lunes, 31 de marzo de 2025

EA: Mantenimiento de la línea SK-105 en la Patagonia

Mantenimiento operativo en unidades de combate patagónicas




Los escalones móviles de la Base de Apoyo Logístico Comodoro Rivadavia realizaron el mantenimiento de segundo y tercer nivel en vehículos y sistemas de armas del Regimiento de Caballería de Exploración 3 (Esquel), del Batallón de Ingenieros Mecanizado 11 (Comandante Luis Piedrabuena) y del Regimiento de Caballería de Tanques 11 (Puerto Santa Cruz).



Estas tareas fortalecen la operatividad y aseguran el alistamiento de las unidades de combate.

Ejercicios de defensa de activos estratégicos



Fuerzas Armadas en Córdoba: por qué están desplegadas en Embalse, CONAE y en la central espacial “Tabanera”

Los efectivos de las Fuerzas Armadas argentinas son parte de un despliegue militar sin precedentes en Córdoba. ¿El objetivo? consolidar la capacidad operativa en pos de las nuevas misiones.
Patricia Fernández Mainardi || DEF



Menos de 30 días tardaron las Fuerzas Armadas argentinas en realizar un nuevo ejercicio militar con el objetivo de consolidar sus capacidades operativas a partir de la publicación de los decretos presidenciales que modifican sus misiones.

La primera de estas actividades, el ejercicio “Candú”, se realizó en Zárate y apuntó a evaluar el adiestramiento del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea Argentina a la hora de defender el complejo nuclear Atucha.
 
Ahora, a menos de un mes, llegó el turno de evaluar las capacidades y la capacitación que tienen nuestros militares si hay que defender infraestructuras críticas de interés nacional, como la Central Nuclear Embalse, CONAE y el Centro Espacial “Teófilo Tabanera”, dos puntos vitales para el desarrollo estratégico del país. Esta vez, la operación recibió el nombre de “Candú II”.


Desde el puesto de comando multidominio se pueden ver todas las operaciones en tiempo real (Foto: gentileza FDR)

El detalle: en esta oportunidad hay un elemento del Ejército Argentino que cobra especial protagonismo, la Fuerza de Despliegue Rápido (FDR): un organismo que busca posicionarse y consolidarse como la única fuerza de respuesta inmediata, versátil y altamente capacitada para los desafíos de la defensa del siglo XXI. En términos generales, y para entender su importancia, son ellos los que, a la hora de pensar en un hipotético ataque a nuestro país, serán los primeros en llegar para contrarrestar al enemigo.

Los decretos que impactan en las misiones de las Fuerzas Armadas

Resulta que, a fines del año 2024, el presidente Javier Milei firmó dos decretos que impactan en el accionar de las Fuerzas Armadas. Uno, el 1107/2024, define los objetivos de valor estratégico que deberán ser custodiados por el personal militar: instalaciones, o conjuntos de ellas, y entidades materiales de vital importancia para el Estado, como centrales nucleares, embalses, la Casa de Gobierno o el Congreso.

Por otro lado, el 1112/2024, detalla que el personal militar deberá actuar de manera disuasiva o efectiva ante amenazas y agresiones de origen externo que se desarrollen o incidan en los espacios terrestres, marítimos, fluviales, lacustres, aeroespacial, ciberespacial y en el espectro electromagnético sin perjuicio de las misiones establecidas en la Ley de Seguridad Interior (24.059) y  de Defensa (24.948).


El general Sergio Jurczyszyn, comandante de la FDR, junto a las tropas especiales del Ejército (Foto: gentileza FDR)

En ese sentido, y desde la actividad que los militares protagonizan en Córdoba, el comandante de la Fuerza de Despliegue Rápido, general Sergio Jurczyszyn, destacó el nivel de profesionalismo y preparación demostrado por todos los elementos que operan en la provincia en este momento. No solo para reforzar las capacidades operativas, sino también para reafirmar el compromiso del Ejército en la defensa de los intereses estratégicos de la Nación.

Efectivos de élite en la provincia de Córdoba


En este momento, y en pos del ejercicio “Candú II” que se realiza en Córdoba, la Fuerza de Despliegue Rápido del Ejército Argentino buscó demostrar su capacidad de respuesta inmediata y su alto nivel de preparación operacional.


Las Fuerzas Especiales del Ejército en acción durante la etapa del ejercicio que se realizó en CONAE (Foto: gentileza FDR)


Para ello, cerca de 600 efectivos, altamente especializados y pertenecientes a unidades de élite como la IVta Brigada Aerotransportada y la Agrupación de Fuerzas de Operaciones Especiales, se ubicaron en diferentes puntos de la provincia para evaluar la respuesta a nivel táctico.

Desde la FDR detallaron que las operaciones que realizan buscan garantizar la protección de infraestructuras críticas de interés nacional localizadas en ese punto de la Argentina: la Central Nuclear Embalse y el Centro Espacial “Teófilo Tabanera”. En ese sentido, destacaron que ambas instalaciones son vitales para la defensa y el desarrollo estratégico del país.


Paracaidistas y comandos entre los participantes en el Candú II (Foto: gentileza FDR)

Uno por uno, los movimientos del ejercicio “Candú II”

Desde el Ejército contaron que la Fuerza de Despliegue Rápido instaló un puesto de comando en la zona de operaciones. ¿La razón? Consolidarse como núcleo central en la coordinación de las acciones.

¿Un valor agregado? Este puesto de comando, a diferencia de otros, integra capacidades de inteligencia artificial, comunicaciones seguras y diversos tipos de apoyo.

Asimismo, y en pos de garantizar la movilidad táctica y el apoyo aéreo necesario para ejecutar las operaciones de forma eficiente, el Ejército Argentino desplegó sus aeronaves.



Por su parte, las Fuerzas de Operaciones Especiales, efectivos altamente capacitados para operar hasta en la hostilidad más rigurosa y bajo condiciones extremadamente exigentes, son las encargadas de realizar el reconocimiento avanzado y la ocupación de determinados objetivos durante el “Candú II”.

A estos actores se suman aquellos que, con equipos de comunicaciones e inteligencia, garantizan la información en tiempo real, aspecto clave para que los comandantes puedan tomar las decisiones y, en consecuencia, ejecutar las maniobras. Además, como sostienen desde Córdoba, en la actividad también se evalúa la cadena logística militar (y la autosustentabilidad para actuar en caso de conflicto): “fundamental para el éxito de las operaciones, ya que asegura el abastecimiento continuo y la sostenibilidad de las fuerzas en el terreno”.

domingo, 30 de marzo de 2025

EA: Adiestramiento operacional del RIMec 24 en Santa Cruz

Adiestramiento operacional en Santa Cruz




El Regimiento de Infantería Mecanizado 24 está realizando ejercicios en el campo de instrucción “Teniente Coronel Fernández Cutiellos” de la Guarnición Ejército Río Gallegos.



