juan Cufré, Suboficial Principal Carlos Golier, Suboficial Principal Roberto Caravaca, Suboficial Auxiliar Héctor Sosa y Suboficial Auxiliar Juan Marnoni. Despegó de Río Gallegos a las 11:25 y arribó a las 17:15 hs.



Cuatro A-4C, indicativo Zonda. Misión: ataque al portaaviones ubicado en la posición 51° 38' Sur / 53° 38' Oeste, con dos reabastecimientos, armado con tres bombas retardadas por paracaídas (BRP), cada uno. Tripulación: 1er Teniente José Vázquez (C-301), 1er Teniente Ernesto Ureta (C-321), 1er Teniente Omar Castillo (C-310) y Alférez Gerardo Isaac (C-318). El Teniente Daniel Paredi actuaría como reserva. Despegaron de Río Grande a las 12:30 hs y regresaron a las 16:00 hs.

Las rutas previstas partían de Río Grande (Super Etendard / A-4C Skyhawk) y Río Gallegos (Hércules KC-130), convergían a los 55º 50' S / 58º O, donde se haría el reabastecimiento.

Cada sistema reabastecería dos veces, a la ida y al regreso, para despegar con máxima carga de armamento. A partir de allí, con rumbo 330º / 350º descenderían a rasante (100 pies), los Super Etendard al frente y dos A-4C Skyhawk a cada lado. Se aproximarían volando en formación a 420 nudos hasta unas 100 millas del blanco.

En este tramo, los Super Etendard deberían localizar con su radar el objetivo y, veinticinco kilómetros antes, lanzar el último Exocet regresando, previo reabastecimiento, a Río Grande.

Acelerando al máximo, los A-4C Skyhawk se montarían en la trayectoria del misil hasta el buque, cincuenta segundos después del impacto arrojarían tres bombas retardadas por paracaídas de 250 kg. cada uno.


La ejecución
A las 11:25 hs despegaron desde Río Gallegos los Hércules KC-130 y se dirigieron al punto de reabastecimiento en 55º 30' S / 58º O. A las 12:30 hs despegaron de Río Grande dos Super Etendard ("Ala") y cuatro A-4C Skyhawk ("Zonda").

La operación estaba condicionada por una serie de requisitos que debían cumplirse inexorablemente. Todos se cumplieron a la perfección.

Una vez disparado el Exocet, los cuatro A-4C Skyhawk (Ureta e Isaac a la derecha y Castillo y Vázquez a la izquierda), siguieron la estela del misil.

Lo primero que vieron fue una columna de humo en el horizonte. El impacto del Exocet señalaba el blanco, pero había alertado al sistema defensivo del portaaviones y su escolta.

Cuando ya tenían nítidamente al HMS Invincible en las miras, un misil (posiblemente un Sea Dart) impactó al jefe de escuadrilla, 1er Teniente Vázquez, que se partió en dos y se estrelló en el mar.

Cinco segundos antes del lanzar las bombas, la artillería impactó en el 1er Teniente Castillo, cuyo avión explotó.
Al parecer, su motor cayó sobre la cubierta y resbaló hasta el hueco del ascensor de aviones, por donde entró e incendió su interior.

Los dos A-4C restantes alcanzaron el objetivo, al que vieron despidiendo humo. Los pilotos argentinos lanzaron las bombas sobre la cubierta. Ureta que pasó primero, cree haber impactado en la superestructura. Indemnes, se alejaron con rumbos distintos, haciendo maniobras evasivas. Al serenarse, echaron un último vistazo al buque y lo vieron cubierto de humo espeso y negro.



Se perdieron de vista entre ellos pero siguieron rasante en rumbo 230º/240º, hacia el punto en que deberían reunirse con los reabastecedores. Primero se avistaron entre ellos y luego, en el punto exacto, se encontraron con los dos Hércules KC-130.

Ureta e Isaac reabastecieron y se dirigieron a la BAM Río Grande. La operación había durado casi cuatro horas. Finalizaba así la operación aérea más imaginativa y audaz que se haya realizado en este conflicto.



En la revista Noticias apareció una nota sobre Malvinas que decia 

Cita:
“Un grave problema surgió después de la misión contra el Invincible. Los mandos de la Fuerza Aérea reprocharon a los pilotos de la Marina que lanzaron el último Exocet no respetar lo planificado. Los Súper Etendard hicieron el disparo, viraron y tomaron altura para regresar a la base, los cuatro Skyhawk de la Fuerza Aérea seguían la estela del misil que los llevaría al blanco. Al tomar altura los Súper Etendard, los radares de las fragatas detectaron el ataque en el que dos de los aviones fueron derribados. Los pilotos de la Marina debían reabastecer combustible en el aire antes de regresar a la base, pero al tomar altura (el avión gasta muchísimo menos combustible) no necesitaron hacerlo. Hubo mucha bronca”
.

Sin embargo,

1) Para la fecha del ataque al Invencible, la Royal Navy ya tenía conocimiento como era la secuencia del lanzamiento de un Exocet, no solo por sus dos experiencias anteriores (Sheffield y Atlantic Conveyor) sino por toda la información suministrada por Francia.

2) La primera indicación de un ataque con Exocet, la tuvieron cuando los SUE se "asomaron" por encima del horizonte radar para que el radar Agave realizara un par de barridos a fin de detectar los blancos. Dicha emisión fue percibida con absoluta claridad y era similar al patrón de detección/adquisición/lanzamiento del Exocet.

3) Efectuado el lanzamiento, los SUE rompen la formación y dejan pasar a los A-4C que van tras la estela del misil. Por el relato de uno de los pilotos navales, al romper la formación recibió indicaciones que estaba siendo detectado por un radar de búsqueda. Textual sus palabras fueron..."tengo lobos en la cola".

4) Con dos "blips" detectados por los británicos, en el mismo curso, ya era más que obvio la llegada de un ataque. Eso les dió tiempo sifuciente para detectar a los A-4C a tan baja altura y efectuar el disparo de al menos tres misiles, dos de los cuales impactaron en sendos A-4C.

5) Finalizada la misión, algunos dicen que hubo una fuerte discusión entre pilotos de FAA y COAN, otros han relatado que incluso se fueron a las manos por la maniobra de los SUE que al romper, develaron el ataque. Ruido hubo y algo se filtró en la prensa. Hoy por hoy es un secreto a voces.

6) Según los británicos, cuando se detectó el primer eco (momento en que los SUE se asomaron para adqurir el blanco) se consideró como un falso eco, máxime que se situaba al Este. Pero cuando un minuto después el eco de volvió a aparecer, se dió la alarma de ataque aéreo.

Entonces, el tema de observar “quien descubrió primero el ataque” si los Super Etendart, los A-4C o el Exocet es muy interesante ya que a simple vista se observa que las distancias y los tiempos están muy ajustados.

