sábado, 19 de diciembre de 2020

Argentina: Defensa, economía y Malvinas

Hacia una historia ecléctica de la defensa argentina

 

Constamente se agotan discusiones sobre posibles compras en defensa que reviertan el estado paupérrimo de la defensa argentina (1,2). Esta es una cuestión que atañe a los argentinos interesados en el tópico de defensa desde el inicio de la democracia. Principalmente porque desde 1983, en el año posterior a la finalización de la campaña de Malvinas, todo un esquema defensivo creado a través de las décadas desde los años 30 (no desde el 45 como muchos piensan) fue consecutiva y paulatinamente desmontado producto de muchas circunstancias, sin dudas enmarcadas en pobrísimas decisiones de política. La idea es discutir diferentes aspectos de este período negro de la defensa argentina y diferentes interpretaciones propias tratando de alejar las mismas de muchas formas tradicionales en las que ha sido explicado.

Crucero blindado ARA San Martín 

El propósito de este ensayo es simplemente repasar la historia de la defensa argentina en vistas de la economía que enfrentó y de cómo cambios en esa estructura determinaron configuraciones y doctrinas de defensa. Y nos encontramos actualmente en una nueva fase de decadencia que se podría tal vez asemejar al período previo a la Guerra del Paraguay.


Antes de la Segunda Guerra Mundial

En primer lugar debemos distinguir dos períodos de la historia argentina reciente que muchas veces se distinguen temporalmente pero aquí agregaremos diversas otras razones para renombralos. En primer lugar, dentro del imaginario popular pero también refrendado con los datos la economía argentina (el sistema político se adaptó de una manera más lenta y diferente), existe un gran período de tiempo entre tal vez el fin de la guerra del Paraguay (1865-1870) y el fin de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), es decir un período de 75 años, en los que Argentina mantuvo las siguientes características económicas:

  • economía abierta al Mundo (en esos momentos, Europa principalmente) tanto en inversiones como en inmigración, producto de ello el país tuvo
  • fuerte inversión externa (europea en su mayoría y principalmente británica) que se dejó observar más precisamente en la creación de una de las redes de ferrocarriles más densas de Latinoamérica
  • fuerte inmigración europea, principalmente italiana y española, producto de diferencias salariales marcamente superiores en Argentina respecto a esos países especialmente comparados con las regiones más pobres de estos dos primeros países. De allí que se produjeron enormes masas de inmigrantes gallegos, abruzzeses, napolitanos, asturianos, entre otros.
  • una economía marcadamente administrada por equipos y formas organizacionales de origen europeo (nuevamente, británicos principalmente, seguidos de británicos y franceses, entre otros).
  • marcada integración al comercio mundial exportándose principalmente productos agropecuarios de las pampas (cereales y y cortes de carnes de ganado vacuno refrigerado) pero también maderas del Chaco, lanas y carne de oveja de la Patagonia, y todo lo que se pudieran embarcar y vender al exterior.

Durante este período, más precisamente al final de siglo 19, es que Argentina detenta la mejor performance histórica de su economía llegando en 1895 a tener el PBI per cápita más alto del Mundo. Sólo un hecho anecdótico desde el desastroso siglo 21 de Argentina. Sin embargo en esa época el país se enriqueció exportando todo lo que se movía y con ello se acumularon enormes cantidades de oro que permitieron importar cualquiera cosa que fuese necesaria para la economía. Producto de ello fue que las fuerzas armadas (Marina y Ejército) crecieron a la par transformando una armada fluvial en una de proyección oceánica (véase las entradas respecto a la carrera naval argentino-chilena).


¿Por qué hubo inmigración hacia Argentina? Porque se pagaban salarios el doble o el triple de altos respecto a la zonas emisoras de emigración

Este proceso armamentístico fue un proceso de retribución a los principales inversores del país: los grandes inversores europeos invertían en infraestructura en el país, esa infraestructura permitía al sistema productivo ser efeciente y exportar y acumular reservas de oro y finalmente esas reservas de oro volvían a Gran Bretaña (y otros proveedores) en la forma de compra de armamentos carísimos para la época. Debe recordarse que la Armada Nacional (ARA) de la época compraba acorazados, cruceros acorazados e incluso flotas de destructores para proteger a la flota en categorías de destructores análogos a la misma Royal Navy.