La instrucción se lleva a cabo en dos fases: la primera consta de una pista de comprobación de 25 km para evaluar destrezas y roles de combate. Luego, se desarrollan ejercicios de tiro con armamento de dotación para certificar a los tiradores y fracciones.

sábado, 29 de marzo de 2025

Malvinas: La inteligencia del campo del batalla, el punto de inflexión.

Un punto de inflexión en Malvinas: El rol de la inteligencia en la campaña de las islas Malvinas de 1982

Basado en el artículo “A Fulcrum in the Falklands: The Role of Intelligence in the 1982 Falkland Islands Campaign” escrito por Matthew A. Hughes, Military History Chronicles 1(1): 93-125. Año 2023.
doi: 10.18278/mhc.1.1.7





Se examina cómo el proceso de inteligencia impactó directamente el desarrollo de la campaña de las Malvinas. El segmento analiza desde la invasión argentina hasta el despliegue inicial de la fuerza británica, enfocándose en los errores de cálculo estratégicos, la capacidad logística, las ventajas tecnológicas y los apoyos externos que influyeron en el uso y eficacia de la inteligencia por ambos bandos.

El texto inicia con la invasión sorpresa de Argentina a las islas el 2 de abril de 1982. Los líderes argentinos creían que esta acción desencadenaría negociaciones diplomáticas con el Reino Unido, basándose en antecedentes como la Ley de Nacionalidad Británica de 1981 y la retirada planificada del HMS Endurance. Sin embargo, se equivocaron al no anticipar una respuesta militar británica, que comenzó solo tres días después, el 5 de abril, con el despliegue de una fuerza de tarea desde Portsmouth.

La inteligencia jugó un papel clave en estas primeras fases. Argentina esperaba un bloqueo prolongado, por lo que organizó una defensa en torno a Puerto Argentino, mientras que el Reino Unido, centrado hasta entonces en amenazas soviéticas, había descuidado la recolección de inteligencia sobre Argentina, clasificándola como una prioridad baja. Esto generó brechas significativas en su comprensión de las capacidades y disposición argentinas.


Tropas británicas luego de la batalla de Monte Longdon. Diversos reconocimientos previos fueron mapeando el terreno para el avance del 3 Para.

A nivel operativo, la campaña involucró cerca de 10.000 soldados británicos y 13.000 argentinos. El Reino Unido enfrentaba dificultades logísticas por la distancia (13.000 km), mientras que Argentina, al estar solo a 480 km, tenía ventajas en reabastecimiento y movilidad aérea. No obstante, el profesionalismo y entrenamiento británico contrastaban con una fuerza argentina compuesta en gran parte por conscriptos, lo que impactó en moral y desempeño.

En el ámbito de la inteligencia, el Reino Unido tenía ventajas notables, especialmente gracias a sus submarinos equipados con sistemas de inteligencia de señales (MASINT), capaces de detectar salidas de aeronaves argentinas. Por el contrario, Argentina disponía de radares limitados, concentrados en Puerto Argentino y algunos puntos costeros, lo que restringía su capacidad de detección.

El mal tiempo en junio obligó a ambas partes a depender más de interceptaciones de señales y patrullas pequeñas para inteligencia actualizada. Las fuerzas especiales británicas como el SAS y SBS realizaron reconocimientos que mejoraron significativamente la planificación de misiones. En cambio, las tropas argentinas permanecieron en posiciones defensivas sin realizar exploraciones activas, lo que limitó su conocimiento situacional. Una de las pocas misiones de patrulla de reconocimiento (las fracciones Basualdo y Pereyra) para obtener información de primera mano del desembarco en San Carlos fue un fracaso. No por la misión, sino porque fue un caso aislado y no parte de un conjunto más grande, interconectado y planeado de ir observando el avance de las tropas enemigas.

Figura 1. Comparación de fuerzas principales – Guerra de las Malvinas

CategoríaReino Unido (~10.000 tropas)Argentina (~13.000 tropas)
Fuerzas terrestres- 2 brigadas (BDE)
 • 3 batallones de infantería de marina (MARINE BN)
 • 2 batallones aerotransportados (AIRBORNE BN)
 • 3 batallones de infantería (INFANTRY BN)
   ~5.200 tropas
- 5 baterías de artillería (ARTY BTRY)
- 1 batería de artillería antiaérea (ADA BTRY)
- 2 pelotones de tanques (TANK PLT)
- 2 escuadrones de helicópteros (31 helicópteros)
- 9 regimientos de infantería (INFANTRY REGT)
- 1 batallón de infantería de marina (MARINE BN)
   ~8.000 tropas
- 6 baterías de artillería (ARTY BTRY)
- 1 unidad de caballería blindada (ARMD CAV TROOP)
Fuerzas navales- 2 escuadrones de cazas (33 aviones)
- 9 destructores
- 8 buques anfibios
- 12 buques de apoyo
- 3 submarinos nucleares (SSN)
- 1 portaaviones ligero
- 1 crucero ligero
- 8 destructores/fragatas
- 3 submarinos diésel (SS)
Fuerza aérea(Incluida en escuadrones navales)- 3 escuadrones de caza/bombardeo (60 aviones)
- 5 escuadrones de caza (60 aviones)
- 1 escuadrón COIN (10 aviones)
- 1 escuadrón de helicópteros (10 helicópteros)
- 1 escuadrón de transporte (10 aviones)

Abreviaturas clave
ADA: Artillería de defensa aérea
ARMD: Blindado
ARTY: Artillería
BDE: Brigada
BN: Batallón
BTRY: Batería
CAV: Caballería
PLT: Pelotón
REGT: Regimiento
SQN: Escuadrón
SS: Submarino (diésel)
SSN: Submarino (nuclear)




La cooperación internacional también fue determinante. Mientras que países como Estados Unidos y Chile apoyaron encubiertamente al Reino Unido con recolección de inteligencia y operaciones de engaño, la Unión Soviética no ofreció ayuda sustancial a Argentina. La colaboración con Chile fue especialmente eficaz: se usaron maniobras de desinformación y aumentos en el tráfico radial y despliegue naval chileno para sembrar dudas en el alto mando argentino sobre una posible invasión desde el sur. Esto llevó a Argentina a retener en el continente la mayoría de sus fuerzas (90 %), debilitando así la defensa de las islas.

En suma, las páginas analizadas muestran que las deficiencias en el ciclo de inteligencia —especialmente en recolección y análisis— fueron fundamentales para el fracaso argentino. La combinación de recursos limitados, subestimación del enemigo, dependencia de supuestos erróneos y desinformación exitosa por parte del Reino Unido, permitió que los británicos consolidaran su posición antes del combate terrestre. Así, estas secciones establecen cómo la inteligencia fue no solo un apoyo, sino un factor decisivo en la evolución del conflicto.