La lógica de guiado de los primigenios Exocet con la computadora EOG y radioaltimetro Thomson-TRT AHV-7 le daban una altura de vuelo de 15m (+/-) lo que equivale a 34 km de horizonte para el radar naval...pero, ¿tenia suficiente potencia y resolución el radar Type 995/6 para discernir un blanco de menos de 1m2 de RCS (se dice, se cuenta, se comenta... que son 0.63m2) a 34 km volando a 15m?, creo que no.
Sin embargo esta sobradamente capacitado para localizar pequeños aviones ( de 2 a 5 m2 de RCS) a esa distancia y altura.
La secuencia de ataque de un AM-39 de 1982 indica que el avión portador debe permanecer al menos 60 segundos encima del HRE, puesto que aparte de los datos transmitidos por el Agave el piloto debe introducir unos imputs en manual antes del disparo del misil, o mas correctamente antes de iniciar la secuencia de lanzamiento, puesto que este misil no le lanza, se “suelta” e inicia su trayectoria tras 10m de caída libre.
Así pues, si el Agave tiene una capacidad de detección de blancos de mas de 100m2 de 32 MN ( 59km) deberá estar en condiciones de blocarlo sobre las 23 MN (43 km)...si suponemos que el SUE volaba a unos 600 km/h....en un minuto volando a esa velocidad se recorren 13 km, por lo efectuaría su “suelta” del misil a unos 33 km del buque.
( si volaba mas lento, la suelta se efectuaría de mas lejos).
Aquí debemos tener en cuenta de que el Agave del SUE para “ver” a 59 km necesita volar a mas de 50m de altura y si el SUE “ve” al buque, el buque “ve” al SUE.

La frase “Pero cuando un minuto después el eco de volvió a aparecer, se dió la alarma de ataque aéreo” pueden pertenecer al mismo eco los dos contactos, solo que el espacio entre el primer y segundo contacto fuese difuminado por glind o reflexiones multipath porque hay que tener en cuenta que el radar Type 996 es rotatorio, da vueltas, y a cada giro pierde el contacto...para esperar recuperarlo en la siguiente.

Después, a causa de la configuración asimétrica del SUE con un deposito de combustible en la semiala de babor y el misil en la de estribor , al virar para romper el ataque, siempre lo hace virando a babor y bajando el morro para aprovechar el mayor peso, lo que le otorga mayor capacidad de virada....si descubrieron a los SUE en su huida fue porque estos treparon con excesiva rapidez...¿a causa de estar cercano el “bingo” de combustible? Lo de ganar altura para ahorrar combustible es plausible y es posible que las cosas sucedieran así.

Esto parece indicar que el viejo Type 996 descubrió a los SUE al hacer el pop-up para el blocaje y suelta...y tal vez en la huida, pero no estaba capacitado para descubrir al misil a esa distancia y los sistemas de la Royal Navy del 82 ( ni aun ahora) podían atacar el contacto a esa distancia.
Si los A-4C fueron descubiertos a 34 km del buque volando uno cerca del otro...carpe diem, simplemente por el tiempo de reacción que otorgaban.
Máxime si volaban juntos sin obligar a los lanzadores de Sea Dart a rotar para disparar al encontrarse un ataque múltiple por marcaciones diferentes, pues el radar Type 909 no tubo problemas en blocar y atacar a los A-4C entrando por marcaciones similares, pero dudo mucho de su efectividad contra el misil, ya que volando este a mas de 300m/s le da un chance a sistemas de este tipo ( y de 1982) de menos de un minuto desde que se enciende el ESD ADAC del misil a 15 km del blanco hasta que impacta con el buque.

Si el Exocet les entra por una marcación y los cuatro A-4C por marcaciones diferentes no hubiesen podido repeler el ataque y esto es, ni mas ni menos, lo que le sucedió a la Royal Navy durante todo el conflicto y que explica como aviones con bombas de caída libre, sobrevolaran sus navíos una y otra vez durante todo el conflicto...esto junto con ineficacia probada de sus sistemas de vigilancia de largo alcance y misiles de defensa antiaérea, que aun hoy es “tema reservado” porque son sistemas que aun están en servicio en algunas marinas.

Creo que todo indica que hubo una mala planificación del ataque o que alguien no siguió la planificación preestablecida...pero es que en un combate real, las cosas raramente salen como se planean en la tranquilidad de un despacho.

NOTA ACLARATORIA.
Cada sistema reabastecería dos veces, a la ida y al regreso, para despegar con máxima carga de armamento. A partir de allí, con rumbo 330º / 350º descenderían a rasante (100 pies), los Super Etendard al frente y dos A-4C Skyhawk a cada lado. Se aproximarían volando en formación a 420 nudos hasta unas 100 millas del blanco.

En este tramo, los Super Etendard deberían localizar con su radar el objetivo y, veinticinco kilómetros antes, lanzar el último Exocet regresando, previo reabastecimiento, a Río Grande.
Acelerando al máximo, los A-4C Skyhawk se montarían en la trayectoria del misil hasta el buque, cincuenta segundos después del impacto arrojarían tres bombas retardadas por paracaídas de 250 kg. cada uno.


Este texto, sacado aquí indica que el Super Etendardt al lanzar el Exocet volaría sobre 1000km/h de velocidad al lanzar el misil a 25 km del buque ya que pasaron 17 km desde el blocaje sobre los 40 km al lanzamiento a los 25 km y que los A-4C Skyhawk volando a baja cota y alto regimen, sobre 800km/h iban 50 segundos detrás del misil, sobre los 10 u 11 km.

Fuente: FAA


miércoles, 29 de mayo de 2013

Poder aéreo: Bases para una Fuerza Aérea Expedicionaria

Una perspectiva de la Fuerza Aérea Expedicionaria (FAE)
Planificación y conducción de las operaciones expedicionarias
 
Autor: Daniel Mortensen 
Fecha de publicación: 16/07/2002 


Las organizaciones militares han efectuado operaciones expedicionarias por siglos; durante el último siglo, los aviadores han adoptado las fuerzas aéreas expedicionarias. Nuestra encuesta preliminar sobre el tema reveló una amplia serie de ejemplos históricos que le ofrecen lecciones útiles a aquellos aviadores que buscan entender mejor los retos que conllevan utilizar fuerzas aéreas expedicionarias a inicios del siglo XXI. Algunos ejemplos que se han tomado desde los inicios tienen que ver con operaciones terrestres completamente desprovistas de un elemento aéreo. Pero, inclusive en situaciones donde no hay un elemento aéreo, un sinnúmero de factores significativos relacionados con los aviadores son fácilmente aparentes. Por ejemplo, uno piensa en cuestiones que tienen que ver con la inteligencia, la logística, la mezcla de fuerzas, la protección de fuerzas, tareas consecutivas, innovación operacional y muchos otros factores. 