La propia dinámica de la economía empezó a generar sus propios procesos incipientes de industrialización ya hacía principios del siglo 20. Los procesos de producción industrial más acabados se iniciaron en los 20s y 30s en términos de industria de defensa con creación de la empresa HAFDASA o Hispano-Argentina que produjo motores, vehículos de tracción, pistolas, metralletas, entre otras. Es decir, la producción militar en Argentina no se inició después de la SGM.

¿Qué ocurre sumariamente luego de la Segunda Guerra Mundial?

En primer lugar, entra el fazismo (cruza entre nazismo y fascismo) en Argentina de la mano de un Coronel del EA llamado Juan Perón. Abierto admirador del Duce y de las tropas alemanas formó parte del GOU (Grupo de Oficiales Unidos), una secta pro-Eje dentro del EA que influyó fuertemente para que Argentina no formara parte de las fuerzas Aliadas. Bajo un enorme error de pronóstico, el GOU precisamente produjo el golpe de estado pro-nazi de 1943 justo después de que las fuerzas germanas fuesen completamente arrasadas en Stalingrado de la cual nunca se recuperaron. El GOU actúa contra el presidente Ramón Castillo porque éste mostraba simpatías con los Aliados, siendo ésta la principal razón de su desplazamiento. La historia oficial repetida desde ese entonces confunde a los lectores al afirmar que ese gobierno era "semi-legal" (Scenna, 1980) y parte de la década infame. Nada de esas burdas especulaciones termina de conformar la lógica del golpe salvo cuando uno pinta el favoritismo de cada bando por cada adversario de la SGM.


¿Que tan nazi se puede ser? Desfile del 9 de julio de 1944 con un cóndor haciendo de águila imperial romana/alemana.

A partir de 1945 nace un completo evento bisagra estilo nazi como el putsch de Munich: aquí fue el 17 de octubre de 1945. En esa fecha es liberado el Cnel. Perón de la cárcel de la isla Martín García luego haber sido encerrado por sus ex-cómplices del golpe y nace un mito político que accedería a la presidencia por un período completo en 1946 y dos períodos incompletos posteriores. Desde el punto de vista económico lo que se define desde 1945 es un escenario en el que Argentina:

  • Se aísla del Mundo mediante fuertes esquemas de protección mediante aranceles y restricciones tarifarias. Un sector agroexportador es el que produce la entrada de divisas que se utilizan para sustentar las importaciones y el sector público.
  • Nacionaliza muchos servicios públicos en manos británicas principalmente, lo cual termina afectando la eficiencia del mismo.
  • Enormes desincentivos a la producción primaria (eje del crecimiento del lustro y medio anterior) mediante la creación de organismos de control de precios y divisas (IAPI)
  • Redirección de parte de esos recursos para corrupción pública (Fundación Evita, robos directos del propio presidente) y promoción de algunas industrias.
    • Esto último es consistente con lo que modernamente se denomina Industrialización Sustitutiva de Importaciones (ISI).
  • Tal vez lo peor que ocurrió en toda esta fase: la enorme sindicalización de la mano de obra que permitió trabas constantes en el proceso productivo mediante huelgas y subas de costos laborales así como politización de todo el proceso productivo.

Producto de gastar las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) acumuladas durante la SGM y de los recursos extraídos al sector agroindustrial, el gobierno argentino financió diversos de desarrollo de aeronaves. Ninguna leyenda infundada ha inflado más la imaginación nacional que el potencial desarrollo y planes de producción del IA.33 Pulqui II (3, 4, 5). El caza que "era mejor que el MiG-15 y el F-86" (algo completamente incomprobable) que íbamos a producir 100 unidades y exportarlas a toda Latinoamérica. Nunca la ciudad de Córdoba tuvo en esos momentos el tejido industrial de productores de partes de avión como para abastecer esa producción. Más aún, jamás se compraron los 100 motores Rolls Royce Nene necesarios para montar los aviones. Todo el proceso fueron una decena de prototipos que algunos adornar museos. Con los años se gestó detrás de este prototipo miles de leyendas gobbelianas completamente descartables por la evidencia.