Fase 0

La primera fase de movilización británica tras la invasión argentina a las Islas Malvinas es conocida como Fase 0, y enfatiza los retos y métodos de recolección de inteligencia, así como los engaños y errores analíticos que definieron los movimientos iniciales de ambas fuerzas.

El 5 de abril de 1982, apenas tres días después de la ocupación argentina, zarpó desde Portsmouth la fuerza de tarea británica, iniciando así la respuesta militar del Reino Unido. Sin embargo, los británicos partían con una clara desventaja: contaban con muy poca información sobre el despliegue argentino en las islas. Se apoyaban en mapas sin cuadricular, reportajes periodísticos, almanaques militares y testimonios de personal previamente asignado a las Malvinas. A pesar de estas limitaciones, la inteligencia británica logró elaborar estimaciones bastante precisas de las posiciones y capacidades argentinas, gracias a métodos ingeniosos como la interceptación de comunicaciones entre soldados argentinos y sus familias, imágenes de reconocimiento, y el uso de fuentes abiertas.

Las unidades especiales británicas —SAS y SBS— jugaron un rol esencial al realizar reconocimientos que guiaron decisiones clave, como el sitio del desembarco anfibio. Mientras tanto, las fuerzas argentinas, que no preveían una respuesta militar británica, tampoco habían desarrollado una estructura sólida de recolección de inteligencia. Carecían de plataformas para rastrear la flota enemiga y subestimaron la posibilidad de una contraofensiva. Como resultado, debieron recurrir a métodos improvisados, como el uso de embarcaciones y aeronaves civiles para detectar movimientos británicos. Un ejemplo claro fue el buque pesquero *Usurbil*, al que se le encomendó monitorear la flota británica con una tripulación mixta de argentinos y españoles. Sin embargo, estos reportes civiles resultaron escasos e imprecisos, y facilitaron que el Reino Unido llevara a cabo acciones de engaño exitosas.


Estimación británica de las fuerzas argentinas, fechada el 15 de mayo de 1982. La precisión de esta estimación, comparada con la disposición real de las fuerzas, refleja la gran fiabilidad de los métodos de recopilación de inteligencia entre las fuerzas británicas. [van der Bijl, Mis amigos el enemigo, 101] Licencia Creative Commons.

En paralelo, la percepción argentina sobre la amenaza chilena condicionó su estrategia. Desde el comienzo, la inteligencia argentina consideraba a Chile como un posible agresor en caso de guerra, dada una disputa limítrofe previa. Aunque no había pruebas concretas de un ataque chileno, los mandos militares aceptaron este riesgo bajo la creencia de que el Reino Unido no respondería militarmente. No obstante, la situación cambió: la inteligencia argentina empezó a recibir señales de una posible ofensiva chilena, lo cual obligó al alto mando a dividir sus fuerzas y dejar solo el 10 % de su ejército en las islas.

Este temor fue avivado por una estrategia de engaño británica concertada con Chile. Como parte del acuerdo, el Reino Unido ofreció armamento a cambio de cooperación en inteligencia. El ejército chileno aumentó su tráfico radial y desplegó unidades navales bajo silencio radial, simulando un inminente ataque. Esto llevó a Argentina a mantener a sus mejores unidades —incluyendo cuatro de cinco batallones de infantería de marina— en el continente, debilitando notablemente su postura defensiva en las islas.

En resumen, esta sección demuestra cómo los británicos, a pesar de comenzar con información limitada, compensaron con creatividad, uso de fuentes abiertas, reconocimiento especial y apoyo extranjero. En contraste, la inteligencia argentina, afectada por suposiciones erróneas y falta de medios eficaces, tomó decisiones que afectaron negativamente su capacidad de respuesta ante el avance británico.



Fase 1

Se analiza luego cómo la lucha por el control aéreo y marítimo fue profundamente influenciada por la inteligencia, tanto en su uso eficaz por parte del Reino Unido como en sus fallos críticos en el lado argentino. Dos elementos principales estructuran esta fase: la amenaza de los misiles Exocet y los bombardeos a buques británicos.

El Reino Unido identificó desde el inicio que los cinco misiles Exocet franceses en posesión de Argentina, lanzados desde cazas Super Étendard, representaban un riesgo existencial para su flota. Un solo impacto sobre alguno de los dos portaaviones británicos podría arruinar toda la operación. Consciente de ello, el gobierno británico adoptó una estrategia proactiva basada en inteligencia: persuadió al presidente francés François Mitterrand para que suspendiera la venta de más misiles y emprendió operaciones encubiertas para comprar o sabotear cualquier Exocet disponible en el mercado internacional, incluso con una inversión de 50 millones de dólares. Estas acciones lograron interrumpir los planes argentinos de reabastecimiento, frustrando sus intentos de adquirir más misiles a través de Libia, Irán y Perú.

El impacto psicológico de esta amenaza fue notable. Las fuerzas británicas hablaban del “síndrome Exocet”, una actitud de extrema cautela que condicionaba las decisiones tácticas. Por ejemplo, evitaban exponer sus portaaviones innecesariamente. Solo cuando se confirmó que Argentina no podría reabastecerse de *Exocets*, los británicos comenzaron a asumir mayores riesgos operacionales.

Por otro lado, aunque Argentina logró impactar con bombas alrededor del 75 % de los buques británicos atacados, aproximadamente el 50 % de estas no detonaron debido a errores en la técnica de lanzamiento. Aviadores navales desarrollaron una solución (lanzamiento en parábola), pero no la compartieron con la Fuerza Aérea. Además, Argentina dispersó a los pilotos tras sus misiones para ocultar pérdidas, lo que impidió debriefings eficaces. Este fallo en la diseminación de inteligencia redujo significativamente el impacto de los ataques aéreos, permitiendo a los británicos consolidar su superioridad naval y aérea. Así, el control del aire —clave para la campaña— fue definido más por el manejo de la inteligencia que por la cantidad de medios disponibles.



Fase 2. Desembarcos
La sección se centra en cómo la inteligencia —su uso, fallos y manipulaciones— fue determinante en el éxito del desembarco británico en San Carlos y las operaciones previas, como el ataque a Isla Bordón (Pebble Island). Esta fase muestra cómo las decisiones tácticas clave, tanto acertadas por parte del Reino Unido como erróneas del lado argentino, estuvieron profundamente influidas por evaluaciones de inteligencia incompletas o equivocadas.

La etapa comienza con el primer gran error de interpretación argentina. El 1 de mayo, ante bombardeos británicos y desembarcos de fuerzas especiales (SAS y SBS), los defensores argentinos reportaron lo que interpretaron como un desembarco masivo en el norte de la Isla Soledad. Esta percepción coincidía con evaluaciones previas argentinas que preveían un ataque británico en esa área hacia finales de abril. La Armada argentina, actuando en base a esta información, desplegó unidades navales para interceptar la supuesta invasión. Sin embargo, a falta de actualizaciones posteriores y ante la ausencia de combates sostenidos, el almirante Lombardo canceló la operación seis horas después. Durante la retirada, el crucero General Belgrano fue hundido por el submarino británico Conqueror, causando 368 muertes, la mayor pérdida argentina en toda la guerra. Este fracaso fue el resultado directo de una interpretación errónea de los indicios iniciales, derivada de análisis circular y falta de verificación independiente de reportes.