En resumen, nuestra encuesta de experiencias anteriores pone de relieve muchas lecciones instructivas para los aviadores del siglo XXI que buscan abordar la planificación y la conducción de las operaciones expedicionarias. Con esto, a continuación se presentan algunos casos pertinentes. 

Líderes de la Fuerza Aérea Promueven las fuerzas expedicionarias 

- 1920, Gen. Billy Mitchell ideó las "brigadas" (todo tipo de aviones) capacitadas y preparadas para misiones en el hemisferio y en el extranjero. 
- 1940, Gen. Hap Arnold organizó las "fuerzas aéreas" (todo tipo de aviones) para misiones en el hemisferio--luego organizó las fuerzas numeradas para enviarlas al extranjero. 
- 1944, Gen. Hap Arnold organizó unidades de "comando aéreo" (todo tipo de aviones) para misiones expedicionarias en China, Burma y la India. 
- 1953, Gen. Glenn Barcus, Comandante de TAC, experimentó con Fuerzas Mixtas de Ataque Aéreo para responder rápidamente a misiones remotas. 
- 1955, Generales Nathan Twining y O.P. Weyland organizaron la Decimonovena Fuerza Aérea (todo tipo de aviones tácticos) para el despliegue de corto aviso al extranjero. 
- 1990s Gen. Tony McPeak formó las Alas Mixtas (aviones mixtos maniobrando juntos) para crear un elemento de fuerza eficaz. 
- 1994, Gen. John Jumper, Comandante de la Novena Fuerza Aérea de ACC, propagó la idea de la Fuerza Aérea Expedicionaria (fuerza con aviones mixtos y de despliegue rápido). 
- 1998, Gen. Mike Ryan introdujo la idea de las Fuerzas Aéreas Expedicionarias (una serie de FAEs compuestas de muchos tipos de aviones) para misiones globales. 

Antecedentes Operacionales 


La idea de este conjunto de unidades aéreas para misiones lejanas aparece a inicios del siglo aéreo. El General Billy Mitchell, recién llegado del puesto de comandante de las fuerzas aéreas mixtas en Francia, sugirió que las fuerzas aéreas en "Brigadas" conformadas por aeronaves de bombardeo, seguimiento, ataque y observación formarían una "reserva estratégica eficaz" para desplazarse rápidamente a cualquier amenaza lejana a las fronteras del país. A inicios de la década de los años 1940, con el estallido de la guerra en Europa, el General H.H. Arnold organizó las fuerzas aéreas numeradas, primero para proteger al hemisferio y luego para utilizarlas en el ámbito global. Bien adentrado en la guerra, Arnold organizó una serie de grupos de comandos, dotándolos con una variedad de aviones para facilitar las operaciones independientes en regiones remotas. 

Las dificultades experimentadas al desplegar poderío aéreo táctico, listo para el combate, como respuesta a la crisis en Corea en 1950, exhortaron al Comandante de TAC, el General Glenn O. Barcus, y al futuro Jefe de Estado Mayor, Nathan Twining, y al futuro Comandante de TAC, O. P. Weyland, a organizar fuerzas tácticas de reacción rápida para utilizarlas en situaciones precarias alrededor del mundo. La preocupación con la guerra en Vietnam ocasionó la desaparición de estas primeras fuerzas de ataque mixto. El General Merrill McPeak vio la necesidad de revivirlas inclusive antes de la Guerra del Golfo en 1991. Él experimentó con fuerzas mixtas con distintos tipos de aviones operando en una base. La única de estas unidades que aún está funcionando es la 366ava Ala en Mountain Home. El General Jumper organizó una fuerza provisional con aviones mixtos que, con un tamaño pequeño, podría reaccionar a misiones que se desarrollasen rápidamente. 

Estas FAE proporcionaban fuerzas de tarea aérea económicas para las misiones de corta duración. El alto ritmo operacional (Ops Tempo) y de personal (Pers Tempo) de las unidades aéreas convenció al actual Jefe de Estado Mayor de la Fuerza Aérea (CSAF) a reorganizar la fuerza en una serie de 10 FAE, que podrían turnarse para responder a misiones sin guerra declarada que parecen dominar la estrategia nacional a inicios del siglo. 

Las Legiones Expedicionarias Romanas 

- Series de unidades más pequeñas fomentaban la capacidad de maniobra; combinadas para lograr más resistencia. 
- Flexibilidad en el equipo, las tácticas y la organización. 
- Fuerzas livianas y transporte eficaz fomentaron la movilidad. Piense en el poderío aéreo dentro del contexto de carreteras y barcos romanos. 
- La legión constaba de infantería, caballería, ingenieros, etc., para operaciones independientes. 
- Las fuerzas profesionales se adiestraban y combatían juntas. 
- Tecnología, organización y adiestramiento superior. 
- Poder asimétrico: ganar batallas aún cuando había mayor número de contingentes. 
- Apoyo conjunto con la armada romana y otras unidades auxiliares; apoyo de la coalición o de aliados según era necesario. 
- Mientras participaban en contingencias, construían de noche los campamentos fortificados. 
- Fuerzas especiales diseñadas para misiones específicas. 
Antecedentes Operacionales 

Las derrotas en el campo de batalla y el incendio de Roma en el año 390 (antes de Jesucristo) mostraron que la falange era demasiado rígida para derrotar a los bárbaros que carecían de cohesión. Los romanos se reorganizaron en unidades más pequeñas que permitían que el comandante maniobrara sus fuerzas durante la batalla. Para llenar el vacío entre las unidades y para extender el alcance letal de las armas de los soldados más allá del alcance de una lanza, los romanos reemplazaron sus lanzas de largo alcance con lanzas más cortas (jabalinas). Para poderlas lanzar eficazmente, las tropas tenían que estar más separadas. 


De cerca, los romanos dependían de sus lanzas más cortas y de esta formación abierta. Para controlar estas unidades más pequeñas, los romanos crearon una nueva organización: la Legión. Cada Legión tenía una organización establecida de aproximadamente 5,000 soldados de infantería junto con un contingente orgánico de caballería. Sin embargo, lo que las convertía en organizaciones verdaderamente independientes eran las diversas tropas especializadas que no sólo hacían el trabajo administrativo y de mantenimiento sino que construían y operaban las catapultas y proporcionaban los conocimientos necesarios de ingeniería. 