Derribo del 16 de junio de 1955: El COAN descubre que necesita cazas


Previo a la Revolución Libertadora se produjo el intento de decapitamiento del regimen con el bombardeo de la Plaza de Mayo. En ese evento, que produjo 326 muertos civiles, aviones militares que no eran ni bombarderos ni cazas (que casi no poseía por otra parte) del COAN armados con bombas y ametralladoras atacaron la Casa Rosada intentando asesinar al dictador Perón. Un AT-6 pilotado por el Tte. de Corbeta Máximo Rivero Kelly y el guardamarina Armando Román intentó escapar hacia Uruguay y fue derribado por un Gloster Meteor pilotado por el Tte. Ernesto Adradas, siendo éste el bautismo de fuego de la FAA y del COAN y el primer derribo de un avión por un caza a reacción en Latinoamérica. El COAN, sin embargo, no tenía con qué enfrentar a los Meteor. El Comando de Aviación Naval decide inmediatamente al golpe de estado adquirir cazambombarderos de altas prestaciones (primero, Vought F4UN, versiones de caza diurna y nocturna, y sobre todo Grumman F9F Panther, primeros cazas reactores capaces de enfrentar los Gloster Meteor de la FAA). Ambos modelos serían reemplazados por el A-4Q Skyhawk posteriormente, y este finalmente por el AMD Super Etendard.

Gloster Meteor (FAA) vs F9F Panther (COAN)

Desde finales de los 50 hasta principios de los 70s las FF.AA. argentinas progresivamente se van modernizando, siendo tal vez el salto más espectacular dado por la Armada. Así, durante los 60s y 70s Argentina cuenta con dos portaaviones, el primero el ARA V-1 Independencia, capaz sólo de adminitir aviones a hélices y, posteriormente, el ARA V-2 25 de Mayo capaz si de aceptar los primeros jets embarcados de Latinoamérica. Por su parte la FAA recibe los F-86 Sabre excedentes de la guerra de Corea, siendo tal vez el mejor relato de este período se encuentra en el trabajo de Tom Cooper.


F-86F-30 de la FAA en 1960

Finalmente, el EA inicia el plan Europa de modernización adquiriendo blindados franceses y, ya entrada la década del 70, austríacos en medio del plan de reemplazo de los M4 Sherman con los futuros TAM VC. Durante este período también se da nacimiento y producción al IA-58 Pucará de COIN y se compran los primeros cazas supersónicos: una docena de Mirage IIIEA/B.

La década del 60 fue un período políticamente inestable para el país, con diversos golpes de estado y fundada persecución al cáncer que siempre fue el peronismo. Más aún, se produce dentro del mismo seno de las Fuerzas Armadas conflictos internos vergonzosos como la rebelión de azules y colorados. Aún con toda esa inestabilidad política, el país creció como una en la segunda mitad del siglo 20. Solo hacía falta que Perón no estuviera en el país.

La vuelta de este geronte vino acompañada de todo un proceso en el cual producto de su narcisismo alocado y utilizando una táctica que todo el peronismo reproduciría hasta la actualidad. Perón alentó a las guerrillas locales de extracción peronista como Montoneros y también las de extracción guevarista a que atentaran y dificultaran el desempeño político y económico del gobierno. Con ello Perón dio apoyo y nacimiento al terrorismo en el país. Una vez arribado al país en el caos de Ezeiza, hizo lo que el peronismo siempre hizo también: traicionó a los guerrilleros echando al imbécil de Cámpora del gobierno y sus secuaces que los apoyaban. Ahora Perón crea la Alianza Anticomunista Argentina (AAA) y con ello funda el terrorismo de Estado. Perón gracias a Dios muere y deja a la cabaretera María Estela Martínez, junto al pianista del cabaret donde ésta había trabajado Raúl Lastiri y José Lopez Rega, un brujo pistolero y macumbero. Los desastres de estos inoperantes se ven acrecentados por el clima de violencia política inédito en el Mundo hasta ese momento que deviene en el pedido directo de intervención de las FF.AA. Para 1976 un golpe de estado marca el fin de una etapa del terrorismo peronista.