Comando del SAS (identificado tácitamente por portar la carabina M4)

El siguiente episodio clave fue la Operación en Pebble Island, ejecutada el 15 de mayo por el SAS. Guiados por un único informe de inteligencia sobre la posible existencia de un radar argentino en esa ubicación —capaz de alertar sobre cualquier desembarco en San Carlos—, los británicos decidieron lanzar un ataque preventivo. El riesgo fue alto: incluso expusieron un portaaviones fuera de la protección de sus escoltas para apoyar la operación. Finalmente, aunque el radar no fue hallado, se destruyeron diez aeronaves Pucará, reduciendo así la capacidad argentina de contraataques aéreos durante el desembarco real. El éxito táctico fue acompañado de un fallo estratégico argentino: su inteligencia no interpretó este ataque como una operación de preparación (shaping operation) previa a un desembarco mayor.

El desembarco en San Carlos (21 de mayo) marcó un punto de inflexión. Los británicos eligieron ese sitio en gran parte gracias al trabajo previo del Mayor Ewen Southby-Tailyour, quien, durante una asignación anterior en las islas, había cartografiado detalladamente la zona. Sus notas resultaron cruciales para planear la operación. En contraste, los argentinos desestimaron esa área como apta para un desembarco, basándose en un estudio naval que la consideraba inviable por su geografía. Esperaban una invasión en Puerto Argentino (Stanley) o al noreste de Isla Soledad. Por tanto, distribuyeron sus defensas en hasta diez puntos posibles, debilitando su capacidad de respuesta.


El fin de una misión de reconocimiento argentina: oficial Dante Camiletti de la IMARA, parte de la patrulla Pereyra, capturado en San Carlos observando el desembarco de tropas británicas.

Además, el Reino Unido desplegó una operación de engaño (deception operation) días antes del desembarco real: el HMS Glamorgan bombardeó posiciones cerca de Puerto Argentino y emitió mensajes falsos para simular un desembarco inminente allí. Esto alimentó los sesgos existentes en la inteligencia argentina. Así, incluso cuando el 21 de mayo un teniente argentino observó el desembarco real en San Carlos y lo reportó, sus superiores lo interpretaron como una distracción. Un oficial naval argentino aseguró que, por la profundidad de la bahía, un desembarco masivo era “imposible”.

El resultado fue que las tropas británicas desembarcaron sin oposición significativa. Esta falta de reacción en un punto tan crucial —identificado por los británicos como el “último momento en el que la campaña podría haber fracasado”— se debió a la persistencia de valoraciones erróneas y a la falta de flexibilidad analítica del mando argentino. Según el autor, si el general Menéndez hubiera reaccionado con rapidez, habría podido extender el conflicto y posiblemente alterar el equilibrio estratégico.


Acciones significativas, 15 de mayo - 8 de junio de 1982. La ubicación de los eventos clave revela el papel vital de las operaciones conjuntas y la planificación de inteligencia (p. ej., los puntos de desembarco costero previstos frente a la ubicación elegida por las fuerzas británicas). [Hastings y Jenkins, La batalla de las Malvinas, 201] Licencia Creative Commons.

En conjunto, esta fase ilustra cómo el Reino Unido, con recursos limitados y poco conocimiento inicial, logró construir un panorama confiable gracias a la explotación de fuentes abiertas, el uso de inteligencia humana (HUMINT), señales interceptadas (SIGINT), y reconocimiento previo. Además, aplicó técnicas de engaño eficaces y tomó decisiones arriesgadas basadas en información parcial pero procesada con mayor rigor.

Argentina, por su parte, cometió errores reiterados: sus análisis partían de supuestos inflexibles; el procesamiento de inteligencia era lento y afectado por “información circular” (repetida sin verificación independiente); y las evaluaciones no se ajustaban ante nueva evidencia. Este conjunto de fallos, combinado con la sobrestimación de amenazas externas (como una invasión chilena), debilitó la defensa y facilitó el avance británico. Así, la inteligencia, o su ausencia efectiva, volvió a inclinar la balanza de la campaña.

Fase 3. Operaciones terrestre y fin de la guerra

La sección expone cómo la fase final de la campaña en las Malvinas estuvo profundamente marcada por la calidad de la inteligencia táctica recolectada por ambos bandos. Esta etapa, que culminó con la rendición argentina el 14 de junio de 1982, revela cómo la inteligencia a nivel de unidad, la cooperación con civiles locales y las lecciones derivadas de fallos anteriores fueron determinantes para el éxito británico en el terreno.

Tras el exitoso desembarco en San Carlos, las fuerzas británicas comenzaron una marcha terrestre de más de 80 kilómetros en dirección a Puerto Argentino (Stanley), dividiéndose en dos ejes: uno por el norte y otro por el sur. Esta fase coincidió con condiciones meteorológicas adversas, que limitaron las capacidades de reconocimiento aéreo de ambos bandos. Como resultado, se intensificó el uso de inteligencia basada en señales (SIGINT), informes de patrullas, y particularmente en los testimonios de civiles isleños, quienes proporcionaron información valiosa sobre la localización de tropas argentinas. Esta dependencia en inteligencia humana local resalta el componente informal y a la vez crucial de la recolección de información durante operaciones militares.

En el eje sur, el 2.º Batallón del Regimiento de Paracaidistas británico (2 Para) se preparaba para atacar la posición argentina en Wireless Ridge, una elevación clave al oeste de Puerto Argentino. El comandante del batallón inicialmente contaba con inteligencia muy limitada sobre el enemigo. Sin embargo, tras una postergación de 24 horas, él y sus oficiales ascendieron el cercano Monte Longdon para obtener observación directa del terreno y las fuerzas enemigas. Este ejemplo ilustra la importancia de la inteligencia generada directamente por los mandos tácticos, a falta de información suministrada por estructuras superiores. A partir de estas observaciones, pudieron planificar una ofensiva más precisa, que resultó en una victoria con bajas mínimas propias y una fuerte pérdida argentina (hasta 100 muertos y 17 capturados según no siempre confiables fuentes británicas). La desmoralización posterior en las fuerzas argentinas en Puerto Argentino fue un factor directo que aceleró la rendición.