Durante los próximos trescientos años, los romanos mejoraron su armamento y remendaron su organización. La última reforma importante tuvo lugar bajo Mario alrededor de 100 (antes de Jesucristo) cuando Roma canceló el requisito de ser dueños de propiedad para poder unirse a la legión y se convirtió en una fuerza de profesionales. Estos integrantes de la Legión se adiestraban más intensamente y por más tiempo que sus antecesores, y estaban más dispuestos a servir en campañas de larga duración lejos de Roma. Contando con mejor equipo, organización y adiestramiento, las Legiones Romanas podían pelear repetidamente, aún cuando las cifras del enemigo eran mayores, y ganar en contra de sus adversarios desde Escocia hasta en el Desierto de Sahara. 

Sin embargo, las Legiones rara vez operaban solas. Más bien eran el centro de las fuerzas expedicionarias robustecidas por auxiliares y aliados que proporcionaban la mayor parte de la caballería, los arqueros y las tropas livianas. Estas fuerzas reducían substancialmente las demandas que se le hacía al personal limitado de Roma y eran particularmente importantes para enfrentar las amenazas asimétricas (v.g., pequeños ataques de morder y correr de la caballería y los arqueros). Por lo tanto, los auxiliares y los aliados le permitieron a los comandantes romanos crear fuerzas de tarea cuidadosamente a la medida para enfrentar las amenazas específicas y maximizar el poder de combate del pequeño número de legiones. 

Enfocarnos en el equipo, la organización y el éxito en el campo de batalla de la Legión Romana no nos debe distraer de su extraordinaria movilidad estratégica. La Legión se desplazaba de manera rápida y liviana, y también utilizaba a la Armada Romana y la extensa red de excelentes caminos para lograr velocidades insuperables hasta la era del vapor. A Mario se le acredita con exigirle a sus tropas que transportaran su propio equipo, y aunque esto provocaba que las tropas se quejaran de ser las "mulas de Mario", los obligó a viajar ligeros y los independizó de las carretas tiradas por bueyes que eran tan vulnerables y que retrasaban a sus enemigos. Inclusive viajar liviano no anulaba los problemas de protección de fuerza. Mientras estaban en marcha, cada noche las legiones fabricaban campamentos fortificados. 

Expedición de Napoleón a Egipto: 1797 

La superioridad naval pudo contener y luego derrotar a una fuerza terrestre superior. 
La falta de dotación adecuada de las fuerzas puede resultar en derrota y desastre. 
Las ventajas de la movilidad ayudan durante las etapas iniciales. 
Hay grandes debilidades sin las bases de avanzada amigas. 
Con el tiempo, el enemigo puede hacer innovaciones y adaptarse. 
Los disturbios locales intensifican los problemas de protección de fuerza. 
El peligro de permitir que los problemas nacionales dirijan las expediciones militares. 

Antecedentes Operacionales 

En 1797, aunque extenuados por una guerra larga e irresoluta en Europa, los franceses lazaron una campaña en Egipto. Ellos estaban convencidos de que podrían poner de su parte a los ciudadanos locales a causa de la mala administración crónica y que la ocupación de Egipto debilitaría el comercio británico en la zona al igual que proporcionaría una ayuda para atacar la joya del Imperio Británico: la India. En el ámbito nacional, Napoleón consideró ésta como una oportunidad para aumentar su prestigio (imitar a su héroe Alejandro Magno) mientras que su Directorio lo vio como una oportunidad para sacar de Europa al peligroso y ambicioso Napoleón. 

En mayo de 1798, Napoleón partió secretamente de Francia con una expedición grande que constaba de cientos de buques, alrededor de 40,000 tropas, 1,200 caballos y 161 rifles. La cifra pequeña de caballos era crítica porque limitaba el número de rifles y caballería que los franceses podrían mantener en campaña. En contraste, Napoleón ganaría victorias arrolladoras con grandes cantidades de artillería, los ataques de la caballería y la temible persecución de la caballería en Europa. La falta de caballos le negó la movilidad operacional a Napoleón--una ventaja importante. 

La Armada Real fue sorprendida cuando los franceses partieron rumbo al este, no hacia Gran Bretaña, permitiéndole a la Armada Francesa, que era inferior, que llevara su expedición a Egipto. Los franceses hicieron a un lado con facilidad la oposición local y ganaron una victoria importante y desequilibrada en contra de fuerzas mayores en julio de 1798 en la Batalla de las Pirámides. Sin embargo, la acción decisiva fue una batalla naval al siguiente mes cuando Nelson sorprendió y aniquiló durante la Batalla del Nilo a la flota francesa que estaba anclada. Napoleón estaba incomunicado del exterior. La pregunta ahora fue si Napoleón podía ser derrotado y qué podría lograr aislado. Los egipcios civiles no simpatizaban con el gobierno francés; por el contrario, lo resentían y se rebelaron contra él. 

Además, había amenazas externas. A principios del siguiente año, los franceses avanzaron hacia el norte para evitar que los turcos atacaran a Egipto. Pero mientras los franceses ganaban sus victorias, no podían vencer la ciudad de Acre. Nuevamente, la superioridad naval británica fue decisiva. Una fuerza relativamente pequeña de la Armada Real capturó el tren de asedio de Napoleón y lo entregó a los defensores de la ciudad. La falta de una artillería pesada francesa, unos cuantos asesores británicos, abastecimientos de afuera, y apoyo de fuego provisto por la Armada Británica, ayudaron a los defensores de la cuidad a soportar el bloqueo de dos meses. (Además, las enfermedades habían destruido al Ejército Francés.) 

Después de una difícil marcha, Napoleón regresó a Egipto con gran parte de su fuerza y, aunque ganó otra Victoria en Egipto, abandonó su ejército y regresó a Francia en octubre de 1799. Inclusive sin Napoleón y con los abastecimientos interrumpidos, el Ejército Francés era superior a sus enemigos pero estratégicamente ineficaz. Pudo soportar por casi dos años antes de rendirse en junio de 1801. 

Organización en Serie de la Fuerza de Napoleón: 1800s 

- La flexibilidad siempre ha sido un atributo clave de las organizaciones militares prósperas. 
- El cambio eficaz requiere volver a pensar y hacer, no uno, sino muchos elementos. 
- La movilidad se puede lograr a través del equipo, las tácticas y la organización. 
- La movilidad es de suma importancia, inclusive para las fuerzas terrestres. 
- Similitud de estructura de fuerza en serie. 
- Comunicaciones eficaces y subordinados innovadores. 
- La protección de fuerza es más sensible para las fuerzas de división individuales. 

Antecedentes Operacionales 

Napoleón Bonaparte fue un comandante brillante que ganó grandes victorias con el ejército más rápido y más flexible en Europa. Tradicionalmente, los ejércitos europeos organizaban sus infanterías, artillerías y caballerías en regimientos separados y sólo los reunían cuando formaban un ejército para una campaña y luego avanzaban en conjunto. Este método proporcionaba una protección de fuerza excelente porque todo el ejército podía apoyar inmediatamente cualquier parte del ejército que fuese atacado. Sin embargo, esto limitó al ejército a uno que se desplazaba en un camino recibiendo apoyo desde una base de avanzada, limitando así la velocidad, la logística y el tamaño del ejército. 