Las juntas militares derrotan al terrorismo peronista utilizando métodos estratégicamente errados aunque tácticamente eficientes. Hacia 1978 comienza y termina una crisis con Chile de la que Argentina sale militarmente fortalecido en prevención de un potencial conflicto. Para ese entonces, las fuerzas armadas argentinas se hallaban en un marco de crecimiento, ampliación de capacidades y entrenamiento cotidianos. Si embargo Malvinas marcaría el fin de esta etapa.

¿Qué terminó siendo Malvinas?

Luego de décadas y décadas de ser incluso tácitamente parte económica del imperio británico, Argentina decide romper esa "cadena" de una manera imprevista. Debe recordarse que el lazo militar con el Reino Unido llegó hasta enero de 1982 mismo. Más aún, debe siempre tenerse presente que hubo negociaciones diplomáticas incluso con Margaret Thatcher para la devolución pacífica de las islas a Argentina (1,2) en los dos años previos al conflicto.

Luchamos contra un país que viene luchando organizadamente desde hace más de mil años. Mil años. 200 guerras, internas y externas, a lo largo de todo el mundo. Y no es que ello halla sido lo que les hizo ganar la batalla en sí.  Malvinas fue solo una cuenta en collar muy extenso y naturalizado de conflictos. Nomás ocho años después estaban mandando tropas a luchar la Segunda Guerra del Golfo combatiendo a Irak por la ocupación de Kuwait, y siguieron a lo largo de los 90s, 2000 y 2010 en Irak, Afganistán e intervenciones puntuales en África y Asia. Ellos llevaron el espíritu de guerra anglosajón al Atlántico Sur a enfrentarse contra un país que había acumulado armamento y entrenamiento sólo en las últimas tres décadas anteriores. Esto se produjo en el período donde Perón no estuvo en el país lo que permitió ahorro de recursos, un nivel de corrupción menor y una industrialización mayor posibilitó dicha acumulación. Un veterano de 200 guerras se encontraba con un país que hacía 120 años que peleaba una. Un veterano que venía con todo el aguante (stamina) para combatir hasta que el oponente caiga. ¿Acaso se rindieron los británicos al Kaiser o al Fuhrer? La única cuestión era que estaba sin experiencia directa desde los años 50s (desde la crisis de Suez y la emergencia malaya) aunque entrenaba todos los días con el mejor equipo, la OTAN, en todos los ambientes de combate. Un país que gestiona esa historia siempre esta listo para volver al ring. Eso no quiere decir nunca que sea invencible: solo que hay que pensar bien la estrategia, hay que pensarla muy bien. Y algo que demostró Malvinas es que se le puede pegar en el mentón y hacerlo tambalear.


Escenarios alternativos y

¿Argentina pudo haber evitado al recuperación de las islas manu militari en 1982? La respuesta es claro que si. ¿Qué escenarios se habrían desarrollado? Esto siempre queda en el marco de la especulación pero se pueden explicitar algunas especulaciones argumentadas (educated guess).