Otro episodio decisivo fue el ataque aéreo argentino sobre Pleasant Bay (Bahía Agradable) el 8 de junio, cuando la inteligencia argentina detectó correctamente el desembarco británico de refuerzos. Utilizando una táctica de engaño, enviaron cuatro cazas Mirage como señuelo hacia San Carlos para atraer a los Harrier británicos en patrulla aérea de combate (CAP), mientras una segunda oleada principal atacó sin oposición en Port Pleasant. Sin embargo, aunque el submarino británico HMS Valiant detectó a tiempo el despegue argentino y envió un aviso vía satélite al cuartel general en Northwood (Reino Unido), este mensaje no llegó a la fuerza de tarea en las Malvinas por “problemas de comunicación”. Como resultado, los británicos no pudieron anticipar el ataque ni evacuar rápidamente, lo que causó la mayor pérdida humana británica en un solo incidente de la guerra: 50 muertos y 54 heridos. Este caso ilustra una de las pocas fallas significativas del sistema de inteligencia británico, directamente asociada a fallos en la diseminación de inteligencia entre niveles estratégicos y tácticos.

En las conclusiones bajo el título “The Fulcrum of Intelligence”, el autor sintetiza cómo la campaña fue moldeada, en cada fase, por el desempeño en el ciclo de inteligencia. Gran Bretaña, a pesar de sus limitaciones iniciales, aprovechó con gran eficacia los recursos disponibles: inteligencia de señales, colaboración con civiles y países aliados (notablemente Chile y EE. UU.), y una actitud proactiva para suplir carencias mediante reconocimiento táctico y fuentes abiertas. El análisis también destaca la capacidad británica para usar la inteligencia no solo como herramienta de recopilación, sino como base para operaciones de engaño y decisiones de riesgo calculado.

Por contraste, Argentina padeció una serie de deficiencias sistémicas en todo el ciclo de inteligencia: recolección insuficiente, análisis sesgado (incluyendo dependencia de suposiciones erróneas), deficiente diseminación de información, y una marcada incapacidad para adaptar evaluaciones ante nueva evidencia. La percepción constante de una amenaza chilena —reforzada por operaciones británicas de desinformación— condicionó decisiones estratégicas clave, como mantener la mayoría de sus fuerzas en el continente.


Batalla de Wireless Ridge, 13-14 de junio de 1982. Las fuerzas británicas dependían de la recopilación orgánica de datos mediante observación directa (patrullas) debido a las limitaciones de otros métodos de recopilación. [«Parte 47: Aproximación de los 2 Paracaidistas a la Batalla de Wireless Ridge: 13/14 de junio de 1982», Naval History Homepage, 31 de mayo de 2013, https://www.naval-history.net/F57wireless.htm] . Licencia Creative Commons.

El autor argumenta que, de haber contado con una estructura de inteligencia más robusta, Argentina podría haber desplegado más tropas en las islas, planificado mejores ataques aéreos, ocupado terreno clave, y neutralizado activos británicos cruciales como los portaaviones. Tales acciones, sugiere, podrían haber alterado el resultado del conflicto.

En conclusión, la inteligencia no solo apoyó las operaciones militares: fue el punto de equilibrio sobre el cual se inclinó el conflicto. El Reino Unido, mediante su enfoque adaptable y centrado en la explotación máxima de la inteligencia disponible, logró superar la ventaja numérica y geográfica argentina. El título del artículo —“A Fulcrum in the Falklands”— cobra pleno sentido: el éxito británico no se debió únicamente a su fuerza militar, sino a cómo supieron posicionarse estratégicamente en el eje decisivo de la guerra: la inteligencia.


Principales recursos de inteligencia en la Campaña de las Islas Malvinas (Figura B-1)

DisciplinaArgentinaReino Unido
Inteligencia Humana (HUMINT)Fuerzas: 15 civiles isleños argentinos
Notas: La población residente argentina en las islas (15 personas) sirvió como fuente.
Fuerzas: Isleños de las Malvinas
Notas: Reportaron movimientos argentinos a través de radio banda ciudadana.
(Limitaciones por falta de hispanohablantes; solo el intérprete del comandante de fuerzas terrestres hablaba español).
Inteligencia de Señales (SIGINT)Fuerzas:
– Buques pesqueros (Narwal)
– Submarino (ARA San Luis)
– Isleños de las Malvinas
Notas:
– Los pesqueros tenían capacidades ELINT; buena producción de inteligencia.
– El submarino se posicionó cerca de la fuerza británica; inteligencia limitada.
– Los argentinos monitoreaban radio de banda ciudadana, usada por los isleños y aprovechada para interceptar comunicaciones británicas abiertas (ventaja por número de hablantes de inglés).
Fuerzas:
– Avión de vigilancia Nimrod
– Estación de escucha en Isla Ascensión
– Lingüistas en Cheltenham, Reino Unido
Notas:
– La estación (a más de 6.400 km) interceptaba comunicaciones argentinas.
– Especialistas trabajaban 24/7 para “monitorear, analizar y descifrar miles de mensajes operativos y de otro tipo”.
Inteligencia de Medición y Firmas (MASINT)Fuerzas: Radares costeros
Notas: Detectaban buques y aviones británicos a lo largo de la costa.
Fuerzas: Submarinos cerca del continente argentino (incluyendo HMS Valiant)
Notas: Los radares detectaban despegues; alertaban a la fuerza de tareas sobre ataques aéreos inminentes.
Inteligencia de Imágenes (IMINT)Fuerzas: Varias aeronaves
Notas: El mal tiempo y la nubosidad en junio redujeron la capacidad de recolección.
Fuerzas: Varias aeronaves y satélites
Notas: También afectadas por el mal clima; disponibilidad limitada de imágenes satelitales.
Inteligencia de Fuentes Abiertas (OSINT)Fuerzas: Servicio Mundial de la BBC
Notas: Revisión diaria de noticias revelaba información útil sobre fuerzas y planes británicos, pero los argentinos solían considerar erróneamente que se trataba de desinformación.
Fuerzas: Analistas de inteligencia
Notas: Recolectaban información de diversas fuentes como Military Balance 1978/79, Jane’s, International Defense Reviews, revistas de reconocimiento, fotografías periodísticas y transmisiones televisivas.