Desplazarse por un solo camino también le facilitaba al enemigo poder vigilar el progreso del ejército y, por ende, tornar la sorpresa estratégica en algo prácticamente imposible. En contraste, los franceses dividieron su ejército en divisiones que constaban de infantería, caballería y artillería que podían desplazarse y pelear por sí solas. Para mejorar el mando y control, intercalaron un cuartel general del cuerpo entre el comandante del ejército (Napoleón) y las divisiones. Esta nueva organización le permitió a los franceses poder avanzar por muchos caminos, apoyados desde varias bases de avanzada, y por ende apoyar fuerzas más grandes que se movían más rápido que sus enemigos. Este a menudo le permitió a Napoleón poder sorprender y aplastar sus enemigos. 

Sin embargo, el precio de las ventajas de logística, movilidad e inteligencia (había espías por doquier) de esta nueva organización fue la protección de fuerzas. Las divisiones fueron diseñadas lo suficientemente fuertes como para contener por varias horas el ejército del enemigo mientras que el cuerpo (varias divisiones) podía contener el ejército del enemigo por todo un día. La división atacada sería reforzada por el resto de su cuerpo y, antes de que el enemigo pudiese arrollar el cuerpo, sería atacado desde diferentes direcciones por otros cuerpos del ejército francés, marchando al sonido de los rifles para convergir en la fuerza enemiga. Por lo tanto, inclusive si todo un ejército atacase una sola división francesa, los franceses prevalecerían. 

El éxito del sistema dependía de las comunicaciones eficaces y los subordinados innovadores. Al seleccionar y capacitar cuidadosamente a los comandantes de división y de los cuerpos, Napoleón contaba con fuerzas en las cuales podía depender inclusive cuando estaban fuera de su vista. Aunque no contaba con tecnología moderna para comunicarse, él creó un sistema de órdenes e informes escritos que le permitían coordinar las movidas de su fuerza dispersada. Haciendo uso de la red de caminos de Europa occidental y tropas rápidas y entusiastas, los agresivos ejércitos franceses podían maniobrar mejor, marchar más y, a menudo, sorprender las fuerzas enemigas más lentas. 

Operaciones Expedicionarias durante la Guerra Civil: 1865 

- Se prefieren las fuerzas mixtas--infantería, caballería y artillería. - Movilidad--todos a caballo--para una fuerza mixta eficaz. - Ventaja asimétrica con armamento superior. - La inteligencia superior ganó la situación. - Innovación en las operaciones requería líderes eficientes e independientes. 

Historia Operacional 

La idea de organizar fuerzas expedicionarias mixtas (en aquel entonces significaba una mezcla de infantería, caballería y artillería) surgió a inicios de la Guerra Civil. La "Hampton Legion", organizada por Wade Hampton, un terrateniente sureño rico, fue particularmente famosa. Conocida como la batalla de Bull Run en julio de 1861, la prueba de movilizar simultáneamente una fuerza mixta fracasó. Sólo partes de la fuerza lograron llegar a Manassas, la caballería y la artillería eran demasiado "pesadas" para el transporte disponible. La legión de Hampton fue repartida a otras unidades similares. Otra iniciativa del sur, la legión de Thomas Cobb de tres armas mixtas, llegó a considerarse demasiado pesada y la legión fue dispersada después de Antietam. Michael Corcoran organizó una legión mixta para el norte que duró hasta que él murió en la batalla de Cold Harbor. 

Las organizaciones que son inducidas por la personalidad tienen que considerarse en campañas de larga duración. Sin embargo, el concepto de trasladar una fuerza mixta fue restablecido al final de la guerra por los generales del norte para un ataque expedicionario importante en el sur de Estados Unidos. 

Fue a inicios de la primavera, al final de la guerra, en marzo de 1865, cuando el General de División James H. Wilson encabezó una fuerza expedicionaria hacia el corazón de Dixie (nombre dado a los estados del sur). Tenía una base de avanzada en el Río Tennessee cerca de Gravelly Springs, Alabama, en una ruta de ferrocarriles logísticamente conveniente hacia el norte, como un lugar para agrupar, equipar y adiestrar a sus hombres. Su fuerza mixta constaba de una infantería, caballería, artillería e ingenieros, todos montados y sumamente móviles. 

Todos portaban lo más moderno de la tecnología de armamento, los fusiles Spencer de repetición. La labor extensa de inteligencia proporcionó una garantía de la ventaja asimétrica tanto en números como en equipo. Esto fue de especial importancia en vista de la existencia de una fuerza enemiga en la región bajo el mando del famoso general de la caballería confederado, Nathan Bedford Forrest. Y una característica prominente de la invasión de Wilson fue la innovación de los subordinados; a las tropas experimentadas y bien adiestradas se les exhortaba a que se adaptaran al entorno. Wilson dividió sus fuerzas en tres segmentos, cada uno independiente y autosuficiente. La fuerza causó estragos en Alabama. Capturó Tuscaloosa, Selma, Montgomery e, inclusive, llegó a Columbus, Georgia, cuando la capitulación del General Lee al General Grant le dio fin a esta operación expedicionaria impresionantemente eficaz. 

La Rebelión de los Bóxers: China, 1900 

- La logística siempre es decisiva para lograr el éxito. 
- Hay que pagar un precio por utilizar expediciones ad hoc de la coalición. 
- El mando combinado preexistente puede ser importante para el éxito. 
- Las fuerzas profesionales, bien equipadas, adiestradas y guiadas señalan la victoria. 
- Las fuerzas separadas tienen que ser independientes y autónomas. 

Antecedentes Operacionales 

El fin del siglo XIX fue un momento de rápidos cambios tecnológicos, políticos y económicos que golpearon a la China. Esto propició sentimientos anti Occidentales y el desarrollo de insurgencias anti Occidentales. Los occidentales denominaron "Bóxers" a una de estas insurgencias más grande y más importante. Con el apoyo del gobierno, se tornaron más temerarias y, en el verano de 1900, interrumpieron rutas importantes de ferrocarriles e intentaron matar a todos los occidentales que se encontraban en la China. Los occidentales se escondieron en los lugares más seguros disponibles y pidieron auxilio. El más famoso y grande de estos enclaves era el sector diplomático de Beijing donde 925 occidentales estuvieron atrapados por casi dos meses hasta que les llegó ayuda. 