La estrategia del conflicto fue pésimamente planteada. La probabilidad de que el Reino Unido no reaccionara a lo que a toda vista era una humillación era extremadamente baja e improbable. Si bien el Libro Blanco de la Royal Navy para 1981 indicaba la baja de varios activos navales (incluyendo el HMS Invincible para su venta a Australia y el retiro del HMS Endurance de la patrulla antártica) recién eso estaba planeado para finales de 1982. Definitivamente no era el momento de atacar. Con simplemente retrasarlo un año hubiese sido tal vez suficiente para cambiar el resultado, considerando también que Argentina hubiese recibido más Super Etendard y Exocets, aunque también de una manera improbable. El Reino Unido aún habiendo dado de baja esos activos no iba a firmar ninguna rendición ni entrega voluntaria de los territorios. Con SSN y SSBN armados con armas nucleares la amenaza última hubiese sido presentada o, peor aún, incluso ejecutada (recuerden las frases de la primera ministro sobre la posibilidad de un bombardeo nuclear a Córdoba).

Los planes británicos era aplicar el Libro Blanco: vender el HMS Invincible y radiar el HMS Endurance. Con ello quedaba el HMS Hermes que también se pensaba dar de baja dado que el perfil de la Royal Navy iba a enfocarse en guerra ASW.

Ello habilitaba pacientemente a nuevas negociaciones sobre el acercamiento a las islas... Argentina poseía el ARA Alte Irizar como magnífico buque polar que podría realizar tareas de apoyo de ser necesarias a las instalaciones británicas en las islas Malvinas y Georgias del Sur. Mil posibilidades para negociar muchos posibles otros escenarios. Más aún, la posibilidad de seguir abasteciéndonos de material de guerra británico: en enero de 1982 se había ya realizado el pago inicial para la compra de BAC Canberra de guerra electrónica, aviones únicos en la región. Para esa época el EA fue el primer usuario latinoamérica de un MANPADS, el sistema Blowpipe de la Shorts británica. La ARA había producido sus dos destructores misilísticos Tipo 42 como el ARA Hercules y el ARA Santísima Trinidad, buques de defensa aérea ultramodernos gemelos al HMS Sheffield. Hablemos de ironías.

Malvinas tiene que ser un ámbito de meditación racional. Antes de calentar la cabeza con ideas adolescentes, hay que intentar de enfriar la cabeza y atar cabos. Las islas Malvinas son más argentinas que la Patagonia por derecho colonial: 60 años antes de crear una base en las desembocadura del río Santa Cruz el país ya había creado el primer asentamiento en las islas dirigido por el Louis Vernet. Eso está claro y la historia siempre está detrás del reclamo argentino, más aún detrás de la historial colonial británica de ocupar territorios por la fuerza por motivos estratégicos y luego por las mismas razones desocuparlos. Pero al enemigo se lo conoce para derrotarlo. Y la opción de ganar sin pelear siempre es mejor que ganar algo luchando: Si se puede obtener diplomáticamente mejor. Aunque en este caso, la diplomacia siempre tiene que ir con una pistola amartillada.

En el caso Malvinas la recuperación alteró completamente la posición negociadora, ayudado por el desarme criminal de la democracia argentina. No tienen por qué cedernos nada ahora porque no tenemos capacidad de amenazarlos militarmente, tan simple como eso. La razón por la que China volvió a tener soberanía sobre Hong Kong fue porque había logrado tener sus primeros ICBM capaces de alcanzar nuclearmente las islas británicas desde el otro lado del Mundo. Esto quiere decir que si ni siquiera tenemos escuadrones fijos en la Patagonia, ni misiles tierra-tierra, ni buques de desembarco ni aviones de largo alcance... a los británico no les cuesta nada gestionar las islas ni siquiera en la intranquilidad de un sueño. Pero eso no es gratis ni se puede hacer mientras seamos poco serios en todo lo que lo hagamos.