ContrainteligenciaFuerzas: (No especificadas)
Notas: Mal ejecutada y poco controlada. Intentaron censurar la prensa pero tuvieron dificultades con la Secretaría de Información Pública.
Fuerzas: (No especificadas)
Notas: Luchas constantes con la prensa para limitar la difusión de información sobre las operaciones.
Fuerzas EspecialesFuerzas: Unidades de comando
Notas: Utilizadas para establecer contacto y recolectar inteligencia.
Fuerzas: SAS, SBS
Notas: Realizaron reconocimiento de sitios de desembarco y defensas argentinas; ejecutaron la incursión en Isla Pebble.
Unidades de ManiobraFuerzas: Puestos de observación
Notas: Reportaron movimientos de la fuerza de tareas británica, principalmente a lo largo de la costa.
Fuerzas: Fuerzas de patrulla / puestos de observación
Notas: Proporcionaron la mayor parte de los informes en junio, a medida que se acercaba el final del conflicto.
Guerra Psicológica (*)Fuerzas: (No especificadas)
Notas: Operaciones mal ejecutadas y controladas en las islas.
Fuerzas: (No se disponía de unidad de guerra psicológica para esta campaña)
Notas: El Ministerio de Defensa no contaba con una unidad dedicada a estas operaciones.
Facilitadores ExtranjerosFuerzas: Unión Soviética
Notas:
– Lanzó el satélite Kosmos 1365, posicionado sobre el Atlántico Sur; usado para ubicar al HMS Sheffield.
– Usó aeronaves TU-95 para recolectar información sobre la fuerza británica cerca del ecuador.
Fuerzas:
– Chile
– Estados Unidos
Notas:
– Chile brindó alerta temprana y colaboró en operaciones de engaño.
– EE. UU. apoyó con SIGINT satelital (VORTEX) y aviones de reconocimiento de largo alcance SR-71.
Análisis de Fuentes Combinadas (All-Source Analysis)Fuerzas: Células o personal de inteligencia en unidades de maniobra y servicios.
Notas: Cada servicio procesaba su propia inteligencia, pero no la compartía con otros.
Fuerzas:
– Célula de inteligencia a nivel de batallón y superiores
– Célula de Inteligencia Aérea
Notas:
– Realizaban análisis a partir de informes primarios.
– Ni SBS ni unidades de guerra ártica/montañosa tenían apoyo de inteligencia.
– La célula aérea fue creada durante el conflicto para evaluar amenazas aéreas.

Definiciones

MASINT (por sus siglas en inglés: Measurement and Signature Intelligence) es un tipo de inteligencia utilizada por fuerzas militares y agencias de seguridad que se basa en la medición y análisis técnico de firmas físicas o químicas asociadas a objetos, actividades o fenómenos.

En criollo: es la inteligencia que no se basa ni en fotos (IMINT) ni en comunicaciones (SIGINT), sino en detectar cosas como radiación, vibraciones, calor, sonidos, emisiones electromagnéticas raras, partículas, etc.

¿Qué analiza MASINT?

  • Firmas térmicas (calor de un motor o explosión)

  • Emisiones de radar no estándar

  • Radiación nuclear o química

  • Vibraciones de túneles subterráneos

  • Huellas acústicas o sísmicas

  • Análisis espectral de gases o materiales

Ejemplo real:

Un misil es lanzado → MASINT puede detectar el calor, la trayectoria, el sonido, y hasta la firma química del combustible para saber de dónde salió, qué tipo era, y quién lo fabricó.

Es clave en vigilancia estratégica, detección de armas ocultas o no convencionales, y verificación de tratados internacionales.

IMINT significa Inteligencia de Imágenes (en inglés, Imagery Intelligence), y es una disciplina del mundo de la inteligencia que se basa en el análisis de imágenes —tanto fijas como en movimiento— obtenidas desde plataformas aéreas, espaciales o terrestres.

En lenguaje común: es ver y entender desde arriba, ya sea con satélites, drones, aviones espía o cámaras instaladas en tierra.

¿Qué analiza IMINT?

  • Ubicación de unidades militares

  • Movimientos de vehículos o barcos

  • Cambios en infraestructura (bases, pistas, radares, lanzadores)

  • Construcciones ocultas o ilegales

  • Patrones de actividad humana o logística

Tipos de imágenes usadas:

  • Fotografía aérea convencional

  • Satelital óptica (como Google Earth, pero con mejor resolución y espectros)

  • Infrarroja (detección de calor)

  • Radar de apertura sintética (SAR) (ve a través de nubes o de noche)

  • Multiespectral e hiperespectral (analiza materiales, vegetación, actividad química)


OSINT, que significa Open Source Intelligence o, en castellano, Inteligencia de Fuentes Abiertas.

¿Qué es OSINT?

Es la obtención, procesamiento y análisis de información pública y accesible legalmente, con fines de inteligencia. Es decir, todo lo que está “ahí afuera”, pero requiere saber dónde buscar, cómo analizar y qué extraer.

En criollo: es como armar un rompecabezas solo con piezas que cualquiera puede ver... si sabe dónde mirar.

¿Qué fuentes usa OSINT?

  • Medios de comunicación (TV, radio, diarios)

  • Redes sociales (X, Facebook, TikTok, Telegram, etc.)

  • Sitios web y foros

  • Bases de datos públicas

  • Documentos académicos o gubernamentales

  • Fotos y videos publicados online

  • Imágenes satelitales comerciales

  • Registros civiles, comerciales, licitaciones, etc.

Ejemplo real:

En plena guerra, un soldado sube una foto a Instagram con el fondo de un edificio. OSINT permite geolocalizarlo, cruzarlo con mapas e imágenes previas, y detectar la posición exacta de una unidad militar. Así lo hacen grupos como Bellingcat.



EA: Entrenamiento del RIM 9 en Misiones

 


Adiestramiento de combate en Misiones



El personal del Regimiento de Infantería de Monte 9 completó las certificaciones por Rol de Combate.
Estos cursos incluyeron instrucción teórica y práctica que permitió a cuadros y soldados reforzar su educación operacional y fortalecer la preparación de la Unidad para futuras operaciones.



Chequia: Pequeños motores jets PBS TJ150 para UAVs y armas dirigidas (como la Dardo 3)

Licencia de exportación para pequeños motores a reacción: una garantía de seguridad y confianza

El fabricante checo de motores a reacción pequeños, PBS GROUP, opera en un sector donde la precisión tecnológica va de la mano con la responsabilidad por la seguridad y el control de las exportaciones. Sus motores están clasificados como material militar en la República Checa, lo que significa que su exportación está sujeta no solo a las regulaciones comerciales estándar, sino también a estrictas medidas de control.
CZ Defence

Imagen: PBS GROUP Los motores están clasificados como material militar en la República Checa, lo que significa que su exportación está sujeta no solo a las regulaciones comerciales estándar, sino también a estrictas medidas de control | PBS GROUP

La situación de seguridad global y la consiguiente creciente demanda de productos de PBS GROUP han transformado a esta tradicional empresa checa, que hasta hace unos años se centraba principalmente en programas de producción civil, en una empresa dedicada principalmente a la exportación de equipo militar. Esto, inevitablemente, impone mayores exigencias en materia de seguridad. La empresa ha superado con éxito diversas inspecciones, incluyendo los trámites de licencia para la exportación de equipo militar. «Nuestros productos son tecnología de vanguardia que impacta en las capacidades de defensa de las naciones. Por eso, insistimos en que nunca caigan en malas manos», declaró Pavel Čechal, director ejecutivo de PBS GROUP, a CZ DEFENCE.