La primera fuerza internacional enviada para ayudarlos constaba de tropas y buques de guerra que ya estaban en la China. Esta fuerza capturó una base en la costa de Taku y rescató a los occidentales acosados en Tientsin. Sin embargo, su elemento terrestre era de solamente 2,100 efectivos y no podía abrirse paso hasta Beijing a través de las fuerzas de los Bóxer y del gobierno de China. Este fracaso provocó una pelea descabellada para organizar una fuerza de rescate más grande. La fuerza diversa que surgió era de casi 20,000 efectivos, incluyendo 2,100 tropas norteamericanas. 

La expedición de ayuda tuvo éxito porque estas tropas eran más profesionales y estaban mejor equipadas y guiadas que sus enemigos. Las fuerzas de rescate llegaron más desorganizadas y menos equipadas que lo que debieron haber estado, y carecían de una estructura que podía controlar e integrar los ocho contingentes nacionales que se sospechaban entre sí. Esto retrasó el rescate. Las fuerzas chinas más grandes permanecieron en la defensiva y no podían aprovecharse de la diversa fuerza de rescate. La incapacidad de los aliados de integrar eficazmente las actividades de diferentes fuerzas nacionales significó que cada fuerza luchó prácticamente independiente, pero afortunadamente todos los contingentes nacionales grandes contaban con caballería y artillería y por lo tanto podían operar independientemente de las otras fuerzas. 

Los tres factores claves para el apoyo logístico exitoso de la expedición fueron la base asegurada en Taku, la decisión de seguir el río y depender de chatarras en lugar del ferrocarril, y el tamaño pequeño de la fuerza expedicionaria. Esta fuerza pequeña era sumamente letal y eficaz y se pudo apoyar, mientras que una más grande, y quizás más letal, pero menos capaz de ser apoyada hubiese fracasado. 

Desastre en Irak, la Batalla de Kut: 1916 

- La lentitud de la misión es siempre un problema latente. 
- Las tácticas tienen que encajar con la situación técnica, militar y geográfica específica. 
- Un ejército que es propio para un tipo de guerra puede fracasar fácilmente en otra. 
- Siempre es esencial contar con una evaluación precisa de las capacidades de los aliados y del enemigo. 
- El transporte aéreo eficaz requiere mucho más que aviones, tripulaciones y buenas intenciones. 
- Inclusive la tecnología obsoleta del enemigo puede obstaculizar la victoria. 
- Las comunicaciones y la logística eficaz apoyan el éxito. 

Antecedentes Operacionales 

A fines de septiembre de 1915, una expedición británica avanzó por el Río Tigris y derrotó un gran ejército turco en Kut (alrededor de tres cuartos de la distancia entre el Golfo Pérsico y Bagdad). Luego, al comandante británico se le ordenó que se continuara a Bagdad, lo que hizo, aunque protestando de que sus fuerzas eran inadecuadas y sus líneas de abastecimiento eran pocas. El Alto Mando buscaba una victoria económica para contrarrestar el estancamiento tanto en el Frente Occidental como en los Dardanelos, y pensó que la campaña simultánea en los Dardanelos obligaría a las tropas turcas a retirarse. 

También pensaban que su ejército profesional, sumamente experimentado y disciplinado, que había tenido tanto éxito en las campañas coloniales en contra de las tribus primitivas al noroeste de la frontera con la India, podría derrotar fácilmente cifras superiores de tropas turcas tal como lo había hecho hasta el momento. Las fuerzas británicas que constaban de aproximadamente 12,000 efectivos avanzaron río arriba hasta Ctesiphon, alrededor de 22 millas de Bagdad, donde a finales de noviembre atacaron y atrincheraron una fuerza turca de 18,000 hombres. Esta batalla sangrienta le costó un tercio de bajas a los británicos y más de la mitad a los turcos. Pero los turcos retuvieron su superioridad numérica y sus posiciones, y obligaron a los británicos a retirarse de Kut donde el comandante optó esperar por ayuda. 

Los turcos asediaron a los británicos en Kut e intentaron destruirlos antes de que llegara la ayuda. El ejército asediado soportó numerosos asaltos de los turcos, pero no pudo hacer más. Los británicos pudieron lanzar abastos por paracaídas, pero si bien esto ayudó, el transporte aéreo no cumplía con los requisitos. Mientras tanto las fuerzas de ayuda marcharon hacia Kut y pelearon en cierto número de batallas a principios de 1916. Pero mientras que podían acercarse a Kut, no podían levantar el bloqueo, y sufrieron 24,000 bajas. 

Un movimiento ruso a través de Persia (Irán) llegó a la frontera de Mesopotamia demasiado tarde como para servir de ayuda. El 29 de abril una guarnición de 10,000 hombres se rindió después de haber aguantado 147 días, uno de los periodos más largos en la historia. Esta también fue la cifra más grande de tropas británicas que se han rendido hasta la fecha, sobrepasando las 8,000 bajo Cornwallis en Yorktown, y no fue superada sino hasta la caída de Singapur en 1942. La derrota en Kut fue golpe para el orgullo y el prestigio de los británicos. Ellos fracasaron porque extendieron demasiado sus comunicaciones, sobrestimaron sus capacidades logísticas y utilizaron tácticas anticuadas en contra del poder mejorado de ametralladoras y fusiles de repetición, manejadas por tropas decididas que estaban bien atrincheradas. 

La Expedición Mexicana Punitiva: 1916 

- Contar con el equipo adecuado es esencial para el logro de la misión. 
- La deficiencia en el adiestramiento puede limitar severamente las operaciones y podría ser un indicio de desastre. 
- Los militares norteamericanos tienen que estar preparados para luchar contra cualquier enemigo, en cualquier lugar y en cualquier momento. 
- Las operaciones aéreas dependen del apoyo y la logística adecuada. 
- Ejemplos de militares norteamericanos en operaciones internacionales de orden público. 

Antecedentes Operacionales 

En 1911, el gobierno mexicano fue derrotado y el país cayó en una guerra civil que se esparció al otro lado de la frontera. Veintisiete ataques a lo largo de la frontera mataron a nueve soldados y seis civiles norteamericanos. En enero de 1916, las fuerzas leales a Pancho Villa asesinaron a ocho americanos en México, y en marzo de 1916 atacaron la ciudad de Columbus, Nuevo México, matando a ocho soldados y ocho civiles. El Presidente Woodrow Wilson le ordenó a las fuerzas norteamericanas, bajo el mando del General John Pershing, que capturaran a Villa en México y activó la Guardia Nacional para luchar en la frontera mexicana-norteamericana. 