Economía, eficiencia y gasto militar

El gasto en defensa es un derivado obvio de la capacidad de generar recursos. Con ingresos pobres solo se pueden tener fuerzas armadas pobres salvo que se emplee la táctica de Corea del Norte. La economía pujante y creciente, la enorme apertura comercial de la época, una clase dirigente inteligentemente complaciente con la situación terminó derivando en la fuente de financiación de esa época dorada de la economía argentina. En esa época las economías se regían con el patrón oro (no había inflación) aunque ello limitaba la capacidad de la política monetaria de absorber crisis externas o internas. En ese sentido, la economía de mercado (mal llamada capitalismo por la izquierda radical, término acuñado por el marxista Dorfmann en los 50s) de esa época era muy proclive a generar crisis sin atenuamiento y con ausencia de intervención del Estado. Más aún, el único caso justificable para que el Estado interviniera en la economía era precisamente el estado de guerra. Si una guerra se desataba, el gobierno podía controlar toda la actividad económica incluso fijando todos los precios. Un minuto después de terminada la guerra, todo volvía a la situación de mercado libre previo. Siempre el mercado tiene la información acabada de las necesidades de la demanda y de las posibilidades de la oferta. La Humanidad tardó 70 años en aprender ello y costó 150 millones de vidas de aplicar sistemas ajenos a la economía de mercado ese aprendizaje.

Siguiendo entonces con la evolución de la economía y el país, tenemos que Argentina adhirió al mercado internacional y fue parte vibrante del mismo desde los 1870s hasta 1946, con excepciones durante los períodos de guerra. En esos períodos, incluyendo la mal llamada Década infame con el pacto Roca-Runciman incluido, la crisis del 30 pegó fuertemente en el país e hizo economía sostenible iniciar lentamente el proceso de industrialización en el país. En este caso, fueron capitales españoles quienes iniciaron este proceso. Ya en los 20s y por cuestiones geoestratégicas se había iniciado la empresa nacional de petróleo, Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) para que las FFAA no dependieran de petróleo extranjero provisto en esas épocas por Shell y Standard Oil (Audino, 2019).


Crecimiento de PBI per cápita de los países

Sin embargo, el proceso iniciado por Perón cerró la economía e intentó (con más propaganda que hechos concretos) aumentar el proceso de industrialización. En esa época, posterior a la SGM, el mundo adoptaría como programa de crecimiento y desarrollo el mencionado anteriormente como ISI (industrialización sustitutiva de importaciones) el cual suponía que cada país debía producir todo autónomamente e independendizarse de la interacción con el resto de las economías. Crecer internamente desarrollando una industria, destacarse en términos de eficiencia y luego si, abrir la economía y salir a conquistar mercados mundiales. Argentina como en toda su historia, leyó la parte vaga de la misma. Simplemente cerró la economía, creó una elite de empresarios asociados al Estado y luego casi nunca buscó el zénit de productividad para exportar a mercados mundiales. Simplemente los empresarios se quedaron abasteciendo oligopolicamente el mercado nacional. Casos así se pueden apreciar en todo el Mundo hasta los 80s.

Crecimiento de PBI per cápita de los países

Pero en esa década salta a la fama una serie de economías que no habían seguido el camino de la ISI: Alemania fue una aunque principalmente el caso a citar es Japón. Japón había terminado la guerra completamente destruido. Es por ello que cuando decidió reconstruirse los burócratas japoneses también recomendaron iniciar un proceso ISI pero había un gran problema: la población japonesa estaba completamente arruinada por la guerra. No tenían capacidad adquisitiva para comprar lo que los empresarios locales pudieran producir. Entonces el ciclo se cortaba rápido: Se cerraba la economía, se protegía la industria nacional, se producían bienes y servicios pero las familias japonesas estaban completamente arruinadas, v.g., no podía consumir lo que producían. Entonces lo que había que hacer era producir pero no para la demana interna sino para la demanda que pudiera pagar: los mercados internacionales. Y allí surge la idea de lo que modernamente se denomina el crecimiento exo-dirigido. La idea es una ISI pero conectada por exportaciones plenamente al mercado mundial. Japón inició tímidamente ese proceso en los 50s y 60s y para los 80s Japón le disputaba el mercado mundial de grandes sectores industriales a USA. Su ejemplo sería seguido inmediamente en los 80s por Corea del Sur (y ya vemos adonde llegó) y China, y ya entrados los 90s y 2000s, por gran parte del Sudeste Asiático.