Control consistente de múltiples niveles

Obtener una licencia de exportación de equipo militar en la República Checa es un proceso complejo que garantiza que cada exportación se examine cuidadosamente desde múltiples perspectivas. Cuatro ministerios participan en este proceso. El principal coordinador es el Ministerio de Industria y Comercio. Recibe las solicitudes de licencia de exportación, gestiona la tramitación administrativa y también es responsable de garantizar el cumplimiento de todos los requisitos legales y normativos relacionados con las exportaciones. «La cooperación con el Ministerio de Industria es fundamental. Se trata de garantizar que el proceso administrativo sea lo más eficiente posible y que se respeten todos los estándares de seguridad», afirma Čechal.

Imagen: Motor actual PBS TJ150 | PBS GROUP



Desde una perspectiva de política exterior, el Ministerio de Asuntos Exteriores evalúa las licencias de exportación. Examina los riesgos asociados a los posibles usuarios finales y su impacto en la seguridad internacional. El Ministerio de Defensa evalúa si la exportación socavará la seguridad de la República Checa y sus intereses de defensa. Este paso es importante para garantizar que la tecnología checa no se utilice indebidamente en contra de los intereses nacionales. Otro organismo gubernamental involucrado en el proceso es el Ministerio del Interior, que se centra en prevenir infracciones de las normas de control de armas y materiales sensibles y en minimizar el riesgo de uso indebido. «Cada uno de estos pasos añade un nivel adicional de control, garantizando que el resultado final se ajuste tanto a los requisitos de seguridad como a las normas internacionales», declaró Pavel Čechal.

Selección cuidadosa de clientes

Uno de los pasos más importantes para obtener una licencia de exportación de material de uso militar es investigar exhaustivamente al usuario final del producto, como un motor de aeronave pequeña o una unidad auxiliar de potencia (APU). Este proceso incluye la identificación y verificación del comprador, la evaluación de los riesgos asociados a un posible uso indebido y la comprobación del cumplimiento de las sanciones y embargos internacionales. «La verificación del usuario final no es solo un procedimiento formal, sino también una parte vital de nuestra responsabilidad. Necesitamos asegurarnos de que nuestra tecnología no se utilice indebidamente», enfatiza Pavel Čechal.

Imagen: Vehículo aéreo no tripulado actual | PBS GROUP

Las licencias de exportación como medida de protección

El sistema de licencias de exportación de la República Checa está diseñado para minimizar el riesgo de uso indebido de equipo militar y garantizar que las exportaciones se realicen de conformidad con las normas internacionales de seguridad. Este estricto régimen de control refuerza la confianza de los socios extranjeros en los proveedores checos y garantiza que la República Checa siga siendo un actor fiable en el mercado mundial de equipo militar.

«Las licencias de exportación no son, sin duda, una simple tramitación burocrática, sino una garantía esencial que protege no solo a nuestra empresa, sino también a la comunidad internacional, del riesgo de uso indebido de tecnología avanzada», afirma Čechal. «Gracias a este proceso, podemos garantizar a nuestros clientes extranjeros que la cooperación con PBS GROUP no solo es garantía de calidad, sino también un enfoque responsable hacia la seguridad internacional», añadió el director ejecutivo de PBS GROUP.

Foto: El Ministro de Industria y Comercio, Lukáš Vlček, durante su visita a PBS Velká Bíteš | GRUPO PBS

El régimen de exportación en la República Checa forma parte de la garantía de un enfoque seguro y responsable en el desarrollo y la distribución de equipo militar. Para PBS GROUP, un proceso de licencias de calidad es un medio y una condición fundamental para el rápido crecimiento de la empresa en los mercados extranjeros en un momento de gran demanda de sus productos. Esto le permite consolidar su posición como socio internacional fiable y responsable para garantizar la defensa de numerosos países, incluyendo gran parte de la Alianza del Atlántico Norte.

¿Qué características tiene el PBS TJ150?

El PBS TJ150 es un motor turborreactor checo fabricado por PBS Velká Bíteš. Este motor fue desarrollado para vehículos aéreos no tripulados, incluyendo drones objetivo, así como aeronaves tripuladas. Con un empuje de hasta 1500 N, el PBS TJ150 es el segundo motor más potente de la gama de motores PBS. El motor entró en producción en serie en 2019.


El PBS TJ150 es un pequeño turborreactor de un solo eje que consta de un compresor radial , un difusor radial y axial, una cámara de combustión anular, una turbina axial y una tobera de salida fija. El motor cuenta con un generador de arranque integrado para arrancar y suministrar energía a la red de cubierta, y un sistema de aceite independiente.



El motor PBS TJ150 se desarrolló a partir del PBS TJ100 , utilizando el mismo diámetro exterior y peso, pero con un 20 % más de potencia. Una de las versiones del PBS TJ150 permite el aterrizaje en agua salada.



Características generales

  • Tipo: turborreactor
  • Longitud: 25,04 pulgadas (636 mm)
  • Diámetro: 10,71 pulgadas (272 mm)
  • Peso seco: 37,70 lb (17,10 kg)

Componentes

  • Compresor

Rendimiento

  • Empuje máximo : 337 lbf (1500 N)
  • Relación empuje-peso : 8,9:1


Nota del editor:
Es una gran oportunidad para evaluar esta posibilidad para equipar a la FAS-850 Dardo 3 con un motor que extienda su alcance o, en caso de ser necesario, reformular el modelo para aceptar la nueva adición. La posibilidad de producir bajo licencia, dada las consideraciones económicas del país, debiera dejarse para un mejor momento salvo que se pudiera considerar un joint-venture o la instalación en el país de una planta para provisión a terceros.


jueves, 27 de marzo de 2025

Ases de la guerra de Biafra

 


Biafra

Guerra civil nigeriana

Victorias aire-tierra

Fecha Unidad Aeronave
Piloto Lugar Víctima Resultado País 10.7.1967 BAF RB-26P Zumbach, J. Aeródromo de Makurdi "varios" DC-3 presa./dest. NAF 19.8.1967 BAF   desconocido Aeródromo de Kano "varios" MiG-17 destruido NAF 20.8.1967 BAF   desconocido Aeródromo de Kano "varios" MiG-17 destruido NAF 22.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) Aeropuerto de Port Harcourt. MiG-17F
NAF620 presa./dest. NAF 22.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) Aeropuerto de Port Harcourt. MiG-17F presa./dest. NAF 22.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) Aeropuerto de Port Harcourt. Il-28 presa./dest. NAF 25.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (**) Aeropuerto de la ciudad de Benin. MiG-17F presa./dest. NAF 25.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (**) Aeropuerto de la ciudad de Benin. Il-28 (+) presa./dest. NAF 26.5.1969 Esc IMF IMF-9 Haglund, G. aeródromo de enugu MiG-17F destruido NAF 26.5.1969 Esc IMF IMF-9 Lang, M. aeródromo de enugu MiG-17F destruido NAF 26.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) aeródromo de enugu MiG-17F presa./dest. NAF 26.5.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) aeródromo de enugu Il-28 (++) presa./dest. NAF 8.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) helicóptero aéreo. helicóptero destruido NAF 8.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) helicóptero aéreo. helicóptero destruido NAF 8.1969 Esc IMF IMF-9 desconocido (*) helicóptero aéreo. helicóptero destruido NAF

Estadísticas de los primeros 29 ataques (5 abandonados por diferentes motivos) mayo-agosto:

432 cohetes disparados, más del 50% alcanzaron objetivos. No se perdieron aviones ni pilotos propios.
  Destruido dañado
MiG-17 3 2
Il-28 1  
Canberra 1 1
Intruso 1  
2 ing.transporte   1
Helicópteros 2 1
Camiones 7  
Radar 1  
torre ATC 1 1
Edificios terminales   2
Planta de energía 1  
Ammm. almacenamiento 1  
Sede   3
aaa 2  
Estación de bombeo de aceite 1  
Pérdidas enemigas: 300 hombres en los aeropuertos, 200 hombres en el frente

Fuente: Haglund, Gunnar: Gerillapilot i Biafra , Allt om hobby AB, Estocolmo, 1988.