La inexperta arma aérea del Ejército norteamericano envió el 1er Escuadrón Aéreo que constaba de ocho aviones, diez pilotos y apoyo de personal equipado con camiones y motocicletas. Esta fue la primera expedición para los aviadores norteamericanos. También le dio a las fuerzas del Ejército de EE.UU. una herramienta posiblemente potente en esta operación sumamente móvil en terreno escabroso. Pero el servicio de los aviadores fue menos que distinguido. Los aviones de poca potencia no pudieron cruzar las montañas de 10,000 hasta 12,000 pies, solamente podían transportar cargas útiles de 265 libras, y el clima del desierto los afectó. 

Las hélices quebradas fue un problema ocasionado por el clima. Además, las máquinas eran sumamente sensibles en los controles y carecían de instrumentos. No contaban con comunicaciones o ayudas a la navegación, ametralladoras o bombas. No es de sorprendernos que todos, salvo los dos pilotos con más experiencia, consideraban que estos aviones no eran seguros. El adiestramiento también era primitivo, prácticamente no existía, ya que sólo uno de los pilotos del escuadrón había volado de noche, ¡y solamente lo había hecho una vez!. Después de un mes de operaciones, sólo dos de los ocho aviones estaban aptos para volar. 

A pesar de grandes promesas, los aviadores norteamericanos sólo podían entregar correspondencia y hacer envíos en una campaña en la que el poderío aéreo pudo haber desempeñado un papel significativo, sino decisivo. Al mismo tiempo que el Ejército de EE.UU. participaba en una guerra de guerrillas en México, los europeos participaban en la segunda guerra mundial. Uno de los resultados positivos de este operativo fue darle a conocer a los medios de comunicación, al pueblo y a los gobernantes la difícil situación de la aviación del Ejército norteamericano. 

Las Primeras Fuerzas Aéreas Expedicionarias (FAE): 1995-96 

- El despliegue de una FAE puede realzar las relaciones con el país sede o la coalición. 
- Las unidades rotativas fueron concebidas como un resultado lógico de la experiencia. 
- Las primeras misiones pueden lanzarse a las 24 horas de los aterrizajes iniciales. 
- Es importante contar con una infraestructura establecida en el país anfitrión. 
- El despliegue de una FAE puede ser flexible ante las exigencias inesperadas sobre los recursos de uso conjunto. 
- Los recursos de la FAE se pueden intercambiar con las fuerzas expedicionarias de otras armas. 
- Los despliegues de la FAE ayudan a los ejercicios combinados y conjuntos. 
- Se comprobó que el reach-back (acceso a tropas/fuerzas en EE.UU.) era un concepto válido para aumentar las fuerzas desplegadas. 

Antecedentes Operacionales 

El concepto de la Fuerza Aeroespacial Expedicionaria, según lo presagiado por la 366ava Ala Mixta del General Merrill McPeak, fue anunciado inicialmente por el General John Jumper cuando era el comandante de CENTAF, y luego establecida por el General Mike Ryan como el nuevo concepto de organización para la USAF. Fue "probada en campaña" por primera vez bajo condiciones operacionales reales en una serie de tres despliegues al Oriente Medio de 1995-96. 

La FAE I fue desplegada a Bahrain desde el 28 de octubre hasta el 18 de diciembre de 1995; la FAE II a Jordania desde el 12 de abril hasta el 28 de junio de 1996; la FAE III a Qatar desde el 24 de junio hasta el 20 de agosto de 1996. Cada una de ellas dejó equipo en el país anfitrión para poder apoyar una FAE futura. Para poder conservar los lazos con las fuerzas armadas del país anfitrión y para disminuir los problemas de apoyo a la familia, la Novena Fuerza Aérea de CENTAF designó subsiguientemente a tres de sus alas para proveer los elementos básicos o principales para las futuras FAE destinadas a esos países. 

Estos tres primeros despliegues de las FAE modernas fueron educativos tanto en similitudes como en sus diferencias, aunque las similitudes predominaban. Todas generaron una proporción significativa de las misiones requeridas de CENTCOM durante los periodos de sus despliegues. Las tres lanzaron sus primeras misiones en 24 horas después de los aterrizajes iniciales. Las tres tenían acceso a una infraestructura bien desarrollada de los aliados del país anfitrión. La FAE I, la primera prueba del concepto, era más moderada en tamaño y tarea, desplegando 18 F-16, con 576 efectivos y creando 637 misiones de vuelo. En contraste, las FAE II y III tenían 30 y 34 aviones caza, 1,150 y 1,200 efectivos y 918 y 1323 misiones, respectivamente. 

La FAE II demostró la flexibilidad del concepto cuando se ajustó al cambio no anticipado del transporte aéreo y la reprogramación del transporte aéreo para apoyar las operaciones como consecuencia del accidente fatal del CT-43 del Secretario de Comercio, Ron Brown, al igual que operaciones humanitarias en Liberia. La FAE II, al cubrir la "falta de portaaviones" entre el 14 de mayo y el 24 de junio de 1996, también demostró su capacidad de intercambiar con la fuerza expedicionaria de otra arma--por lo menos para ciertas misiones. Otra virtud de la FAE II fue la oportunidad que brindó para mejorar las relaciones y el adiestramiento con Jordania, un aliado putativo de la coalición, que en ese entonces estaba esperando la entrega de sus propios F-16. 

La FAE III incluyó cuatro iniciativas dignas de mencionar: (1) realzó aún más las capacidades de operaciones combinadas al llevar a cabo ejercicios con otros socios en el Golfo, y también efectuó operaciones conjuntas con elementos de la Armada de Estados Unidos en el Golfo. (2) Combinó los recursos en la zona (12 F-15 que ya estaban en el Golfo) con otros 22 aviones caza que estaban desplegando desde el territorio continental de Estados Unidos (CONUS). (3) Además de los aviones en el teatro, tres B-52 y un B-1 estaban a petición de manera permanente. (4) Por último, la FAE III se convirtió en la primera en montar una misión de poderío global cuando dos de sus B-52 a petición hicieron un vuelo de ida y vuelta desde la Base Aérea Barksdale, Louisiana, y lanzaron 27 bombas Mk-117 en el Campamento de Armas Udari en Kuwait. 

Aunque estas tres primeras pruebas del concepto contemporáneo de la FAE fueron algo modestas en alcance, fueron verdaderamente exitosas en lograr las misiones encomendadas de cumplimiento de la paz y de disuasión. Además, fueron los primeros casos en una FAE en desarrollo que le proporciona confianza y dirección a la iniciativa en curso de implementar la visión del Jefe de Estado Mayor de la Fuerza Aérea de una Fuerza Aeroespacial Expedicionaria. 