Para los 80s Argentina ya mostraba signos de enfermad de la ISI. Había una gran capacidad industrial instalada en el país pero lo que se producía no salía al mercado externo, era caro y con tecnología atrasada y tenía que ser consumido internamente (recuerden que todavía se comercializaba el Ford Falcon como auto 0Km). El problema es que la demanda interna es la base de la propaganda o verso peronista: "lo producido para el pueblo". En los 70s y 90s hubo experiencias de economía abierta pero no se sostuvieron por 30 o 40 años como lo demuestran los casos exitosos.

Crecimiento de PBI per cápita de los países

La crisis del 2001 trajo una debacle en la actividad económico producto del golpe de estado suave que da el peronismo al gobierno de De la Rúa y lo que sigue, incluyendo el período del gobierno de Macri, fue seguir (si, increiblemente seguir) con la ISI de los años 50s. Cerrar la economía, proteger a los corruptos que pagaron coimas en bolsos de dinero a los presidentes más corruptos de la Historia de la Humanidad como el matrimonio Kirchner-Fernández y crear industrias completamente falsas en la feria fiscal de Tierra del Fuego o modernizar al ARA San Juan casi sin insumos importados que sellaría su suerte producto de ello en 2017. Todo ese desastre económico se puede apreciar en los gráficos de arriba que muestran el PBI per cápita de Argentina comparada con los países vecinos, con países comparables y países que fueron fuente de inmigración hacia nuestro país para ver como dilapidamos 75 años de historia por una idea equivocada planteada por un delincuente sexual y sus ideas fascistas.

Llegados al 2020, la Argentina está una peor decadencia de 150 años, gobernados por inútiles con un PBI decreciente. Lamentablemente debemos llamar peronismo al período de entrada del dictador en 1946 pero lamentablemente peronismo han sido los últimos 75 años en Argentina, independientemente de si gobernaran peronistas, mujeres de cabaret como Estelita o Evita, militares, radicales o gente de Cambiemos. Argentina no ha salido del peronismo denigrante y atrasado de aquel período aún cuando desde 1980 sabemos que ese no era el modelo a seguir sino que el modelo a seguir es el de integrarse al mercado mundial, no a aislarse. No a buscar la independencia (la soberanía alimentaria, energética y todas esas estupideces de la propaganda K) sino la interdependencia. Los países crecen interdependientes. La industria automotriz es el mejor ejemplo: son miles de piezas de muchos países que se montan en uno solo, pero se necesita de todos. Lo mismo pasa con la industria de defensa. Suecia produce uno de los mejores cazas del Mundo pero es una montaje maravilloso de piezas producidas en otros países: a Suecia no le daría el cuero para producirlo todo. Lo mismo ocurre con todos los proyectos de defensa de los países en desarrollo y gran parte de los desarrollados.
China es un ejemplo que pareciera no ser parte de ello, pero es un error: ahora tiene una industria de defensa independiente luego de haberse abierto al Mundo y copado todos sus mercados. Y ello lo logró con enormes inversiones externas, con seguridad jurídica completa para los inversores y con la completa ausencia de sindicatos que traben nada de la actividad económica. El agente principal de toda economía es el empresario, no el trabajador. Quienes visitan regularmente el sistema de Blogs FDRA pueden apreciar que en los últimos 2 años hay una repetición cotidiana de noticias generadas desde el Sudeste asiático, principalmente Indonesia y de Oceanía, sobre todo de Australia. Ello es porque estas economías se hallan en una fase de crecimiento continuado desde los 80s, han desarrolado una enorme productividad y acumulado riqueza y ahora pueden desarrollar las ambiciones de defensa que deseen porque pueden costearlos y con ello no hacer tambalear su economía. En esa situación se encontraba Argentina hacia fines del siglo 19.