10.10.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de la ciudad de Bebibg. MiG-17F destruido NAF 10.10.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de la ciudad de Bebibg. DC-4 destruido NAF 11.11.1969 BAF AT-6 Harvard desconocido (#)   DC-4 destruido NAF 11.11.1969 BAF AT-6 Harvard desconocido (#)   MiG-17F dañado NAF 11.11.1969 BAF AT-6 Harvard desconocido (#)   L-29 Delfin dañado NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. MiG-17F presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. MiG-17F presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. MiG-17F presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. DC-1 presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. DC-4 presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. hacer-27 presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. e/a presa./dest. NAF 12.11.1969 IMF cuadrados. IMF-9 desconocido (***) Aeropuerto de Port Hacourt. e/a presa./dest. NAF
Comentarios:
(*) :
Carl-Gustaf Ericsson von Rosen (Sw), Gunnar Haglund (Sw), Martin Lang (Sw), Willy Murray-Bruce (Biaf), Augustus Opke (Biaf).
(**) :
Carl-Gustaf Ericsson von Rosen (Sw), Gunnar Haglund (Sw), Martin Lang (Sw), Augustus Opke (Biaf).
(***) :
Friedrich Merz (Alemania), Ibi Brown (Biaf), Alex Agbufane (Biaf), "Benny" (Biaf).
(#) :
Mercenario portugués.
(+) :
De hecho, Douglas DC-4.
(++) :
De hecho, el Douglas RB-26P Invader fue destruido en 1967.
BAF:
Fuerza Aérea de Biafra.
NAF:
Fuerza Aérea de Nigeria.


SAAB MFI-9 MiniCOIN, Fuerza Aérea de Biafra.

SAAB MFI-9 MiniCOIN, Fuerza Aérea de Biafra.

North American AT-6 Texan/Harvard, Fuerza Aérea de Biafra, aeródromo de Uga, octubre de 1969.

Douglas RB-26P Invader, Fuerza Aérea de Biafran, aeródromo de Enugu, agosto de 1967.

Mikojan-Gurjevič MiG-17F Fresco, Fuerza Aérea de Nigeria.

Mikojan-Gurjevič MiG-17F Fresco, Fuerza Aérea de Nigeria.

Iljušin Il-28 Beagle, Fuerza Aérea de Nigeria.


Fuentes y literatura 


  1. Investigador Håkan Gustavsson.
  2. Baxter, Peter: Biafra, The Nigerian Civil War 1967-1970, Africa@War Book 16, Helion & Company, 2014. ISBN 978-1-909982-36-9
  3. Baxter, Peter: Biafra, The Nigerian Civil War 1967-1970, Africa@War Book 45, Helion & Company, 2019. ISBN 978-1-915113-22-1
  4. Berns, Lennart: Děti z Biafry… Air Force o pěti letadlech, in Revi, No. 2, 1994.
  5. Brzkovský, Marek: Neklidné africké nebe, Letečtí žoldnéři v Biafře, in extra Válka Vojska, No. 51, 2021.
  6. Brzkovský, Marek: Esa jednoho dne, Sériové sestřely, in Válka revue Speciál, Války stíhačů, 27. říjen 2021.
  7. Jowett, Philip: The Biafran Army 1967-70: Build-Up and Downfall of the Secessionist Military, Africa@War Book 47, Helion & Company, 2019. ISBN 978-1-915113-24-5
  8. Kluge, Robert: MiniCOIN über Biafra, Bürgerkrieg in Nigeria, in FliegerRevue X, No. 75, 2019.
  9. Petz, Daniel: MFI-9, trpaslík mezi bitevníky, in Historie a plastikové modelářství, No. 10, 1993.
  10. Polák, Tomáš: Okřídlený tulák Jan Zumbach, in Aero Plastic Kits Revue, No. 49, 1996.
  11. Polanský, Karel: Biafra, zapomenutá africká tragédie, in Fakta & svědectví, No. 7+8, 2018
  12. Slizewski, Grzegorz - Comas, Matthieu - Cony, Christophe: Jan Zumbach un sacre canard dans la RAF, in Avions, No. 124, 2003.
  13. Šafařík, Jan: Létající hrabě Carl-Gustav Ericsson von Rosen, in Hobby Historie, č.4, 2010.
  14. Жирохов, Михаил - Моногону, Обунигве: Прощай, Биафра! Воздушная война в Нигерии в 1967-70 гг., Авиамастер, № 4, 2002.
  15. "Biafran Babies", A Noble Swede: From Relief to Raid, http://www.kwenu.com/biafra/biafran_babies.htm.
  16. Biafran Invaders, The Douglas A/B-26 Invader, http://vectaris.net/id307.html.
  17. Cooper, Tom: Civil War in Nigeria (Biafra), 1967-1970, Air Combat Information Group, http://s188567700.online.de/CMS/index.php?option=com_content&task=view&id=218&Itemid=47.
  18. Gustavsson , Håkan: Biplane Fighter Aces from the Second World War, http://www.dalnet.se/~surfcity/index.html.
  19. Haglund, Gunnar: Gerillapilot i Biafra, Allt om hobby AB, Stockholm, 1988.
  20. Housworth, Gordon: Asymmetrical air force symmetries: Biafra Babies and Air Tigers, part II, http://spaces.icgpartners.com/index2.asp?NGuid=DA8D6DADD9DD4F59AED1AD1F66DA147B.
  21. Operation Biafra Babies, The Swedish military aviation page, http://www.canit.se/~griffon/aviation/text/biafra.htm.
  22. Runarsson, Kristjan: Fleas versus Falcons over Biafra, Short history and assessment of the MFI-9B "MiniCOIN" in Biafran air force service, Part I, The Pogrom, War & Starvation, http://thepogrom-war-starvation.blogspot.com/2007/06/fleas-versus-falcons-over4-biafra.html.
Fuente