Autores 
Dr. Daniel R. Mortensen 
Dr. William L. Dowdy 
Dr. Kenneth P. Werell 
Sr. Thomas R. Searle 

Fuente: Aerospace Power Journal 

Full Adventure

Furtividad: Nuevo caza de superiodad turco

IDEF 2013: TAI revela diseños caza de quinta generación 
Por Nicholas de Larrinaga 



Turkish Aerospace Industries (TAI) ha mostrado diseños de concepto para el programa de caza indígena de quinta generación FX de Turquía en el 2013 Exposición defensa IDEF, el primero que se ha demostrado públicamente. 

TAI muestra imágenes de los tres potenciales diferentes diseños de concepto de seguridad simples: una aeronave monomotor convencionalmente; un avión de un solo motor, equipado con estabilizadores y un caza bimotor, establecidas convencionalmente. 

Los tres conceptos de elementos de características tradicionalmente asociadas con aviones de quinta generación, incluyendo un diseño optimizado para la baja densidad de radar de la sección transversal, bahías de armas internas, y la capacidad de súper crucero, dijo Huseyin Yagci, ingeniero jefe de TAI en el programa FX dijo IHS Jane en IDEF . 

Según Yagci, los dos conceptos solo motor tendrán un peso máximo de despegue de entre £ 50.000 y £ 60.000, mientras que el avión bimotor tendrá un peso máximo de despegue de entre £ 60.000 y £ 70.000 

El futuro avión de combate FX pretende sustituir eventualmente los aviones Lockheed Martin F-16 Fighting Falcon de Turquía, y otros aviones y aumentará compra planificada del país de 100 aeronaves Lockheed Martin F-35 Lightning II Joint Strike Fighter (JSF). 



Jane´s

martes, 28 de mayo de 2013

Guerra del Paraguay: El honor del 1º de Línea

"No soy digno de ser su Jefe" - Por Esteban D. Ocampo

de Escuadrón De Caballería Histórica


Recuerdo un tiempo de Gloria donde los Jefes de Batallón marchaban al frente de sus hombres para mostrarse como ejemplos, y no quedar en las ordenes... Tiempo en el cual junto al último de sus soldados sufrieron la Batalla; donde sangraron con ellos; donde su corazón se deshizo al ver caer a sus muchachos por el fuego del enemigo... Un tiempo donde cada uno de ellos fue como un padre para sus hombres. 

"El 1ro de Línea y el 1ro de Guardias Nacionales de Corrientes, atacados por un fuego infernal de fusilería y coheteras, se vieron pronto envueltos por dos batallones de infantería y un regimiento de caballería paraguayos que, resueltos e impetuosos, los obligaron a replegarse. No obstante, repuestos de la sorpresa inicial y a pesar de las grandes bajas sufridas, el 1ro. de Línea logró hacer pie y detener el avance arrollador del enemigo. Sosteniéndose a duras penas, esperando el envío de refuerzos con los que retomarán la ofensiva. Pero éstos no llegan, muy por el contrario, reciben una orden inesperada: ¡replegar el batallón! Ello significaba abandonar el campo al enemigo, y lo que era peor aún, dejar allí a los heridos y a los muertos. 
El coronel Rosetti, jefe del 1ro de Línea, aduciendo estas razones, solicitó se le enviase protección para salvar a aquellos y también el honor del batallón. Pero la respuesta fue la confirmación de la orden anterior.(...) 
Como es natural, el movimiento hacia retaguardia que se efectuó, alentó al enemigo que, emprendiendo el avance y llegando al campo abandonado, cayeron con saña feroz a ultimar a bayonetazos a los heridos y a cobrar su botín de la victoria. 
Momentos antes, uno de los heridos que quedaba abandonado, el sargento 2do José María Abrego, que tenía una pierna fracturada por una bala a la altura del muslo (y que fue ultimado luego a bayonetazos), se incorporó y levantando su fusil gritó con voz enérgica: 

-"¿Es posible, camaradas, que se retiren y nos dejen tomar prisioneros? ¡Vengan compañeros!" 

El soldado Alejandro Sider, que tenía un balazo en un tobillo, gritó que no lo abandonasen, y así se dejaron oír otros llamados. El batallón se había alejado 80 pasos cuando estos hechos ocurrieron. El coronel Rosetti, tan valiente como noble soldado, escuchando esto, no pudo soportarlo y decidido a desobedecer la orden a cualquier precio, dirigiéndose a su batallón expresó: 

-"Es la primera vez que el 1ro de Linea se retira frente a sus enemigos", y dejándose llevar por esta cruel idea, se arrancó una de las presillas de grado y arrojándosela a los paraguayos, agregó: "No soy digno de ser su jefe", y dando vuelta cargó sólo sobre el enemigo. 
Sus palabras y su acción hicieron reaccionar a las destrozadas filas del 1ro que, al ver la desesperación heroica de su jefe, dio cara al enemigo y se lanzó al combate al grito de: "¡Viva el Batallón 1ro de Infantería!" 
Así, como obedeciendo un mandato de la historia, el 1ro de Línea dio frente al enemigo y contraatacó. 
Sus tropas se desmembraron, no hubo orden y se apreció en distintas direcciones destacarse grupos de soldados acaudillados por oficiales y suboficiales, corriendo al encuentro de los paraguayos (...) 
Después de recoger a los caídos, el batallón formó en columna y marchó a su campo y aunque en el rostro de todos se veía claramente la pena que embargaba sus espíritus por la pérdida de tantos compañeros, llevaban en sus corazones la convicción de haber cumplido la palabra empeñada por su jefe, el coronel Rosetti, al presidente de la República, al contestar la alocución que éste dirigió al batallón al marchar a la campaña del Paraguay y que concluyó, diciendo: 

"Sois el 1ro en glorias y el 1ro en presentarse en el campo de batalla a hacer flamear esa bandera que tantas veces habéis cubierto de glorias..." 

A lo que contestó su valiente jefe: 

"Excelentísimo señor: podéis estar seguro de que el batallón sabrá cumplir con su deber en el puesto que se le designe". 

Y así fue." (1) 

Hubo un tiempo de Gloria donde se luchaba por la Patria con arrojo temerario, valor y compañerismo... donde cuando uno caía, era como un golpe certero al corazón, porque uno de los hijos de la Patria estaba entregando lo más sagrado que un hombre tiene: su propia vida.
Un tiempo de Gloria, donde los Jefes se pensaban no ser dignos de sus valientes muchachos, y por ello cargaban por la Gloria junto a ellos... junto a sus hombres...

Un tiempo donde todos sabían que:

"Perecer donde se eleve la libertad e independencia de la Patria, es la tumba más gloriosa para el bravo..."
 

Aunque no fueran Jefes dignos de sus hombres... 
Aunque hoy, ante su ejemplo dejado, yo no sea digno de ser llamado ARGENTINO como ellos lo fueron... 

Esteban D. Ocampo 


(1) Giunti, Luis Leopoldo "Páginas de Gloria", Círculo Militar, pag. 88