Volviendo a lactualidad del siglo 21 de Argentina, al peronismo se lo combate por la misma decencia básica que la cultura occidental nos predica. La laboriosidad, la invididualidad, la búsqueda de un mejor futuro para cada individuo y su núcleo familiar es la base más clara de quienes aborrecen el sistema despótico y corrupto que siempre acompañó al peronismo cada vez que gobernó en cada municipio, provincia o en la misma nación. El kirchnerismo, en ese sentido, es la fase pornográfica de este proceso histórico en el que analfabetos explícitos, incapaces siquiera de hablar correctamente el español, gobierna asentados en normas extractivistas delictuales (sobornos y coimas) llegando incluso al asesinato político (Alberto Nisman, Fabián Gutiérrez y varios más) y al manejo criminal de una crisis como la pandemia del COVID-19. Impotentes producto de su propio desconocimiento básico de cómo opera un país normalmente es completamente imposible obtener de este régimen ningún progreso económico sostenido. Y con ello, la defensa quedará atada a un línea decreciente de recursos como ha venido pasado desde hace casi 40 años.

¿Cómo salir del peronismo? Ejemplos tan distantes como Nueva Zelanda, Irlanda o Polonia marcan un camino concreto y directo. Garantizar seguridad jurídica a las empresas extranjeras. Controlar la política fiscal y monetaria (nada de déficit público ni inflación). Educación de primera calidad. Impuestos bajos a moderados. Fin de los consejos. Con ello basta. Cualquier manual básico de economía lo plantea desde hace décadas. Lamentablemente, no hay nada más antiperonista que la eficiencia, la decencia y el bienestar de una sociedad.







Mientras no eliminemos al peronismo, hablar de cazas, cazones o cazotes no tiene el menor sentido.


Conclusiones

Primero, Argentina se tiene que reacomodar y volver a la sensatez internacional toda la economía. Con el perokirchnerismo en el poder eso jamás va a ocurrir. Se deben plantear los métodos institucionales o neo-instucionales para lograr echar a esta gente y luego mantenerse en el poder con el pleno funcionamienteo del sistema económico por un mínimo de 30 a 40 años. La clase política argentina como está conformado hoy no puede jamás volver a acceder a gestionar los recursos del Estado. Ello en ningún caso implica la violación de derechos civiles siempre que se puedan acordar nuevas reglas de juego en vista de la desastrosa experiencia económica de la democracia argentina.

Segundo, una vez logrado el sendero de crecimiento económico se debe plantear un plan de defensa acorde con las hipótesis de conflicto derivadas de un análisis geoestratégico adecuado. Sin dudas de ese análisis emergerá el tema Malvinas como el más complejo y difícil. Probablemente no implique nunca crear fuerzas armadas para enfrentar al Reino Unido en una guerra abierta pero sí pensar en unidades especiales que ejerzan disuasión y sobretodo provocarle costos explícitos e implícitos a la ocupación de las islas por parte de la fuerzas británicas. En el largo plazo incluirán pequeñas unidades altamente complejas y caras: un escuadrón de aviones furtivos, un escuadrón de atacantes de largo alcance, corbetas con misiles de crucero, algún buque de desembarco o proyección de poder naval, etc. Cualquier de los otros frentes vecinales sin dudas son menos complejos y posibles de ser lidiados con pura diplomacia.

Tercero, y final, debiera replantearse un nuevo enfoque de fuerzas armadas que evolucione con el cambio institucional y que brinde protección y seguridad a toda la actividad económica. Si algo nos enseña el ejemplo chino es que primero está la economía, y luego el resto. Eso no implica la disolución de la democracia (como si ocurre en China) sino que la actividad política libre y democrática jamás puede bajo ningún concepto arruinar al sistema económico ni mermar sus capacidades. En el medio siempre hay un potencial de interacción entre libertades y crecimiento económico.


Esteban McLaren - Blog FDRA

1 comentario:

  1. Peor no se puede hacer
    Ni aviones ni helicópteros para patrullar el mar buscando alos barcos que esquilmar los recursos

    Ni helicópteros de rescate de alta cota ni SAR
    Ni aviones de transporte para ayudar a la población en sitio dispersos
    Temo que su gobierno no piensa en su país ni ayudar a su gente

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